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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 13-05-2024 / 16:05
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

Argentina al borde del abismo: Construcción, industria y consumo se derrumban a niveles históricos

Argentina al borde del abismo: Construcción, industria y consumo se derrumban a niveles históricos
Esta semana se conocieron datos que terminan de echar por tierra las expectativas de una rápida recuperación de la economía. Construcción, industria y consumo se derrumban a niveles históricos. La política también se complica en el Congreso y deshilacha la quimera presidencial del relanzamiento de Javier “el Loco” Milei. Los ministros con rango de fusibles y los crujidos en el barco opositor que busca encauzar su rumbo.
Esta semana se conocieron datos que terminan de echar por tierra las expectativas de una rápida recuperación de la economía. Construcción, industria y consumo se derrumban a niveles históricos. La política también se complica en el Congreso y deshilacha la quimera presidencial del relanzamiento de Javier "el Loco" Milei. Los ministros con rango de fusibles y los crujidos en el barco opositor que busca encauzar su rumbo.
 
Le digo efecto Coyote por el personaje que siempre intentaba (y nunca podía) cazar al Correcaminos en los dibujitos animados. Durante esa eterna persecución, una y otra vez este personaje iba más allá del borde de un acantilado o un cañón y seguí­a corriendo en el aire sin notar que debajo suyo había un precipicio. Hasta que miraba. Eso rompía el hechizo y lo dejaba en manos de la fuerza de gravedad, que sin excepciones lo arrojaba silbando contra el lejanísimo suelo hasta que el impacto producía una nube de humo y una explosión.
 
Si no mirás para abajo, no te caés. Ese es el efecto Coyote, que explica en buena medida lo que sucede con el gobierno de Milei. Esta semana se conocieron datos que terminan de echar por tierra las expectativas de una rápida recuperación de la economía: la construcción en marzo cayó un 42,2 por ciento interanual, la industria de manufactura un 21,2 por ciento, las ventas en supermercado en abril volvieron a desplomarse un 15 por ciento, el índice de salarios perdió nuevamente contra la inflación y se estima que el consumo recién podría recuperarse en 2025.
 
No miren para abajo. Aunque no aparecen fuentes de financiamiento externo y el superávit sólo pueda simularse con deuda en dólares, aunque la inflación siga en niveles altísimos en el marco de una recesión histórica que recién empieza y el poder adquisitivo encuentre, un mes atrás otro, nuevos subsuelos, no miren para abajo. Aunque al oficialismo le cuesta cada vez más construir consensos políticos y no sacó una sola ley, aunque las internas sean cada vez más feroces, aunque el presidente hable con perros muertos, si nadie mira para abajo no nos caemos.
 
Pero tarde o temprano el Coyote siempre terminaba descubriendo su precaria situación. Sin importar cuántas veces lo intentara, nunca llegó al otro lado. Corolario al efecto Coyote: el único final posible, si no hay nada que te sostenga, es la caída. Es cuestión de tiempo. Van cinco meses de gobierno, que es al mismo tiempo mucho y muy poco. El envión de un triunfo contundente en la cámara de diputados no duró ni una semana. El paro nacional del miércoles pasado fue el más importante desde el gobierno de Fernando De La Rúa, hace un cuarto de siglo.
 
Y algunos empiezan a mirar para abajo. El jueves fue un día complicado en la Casa Rosada. A unas cuadras de allí, en el Hotel Alvear, en el marco de un foro de empresas nacionales y extranjeras dedicadas al negocio de la energía, el gobierno recibía, por primera vez, una amonestación severa del círculo rojo. El motivo fue la decisión de pagar la deuda con ese sector, de 1200 millones de dólares, con bonos a 14 años y una quita del 50 por ciento. La decisión despertó interés en el FMI y el Departamento del Tesoro. Se usaron las palabras "ruptura de contratos" y "default".
 
