Entre Ríos - 01-06-2025 / 19:06
PANORAMA POLÍTICO ENTRERRIANO
¿Frigerio se doblegará ante Milei y su “plan colchonero"?
Si bien evitó emitir una posición definitiva, Frigerio, que adhiere al orden fiscal con ajuste salvaje y al alineamiento total con Milei, dejó clara su orientación favorable a la iniciativa: "Yo creo y apoyo todo lo que sea la simplificación de la burocracia. Todo lo que va en esa línea, nosotros lo vamos a apoyar", concluyó, a pesar que el polémico megablanqueo provocará problemas muy graves en relación con el lavado de dinero proveniente del narcotráfico, la corrupción política y la evasión impositiva. Serán los efectos del dialoguismo de Frigerio.
Mientras el país se hunde en la crisis social, con salarios y jubilaciones pulverizados, comercios cerrando y familias enteras revolviendo tachos de basura, el presidente decidió anunciar una serie de medidas para sacarle impuestos a los ricos, pomposamente denominadas "Programa de Reparación Histórica del Ahorro de los Argentinos", buscando incentivar a que la gente pudiente saque los dólares que guarda "debajo del colchón". ¿El objetivo? Que los billetes circulen en una economía que Javier Milei ya pulverizó, y así evitar el default de la deuda con el FMI.
El Plan es un salvavidas para Milei y una puerta abierta al delito. En el colmo del cinismo, Milei llegó a decir que los que tienen la plata "debajo del colchón" son "héroes" que "escaparon de un Estado opresor que les quería romper el orto con el impuesto inflacionario". ¿De verdad? ¿Eso dice el tipo que hoy reinstaló el abusivo impuesto a las Ganancias con otro nombre, que aumentó desmedidamente las tarifas, que le sacó subsidios al transporte y que transformó la AFIP en una máquina de exprimir al trabajador?
Los efectos del ajuste se sienten en los entrerrianos como nunca en el año y medio de la gestión libertaria y se derrumba un 23 % la coparticipación. Aun así, el gobernador Rogelio Frigerio se refirió positivamente al "plan colchonero", la iniciativa para captar y blanquear dólares no declarados en poder de ahorristas, especuladores y delincuentes. En reuniones virtuales con Guillermo Francos, por la provincia participó Fabián Boleas, ministro de Hacienda y Finanzas. El porteño Frigerio explicó que no pudo dialogar personalmente con él sobre el encuentro, pero que en los próximos días lo hará.
Si bien evitó emitir una posición definitiva, Frigerio, que adhiere al orden fiscal con ajuste salvaje y al alineamiento total con Milei, dejó clara su orientación favorable a la iniciativa: "Yo creo y apoyo todo lo que sea la simplificación de la burocracia. Todo lo que va en esa línea, nosotros lo vamos a apoyar", concluyó, a pesar que el polémico megablanqueo provocará problemas muy graves en relación con el lavado de dinero proveniente del narcotráfico, la corrupción política y la evasión impositiva. Serán los efectos del dialoguismo de Frigerio.
Ahora bien, ¿cuáles son las cuestiones negativas que no tiene en cuenta Frigerio en su apoyo al "plan colchonero"? Primero, el riesgo de lavado de dinero y de instalación de actividades delictivas aberrantes. La facilitación de gastos e inversiones de dineros provenientes de estas actividades (narcotráfico, corrupción, evasión, prostitución y trata, guerrillas, ventas ilegales de armas, etc.) haría más fácil la instalación de estas actividades ilícitas. ¿Qué parte de esto no entiende Frigerio y sus legisladores que, de modo sistemático, le salvan las papas a La Libertad Avanza en el Congreso?
También complicaría las relaciones internacionales de Argentina, ya que desdibuja los límites entre lo legal y lo ilegal, generando inquietud entre organismos internacionales de control financiero. La mayoría de los Estados y organismos, como por ejemplo el Fondo Monetario Internacional, proponen alinearse con compromisos de transparencia en estos aspectos. Y ya ha dado advertencias concretas para este caso. Lo que Milei propone, en Europa es considerado directamente como fomento a la evasión y lavado de dinero.
