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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 25-08-2024 / 09:08
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

Desgobierno de Milei: Batalla por las jubilaciones, veto presidencial, crisis política y lucha interna por el poder

Desgobierno de Milei: Batalla por las jubilaciones, veto presidencial, crisis política y lucha interna por el poder
Macri apostó por Milei desde la primera vuelta y fue crucial para el triunfo en el ballotage, pero una vez consumada la victoria no recibió del nuevo gobierno lo que esperaba. Desde el primer día de su mandato, Milei teme una sociedad entre Macri y Villarruel más que a ninguna otra amenaza sobre su poder y esos temores empezaron a corporizarse a partir del acercamiento entre ambos.
En noviembre del año pasado, una jubilación mínima de 156.720 pesos (entre fórmula y bonos) alcanzaba para 343 litros de leche entera en sachet. En junio de este año, el último mes para el que hay datos de los precios relevados por Indec, la mínima de 276.931 pesos alcanza para apenas 204 litros.
 
Los 317.704 pesos a los que treparía el haber básico de acuerdo a la ley sancionada esta semana alcanzarían para 234 leches, es decir que permitiría recuperar sólo 30 litros de los 139 que los jubilados dejaron de poder comprar durante el primer semestre del gobierno de Javier Milei. Apenas una reparación parcial, incompleta.
 
El presidente decidió vetar esa fórmula aprobada con mayorías muy amplias en el Congreso por considerar que se trata de "un acto de irresponsabilidad, populismo y demagogia". Fue el viernes a la noche en la Bolsa de Rosario, adonde mintió, sin ponerse colorado, que en su mandato "las jubilaciones subieron en términos reales un 5 por ciento, es decir, le ganaron a la inflación".
 
Son falsedades que ya no cree ni el público que asiste a esas veladas con la esperanza de conocer de primera mano algún anuncio económico pero vuelve a escuchar, una y otra vez, las mismas diatribas y las mismas estadísticas sin asidero en la realidad.
 
La misma incredulidad asaltó a los invitados cuando, al final de la peor semana de su gobierno, después de sufrir tres derrotas consecutivas en el plano legislativo y mientras los bloques oficialistas en ambas cámaras implosionan en cámara lenta, en el medio de una crisis severa con Mauricio Macri, el socio político que le puso el banquito para que ganara el ballotage, y recibiendo cuestionamientos cada vez menos velados sobre el trabajo de Karina Milei y Santiago Caputo, su "círculo de hierro", Milei habló de reelección. La distancia entre las elucubraciones del mandatario y la realidad ya es un tema en la agenda del círculo rojo.
 
Si el veto al alivio para las jubilaciones es la confesión tardía de que el grueso del ajuste que aplicó el Gobierno en estos meses recayó sobre los jubilados, el apoyo que dio Macri a esa medida, después de haber ordenado a los senadores del PRO que votaran en sentido contrario, muestra a la clara los límites que tiene el ex presidente cuando decide pasar a la ofensiva.
 
En la pelea sin cuartel por la jefatura única de la derecha argentina hoy Milei tiene los votos y los fierros del Estado, lo que estrecha sensiblemente el margen de maniobra. A Macri el traje de opositor le queda incómodo y el oficialismo no le paga lo que él pretende.
 
El miércoles al mediodía, el PRO dio quórum y aportó veinte votos para voltear el DNU que multiplica por nueve el presupuesto reservado para la SIDE. Minutos antes de la sesión el expresidente había convocado a un zoom donde dio estas instrucciones. Solamente cuatro diputados del bloque, los más cercanos a Patricia Bullrich, acompañaron al oficialismo en la derrota.
 
Al día siguiente repitió la maniobra en el Senado y los legisladores amarillos acompañaron en general la nueva fórmula jubilatoria. El problema es que Macri quiere correr al gobierno por derecha, no por izquierda, por eso salió a dar su apoyo al veto presidencial.
 

