El general Viola se nombró a sí mismo presidente de por vida pero duró menos de 8 meses
El general Roberto Eduardo Viola, segundo dictador del Proceso de Reorganización Nacional, fallece a los 69 años. Fue uno de los ideólogos del terrorismo de Estado. Sucedió como presidente de facto a Jorge Rafael Videla en marzo de 1981 y debía gobernar hasta marzo de 1984. Sin embargo, en medio de la crisis económica y la descomposición del régimen, cayó en un golpe interno que encabezó Leopoldo Fortunato Galtieri a fines de noviembre de 1981. En 1985 fue condenado a 17 años de prisión en el histórico juicio a las Juntas y Carlos Menem lo indultó en 1990.
Viola asumió la Presidencia de su efímero mandato el 29/03/1981. A su lado está su sucesor en el Ejército, Galtieri. La promoción de Galtieri fue el acto de defunción política de Viola, lo que formalmente ocurrió el 11/12/1981, cuando Galtieri fue Presidente, ya declarada por la Junta la incapacidad de Viola para ejercer funciones.
El 30 de septiembre de 1994, en Buenos Aires, muere Roberto Eduardo Viola. Fue un general que, por un golpe militar encabezado por él mismo, depuso al también golpista Jorge Rafael Videla y se nombró a sí mismo presidente de por vida. Pero duró muy poco como Presidente de facto de la Nación Argentina, entre el 29 de marzo de 1981 y el 11 de diciembre del mismo año, durante la dictadura autodenominada Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983), continuando la política entreguista y represiva del gobierno anterior.
Esta política se caracterizó por la violación masiva de los derechos humanos y civiles contra la población mediante el uso de métodos como la privación de libertad sin procedimientos judiciales, la detención en secreto controlada por las fuerzas armadas, la tortura , los asesinatos y las desapariciones; durante este período, además de los miles de personas presas, hubo cerca de 30.000 personas desaparecidas, de los cuales unos 9.000 fueron enlistados por la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas.
En 1983, con el regreso de la democracia y bajo el gobierno constitucional de Raúl Alfonsín, Viola fue arrestado y juzgado por los crímenes cometidos durante su gobierno. En 1985 fue sentenciado a 17 años en prisión, inhabilitación perpetua para el ejercicio de cargos públicos, y pérdida del grado militar. Junto con otros líderes militares, fue excarcelado en 1990 gracias al indulto concedido por el entonces presidente Carlos Menem. Murió antes de la reapertura de las causas en su contra.
La Opinión Popular
Efímera presidencia. El 21 de noviembre de 1981 la Junta Militar declaró a Roberto Eduardo Viola incapaz de ejercer sus funciones de presidente de la Nación Argentina debido a «problemas de salud».