La medida beneficia solo a los más ricos, a sectores que tuvieron la posibilidad de ahorrar, para los que gobierna Milei, y no a los de menores ingresos, que no tienen ahorros significativos. Además, desalienta a quienes tuvieron un comportamiento correcto en el pago de sus obligaciones impositivas. Es castigar al que está en regla y premiar al evasor. Si bien puede significarle al Gobierno un incremento inmediato en la recaudación fiscal, la eliminación de controles podría disminuir la recaudación en el corto plazo. Esto es lo que apoya, sin cuestionar nada, Frigerio, quien apostó desde el primer día al silencio, que le ofrece la ventaja de la ambigüedad.
Hay quienes dudan de la efectividad de este Plan. La mayoría de los argentinos prefiere ahorrar con el dólar por sobre el peso y no depositarlo en los bancos, esto es un dato de la realidad. Además, mientras no se dicte una norma específica que modifique la Ley Penal Cambiaria vigente, no habrá demasiada confianza en entrar en este programa, ante el riesgo de que un eventual cambio de gobierno y, en especial, de orientación económica incremente los montos sobre los cuales se considera la evasión como delito penal.
Para evitar eso, el Gobierno libertariano plantea disminuir el período de prescripción, que hoy es de cinco a dos años, para que cualquier cambie posterior no afecte a quienes hayan blanqueado sus "ahorros". Sin esa modificación, lo único que hasta ahora se facilita para evitar sanciones impositivas es que los movimientos no figuren en las pantallas de la fiscalización.
Bajo el argumento de reactivar el consumo interno y normalizar el uso de dinero fuera del circuito bancario, la medida permitiría que personas físicas y empresas usen libremente sus reservas en efectivo, incluso si fueron adquiridas de manera informal, sin enfrentar sanciones tributarias ni penales. Para imponer el polémico plan, el Gobierno de Milei presiona y aprieta a los gobernadores para que adhieran al "dólar colchón" y adecúen sus legislaciones como condición para seguir accediendo a información de contribuyentes, condicionando el acceso a la información a cambio que se sumen al programa con legislación local. Aunque no lo diga, Frigerio ya habría doblegado.
Milei necesita someter a los gobernadores porque, las provincias mantienen la facultad de abrir investigaciones en caso de que un contribuyente decida depositar dinero no declarado. Cuando esta opción tomó estado público, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) anunció que "convocará a cada una de las provincias a la firma de un nuevo convenio de intercambio de información", para que no investiguen absolutamente nada.
"El objetivo es garantizar las condiciones establecidas en el nuevo Régimen Simplificado de Ganancias, preservando la información de los consumos personales como así también el incremento patrimonial de los ciudadanos en cada una de las 24 jurisdicciones", indicó el organismo a cargo de Juan Pazo en un comunicado. ARCA señaló que "aquellas provincias que no adhieran al mencionado Régimen perderán el acceso a la información de facturación de personas y/o empresas, así como la relativa a los consumos que se den por encima de los umbrales fijados por Arca ($ 50.000.000)".
Por obra y gracia del neoliberalismo de Alfredo Martínez de Hoz, Carlos Menen, Fernando de la Rua y Mauricio Macri, Argentina atraviesa una crisis de confianza institucional profunda. La población ha vivido décadas de confiscaciones, corralitos bancarios y devaluaciones forzadas. Esto ha generado un hábito de desbancarización masiva: Los argentinos compran dólares en el mercado paralelo y los guardan en casa, incluso si son legales. Nadie confía en el sistema financiero que ya se ha quedado con sus dólares.
La discusión no es respecto de la "cuestión moral" del ahorro en dólares, porque es sabido que, debido a las restricciones, la inflación y los problemas para ahorrar en Argentina, muchos deciden resguardar el valor de sus ingresos en la divisa extranjera. Pero también es cierto que, gran parte de esa plata, es dinero que no tiene origen limpio. Y la medida no distingue la procedencia del dinero, que podrían ser utilizado sin ser rastreado. ¿Legalización de la informalidad o incentivo al delito organizado?