 
Bullrich celebró. Cree que los vaivenes abren grietas en el puño de hierro que Macri había cerrado sobre el partido para encapsular las defecciones de la ministra de Seguridad y del ex jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y que por esas grietas puede alimentarse la fuga por episodios de dirigentes del PRO hacia La Libertad Avanza.
 
Es la apuesta de la Casa Rosada: algunos dirigentes no están acostumbrados a pasar mucho tiempo a la intemperie y Macri no tiene caudal electoral para ser competitivo. En esas condiciones, calculan, es cuestión de tiempo para que los dirigentes, de a uno o de a varios, vayan cruzando la frontera.
 
También siguen con interés las novedades los gobernadores del PRO que intentan desacoplarse de la jefatura tóxica del Ingeniero para ampliar su juego y no quedar condicionados a la estrategia macrista. El chubutense Nacho Torres, por caso, es uno de los impulsores de la conformación de bloques robustos en ambas cámaras para que las provincias negocien en conjunto con el gobierno.
 
Participan de esa iniciativa mandatarios peronistas, como Raúl Jalil y Osvaldo Jaldo, radicales, como Leandro Zdero, Massistas, como Gustavo Sáenz, radicales, como Leandro Zdero, y sueltos como Martín Llaryora, Rolando Figueroa y Alberto Weretilnek.
 
El culebrón tiene varios episodios. Macri apostó por Milei desde la primera vuelta y fue crucial para el triunfo en el ballotage, pero una vez consumada la victoria no recibió del nuevo gobierno lo que esperaba. Desde el primer día de su mandato, Milei teme una sociedad entre Macri y Villarruel más que a ninguna otra amenaza sobre su poder y esos temores empezaron a corporizarse a partir del acercamiento entre ambos.
 
Cuando la vice propuso para encabezar la bicameral de control de los organismos de inteligencia al senador Martín Goerling, cercano a Macri, fue interpretado como un desafío directo que hizo estallar todo por los aires.
 
Hubo intentos por reencauzar la relación: una cena en Olivos el miércoles y al menos dos llamados telefónicos al día siguiente, siempre por iniciativa del presidente. Milei (J) intenta preservar su vínculo pero le juegan en contra Milei (K) y Caputo (S), para quienes la presencia del exmandatario, un enemigo en común, pone en suspenso cualquier recelo haya comenzado a crecer entre ellos.
 
Para los dos se trata de una cuestión de supervivencia. Si el Ingeniero pone un pie en el gobierno será un desafío directo a la autoridad que ahora está reservada exclusivamente a ellos dos. Sólo sabe ser jefe.
 
Para peor, Macri ya no pide solamente lugares en el organigrama, la plata de la coparticipación porteña y patente de corso en la hidrovía, YPF y las SAD. El miércoles, entre milanesas, pidió el sacrificio del asesor estrella, que estuvo por unos días alejado de la ciudad, mientras en el Congreso volaba todo por los aires.
 
A diferencia de lo que sucedió durante el tratamiento de la ley de Bases o del DNU 70/23, cuando el Gobierno operó hasta último momento para cambiar votos, esta vez todo sucedió casi sin resistencia. Como si no les molestara asumir el costo del veto y confrontar con el Congreso. Como si todo marchara de acuerdo a un plan.
 
"Javo cerrá el Congreso ya es ahora", posteaba en X Daniel Parisini, el "Gordo Dan", influencer de ultraderecha con acceso a los pasillos de la nueva/vieja SIDE y al despacho de Caputo (S). La radicalización del discurso antidemocrático de los trolls paraoficialistas se combinó esta semana con un intenso ataque a Macri, que no cesó ni siquiera después de la seguidilla de tuits aclarando su posición frente al aumento de las jubilaciones y el veto presidencial.
 
Caputo sigue en su cargo y no se va a mover. El lunes volverá fortalecido. Es el capitán de las bases radicalizadas que todavía le responden a Milei cuando todo lo demás a su alrededor tambalea.
 