La situación financiera de la Argentina sigue siendo delicada y toda estrategia del gobierno se basa en un complejo mecanismo de ingeniería social para sostener la expectativa de una rápida mejora a pesar de que la realidad indique lo contrario. 
 

 
El superávit fiscal, el precio del dólar quieto, la baja del riesgo país y la estabilización, en niveles muy altos, de la inflación, son equilibrios delicados, en el mejor de los casos, o maquillaje contable, y que quedarán expuestos en cuanto pase la euforia y las dudas empiecen a proyectar su sombra. Lo del Alvear no ayuda.
 
El entuerto puede costarle el puesto a Eduardo Rodríguez Chirillo, el secretario de Energía al que además se le atribuye la autoría de la ley de bases, aunque él mismo tuvo que reconocer, esta semana, al exponer en el plenario de comisiones del Senado, que deconocía algunos de los artículos clave. Sin embargo el verdadero responsable de la oferta de bonos a las energéticas fue el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, cuya continuidad quedó en duda sobre el final de la semana mientras los candidatos a reemplazarlo se multiplican.
 
Además de Federico Sturzenegger, el autor intelectual de la reforma del Estado, sin cargo formal en el gobierno pero trabajando en un nuevo mega-decreto con más de 160 normas para que Milei estrene sus facultades delegadas ni bien la ley de bases consiga su sanción, y de José Luis Espert, interlocutor privilegiado del presidente, en la Casa Rosada también evalúan para el cargo el actual embajador en Paraguay Guillermo Nielsen, expresidente de YPF, exembajador en la península arábiga, especialista en energía y finanzas.
 
Los sponsors que lo promueven le recriminan justamente a Caputo que no exhibió efectividad en ninguno de esos dos ámbitos. No pudo conseguir el ingreso rápido de divisas por inversiones en el área de hidrocarburos ni la apertura de mercados financieros para el país.
 
Ni siquiera consiguió el fondeo necesario para salir del cepo, su objetivo más urgente. El ministro, en privado, reparte culpas: a Diana Mondino por bloquear la opción china, al propio Milei por espantar a fondos árabes con su posición intransigente de defensa a Israel.
 
Lo que no puede explicar "Toto" sin autoincriminarse es por qué no consigue dólares frescos de Estados Unidos a pesar del furor por Milei en algunos círculos empresariales y financieros, de que este gobierno subordinó a Washington su política exterior y que hasta la CIA gestionó fondos frescos con el FMI. No hubo caso.
 
El propio Caputo es el principal obstáculo. Las pérdidas ocasionadas por su paso anterior por la gestión todavía se están pagando. Los gringos tienen un refrán que dice: si me cagás una vez es culpa tuya, si me cagás dos, es culpa mía.
 
El ministro de Economía fue respaldado por el presidente a través de un tuit, acaso la forma más auténtica en la que expresa sus opiniones, y por lo tanto políticamente la más valiosa. Pero Milei no siempre tiene la última palabra.
 
Los tironeos por el sillón de Caputo no son más que un frente periférico en la interna asimétrica entre las dos facciones que pretenden llevar el timón en su gobierno. Por un lado Karina Milei, en alianza con Santiago Caputo y los dos Menem, Martín y "Lule". Por el otro el jefe de gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Interior, Guillermo Francos.
 
Esta semana también hubo nubarrones sobre la cabeza de Posse. El jueves hubo una reunión del equipo de gobierno en Casa Rosada, a la que Milei no asistió. Fue encabezada por la secretaria general de la presidencia, Karina, y no por el jefe de gabinete, como indica la Constitución.
 
La tensión llegó al punto de que, en las primeras después del accidente en el ferrocarril San Martín, que dejó casi un centenar de heridos, mientras el gobierno nacional no tuvo una posición pública se operaban entre sí los dos bandos para endilgarse responsabilidades por el hecho.
 
Todos los ojos estarán puestos sobre el jefe de gabinete este miércoles, cuando asista al Senado para hacer un balance de su gestión. Va a recibirlo Victoria Villarruel, protagonista periférica de la misma interna por su lugar expectante en la línea sucesoria.
 
