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                  18:37  |  Martes 16 de Diciembre de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

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“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
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Nacionales - 19-01-2024 / 11:01
IDAS Y VUELTAS DE UNA DESEQUILIBRADA ACTUACIÓN

La desastrosa política internacional de Milei y su equipo ultraderechista rompe vínculos estratégicos

La desastrosa política internacional de Milei y su equipo ultraderechista rompe vínculos estratégicos
Más allá del alineamiento con Occidente y casi exclusivamente con Estados Unidos e Israel, la política internacional de Javier “el Loco” Milei pareciera ser romper los vínculos estratégicos con los socios comerciales más importantes de Argentina. A los traspiés de Milei y Diana Mondino con China y Brasil, se suman las polémicas declaraciones de Patricia Bullrich sobre el narcotráfico en Chile que ya generaron la reacción de funcionarios nacionales del país vecino.
Más allá del alineamiento con Occidente y casi exclusivamente con Estados Unidos e Israel, la política internacional de Javier "el Loco" Milei pareciera ser romper los vínculos estratégicos con los socios comerciales más importantes de Argentina. A los traspiés de Milei y Diana Mondino con China y Brasil, se suman las polémicas declaraciones de Patricia Bullrich sobre el narcotráfico en Chile que ya generaron la reacción de funcionarios nacionales del país vecino.
 
Es que el actual gobierno libertario tiene vocación de "papelonero", ya sea por falta de interés en la acción o el discurso, ya sea por desconocimiento o indiferencia con los temas tratados. Esto se ha visto ampliamente confirmado con el reciente discurso de Milei en el foro de Davos. Es que en esta selectísima reunión de las grandes fortunas del mundo y sus expresiones políticas, las palabras del presidente argentino causaron asombro, al margen de evidenciar la falta de ubicación para con el ámbito en que se encontraba. Típico porteño chanta. 
 
Milei en este, su debut internacional, cayó en tales alucinaciones relativas a su pensamiento económico y político libertario que, al margen de dilapidar el interés de los concurrentes en el enfoque de la economía de nuestro país, sacudió al auditorio con conceptos infantiles que movieron un espectro que osciló de un pasmo inicial a una disimulada risa final, con apenas unos aplausos de cortesía. Su arremetida para con su enemigo personal -el Estado- se dio de narices contra un público que, o bien lo respeta como entidad o bien lo utiliza, pero en modo alguno lo rechaza, reconociéndolo como una herramienta intermedia necesaria a sus intereses.
 
Reiterando su idea panfletaria de que la reunión de Davos está -nada menos-que "contaminada por el pensamiento socialista" que procura el manejo de ese Estado, no vaciló en meter en una misma bolsa a "comunistas, fascistas, nazis, socialistas, socialdemócratas, keynesianos, progresistas, populistas, nacionalistas o globalistas. En el fondo no hay diferencias sustantivas, todos sostienen que el Estado debe dirigir la vida de los individuos".

Después, para el asombro creciente de los concurrentes y como si fuera un discurso de los tiempos de la Guerra Fría, "advirtió" sobre los peligros de un comunismo y socialismo que están -según él- llevando el planeta hacia un desastre, esto en medio de un capitalismo en el que se refugia la esperanza del mundo. ¿Y cuáles serían las herramientas con las que esas pérfidas concepciones avanzan sobre occidente? Pues nada menos que el feminismo en todas sus manifestaciones y un sedicente cambio climático, todo lo anterior dicho en un tono admonitorio para con una elite que estaba muy lejos de aceptarlo, al margen de su total falta de coincidencia.


Si, en su ya evidente megalomanía, Milei esperaba un auditorio que lo ovacionara de pie, quizás habrá advertido que solamente tuvo unos muy tibios aplausos de focas -básicamente de la delegación que lo acompañó, y los gestos de extrañeza e incredulidad de los periodistas presentes que no podían creer lo que oían. El final, con un desubicadísimo: "Viva la libertad, carajo", (una expresión tribunera que habrá desorientado a los traductores de Davos), estuvo acorde con la esencia delirante del discurso. 
Lo despidieron sin pena ni gloria.


Al margen de este monumental papelón -porque lo fue-, el Presidente tuvo muy cuestionables acciones al asegurar a la titular del FMI que el ajuste que implementa es mayor que el pedido por el organismo; también una reunión con el canciller británico en un desequilibrio de jerarquías gubernamentales y en el que Malvinas fue ignorada.