Por Nicolás Lantos
 
Fuente: El Destape
 

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14-07-2025 / 08:07
El presidente Javier "el Loco" Milei está preso de que un proyecto sin sustentos y eso quedó más que claro durante la semana que pasó. El entusiasmo mileísta, de a poco, abre paso a la resignación. Ahora resta saber si ese vacío de entusiasmo podrá ser llenado por un nuevo Nosotros.
 
No tiene mayor sentido detenerse en los aspectos técnicos, o de cálculos transeros, acerca de lo sucedido en el Congreso. Sí lo tiene comprender que la presunta aplanadora de las Fuerzas del Cielo comenzó a encontrar algunos límites.
 
Podrá acontecer que algunos favores presidenciales, a algunas provincias y aliados solícitos, alleguen votos para sostener vetos. Podrá ocurrir que nunca faltará un Kueider por acá, un símil por allá, dispuestos al qué pretende usted de mí. Podrán ofertar todas las Banelco de época que se quieran.
 
Pero ya no habría retorno, nodal, de que al Gobierno empezaron a entrarle las balas (propias). A uno no le gusta esa figura, y sobre todo cuando las guerrillas digitales del neofascismo convocan a la violencia. Se acepta por razones de imagen expresiva.
 
Es impactante la sucesión de errores y horrores ejecutivos que cometieron los adolescentes de Casa Rosada, tal vez porque se acumularon en una misma semana.
 
Puede admitirse, cómo no, que el capital de Javier Milei es permanecer como un intransigente disruptivo a toda costa. Pero de ahí a carecer de todo rasgo de inteligencia política, siquiera para tener fusibles que lo amparen, hay mucha distancia.
 
Podría mantener al personaje y dejar que por abajo negocien lo que fuere, a fines de salvar las papas en instancias determinadas. Por ejemplo, para haber evitado una derrota parlamentaria que se transformó -él transformó- en crisis de alcances inciertos.
 
Hubiera bastado con que no se sometiera al papelón de refugiarse en la niebla, para justificar su ausencia en Tucumán. Juntaba dos, tres, cuatro gobernadores, con algún caramelito de liberar fondos básicos, y prácticamente listo.
 
Pero Milei no sabe. No quiere. No entiende nada, porque siente que le sobra con que todo es cuestión de ganar en las redes, de que su hermana se cargue a quien viniere y de que un coro de bufones corporativos lo aplauda sin percibir que da vergüenza ajena.
 
Sin embargo, eso podría llevar a la conclusión de que el Presidente está preso de sí mismo. No. Eso es una mirada psicologista, que antes de válida es insuficiente. Está preso de que lo que encarna no tiene ni pies ni cabeza como proyecto sustentable. Y como incumbe a la Argentina, con su cultura bimonetaria, le saltó la ficha desde las perspectivas con el dólar.
 
El domingo pasado, bajo la pregunta de si se puede sostener el modelo cambiario, Hernán Letcher describe el panorama de los próximos meses con precisión quirúrgica. Comienza por la canchereada de Caputo Toto ("Si creés que está barato, agarrá los pesos y comprá dólares, campeón"). Fue apenas unos días antes de que el mismo Toto, con imagen desvencijada, apareciera de urgencia en uno de los programas de la televisión oficial.
 

13-07-2025 / 11:07
El presidente Javier "el Loco" Milei avanza contra el Congreso nacional y la democracia misma, opera para vaciar las instituciones y amenaza con cerrar el Legislativo si no logra imponer su voluntad; lejos de moderarse, su estrategia es profundizar la confrontación y tensar el sistema hasta forzar una ruptura o afianzarse en el poder absoluto.
 
Nadie podrá decir que no estaba prevenido. Milei avisó en campaña que las convicciones democráticas no eran parte de su repertorio. Una burda lectura del teorema de la imposibilidad de Arrow era la excusa en la que se refugiaba para no decir, con todas las letras, que su anarcocapitalismo ideal requiere de otras formas de gobierno, menos sensibles a las necesidades de las mayorías.
 