La tregua que firmó con Karina para agilizar el tratamiento de la ley de bases en la cámara alta duró lo mismo que los planes para darle un trámite express. Ni bien se presentaron obstáculos la desconfianza mutua volvió a aflorar. La vice ya no disimula los gestos de diferenciación con el presidente.
 
En la Casa Rosada ven con mucha suspicacia los movimientos del senador salteño Juan Carlos Romero, un experimentado legislador sin más jefe que sí mismo y que muchas veces funciona como vocero de Villarruel en el recinto.
 
Esta semana Romero accedió rápidamente, primero, a agregar exposiciones durante el tratamiento en comisión, lo que significó una demora en el cronograma apretado que impulsaba el oficialismo. También intervino con varias críticas durante el debate con funcionarios, que esperaban una actitud colaborativa de su parte.
 
El gobierno ya se resignó a que no tendrá la ley de bases aprobada antes del 25 de mayo y que seguramente deba volver a la cámara de diputados con cambios significativos. Es probable que el RIGI sufra recortes importantes o sea eliminado y también existen muchas dudas sobre el futuro del impuesto a las Ganancias.
 
La reforma del Estado podría quedar trunca, las facultades extraordinarias no reúnen consenso, y la lista de empresas a privatizar volver a achicarse, dejando a salvo, entre otras, a Aerolíneas Argentinas.
 
Por Nicolás Lantos
 
Fuente: El Destape
 

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17-09-2025 / 09:09
Javier "el Loco" Milei es un mentiroso consuetudinario. Se dedica a "mandar fruta", hablar sin saber realmente del tema, exagerando, inventando o diciendo cosas sin sentido, con la intención de engañar. Todas las organizaciones especializadas en Educación, Jubilaciones y Discapacidad destruyeron los anuncios presidenciales sobre mejoras para esas áreas. Se basan solo en dibujos numéricos y ajustes encubiertos. Los gremios revelaron que el porcentaje del PBI dedicado a la enseñanza, que fue de 1,48 en 2023 y de 0,88 en 2025, baja al 0,75 en 2026. Los rectores aseguran que se congela el gasto universitario en sus peores niveles.
 
El discurso de Milei por el cual presentó el Presupuesto 2026 está plagado de números mentirosos y mensajes al "mercado", a los grandes empresarios y financistas. A los ricos. El presupuesto reduce fuertemente la partida destinada a cancelar deudas previsionales; mientras que la partida para pagar la deuda pública a los especuladores financieros crece un 20%. Hay deudas y deudas para el Gobierno.
 
Milei aseguró al presentar el Presupuesto 2026 que habrá un aumento del 17% de suba en términos reales (por encima de la inflación) en materia de salud, 8% en materia de educación, y 5% en jubilaciones y en pensiones por discapacidad. Además, anunció que se le asignará $4,8 billones a las universidades nacionales, lo que representa una suba nominal del 13% frente a una inflación proyectada del 10%.
 
Sin embargo, anteriormente, el Presidente reveló que el proyecto presenta "una regla de estabilidad fiscal": "si los ingresos caen o los gastos superan a lo previsto se deberán ajustar partidas para mantener el equilibrio fiscal". Es decir, cualquier variable proyectada en el Presupuesto que se modifique, como una inflación anual de 10% o un dólar debajo de $1.350, "obligará" a Milei a no cumplir con estos aumentos. Además, también lanzó que su proyecto estipula el "menor nivel de gasto sobre PBI de los últimos 30 años". Contradicciones que desnudan que sus promesas son incumplibles.
 
En las últimas semanas, el Gobierno libertario redujo en $40.267 millones las transferencias a las universidades nacionales. De esta manera, Milei terminará 2025 con una reducción del 9,4% real del presupuesto universitario con respecto a 2024 y del 32% frente a 2023. Para equiparar los gastos realizados el año pasado, el Gobierno debería invertir $4,6 billones en lo que resta de 2025 y $6,2 billones para igualar el nivel de 2023. Es decir, la promesa de $4,8 billones para el 2026 no absorbe la pérdida registrada.
 
