“Discutir con la ultraderecha es como jugar al ajedrez con una paloma: la paloma derribará las piezas, se cagará en el tablero y luego saldrá volando, atribuyéndose orgullosa la victoria y dejándote a ti la tarea de tener que limpiar la mierda”. Ece Temelkurán
EL 15 DE DICIEMBRE DE 1961, TRAS UN JUICIO EN EL QUE FUE ACUSADO DE GENOCIDIO
En Jerusalén, un tribunal condena al jerarca nazi Eichmann a morir ahorcado
Un tribunal israelí condena en Jerusalén al exjerarca nazi Adolf Eichmann a morir en la horca al hallarlo culpable del genocidio de millones de judíos durante el Tercer Reich alemán en la Segunda Guerra Mundial. La sentencia se cumplió el 31 de mayo de 1962 en la prisión israelí de Ramla.
El genocida Otto Adolf Eichmann fue un teniente coronel de las SS nazis. Fue el responsable directo de la solución final, principalmente en Polonia, y de los transportes de deportados a los campos de concentración alemanes durante la segunda guerra mundial.
La captura en Argentina fue anunciada con gran despliegue de medios, dándole todo el crédito a Simon Wiesenthal (quien había colaborado en la localización) y a la causa sionista para encubrir la poco ortodoxa participación del Mossad en la operación.
El juicio, que finalizó el 15 de diciembre de 1961, lo condenó a morir en la horca por crímenes contra la Humanidad. Este juicio también es considerado como la gran causa judicial del Estado de Israel. La sentencia se cumplió la madrugada del 31 de mayo de 1962 en la prisión de Ramla.
La Opinión Popular
Eichmann fue el responsable del traslado de millones de personas a los campos de exterminio nazi.
En Jerusalén, Eichmann fue sometido a juicio por un tribunal presidido por los jueces Moshe Landau, Benjamin Halevy y Yitzhak Raveh. Su abogado defensor fue Robert Servatius.
Eichmann alegó en su defensa que las acciones que cometió eran bajo la obediencia debida a sus superiores y que estos se aprovecharon de esta característica. El jurado lo encuentra culpable de genocidio.
Adolf Eichmann organizó, sucesivamente, la expulsión de los judíos de Alemania, su deportación de los territorios ocupados por las nazis y el traslado de millones de judíos a los campos de exterminio. Eichmann, entre los asesinos, ocupaba un lugar de importancia. Era él quien los enviaba a la muerte.