Para el presidente, el Poder Legislativo es un objetivo estratégico desde el primer día. Pero no a partir de la búsqueda de construcción de consensos para consolidar sus decisiones ejecutivas sino como un obstáculo a su poder que debía ser corrido o anulado. Esa escalada recrudeció este jueves, luego de sufrir una histórica paliza en el Senado, pero no es nueva, ni es casual, ni está fuera de libreto.
 
El 10 de diciembre de 2023 Milei asumió su cargo de espaldas al Congreso, rompiendo la tradición centenaria de inaugurar el mandato con una asamblea legislativa. Todavía era el presidente que venía a prender fuego el Banco Central y terminar con la casta. Hoy la imagen es muy distinta: el Central mantiene el dólar planchado y la casta finge demencia y se enriquece en medio de la destrucción.
 
Días más tarde anunciaba el DNU 70/23, con el que se adjudicó facultades legislativas en un espectro muy amplio, usurpando, de facto, el rol del Congreso. La ley de Bases, en tanto, con cientos de artículos, se trató en despachos exprés de sólo cuatro comisiones y, en el recinto, se votó por bloques para evitar que se cayeran los aspectos más escandalosos de la letra chica.
 
Durante el tratamiento de esa ley, que duró varios meses, Milei trató de ratas y de corruptos a los diputados y senadores mientras era el oficialismo el que cambiaba el sentido de algunos votos clave a partir de mecanismos nunca aclarados. Uno de ellos, el senador Eduardo Kueider, está detenido en Paraguay desde el año pasado. Lo encontraron tratando de cruzar la frontera con 200 mil dólares.
 
Cuando los aprietes y la corrupción no alcanzaban para frenar iniciativas contrarias a los intereses del gobierno, el presidente recurrió al veto. Para sostenerlo necesita un tercio de los votos en una de los dos cámaras. En el Senado siempre estuvo lejos. En la cámara baja pudo reunir 87 "héroes", con aliados radicales, del PRO y de algunas provincias, que le permitieron imponerse. Lo celebraron con un gran asado.
 
Esa pólvora está mojada. En la Casa Rosada admiten que no pueden garantizar el tercio que blinda las decisiones de Milei. Por eso recurren a otro recurso: bloquear el funcionamiento del Congreso, incluso mediante la violencia. Clausuran las comisiones para evitar dictámenes en proyectos que no quieren tratar e intentan levantar las sesiones por escándalo (esto es literal) para ahorrarse derrotas. Era una táctica con patas cortas. 
 

12-07-2025 / 09:07
Desde el "no fui por la neblina" de Javier "el Loco" Milei, hasta el hurto de fusibles del tablero del Senado, más tuiteros rentados, empleados por el gobierno, pidiendo que "saquen los tanques a la calle" y que "dinamiten el Congreso", todo fue mugriento y tosco. Fantino y JP Morgan empezaron la escalada que aisló al gobierno en sus limitaciones y vilezas destinadas a ahogar a las provincias, saquear a los jubilados y abandonar a enfermos, discapacitados y a víctimas de la tragedia de Bahía Blanca.
 
El desquiciado Milei decidió no concurrir al acto central por el 9 de Julio en Tucumán cuando se enteró que no irían los gobernadores. Pero como no podía confesarlo, dijo que no iba por la neblina. Hizo un día espectacular y para que se notara más, la vicepresidenta se tomó un avión y llegó con pleno sol.
 
Victoria Villarruel puso en evidencia a Milei -quien la considera una "traidora"- y puso en un aprieto al ubicuo gobernador tucumano, Osvaldo Jaldo, interesado en reclamar lo que incumplió el gobierno nacional, pero poco dispuesto a intervenir en la interna entre el presidente y su vice.
 
Lejos quedó la imagen de la doble fila de gobernadores serviciales que recibió a Milei en la Casa Histórica de Tucumán el año pasado. Le votaron poderes especiales, una inconstitucional ley bases y el RIGI que entrega riquezas. A cambio recibieron promesas de financiamientos e inversiones que nunca llegaron.
 
La rebelión de los gobernadores un año después de aquel acto de sumisión demostró la explosión de la crisis en sus provincias con descalabros en las economías regionales, en las rutas, la educación o la seguridad. Pero también fue un indicio de que las expectativas de la sociedad en el gobierno se redujeron con respecto al 2024.
 