La Opinión Popular

 
IDAS Y VUELTAS
 
Romper vínculos estratégicos: La desastrosa política internacional de Milei y su equipo
 
A los traspies de Javier Milei y Diana Mondino con China, ahora se suman las polémicas declaraciones de Patricia Bullrich sobre el narcotráfico en Chile que ya generaron la reacción de funcionarios nacionales del país vecino
 
Es que a las tensiones con Brasil y China, ahora, a poco más de un mes de gestión, se sumó un nuevo conflicto con Chile como consecuencia de polémicas declaraciones que hizo en las últimas horas la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.
 
La funcionaria nacional se refirió este martes el problema del narcotráfico y sostuvo que "la mayoría de la droga" que entra a la Argentina lo hace por Chile. Los dichos llegaron rápidamente al país vecino y la reacción no se hizo esperar.
 
El ministro de Justicia chileno, Luis Cordero, explicó que no comparte "ese juicio" y propuso que en lugar de señalar culpas a otro lado, se avance "en la coordinación con Chile, porque el país tiene una situación de seguridad y de narcotráfico mucho peor de la que tenía hace unos años".
 
Además, Cordero sostuvo que para "hacer una evaluación" como la que hizo Bullrich "es conveniente disponer de cierta evidencia, no sé si ella tiene esa evidencia para sustentar ese juicio".
 
En esa misma línea, la senadora y presidenta del Partido Socialista del país vecino, Paulina Vodanovic, opinó que las declaraciones de la dirigente PRO obedecen a "una estrategia política del nuevo gobierno de Argentina, tal vez de posicionarse y entrar en cierta confrontación con Chile".
 
"Encuentro una cosa bastante sui géneris esto de empezar a pelear con Chile, porque si ella tiene datos como para aquello, me parece más bien que hay que buscar una estrategia con el país vecino, mucho más que iniciar una confrontación", sentenció.
 
Cabe señalar que a pesar de que Chile está gobernado por un partido de izquierda, la relación bilateral con Argentina no se había visto afectada hasta ahora. Contrario a lo que se esperaba y a diferencia de los presidentes de Brasil y Bolivia que no participaron del acto de asunción de Javier Milei, Gabriel Boric sí lo hizo e incluso felicitó al mandatario argentino.
 
Es que más allá de las evidentes diferencias ideológicas que los seperan, el jefe de Estado chileno decidió priorizar la relación bilateral. Chile es el segundo destino de la región de las exportaciones argentinas y el cuarto destino a nivel mundial.
 
Además, luego de Uruguay, Chile es el segundo mercado más importante en términos de diversificación de las exportaciones nacionales. En tanto, Argentina es el cuarto destino de importancia en la región para Chile, y el tercer mercado más diversificado.
 
A su vez, en la actualidad, Argentina suministra cerca de la mitad del gas natural que se consume Chile y en 2022, el comercio total entre ambos países alcanzó los USD 5.797 millones, un 60,7% superior a 2019.
 
Dicho de otra manera, la relación con Chile es de vital importancia para el comercio y la economía argentina. Además, tiene un rol geopolítico fundamental para el fortalecimiento de la región, especialmente, cuando los vínculos con otras naciones vecinas como Brasil no atraviesan su mejor momento.
 
 
Brasil
 
 "No me reuniría con Lula da Silva. Es un corrupto y por eso estuvo preso y es un comunista", había dicho el presidente Javier Milei cuando aún estaba en campaña. Sin embargo, como lo hizo con muchas otras políticas y declaraciones, una vez que se sentó en el Sillón de Rivadavia el economista "liberal libertario" moderó su discurso e intentó dar marcha atrás.
 
Incluso, la cancillería argentina invitó a Lula da Silva a la asunción de Milei, pero el mandatario brasileño rechazó la invitación y mandó a su canciller.
 
Otra decisión que tensó la relación con el gigante sudamericano fue la salida de Argentina de los BRICS, grupo económico conformado por algunas de las economías mas grandes del mundo al que el país había ingresado gracias a las gestiones de Brasil.
 
Ambos países cuentan con una larga historia como socios comerciales, y miembros fundadores del Mercosur. De hecho, Brasil es el país que más productos argentinos importa desde hace al menos treinta años.
 
Por nombrar uno de los últimos datos más relevantes, en 2022, importó desde la Argentina productos por US$ 12,7 mil millones, casi un 60% más que China.
 