Esta flexibilidad abre interrogantes sobre su uso por parte de grandes actores criminales. Desde la perspectiva del crimen organizado, una economía que permite el ingreso de fondos sin preguntas se vuelve muy atractiva. Argentina corre el riesgo de ser incluida en listas grises o negras del Grupo de Acción Financiera Internacional si no demuestra mecanismos de control adecuados.
El proyecto de Milei se inscribe en una lógica libertaria que privilegia la destrucción del Estado y desconfía del control fiscal. Para Milei, los impuestos son un robo, y quien evade, se protege de un sistema injusto. Desde esa óptica, legalizar fondos no declarados no es delito, es justicia. El mensaje que transmite Milei, y apoya Frigerio, es dañino: que la legalidad es relativa si la eficiencia económica lo justifica. Eso socava la credibilidad institucional del país y lo aleja de los estándares internacionales de transparencia.
La Opinión Popular
La resistencia popular crece en todas partes
La situación económica sigue siendo precaria y la caldera social sigue montando presión. La resistencia popular al gobierno de los Hermanos Milei crece en todas partes. Esta semana se produjo la huelga y una masiva movilización de todo el personal del Hospital Garrahan, que cuenta con simpatías unánimes en todo el país, que es el alcance de su práctica, el tratamiento de más de la mitad de los chicos con cáncer.
La nefasta política del gobierno es cuestionada por dos tercios de la población y la policía y los roperos de la seguridad debieron proteger la huida a Karina "la Recaudadora" Milei y Martín "Casta" Menem de la furia de un par de miles de yerbateros de Misiones. Ya en la primera revisión del acuerdo con el FMI no podrá cumplir con los compromisos asumidos y depende de un temprano waiver.
Para conseguir los dólares que se evaporan como gotas de agua sobre piedra caliente, paga intereses extravagantes por un bono que incrementa la deuda pública. El objetivo es aplanar el precio del dólar, que sigue tan regulado como los salarios, con la intención de que el índice de precios al consumidor siga a la baja, con lo que supone que obtendrá una victoria resonante en octubre.
Del Garrahan a las personas con discapacidad, de la represión a los jubilados al nido de trolls rentados encabezados por el Gordo Dan. La realidad distópica del país, cruzada por el destrato libertario, con características negativas que causan la perturbación de la gente, que viven en condiciones miserables, deshumanizadas y temerosas; no parece alterar los apoyos de un sector importante alrededor de la figura presidencial, pese a que crece el descontento con la situación económica. El resultado es mucho más aterrador que el discurso progresista que compara a Milei con Hitler, Mussolini y los totalitarismos fascistas de hace un siglo.
El orden salvaje de la distopía libertaria
Sostiene Rafael Cortes, columnista de Misiones Online, que, envalentonado por la victoria en la interna de la derecha en CABA y por los logros parciales de su programa económico, el gobierno de Javier "el Loco" Milei muestra su costado salvaje. El Garrahan, el Conicet, la atención a discapacitados y el pequeño productor sufren la "revolución cultural" a-narco capitalista.
La inflación en baja y el dólar planchado llevaron al gobierno de Milei a sus mayores niveles de aceptación popular desde que inició su mandato. Los cuestionamientos respecto a la sostenibilidad de un país que gasta más dólares de los que genera y que está poniendo a varios rubros de la industria en terapia intensiva quedan para los analistas, para el ciudadano común queda la impresión de que la situación estaría controlada, porque el dólar está quieto y los precios no aumentan como lo hacían antes.
Los primeros test electorales lo confirmaron. Javier y Karina ganaron la elección que más les importaba, la interna de la derecha en CABA, dejaron de rodillas al PRO y les picaron el boleto a las aspiraciones políticas de Mauricio Macri.
Consolidado como líder del antiperonismo en todas sus formas, Milei se apresta ahora a dar la pelea por la provincia de Buenos Aires contra un peronismo-kirchnerismo debilitado y dividido en una interna que no encuentra, por ahora, vías de solución.