Tras ganar las elecciones, las expectativas de la sociedad en el gobierno de Milei crecieron más que los votos con los que había ganado. Los gobernadores miden esos climas y por eso se sumaron al circo del año pasado. Ahora le dijeron que sin ellos no puede ganar porque esas ilusiones están a la baja.
 
Pero, horror, los gobernadores radicales y del PRO iban a coincidir con sus colegas del kirchnerismo, que resistieron desde el primer día el saqueo a los jubilados y la crueldad de desfinanciar el sistema de atención a la discapacidad o abandonar a las víctimas de tragedias como la de Bahía Blanca.
 
El acuerdo era dar quórum para iniciar la sesión. Los senadores kirchneristas informaron que además de la devolución de los ATN y de lo que les corresponde del impuesto a las naftas, iban a plantear el aumento a los jubilados, la declaración de emergencia en discapacidad y el rechazo del veto presidencial a la asistencia de las víctimas en Bahía Blanca. La noche previa, los gobernadores radicales y los del PRO dijeron que solamente aprobarían la devolución de los fondos a las provincias.
 
Como los puntos que le interesaban a estos gobernadores quedaron al final de la agenda porque serían tratados sobre tablas, sin pasar por comisión, los senadores que les respondían se quedaron hasta el final y algunos de ellos, incluso, votaron junto al kirchnerismo los temas sobre Bahía Blanca, jubilaciones y discapacidad. Este gobierno jugó al borde del precipicio desde que asumió. Zafó al principio con una devaluación que demolió salarios, después con un blanqueo exitoso y luego con la ayuda esclavizante del FMI. 
 

11-07-2025 / 09:07
Por paliza, Javier "el Loco" Milei sufrió una seguidilla de derrotas en el Congreso. Pese a las amenazas y las operaciones sucias, el Senado convirtió en ley por unanimidad el aumento a las jubilaciones y la emergencia en discapacidad y por amplia mayoría la moratoria previsional. Además, rechazó el veto al Fondo para Bahía Blanca, defendió las acciones de YPF y votó los proyectos impulsados por los gobernadores. Los oficialistas abandonaron la sesión y el Presidente, acorralado, ya adelantó que vetará las leyes sancionadas, en una nueva muestra de su autoritarismo y de su fanatismo con el ajuste fiscal a costa del hambre de los jubilados y la motosierra contra los sectores más vulnerables.
 
Enemistado con casi todos los espacios (en las últimas semanas se sumaron los gobernadores), Milei sufrió una derrota tras otra y su gobierno vivió una jornada negra en el Senado. El aumento para los jubilados y la emergencia en discapacidad se aprobaron por unanimidad. La moratoria, con amplia mayoría. Los mandatarios provinciales lograron darle media sanción a la modificación en el reparto de los ATN y en la coparticipación el Impuesto a los Combustibles.
 
La primera de las leyes aprobadas (contaba ya con media sanción en Diputados) fue el aumento de las jubilaciones y del bono para quienes cobran un haber mínimo, que está congelado en $70 mil desde marzo del 2024. De esta manera, la jubilación mínima pasa de $309 mil a $331 mil, y el bono escala a $110 mil. El aval del dictamen contó con 42 votos a favor, 17 en contra y tres abstenciones, mientras que para su aprobación final sumó 52 votos a favor y 4 abstenciones.
 
De acuerdo con el Gobierno, este proyecto rompe el equilibrio fiscal. Sin embargo, según la Oficina del Presupuesto del Congreso, el impacto durante este año será de 0,37% del PBI y en 2026 del 0,71%, número inferior al 0,41% que representó la baja de Bienes Personales a los más ricos. Además, la nueva norma prevé cubrir el impacto fiscal mediante la eliminación de exenciones impositivas, la reasignación de partidas de la SIDE, y utilización de recursos provenientes de registros automotores.
 