Conscientes de la tensión con el país vecino, Diana Mondino recibió ayer al embajador brasileño, Julio Bitelli, para recomponer realciones, abordar la agenda bilateral, comercial y las posibilidades de cooperación en diferentes ámbitos, tales como infraestructura física y energética, en materia nuclear, de defensa y en espacios regionales y multilaterales.
 
Sin embargo, la relación más conflictiva en estos momentos para Argentina es con su segundo socio comercial: China. Al igual que con Brasil, las rispideces comenzaron durante la campaña presidencial cuando Milei vociferaba en todos los medios a los que iba que rompería relaciones con el gigante asiático porque era comunista.
 
A partir del 10 de diciembre, el vínculo no mejoró. La alinación con Estados Unidos y Occidente, la salida de los BRICS y el acercamiento de la Cancillería con Taiwán, territorio chino independentista, provocaron preocupación y enojo en las autoriades chinas.
 
El último desatino argentino fue el supuesto recibimiento de Modino a representantes de Taiwán, hecho que China consideró como una grave provocación. Inmediatamente el Ministerio de Relaciones Internacionales salió a desmentir el presunto encuentro, pero el daño estaba hecho y necesitaba de un gesto para poner paños fríos.
 
Es que a causa de estos reiterados desaires, China primeró congeló la ampliación del swap por unos u$s6.500 millones que había sido acordado con el gobierno de Alberto Fernández y amenazó con la exigencia de pago del tramo utilizado, de aproximadamente 5.000 millones de dólares.
 
Entre las posibles represalias, además de exigir el pago del canje de monedas con el Banco Central, China también advirtió que podía disminuir las compras de carne y soja a Argentina y priorizar, en cambio, a proveedores como Uruguay, Australia y Brasil.
 
Cabe señalar que, según el Indec, en los primeros 11 meses de 2023, las ventas de productos argentinos al gigante asiático totalizaron USD 4.921 millones y las importaciones, USD 13.711 millones. Hoy se calcula que el impacto económico de eventuales cambios en la relación con China pondrían en juego unos 3.000 millones de dólares en exportaciones.
 
La canciller argentina entonces decidió recomponer la relación con Beijing y confirmó la defensa del principio de una sola China en una reunión el pasado 13 de enero con el embajador de la República Popular China en Argentina, Wang Wei.
 
La Cancillería reconoció al país asiático como socio estratégico y aceptó el financiamiento para infraestructura a través de la Iniciativa de la Franja y la Ruta auspiciada por China y que integran más de 140 países; financiamiento que antes habían puesto en duda al sostener una supuesta "falta de transferencia".
 
Dos días después de esa cumbre que parecía había puesto algunos parches entre China y Argentina, el presidente Milei volvió a criticar a la potencia oriental a través de sus redes sociales y tensó otra vez la cuerda.
 
El mandatario compartió un posteo que decía: "La izquierda quiere para vos: El salario de Cuba, La Libertad de Corea del Norte, La justicia de China y La abundancia de Venezuela".
 
Por Josefina López Palma
 
Fuente: diagonales.com
 

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16-12-2025 / 10:12
Las reformas que impulsa el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei, en especial la laboral, buscan sin disimulo convertir a nuestro país en una economía colonial de enclave, productor de materias primas, sin industria y en donde sobre más de la mitad de los argentinos. En el país cierra una empresa por hora y 400 trabajadores por día se quedan sin empleo. El cálculo surge de tomar en cuenta que "el Peluca" y su motosierra destruyeron 19.114 firmas dejando en la calle a algo más que 264 mil asalariados registrados en sus dos primeros años de gobierno.
 
Para Argentina es un cambio dramático, pues es uno de los países en donde la legislación laboral del siglo XX más avanzó en el sentido de proteger a los trabajadores. Por esa razón, por ese "mal ejemplo" para la región latinoamericana, el objetivo del FMI de retroceder más de un siglo en las condiciones bajo las cuales se desenvuelve el mundo laboral, haya sido tomado con tanta energía por los últimos gobiernos de derecha y mucho más ahora bajo el modelo reaccionario extremo que impulsan los desquiciados Milei, Sturzenegger, Caputo y cía.
 
Todos y cada uno de los puntos del extenso proyecto que acaba de aterrizar en el Congreso es un muestrario de la ideología conservadora y retrógrada que alienta a este gobierno como fiel representante de la elite económico-financiera también conocida como "círculo rojo". A tal extremo esto es así que el gobierno ni se molestó en desmentir lo que hace un tiempo se conoció: los autores materiales de este engendro son los estudios de abogados que prestan sus servicios a las corporaciones más poderosas, los llamados "dueños de la Argentina". Es el gobierno para los ricos.
 