Surfeando en la cresta de la ola, el Loco y sus acólitos se sienten liberados para empujar los límites de lo socialmente aceptable. La "revolución cultural" muestra entonces su costado más antipático, se celebra la crueldad y la solidaridad deja de ser un valor deseable.
La palabra presidencial abusa del insulto y la descalificación en la discusión pública, cualquier atisbo de disidencia se castiga con excitación desmedida, el más burdo adoctrinamiento se convirtió en una conducta aceptable, incluso en canales infantiles.
El rigor de la motosierra, que prometió destruir solamente los privilegios de la casta política, se siente con fuerza en áreas sensibles como la salud pública y la educación y en aspectos estratégicos como la ciencia y técnica.
Ni siquiera los discapacitados se salvaron. El jueves asociaciones y ONG con presencia en al menos 14 provincias reclamaron por falta de pago a prestadores y pensiones. Denuncian la quita de pensiones no contributivas, falta de cobertura prestacional y medicamentos. Prestadores de servicios piden una urgente actualización de sus honorarios.
El titular de la Agencia Nacional De Discapacidad, el miserable Diego Spagnuolo, (el mismo que había emitido una resolución que catalogaba a personas con discapacidades mentales con términos como "idiota", "imbécil" o "retardado mental") volvió a quedar en el centro de la polémica tras conocerse sus respuestas a los planteos de la madre de un niño con autismo.
"Si tuviste un hijo con discapacidad es problema de la familia, no del Estado", espetó el titular de la Agencia de Discapacidad en un ejemplo del espíritu "solidario" libertario, para luego reclamar "¿por qué yo tengo que pagar peaje y ustedes no? ¿Por qué vos no pagás estacionamiento y yo sí?".
El vaciamiento del hospital Garrahan es otra de las consecuencias evidentes de la falta de interés del gobierno nacional por sostener un sistema de salud pública. Desde que asumió el gobierno de Milei, los sueldos del personal del hospital que salva las vidas de cientos de niños de todo el país no hicieron más que devaluarse.
Actualmente, un residente que trabaja 70 horas semanales cobra 700 mil pesos y un enfermero con diez años de antigüedad recibe cerca de 900 mil pesos. Por debajo de la línea de la pobreza para una familia tipo. En el último año y medio más de cien profesionales que se desempeñaban en este hospital se vieron obligados a renunciar a sus cargos, simplemente porque no podían subsistir con los ingresos que cobraban.
El vocero Manuel "Cara de Piedra" Adorni reconoció que los sueldos de este hospital nacional son muy bajos y lo atribuyó a un supuesto exceso de personal administrativo que se "come" la mayor parte del presupuesto. "El Garrahan tiene 953 empleados administrativos y sólo 478 médicos de planta", aseveró en una de sus conferencias. Esto es totalmente falso.
En la misma tesitura se manifestó el presidente Milei, que en diálogo con un streaming libertario dijo que la protesta está "politizada", repitió el argumento del supuesto exceso de personal administrativo y los atribuyó a los "psicópatas de los kirchneristas".
De acuerdo con trabajo de fact checking que publicó el sitio Chequeado, los dichos de Adorni repetidos por Milei son mentiras. "El 68% de los trabajadores del hospital (3.190) forman parte del nivel asistencial -es decir, están en contacto con los pacientes-, según datos de 2024 del Departamento de Estadística del hospital. El personal administrativo está compuesto por 473 personas, no 953 como dijo Adorni", concluye la investigación.
Además, esos datos no contemplan a residentes y becarios, que son alrededor de 1.800 por año y que casi todos son médicos, con lo cual el porcentaje de personal médico se eleva todavía más en comparación con los administrativos.
La misma suerte del Garrahan están corriendo las instituciones orientadas a ciencia y técnica, como el Conicet, el INTA, el INTI, el INIDEP, entre otros. Más que presupuestarios, los motivos detrás del vaciamiento de estas organizaciones son ideológicos. Ninguna de ellas insume costos significativos a la estructura del Estado, pero su continuidad atenta contra el ideal conservador ultra montano que defiende el ignorante de Milei.
