La Opinión Popular
                  02:58  |  Viernes 10 de Octubre de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

Por
“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
Recomendar Imprimir
Entre Ríos - 09-10-2025 / 11:10
LA UCR DE ENTRE RÍOS INGRESARÁ A PARTIR DE DICIEMBRE EN SU PISO HISTÓRICO DE REPRESENTACIÓN EN EL CONGRESO DE LA NACIÓN

El apoyo a Milei y la estrepitosa caída del radicalismo entrerriano

El apoyo a Milei y la estrepitosa caída del radicalismo entrerriano
Si el frente electoral que integra -la Alianza La Libertad Avanza (ALLA)- gana las elecciones, la UCR se quedará con una sola banca, para la que se postula el actual ministro de Planificación del gobierno provincial, Darío Schneider, que va en el tercer lugar de la lista de diputados. ¡Qué miseria!
 
Si el frente electoral que integra -la Alianza La Libertad Avanza (ALLA)- gana las elecciones, la UCR se quedará con una sola banca, para la que se postula el actual ministro de Planificación del gobierno provincial, Darío Schneider, que va en el tercer lugar de la lista de diputados. ¡Qué miseria! 
 
Para eso necesita que se mantenga la polarización que se pronostica con la lista oficial del PJ, porque si una tercera lista reúne los votos suficientes como para alcanzar una banca es posible que, en el reparto proporcional, Schneider quede afuera.
 
Si ALLA pierde las elecciones a manos del PJ, que compite con la lista Fuerza Entre Ríos, la UCR provincial quedará, por primera vez en su centenaria historia, sin representantes en el Congreso de la Nación.
 
Lo más notable es que el viejo partido alcanzaría este hito histórico integrando el gobierno provincial, como "columna vertebral" del frente Juntos por Entre Ríos que en 2023 -hace apenas dos años- llevó a Rogelio Frigerio a la gobernación.
 
 
Otro país
  
¿A qué se debe este retroceso que no le permitiría retener ni una de las tres bancas que pone en juego? A que los legisladores nacionales de la UCR fueron electos en otro contexto, con el radicalismo siendo parte de un frente provincial exitoso, que polarizó en 2019 (cuando fue electa la senadora Stella Olalla) y en 2021 (cuando fueron electos Atilio Benedetti y Marcela Ántola) con el peronismo, por entonces a cargo del gobierno provincial.
 
Todo cambió en 2023, con la irrupción de Javier Milei, que mutó aquella polarización hacia un escenario electoral de tercios en Entre Ríos, dividiendo el voto antiperonista. A tal punto que Frigerio terminó ganando por apenas dos puntos cuando en el año anterior a la elección las encuestas le otorgaban una ventaja de 20 puntos.
 
Para evitar que ese escenario de tercios lo exponga a una derrota, Frigerio acordó ahora un frente electoral con LLA. La unión de dos de los tres tercios de 2023 lo debería poner a salvo. En teoría.
 
Frigerio acordó la alianza con Milei en la primera mitad del mes de agosto. Fue en otro país, con un Presidente mucho más poderoso que el actual, aún no golpeado por las fuertes sospechas de corrupción y la inestabilidad económica, que se potenciaron con la imprevista -en su magnitud- caída electoral en la provincia de Buenos Aires, producida exactamente un mes después de que se inscribieran las alianzas.
 
El Presidente se impuso en la negociación para el armado de la alianza. Frigerio cedió los dos senadores y el primer diputado de la lista de ALLA. Esto generó una anomalía histórica: como nunca antes, el espacio político más importante de la provincia, liderado por el gobernador del distrito, no encabeza una oferta electoral.
 
Frigerio cedió. Era eso o quedar tercero en un escenario de tercios, porque Entre Ríos no tiene ni el escenario electoral ni las condiciones económicas como para enfrentarse a la Casa Rosada, como han hecho provincias vecinas como Córdoba y Santa Fe, gobernadas por dirigentes con posiciones políticas muy cercanas a las de Frigerio.
 
Por una razón de supervivencia electoral, Frigerio entregó los senadores a un Presidente fuerte que, seis semanas después, atraviesa por el momento de mayor vulnerabilidad política de su mandato. Y no ya por las crecientes sospechas de corrupción o la decisión de sostener hasta último momento a un candidato asociado al narcotráfico. Lo que falló fue la promesa económica.
 
Por una razón de supervivencia electoral, Frigerio se ve obligado a involucrarse en la campaña. Y por la misma razón, la dirigencia radical acompaña.
 
 
Decisión orgánica
  
Pero los radicales no pueden culpar de su crisis a Milei o a Frigerio. La UCR es el único partido político de Entre Ríos que definió su política de alianzas en dos congresos partidarios y en una interna en la que votaron sus afiliados. En los dos casos, las bases radicales resolvieron apoyar la alianza con Milei en una proporción de 70 a 30.
 