Si bien Milei prometió que las jubilaciones aumentarán 5% por arriba de la inflación en 2026, no alcanza para equiparar lo perdido durante su gestión. En 2024, el recorte en dicha partida fue del 14%, y sin contar el bono para el haber mínimo cuyo monto está congelado hace 18 meses frente a una inflación superior al 100%.

Además, más allá de su promesa, si la inflación anual es más del 10% como se proyecta, ¿mantendrá el aumento de las jubilaciones 5% por encima de la inflación? "Si los gastos superan lo previsto se deberán ajustar partidas", afirmó en su discurso.

En otros rubros, las partidas presupuestarias en Educación acumulan un ajuste del 41% entre 2023 y 2025, según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA). El 8% anunciado por Milei queda chico. En cuanto a discapacidad, la ANDIS sufrió un recorte del 14%. Sobre este punto, Milei supone una suba del 5% real sobre las pensiones. El proyecto ensaya un recitado de mentiras expresadas en números que no cierran ni aseguran la continuidad de las áreas con normalidad. Lo peor todavía no pasó.

La Opinión Popular


16-09-2025 / 11:09
La bala entró. La derrota electoral en la provincia de Buenos Aires sacudió al Gobierno de Javier "el Loco" Milei de tal manera que se vio obligado a cambiar el tono discursivo. La administración libertaria se niega a modificar su brutal política económica de ajuste y motosierra, pero ayer el presidente brindó un discurso atípico: fue moderador, evitó los insultos, las provocaciones, anunció mejoras en el Presupuesto 2026 para los sectores más vulnerables y llamó a trabajar "codo a codo" con los Gobernadores.
 
Además, el jefe de Estado envió un mensaje a la población y aseguró que "lo peor ya pasó, no aflojemos". De esta manera, Milei acusó recibo del fuerte descontento social. Sin embargo, no fue la primera vez que el mandatario prometió que los momentos más difíciles quedaron atrás y que lo mejor estaba por venir.
 
El 10 de diciembre de 2024, el libertario afirmaba que ya habíamos "superado la prueba de fuego". "Estamos saliendo del desierto. La recesión terminó y el país finalmente ha comenzado a crecer. Gracias por confiar en este gobierno. Esto no quiere decir que hayamos llegado a puerto, pero sí quiere decir que podemos terminar el año con alivio y de que hemos dejado atrás lo peor", decía entonces en otra cadena nacional.
 
Un mes antes, el 11 de noviembre de 2024, decía exactamente lo mismo. "Hoy ya podemos decir que la recesión se terminó y de ahora en adelante todo lo que queda es crecimiento. De acá para adelante son todas buenas noticias", exclamaba. Pero lo frase no le pertenece exclusivamente a Milei. Años antes, en 2018, el entonces presidente Mauricio Macri también prometía frente al Congreso nacional que "lo peor" ya había pasado y vaticinaba años de crecimiento qué nunca llegaron.

Un Milei "sosegado" confirmó que profundizará el rumbo de ajuste fiscal exigido por el FMI. Y, tras una paliza electoral, La Libertad Avanza reflota la vieja promesa de que lo más difícil queda atrás. Sin embargo, y a pesar de algunas mejoras anunciadas, el Presupuesto 2026 es una ley de ajuste que no modifica los planes del Gobierno y del Fondo Monetario Internacional. Son mentiras, falsas promesas de aumentos para ganar las elecciones y más ajuste en jubilaciones, salud y educación.

En las calles, se manifestó el hartazgo total, hubo una ola de cacerolazos en el AMBA contra la cadena nacional de Milei. Desde Palermo y Recoleta hasta La Plata, cientos de personas en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires manifestaron su rechazo al Presidente mientras lanzaba el Presupuesto 2026. La sociedad no compró las mentiras de la cadena nacional y repentinamente salió a las ventanas y los balcones a manifestarse en contra de las medidas de ajuste del Gobierno anarco capitalista. La noche quedó marcada por una ola de cacerolazos en todo el AMBA.