Tal como lo expresó en muchísimas oportunidades, sin tapujos ni posibilidad de dobles interpretaciones, el Presidente pretende un Estado reducido a su mínima expresión. Que se limite a prestar seguridad, justicia y una representación ante los demás países. Ni Milei ni los autores que suele citar creen que un Estado deba garantizar servicios básicos como salud y educación a sus ciudadanos, menos aún brindar algún tipo de asistencia a personas con discapacidad.
Justicia divina: Una mancha que difícil de limpiar
La justicia federal es un fuero colonizado por el macrismo, que se sirvió de él para perseguir al kirchnerismo. Esta semana recibió un duro golpe. "Me pareció que, porque la sociedad lo iba a esperar, merecía que el Poder Judicial le rindiera cuentas de su trabajo. Nada mejor que nosotros, que somos los seres humanos que estamos detrás de este juicio, para darle explicaciones a la sociedad de cómo la Justicia lo resuelve. Me parece que es un servicio público".
La polémica jueza Julieta Makintach pasará a la historia del Poder Judicial, pero no por sus fallos ni por su trabajo como vocal de uno de los Tribunales de San Isidro, sino por el escándalo que provocó como responsable de llevar adelante, junto a dos colegas, el juicio por la muerte de uno de los astros mundiales del fútbol, Diego Armando Maradona.
En medio de duros cuestionamientos y de la falta de credibilidad que el ciudadano en general siente de la Justicia, su actuación no hizo más que reafirmar que dentro de ese poder del Estado hay muchas cosas sucias que deben cambiar.
Las circunstancias en las que murió Maradona, una de las personas más conocidas del mundo, merecían ser develadas y juzgadas acorde a los parámetros de excelencia que se espera de magistrados que deben resolver nada menos que sobre la libertad de una persona, uno de los bienes más preciados. La sensación que queda tras lo sucedido es que, si así se trató el caso del durante décadas mayor exponente del fútbol mundial, ¿qué pasaría con los casos de los ciudadanos comunes?
La situación salió a la luz de la manera que menos se esperaba. Alguien se dio cuenta de que una persona estaba filmando y grabando las audiencias, a pesar de que esto estaba expresamente prohibido, excepto en la primera jornada, cuando se permitió que se tomen imágenes.
Cuando se le preguntó quién lo había autorizado, apuntó directamente a la jueza Makintach. De allí se dieron una serie de situaciones, con investigación fiscal incluida, que concluyó con el descubrimiento de que la jueza era parte de una producción que pretendía hacer un documental seriado del juicio aprovechando la repercusión mediática del caso.
Los fiscales Carolina Asprella, Cecilia Chaieb y José Armallo en cinco días descubrieron dos trailers, el crudo de numerosas imágenes y el guion de seis capítulos de 30 minutos cada uno. Makintach resistió en su negativa con respecto a su participación en la serie, hasta que el cúmulo de pruebas fue abrumador y los otros dos vocales, Maximiliano Savarino y Verónica Di Tommasso, decidieron, primero apartarla de la causa; y luego el juicio fue declarado nulo, y deberá comenzar de cero.
Tras el escándalo, los pedidos de juicio político contra la jueza se amontonaron. La Corte Suprema de Buenos Aires decidió además suspenderla por 90 días alegando "una conducta alejada de la sobriedad, la mesura y la corrección exigibles a todo servidor de este poder del Estado".
Las imágenes de Makintach posando, caminando con la cámara a sus espaldas, sonriendo, hojeando expedientes y acomodándose el cabello mientras decía frases para la filmación provocaron el repudio generalizado y que otra vez se ponga sobre el tapete la idoneidad de muchos jueces en Argentina.
Hoy, muy pocos, incluyendo a fiscales, querellantes y defensores, pueden asegurar que el próximo juicio será transparente ni mucho menos imparcial. Actuaciones como las de Makintach son una mancha en la imagen de un Poder Judicial vapuleado, con involucramientos del poder político, que será difícil de limpiar.
La Opinión Popular