El sueño húmedo de esta minoría enferma de codicia es voltear, una por una, todas las protecciones legales que tienen los trabajadores argentinos, aunque también debe decirse que buena parte de ellas ya fueron demolidas de hecho por el propio accionar de un mercado laboral que, con independencia de los gobiernos que se sucedieron desde el estallido social y la gran crisis económica de 2001, dejaron a casi la mitad de los asalariados desempeñándose "en negro", al margen de la formalidad.
 
Lo que veremos en las próximas horas en el Congreso les dejará en claro a los argentinos quiénes son los senadores y diputados dignos de ser llamados oposición y quiénes se someterán ante las ofertas de dinero que ya está circulando por oscuras vías. Gobernadores dialoguistas también estarán en el "toma y daca" que este gobierno puso en marcha sin que la gran prensa porteña, convertida en vocera oficial de la Casa Rosada, hable como lo hacía habitualmente de "látigo y billetera" con otros gobiernos que nunca llegaron a extremos de manipulación de los recursos fiscales como el actual.
 
El triunfo electoral de octubre de Milei es el combustible que aceleró la decisión de avanzar con este proyecto y con otros que también buscan reconfigurar en profundidad el diseño social, económico e institucional de la Argentina. La llamada ley de tierras, de glaciares, la reforma educativa, la tributaria, etc. conforman una ofensiva de los sectores concentrados de la economía contra el conjunto social. Convertir a este país en una economía colonial, sin industria, sin ciencia, sin educación de calidad, sin protección social ni laboral para las mayorías populares es una meta que está en las mentes de los libertarios. La política de tierra arrasada que se proponen les resulta indiferente, pues la ambición de poder -político y económico- está por encima de todo.
 
La CGT convocó a una movilización a la Plaza de Mayo para el jueves a la que adhirieron las dos CTA, ATE y otros gremios, el peronismo, organizaciones sociales y partidos políticos de izquierda.  Para aterrorizar, la especialidad del mileísmo, aplicarán el protocolo antipiquetes. Si la movilización es masiva, cuesta creer que la amenaza de represión violenta se cumpla. Crispar el clima social en vísperas de fin de año, en nuestro país, nunca tuvo buenos resultados para los gobiernos.
 
La Opinión Popular
 

14-12-2025 / 09:12
Bajo el mote de reforma laboral se esconde la decisión de Javier "el Loco" Milei que pretende consagrar institucionalmente, en 2026, los objetivos que en 1976 se planteara la dictadura militar genocida. Los cambios en el proceso de acumulación en el marco del genocidio, el endeudamiento, la valorización financiera y la fuga de capitales, la desindustrialización, el modo de incorporación del cambio tecnológico y la llegada del capitalismo de plataformas, produjo una sustancial alteración de la relación capital-trabajo, obviamente en desmedro del conjunto de los trabajadores.
 
En ese marco de brutal regresividad en las condiciones materiales de vida de quienes trabajan, se sucedieron en las distintas administraciones conservadoras cambios normativos, todos con la misma dirección. 1. Abaratar el precio del trabajo. 2. Facilitar el despido. 3. Debilitar los convenios colectivos. 4. Limitar y destruir la organización sindical.
 
Estas orientaciones fueron parte de los cambios normativos que impulsó la dictadura militar, de las leyes que llevaron adelante Cavallo, Menem y De la Rúa, del frustrado intento de Macri y también del proyecto de Milei. Proyecto este cuya profundidad en términos de alteración de la Ley de Contrato de Trabajo solo es equiparable a lo planteado hace 50 años por la dictadura militar.
 
Además, se lleva a cabo la directa eliminación de los costos del despido a partir de la creación de un Fondo de Asistencia Laboral que se financiará con tres puntos de las actuales contribuciones patronales. A la vez, se les reduce en un punto adicional los aportes a los empresarios en relación a las obras sociales que dejarían de percibir un punto de los que están recibiendo en la actualidad.
 
En síntesis, cuatro puntos de los aportes patronales dejan de financiar las jubilaciones y la salud de los trabajadores, con el objeto de eliminar los costos del despido y reducir los costos laborales. Situación ésta que implica una redistribución de ingresos desde los trabajadores al capital, cercana a los 3000 millones de dólares.
 
