Nacionales - 02-08-2025 / 08:08
LA ECONOMÍA EN MODO ANARCO CAPITALISTA: LA DISPARADA DEL DÓLAR SE VA A LOS PRECIOS
Entre el relato libertariano y la realidad: Milei prometió un dólar a $600 y hoy lo tenés a $1400:
La economía libertaria es como un truco barato de feria: parece mágica hasta que te das cuenta que te robaron la billetera. En febrero, el prescindente Javier "el Loco" Milei aseguraba en tono mesiánico que el dólar se iba a desplomar a 600 pesos. En febrero decía que la divisa "caía como un piano". Hoy se disparó al doble, el Gobierno culpa al "Riesgo Kuka", y mientras tanto, aumenta la nafta, el bondi, el cable y hasta la desilusión.
La economía libertaria es como un truco barato de feria: parece mágica hasta que te das cuenta que te robaron la billetera. En febrero, el prescindente Javier "el Loco" Milei aseguraba en tono mesiánico que el dólar se iba a desplomar a 600 pesos. En febrero decía que la divisa "caía como un piano". Hoy se disparó al doble, el Gobierno culpa al "Riesgo Kuka", y mientras tanto, aumenta la nafta, el bondi, el cable y hasta la desilusión.
"Se cae como un piano", dijo, con esa verborragia de showman desquiciado en gira permanente. Seis meses después, el único piano que cayó fue el que aplastó su credibilidad. Hoy el dólar roza los 1400 pesos y el oficialismo, en lugar de asumir la catástrofe, desempolva el viejo recurso de echarle la culpa al "Riesgo Kuka". Una excusa tan berreta como decir que llueve porque alguien lava el auto.
Ya no alcanza con pelearse con la "casta": ahora Milei pelea contra el dólar como si fuera un fantasma peronista. Mientras tanto, la realidad patea la puerta con aumentos en combustibles, transporte, prepagas, alquileres y servicios. Todo junto. Todo de golpe. Todo firmado por él.
Sí, por el mismo que decía que los precios iban a bajar porque "ajustar era gratis" y que la inflación se combatía con confianza de mercado. Ahora hay más inflación, menos confianza y un mercado que se ríe del Gobierno libertariano con la misma condescendencia que uno le tiene a un primo que quiere inventar la rueda.
Contra el relato del Gobierno, el 14% de suba del dólar en julio impacta fuerte en los precios. Los diez gigantes del consumo masivo ya les avisaron a los supermercados que, desde el lunes, aplicarán aumentos que van del 3 al 9% en alimentos, bebidas, productos de limpieza, lácteos y aceites. Los autos no quieren perder la carrera y habrá incrementos de hasta 12% en concesionarias.
Agosto arrancó con subas por todos lados: aumentó la nafta por el reacomodamiento de impuestos al combustible líquido y al dióxido de carbono (una decisión del propio Ejecutivo que ahora pretende disimular con tecnicismos). El transporte público en el AMBA subió 3,6 por ciento, las prepagas aplicaron subas de hasta 1,9 por ciento, y los servicios de cable y telefonía ya remarcaron hasta un 3 por ciento.
Mientras tanto, los inquilinos con contratos viejos enfrentan aumentos de más del 55 por ciento, y quienes firmaron sin la ley derogada tampoco zafan: el índice de ajuste da más del 6 por ciento trimestral. Todo sube, menos el delirio libertario de Milei, que ya tocó el techo.
La disparada del dólar y la aceleración de precios acorralan al ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo y la estrategia que diseñó para llegar a las elecciones con el tipo de cambio bajo control y la inflación en descenso entró en crisis. La apertura del cepo se le volvió en contra, ya se gastó los ingresos extraordinarios del campo, el carry trade se diluye y ni siquiera vienen los inversores especulativos.
La Opinión Popular
AUMENTOS DE ENTRE 3 Y 9 POR CIENTO EN SUPERMERCADOS Y BARRIOS
La disparada del dólar se va a los precios
Los diez proveedores más grandes de papel, lácteos, aceites, productos de limpieza, alimentos y bebidas avisaron: el lunes aplican nuevas listas, que reflejan la devaluación de las últimas semanas.
Por Leandro Renou
Lo que el Gobierno Nacional decía que no iba a ocurrir, terminó pasando en tiempo récord. Luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente Javier Milei, aseguraran que la suba del dólar era exitosa porque no impactaba en precios, terminó yéndose a las góndolas de una manera fuerte.