Los que defendieron la necesidad de tragarse el sapo libertario argumentaron que sería suicida separarse electoralmente de Frigerio en su alianza con Milei. Pero al quedar tan relegada en las listas de ALLA, el retroceso es prácticamente el mismo para la UCR, al menos en lo que refiere a la representación en el Congreso de la Nación.
 
La dirigencia que controla el partido, que viene ocupando cargos en el Poder Ejecutivo provincial y que funge como aliada parlamentaria desde la conducción de los bloques de diputados y senadores de la Legislatura provincial, vio a la alianza con LLA como una decisión coyuntural de "supervivencia" del gobierno de Frigerio y, por ende, del radicalismo.
 
Argumentaron que el tiempo de la disputa interna en Juntos por Entre Ríos vendrá en 2027, cuando se discuta el poder provincial y municipal.
 
El oficialismo partidario quería evitar la interna del 10 de agosto, que se realizó por la decisión de los críticos de dar la pelea a pesar de que tres días antes se había consumado la alianza de Frigerio con Milei a la que se oponían. Querían, por lo menos, "dejar testimonio" del rechazo de una porción de la UCR a esta sociedad con la derecha más dura.
 
El contexto de apatía electoral y la disputa abstracta que planteaba una interna con eje en la política de alianzas que ya se había resuelto, seguramente tuvieron mucho que ver en la baja participación -votaron 7.193 afiliados, menos de la mitad de los que participaron de la anterior elección cerrada, de abril de 2023- que terminó exhibiendo a la UCR como un partido más débil de lo que su historia y territorialidad hace suponer. Nada bueno para un momento en el que todavía no se habían definido los espacios que cada fuerza política ocuparía dentro de ALLA.
 
 
Sin votar
  
Al acompañar a Frigerio para la gobernación, la UCR de Entre Ríos ha ganado poder, en intendencias y en espacios legislativos tanto provinciales como municipales. Pero al costo de licuar su identidad. No es, claro, un problema sólo del radicalismo entrerriano.
 
Lo distintivo del momento histórico que se iniciará en diciembre es que el retroceso del radicalismo entrerriano en el Congreso de la Nación no se produce por pérdida de votos. No es que los entrerrianos decidieron darle la espalda a los candidatos de la UCR. Es que no hubo candidatos radicales. Sólo uno a diputado y en el tercer lugar de una lista encabezada por LLA. Para el Senado, ni siquiera eso: todo es de LLA.
 
Los radicales disconformes con este armado podrían votar en blanco para el Senado, aunque esa venganza resulte difícil de ejecutar con el estreno de la boleta única de papel (BUP).
 
Y quien quiera mantener al menos un representante de la UCR entrerriana en el Congreso de la Nación debería votar también a un diputado de LLA y otro del PRO. Y si ALLA pierde a manos del PJ, el candidato de la UCR quedará afuera. Los de LLA y el PRO, no. Así de complicado está el voto radical.
 
 
Defección
  
Pero, de nuevo, los radicales no pueden echarle la culpa a Frigerio o a Milei. No sólo porque orgánicamente resolvieron ocupar el secundario lugar que ocupan (todos sabían de antemano a lo que podrían aspirar en una alianza con LLA) sino porque ya habían resignado espacio en el Congreso de la Nación sin perder ninguna elección.
 
Fue hace un año, cuando Pedro Galimberti renunció a su banca de diputado y le regaló un voto al PRO y a Milei con su reemplazante, Nancy Ballejos.
 
El dato político es que el hombre que desde el espacio Construir había desafiado internamente a Frigerio en 2021 y 2023 detrás del proyecto de un gobernador radical, terminó optando por la comodidad de un cargo en la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande (CTM), con un alto ingreso en dólares. Y quien compartió el liderazgo de ese espacio que izaba la bandera de la pureza radical, el ex intendente de Crespo Darío Schneider, pasó a ser, desde el Ministerio de Planeamiento, uno de los hombres fuertes del gobierno de Frigerio.
 
Tras la defección de Galimberti, Schneider pasó a liderar Construir y se supone que no ha resignado su ambición por la gobernación. Al parecer, entiende que una banca en el Congreso sirve más a ese fin que el manejo de la escasa obra pública en la provincia.
 
Por lo pronto, busca convencer a los radicales de que voten la lista violeta, encabezada por LLA. No es fácil, porque su rostro no se ve en la BUP. Tampoco el escudo o los colores de la UCR. Pero sólo un triunfo libertario hará que la UCR de Entre Ríos no se quede sin ningún representante en el Congreso de la Nación.
 
Por: Pablo Bizai
 
Fuente: Página Política
 

NicoSal soluciones web

© Copyright 2009 LA OPINIÓN POPULAR – www.laopinionpopular.com.ar - Todos los derechos reservados.

E-mail: contacto@laopinionpopular.com.ar