El ruido metálico se convirtió en un grito unánime contra las políticas que solo traen más hambre, despidos y desesperación. "No se puede más, nos están matando de a poco", gritaban en Plaza de Mayo, donde las cacerolas parecían tambores de guerra. El fantasma de la crisis del 2001 sobrevoló la noche, con la misma bronca, la misma impotencia y las mismas calles llenas de familias cansadas.
 
El Gobierno de Milei, mientras tanto, respondió con silencio y un operativo de seguridad notorio en los puntos calientes. Sin embargo, la bronca ya no se calla con policías ni patrulleros. La pregunta que queda flotando es si este rugido metálico será apenas un desahogo pasajero o el comienzo de un estallido más grande que termine por arrinconar a la hermana coimera, al libertario desquiciado y a su nefasto plan neoliberal.
 
La Opinión Popular
 

15-09-2025 / 09:09
Un Gobierno anarco capitalista sin cuadros políticos y sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado, se enfrenta a la profundización de su propia distopía tras la paliza electoral. La hermanísima copó el Ejecutivo y con Jamoncito, hasta acá, se demostraron como una unidad indivisible. El Gobierno está completamente en manos político-administrativas de Karina "el Jefe" Milei y se resolvió que sólo sea Luis "Toto" Caputo quien conduzca el único plan existente: pisar el dólar hasta las elecciones de octubre. No hay más que eso. No hay más certezas que ésas.
 
Respecto de la primera, podrían apuntarse dos observaciones. Una es que La Hermanísima Karina siempre estuvo a cargo de la ejecutividad gubernamental, excepción hecha de lo económico. La otra consiste en que, como fuere, no habría mayores novedades porque desde un comienzo la gestión fue un quilombo. Basta con repasar los centenares de funcionarios echados o renunciados, que supieron llegaron al promedio de uno por día.
 
Y esto tampoco sería novedoso, porque se corresponde con las características de un Gobierno arribado como tal sin la más mínima preparación institucional. Sin cuadros políticos. Sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado. En otros términos conocidos, Javier "el Loco" Milei fue un armado del establishment, desde el panelismo televisivo y las redes, para segmentar parte de los votos peronistas y antiperonistas.
 
Pero el Frankestein adquirió una fuerza propia inusitada, a tono con endilgarle ese carácter de accidente insólito en la historia argentina. Y después no hubo nada que hacer. Así, el país quedó al arbitrio de unos Hermanos & Cía. exclusivamente relacionables con un escenario distópico. ¿Cuál es la noticia, entonces? Es que, tras el resultado electoral, la distopía se profundizó. Ya no hay Presidente, al menos por ahora, en su acepción de figura con aptitudes básicas para tomar decisiones autónomas. Milei está paralizado, totalmente fuera de eje.
 
Es así desde la noche del domingo pasado, cuando, aunque siga sin poder creerse, hasta último momento imaginó que perdía por muy poca diferencia. Incluso, de acuerdo con las mesas testigo del indescriptible Sebastián Pareja, pensó que llegarían a ganar por unos 8 puntos. Eran 50 de esas mesas, según pudo constatarse, de calidad irrelevante. Al aterrizar con los números reales entró en colapso (político, aclaremos, porque los diagnósticos psiquiátricos incumben a especialistas y nunca a la bartola periodística). Continúa en ese estado.
 
Se verá si para la cadena nacional de este lunes a la noche puede recomponerse como para dar una imagen atildada, llamémosle. Hablamos del continente, desde ya. El contenido será la provocación de redoblar su rumbo. La hermana, en consecuencia, asumió enteramente el rol presidencial. Y, hasta ahora sin visos de modificaciones, se cargó con desprecio todo intento de cambios siquiera por maquillaje.
 