Según confiaron a Página I12 fuentes de los grandes supermercados y los comercios barriales, los diez gigantes del consumo masivo y algunas marcas más pequeñas avisaron que desde el lunes aplicarán subas en los precios que van del 3 al 9 por ciento. Esto se suma a lo que pasó en las últimas horas en las fábricas de autos, que avisaron que habrá incrementos de hasta 12 por ciento en concesionarias, todo por la suba del 14 por ciento que tuvo el dólar en julio.
Esas alzas en productos esenciales y de consumo hogareño, además, rompen la teoría del Gobierno libertario de que la recesión de los bolsillos, los sueldos planchados, iba a hacer que la demanda de productos masivos se mantenga baja, ergo, que los precios no pudieran subir para no paralizar aún más la actividad comercial.
"Claro que la venta está planchada, pero nuestros costos suben, no podemos aguantar más sin mandar aumentos", se sinceró un proveedor grande ante este diario, recordando que ya post salida del cepo cambiario fue el propio Caputo el que les pidió que eviten aumentar y le cumplieron.
Una rebelión en las góndolas
En el detalle de las listas de precios y avisos que los supermercados recibieron de los fabricantes nucleados en la Coordinadora de Productores de Alimentos (COPAL), se observan aumentos en todos los rubros: alimentos, bebidas, productos de limpieza, papeles, lácteos y aceites.
En nombres propios, Arcor avisó incrementos de entre 3 y 5 por ciento; Mondelez, la ex Kraft, subirá los precios en toda su gama entre 7 y 9 por ciento, dependiendo el producto. La multinacional Unilever, por su parte, pasó una lista con ajustes del 8 por ciento; mientras que Colgate lo hizo por hasta 7 por ciento.
Softys, la empresa que fabrica papeles Elite, pañales Babysec y protectores diarios Ladysoft, aumentará el 7 por ciento. Por su parte, el gigante lácteo Mastellone, de la marca La Serenísima, pasó un 4 por ciento para toda la gama de productos. Otra de las empresas grandes de alimentos, lácteos y bebidas, la francesa Danone, dispara los productos 3,5 por ciento en góndola.
En el caso de las aceiteras, tanto Aceitera General Deheza (AGD) como Cañuelas aumentarán 5 por ciento; mientras que SC Johson, la multinacional estadounidense, avisó que modificará un 7 por ciento sus valores. En los comercios barriales, además, habrá subas de hasta 8 por ciento en cigarrillos y se esperan trepadas en harinas, galletitas y panificados.
Por encima del IPC y sin ventas
Cuando se miran números de las consultoras privadas que proyectan inflación, hasta el lunes pasado los precios de alimentos venían subiendo de manera marginal, lo que depositaría a la inflación de julio en no más de 2 por ciento. Pero el pase a precios que se está viendo hoy marcará el IPC de agosto, porque todas las alzas están muy por encima del índice, en saltos grandes.
"El problema es que esto ya pasó, te remarcan ahora, y si el dólar baja, no vuelven atrás", precisó un comerciante pequeño. El asunto es que el dólar, que empezó la semana en 1300 pesos y terminó en 1375 pesos -a 25 del techo de la banda de flotación del FMI en la que el Gobierno tiene que empezar a vender dólares- ya parece hacer confirmado un precio cercano o superior a los 1400 pesos. Es decir, el Gobierno entró en el riesgo de que le aumenten dos veces los precios.
El problema es que esta suba se da, además, en un contexto de ventas retraídas. Es decir, el peor escenario, el de precios que ya estaba caros y que vuelven a subir, cuando ya el poder de comprar poblacional mostraba una demanda muy baja. El último estudio de la consultora Scentia reportó una caída interanual del 0,8 por ciento en junio si se mide consumo general (súper, farmacias, kioscos, e-commerce, etc), y un desplome del 2,4 por ciento en lo netamente centrado en hipermercados y comercios barriales.
Lo impactante es que esas bajas contra 2024 comparan contra una base de catástrofe: el consumo general había caído 11,3 por ciento en junio de ese año contra mismo mes del 2023; mientras que el gasto en los supermercados se retraía 12,3 por ciento interanual en igual período.
Fuentes: Página 12 y Agencia Nova