La segunda de las leyes que aprobó el Senado es el retorno de la moratoria previsional, con 39 votos afirmativos, 14 negativos y una abstención. De esta forma, se restablece el mecanismo, que venció en marzo de este año, que permite el acceso a una jubilación para quienes no alcanzaron los 30 años de aportes. En tercer lugar, el Senado convirtió en ley por unanimidad la declaración de emergencia para la discapacidad. La propuesta establece la emergencia para el sector hasta diciembre del 2027, que garantiza partidas presupuestarias para incrementar el pago a los prestadores de servicios y saldar la deuda para enfermeros, acompañantes y transportistas. En simultáneo a su tratamiento, diferentes agrupaciones movilizaron al Congreso para presionar su aprobación.
 
Por otra parte, el Senado rechazó por unanimidad el veto de Milei a una ley que creaba un fondo de $200 millones para la restauración de Bahía Blanca tras la trágica inundación de marzo. Ahora dependerá de la Cámara de Diputados, que en su momento dio media sanción a la ley con 153 votos a favor y la única oposición de LLA. Otra de las derrotas del Gobierno fue la media sanción a los proyectos presentados por los 24 gobernadores, que plantean un nuevo reparto a las provincias de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y del impuesto a los combustibles.
 
La Opinión Popular
 

10-07-2025 / 09:07
El gobierno de Javier "el Loco" Milei quema puentes que va a necesitar tarde o temprano, o quizás hoy mismo. El faltazo masivo de los gobernadores al acto del 9 de julio debía ser leído por la Casa Rosada como una advertencia que los alentaría a sentarse a negociar un mejor reparto de recursos. Eso esperaban 18 de los 24 gobernadores; de los restantes hay dos que ya perdieron esa expectativa y cuatro que nunca la abrigaron.
 
Milei no quiso o no supo leer el mensaje. Los acusó, a "todos", de buscar la destrucción del Gobierno. Con una fallida operación de relaciones públicas intentó instalar la idea de que las turbulencias financieras que habrá en las próximas semanas no son a causa de la falta de dólares sino de que el Congreso Nacional apruebe leyes que asignan recursos a jubilados, discapacitados y las provincias.
 
Esa voltereta mediática no hizo más que consolidar el bloque opositor que se prepara para darle esta tarde una dura derrota al gobierno libertario en el Senado. Los gobernadores pasaron de ser los mejores aliados de Milei a sus nuevos enemigos. Como aliados le permitieron obtener la Ley de Bases y sostener el DNU 70/23. Como enemigos puede convertir lo que quede de su mandato en un pantano.
 
Oficialismo y oposición descuentan que este jueves por la tarde van a estar los votos para convertir en ley el aumento a los jubilados y la suba del bono, además de la emergencia en discapacidad. Adicionalmente, buscarán darle media sanción a los dos proyectos impulsados por los 24 gobernadores para que el gobierno nacional reparta entre las provincias fondos que retiene de manera irregular.
 
Pero es otro proyecto el que enciende todas las alarmas. Los senadores de la oposición intentarán alcanzar los dos tercios de los votos para insistir con la ley que declaraba la emergencia en Bahía Blanca por las inundaciones, y que el presidente vetó. Si lo consiguen, los diputados podrán hacer lo propio la semana que viene, dejando al desnudo la vulnerabilidad del gobierno, que perdió el poder de veto.
 
Esa revelación caería en el momento más inoportuno. En la recta final antes de las elecciones en la provincia de Buenos Aires y las nacionales puede quedarse sin herramientas para evitar una serie de derrotas políticas de alto calibre. Por eso se profundiza el ataque al Congreso y se redoblarán los esfuerzos para boicotear su funcionamiento. La oposición deberá evitar las trampas.
 
Para completar un panorama adverso, a Milei también le están dando la espalda los grandes grupos financieros, que son los principales beneficiarios de su gestión. Sólo entre ayer y hoy se pagaron más de 4000 millones de dólares (que equivalen al 80% del presupuesto anual en Salud) en intereses de deuda. La principal prioridad del plan económico del gobierno es pagarle a los acreedores.
 

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