Las experiencias internacionales y la propia experiencia nacional indican que estas propuestas solo profundizan la desocupación, la informalidad y la pobreza. Es más, aspectos laborales de esta naturaleza son los que contenía la Ley Bases y que ya tuvieron dos años de aplicación en el curso del gobierno de Milei. Años que lejos de promover el empleo registrado, coexisten con la destrucción de 222 mil puestos de trabajo formales registrados de los cuales 139 mil son del propio sector privado, al tiempo que el monotributo y los asalariados no registrados constituyen las formas de inserción laboral de mayor importancia en los últimos dos años.
 
Por si esto fuera poco, los modelos que pregonan los funcionarios libertarios como objetivos a alcanzar por la Argentina, no hacen más que negar con la evidencia lo que el propio gobierno pregona para justificar lo que propone. Poner como ejemplo a seguir países como Paraguay o Perú, que prácticamente carecen de legislación laboral, resulta inentendible. Estos dos países exhiben, aún sin legislación laboral, niveles de informalidad superiores a los que hoy exhibe la Argentina.
 
Para frenar esta ofensiva hay que convocar a la sociedad a discutir la necesidad de relaciones laborales diferentes para un país distinto al que construye Milei. Para eso necesitamos relaciones laborales que se edifiquen en base a la redistribución del ingreso, la revalorización del trabajo y la necesidad de expandir derechos para todos aquellos que trabajan independientemente del tipo de inserción laboral que tengan.
 
La Opinión Popular
 

13-12-2025 / 09:12
El proyecto de país que perfila el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei tomó el aspecto de una sociedad sin derechos organizada por el mercado. El mercado elimina el concepto de soberanía y decidirá quién irá preso y quién se tomará vacaciones. A su vez, el mercado está organizado por una escala jerárquica según el poder económico.
 
O sea: la libertad de los libertarios es como la milanesa tucumana hecha con papel higiénico. Y de postre: inflación. Si alguno pensó que el esfuerzo valía la pena, el 2,5 de inflación -medido por un Indec que todo el mundo sabe trucho-- le dio una mala noticia: se quedó sin trabajo, se quedó sin empresa, y además tiene inflación.
 
En la misma semana asumió Joaquín Mogaburu como subsecretario de Derechos Humanos y se presentó el proyecto de reforma laboral en el Congreso. El nuevo funcionario es un personaje ligado a los represores y da cursos en los cuarteles sobre "memoria completa".
  
Mogaburu aboga por la conciliación y el perdón a los genocidas. El combo es coherente con el protocolo de seguridad que criminalizó la protesta social, el decreto que permitió a las fuerzas armadas intervenir en conflictos internos y la eliminación del derecho a huelga y otros derechos como lo estipula la reforma laboral enviada al Congreso.
 
Durante el mes hubo decenas de actos sobre derechos humanos en centros culturales, casas de la memoria y en plazas de todo el país. Y el jueves se realizó un festival en la Plaza de Mayo encabezado por Madres, Abuelas y el Serpaj de Adolfo Pérez Esquivel. Al mismo tiempo, la CGT anunciaba un acto público para oponerse al proyecto de ley enviado al Congreso.
 
No hay derechos humanos y no hay derechos laborales. No hay derecho a la protesta y no hay derecho que proteja contra la tortura y la violación como reclaman los que piden la libertad de torturadores y violadores que actuaron tras haber usurpado el Estado durante el golpe genocida. No hay sujetos de derecho en esta sociedad que conciben los libertarios y que ha sido votada por muchos que perderán los derechos que tenían.
 
Con el mercado se come, con el mercado se educa, con el mercado se cura. Si eso era difícil con la democracia, el mercado ni se lo plantea porque el único derecho que reconoce es el del que tiene más capital. El mercado habla de méritos, pero los derechos no se ganan. Los derechos implican también responsabilidades, pero no se ganan por méritos. Al menos la democracia reconoce que todos tienen derecho a comer, a la educación y a la salud. Después dependerá de los gobiernos proveer esos derechos.
 
Los libertarios inventaron una democracia con voto, pero sin derechos. Y los derechos son para todos porque son inherentes a la condición del ser humano. Si son para pocos, no califica. La democracia se construye sobre los derechos ciudadanos. Sin esos derechos básicos no hay sistema democrático. Este gobierno habla de democracia y libertad, pero cuando hace la milanesa, le pone papel higiénico en vez de libertad y democracia.
 

12-12-2025 / 10:12
El gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei mandó al Senado un proyecto de contrarreforma para eliminar derechos laborales, sindicales y de huelga que atrasa un siglo. Contra la Constitución desconoce hasta la jornada de 8 horas y el derecho a huelga. Redactado por los abogados de las grandes empresas, de Paolo Rocca, Galperin y Eurnekian, en cada rubro empeora la posición de los trabajadores. Perjudica también a monotributistas e informales y se propone financiar los despidos con la plata de los jubilados.
 