El hazmerreír de una mesa política con los mismos rostros de la derrota y el nombramiento de un ministro de Interior que ya lo era de facto, tras el pase de Guillermo Francos a la Jefatura de Gabinete, es todo de ella. Es de ella -en todo caso, junto con el edecán de Francos- llamar al diálogo con los gobernadores mientras se vetan los fondos de ATN a las provincias, para no hablar de la "profunda autocrítica" que en simultáneo rechaza el financiamiento a las Universidades y la emergencia pediátrica Garrahan incluido.
 
Es de ella haberse animado a un acto de lanzamiento de LLA en Tucumán, ante un estadio cuyas tribunas debieron cubrir con lonas negras para ocultar el vacío; en el que brilló por su ausencia cualquier cántico de aliento y donde, en poco más de dos minutos de balbuceos, volvió a incurrir en el espectáculo de su terrorismo sintáctico. Sin más vueltas, he aquí la Presidenta real en ejercicio directo de la función.
 

14-09-2025 / 09:09
El miserable Gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei no solo canceló los fondos destinados a las personas discapacitadas, a los inundados o a la ciencia, también se apropió de los dólares de los créditos internacionales otorgados específicamente para esas actividades. Solo en Discapacidad figuran 560 millones en divisas que nadie sabe a dónde fueron, con la excepción de dos viajes de Spagnuolo a Israel. El Gobierno libertario no explica dónde está la plata que debería ir a ciencia o discapacidad. La hipótesis del Congreso de que los fondos están en el Tesoro para contener el esquema cambiario.
 
Pocas horas después de la paliza electoral en la Provincia de Buenos Aires, Milei recibió en Casa Rosada al presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn. El lunes al mediodía, ambos posaron para la foto junto a Luis "Toto" Caputo, Guillermo Francos y la motosierra de bronce que corona el despacho presidencial. El titular del organismo también había sido muy requerido para entrevistarse con dirigentes de la oposición, pero alegó estar muy ocupado.
 
Desde la comisión bicameral Revisora de Cuentas del Congreso, que conducen el diputado Miguel Pichetto (Encuentro Federal) y el senador Mariano Recalde (Fuerza Patria), querían citarlo para indagar en la letra chica de los créditos que el organismo le otorgó al país en los últimos meses.
 
La preocupación, que se hizo explícita en la última sesión de la comisión, es que muchos de esos fondos --cientos de millones de dólares-- en principio destinados a financiar obra pública y programas de inclusión como la discapacidad o la investigación científica, registran niveles de ejecución nulos o muy por debajo de lo pactado a la firma. Lo cual habilita la hipótesis de que el Gobierno desvía esos recursos hacia las cuentas del Tesoro para contener el actual esquema cambiario y favorecer la bicicleta financiera.
 
En lo que va del año, el Gobierno reconoció haber gastado unos 277 mil millones de pesos (algo menos de 250 millones de dólares) de lo que ingresó vía los distintos créditos de inversión del BID y otros organismos. En total hay unos 140 programas de desarrollo vigentes, desde los pautados para financiar el Progresar hasta la extensión y fortalecimieinto de la red de agua potable, pero el país hasta ahora vió poco y nada de esos fondos.
 
A esta altura del año (en ocho meses), los dos gobiernos anteriores (Cambiemos y Frente de Todos) ya habían ejecutado en promedio más de 1.500 millones de dólares. Es decir, la ejecución de Caputo es prácticamente del 20 por ciento de lo esperable. En paralelo, el Tesoro utilizó 500 millones de dólares para pisar el dólar en las semanas previas de la elección bonaerense.
 
El BID aprobó en julio de este año la "Estrategia País 2025-2028" para la Argentina, un paquete de apoyo financiero por un total de 10.000 millones de dólares (7.000 para el sector público y 3.000 para la inversión privada).
 
Si bien el organismo trabaja con todos los gobiernos y cada uno tiene una orientación específica, en este caso respalda a una administración que solo se preocupa por mantener el esquema cambiario-electoral, mientras tiene un desprecio palpable hacia la obra pública y pasa la motosierra por sectores sensibles. Lo contrario a lo que, a priori, buscan los organismos de crédito cuando apoyan a los países. Pese a todo, Goldfajn sigue apostando por Milei.
 

13-09-2025 / 10:09
Desde el 10 de diciembre de 2023, los auto percibidos libertarios (que en realidad son los nietos de la dictadura, los hijos del menemismo y los hermanos menores del macrismo), sembraron odio, represión, industricidio, desprecio, hambre, pobreza, deuda, desocupación, negacionismo, homofobia, racismo y misoginia.
 
Se vienen tiempos de derrota sin revancha, porque parece que no fue un gran plan dejar sin remedios a los pacientes oncológicos, vaciar de alimentos los comedores populares, pegarle a los jubilados, estafar con una criptomoneda y afanarle a los discapacitados. ¿Podían esperar otro resultado, los que por primera vez pisaron el conurbano, para decirle al pueblo, en campaña y sin intermediarios, "negros de mierda"? ¿Podían esperar otra cosa los que dijeron que la justicia social era una estafa?
 
Creyeron que la realidad, no era la única verdad y cocinaron su suicidio político, gritando desde aquella infame ficción del 17.000% de inflación, hasta el relato perverso con el que aseguran haber sacado a 12 millones de la pobreza. No podía terminar de otra manera una locura que comenzó exigiendo que más de tres tenían que pedir permiso para juntarse en una esquina. No podía terminar de otra manera aquel grito libertario el día de la asunción que clamaba "Po-li-cía, Po-li-cía".
 
Perdieron en las urnas, la motosierra, el protocolo anti-piquetes, el DNU 70/23, la Ley Ómnibus, la Ley Bases, el Pacto de Mayo y la Patria financiera. Perdió el presidente que eligió como enemigo público número uno, a un pibe autista de 12 años. Perdieron las desregulaciones ridículas y las importaciones suicidas. Perdieron la mesa de dinero del Toto Caputo, la crueldad de Patricia Bullrich, el cinismo de Pettovello, la violencia discursiva de Adorni, el verso de Francos y el afano a cuatro manos de los Menem.
 
Perdió un gobierno diseñado exclusivamente para el gran capital y el mercado. Perdieron Kueider, el pastor que convirtió los pesos en dólares y los hermanitos de la Suizo-Argentina. Perdieron De Loredo, el comisario conspirador y candidato, Tronco, la Avenida del Medio, los premios internacionales de plástico, Roberto Piazza, Fátima y Yuyito.
 
Perdieron los que se reunieron con Astiz y los que soñaron con intervenir la provincia de Buenos Aires. Perdieron Libra y el 3% de la coimera Karina. Perdió el Indec de Lavagna. Perdieron el Pacto de Acasusso, Macri, Ritondo, Santilli y Valenzuela. Perdieron Lilia, Benegas Lynch y la tarotista que no pudo ver la derrota.
 
Perdieron la soberbia de Pareja, los "héroes" del veto a jubilados, los periodistas que van a escuchar ópera a Olivos y los que se saben de memoria los diálogos de "Homo Argentum". Perdieron las redes sociales, las patotas tuiteras, el "pedo buzo", "comprá campeón" y "cárcel o bala". Y perdieron todos los gobernadores que, como Frigerio, hasta hace un ratito, fueron cómplices del desastre presente, acompañando en el Parlamento la construcción de un país irrespirable.
 
Ganó la unidad del peronismo. Ganaron los discapacitados, los expulsados del sistema, los que laburan por sueldos de miseria y la gran pelea de los jubilados. Ganaron la obra pública y la industria nacional. Ganaron el Garrahan, el Bonaparte, el Conicet, el INTA y el INTI. Ganó la Universidad pública. Ganaron los que "cagan en latas y pisan el barro". Le ganó el pueblo a la "gente de bien".
 
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