El gobierno libertario demoró la presentación de la contrareforma laboral, que no registra precedentes desde la dictadura genocida de 1976, para estirar los tiempos de negociación y definir cuán a fondo iría en su ofensiva contra los trabajadores y el sindicalismo. El proyecto que ingresó al Senado retoma lo peor de todas las versiones anteriores y lo condensa en 71 páginas y 191 artículos.
 
Enmascarada en una supuesta "modernización", la iniciativa retrocede más de un siglo y desconoce pilares básicos del derecho laboral como la jornada de ocho horas y restringe el derecho a huelga. Lejos de mejorar la vida de los trabajadores, crear empleo o incorporar a los informales al mercado formal, la reforma sólo busca abaratar costos para que el empleador pueda despedir y amplía la desprotección sobre el sector más débil.
 
Los especialistas coinciden en que "invierte la presunción de laborabilidad" perjudicando a monotributistas y trabajadores "independientes". El texto final del proyecto confirma la transferencia regresiva de los derechos de los trabajadores en favor del gran capital, debilita su capacidad de organización y faculta al empleador para modificar condiciones laborales según sus necesidades.
 
La reforma laboral, firmada por Milei, fue elevada al Congreso de manera errónea por parte de Gobierno. Legisladores opositores y abogados laboralistas cuestionaron el ingreso por el Senado, ya que la reforma laboral contiene un capítulo tributario que modifica impuestos centrales. Al respecto, la Constitución fija que toda ley de carácter impositivo debe originarse en Diputados.
 
La reforma laboral que impulsa Milei atrasa porque reinstala un modelo previo al propio nacimiento del derecho laboral. La abogada Natalia Salvo advierte que es "una novedad de museo que nos devuelve a un tiempo sin normas". El proyecto permite jornadas de hasta 12 horas, un retroceso a antes de la Ley 11.544, conquistada después de las huelgas y masacres de la Patagonia y la Semana Trágica.

También elimina ítems remunerativos para achicar aguinaldo y vacaciones, ahora fraccionadas como en etapas de precariedad anteriores a cualquier estándar moderno. Al mismo tiempo, remarca que la iniciativa desconoce los avances globales sobre las plataformas: mientras en Europa los tribunales y países como España o Portugal ya reconocen a esos trabajadores como dependientes, aquí se los deja en un limbo jurídico. Modernizar sería ampliar la protección, no recortarla. Con un 43 por ciento de informalidad, el proyecto empuja al país hacia un pasado sin resguardo, donde la relación laboral quedaba librada a la voluntad de la patronal.

Un Gobierno que miente en todo, presenta el argumento principal en la supuesta "creación de trabajo formal". Silogismo falaz, acaba de ser refutado por un hombre del gran capital, el abogado Julián de Diego. Dijo que "sin crecimiento, no habrá generación de empleo". Ese crecimiento se presenta, como promesa lejana, relato de un provenir etéreo, medido en décadas. Equiparada a Irlanda, Alemania, y otras naciones. Por ahora, lo que hay es recesión, inflación en alza y deuda. Cada vez más deuda.

La Opinión Popular


11-12-2025 / 10:12
Turismo "con la nuestra". Nuevo papelón internacional de Javier "el Loco" Milei que fue a perder el tiempo a Noruega disfrazado con el mameluco de YPF, viajó 25.000 kilómetros para sacarse una foto... y se volvió sin nada. María Corina Machado faltó a su premiación como Nobel de la Paz. Viajó con su hermana Karina a Oslo en el avión presidencial, en un viaje que cuesta 300 mil dólares, y se alojó en el Gran Hotel de Oslo, en donde una habitación cuesta mil euros por noche. "El Peluca" volvió a las apuradas y de inmediato puso su firma en el funesto proyecto que apunta contra la justicia social y modifica la regulación de horas extras, vacaciones e indemnizaciones.
 
El fugaz y costoso paseo de Milei por Noruega terminó en un traspié político que expuso improvisación y falta de estrategia. La salida apresurada dejó al libertario sin el rédito simbólico que buscaba y reforzó las críticas sobre un viaje reducido a gestos vacíos, sin resultados concretos ni agenda internacional consistente. Tenía una agenda que incluía reuniones con el primer ministro y con el rey, además de la posibilidad de un encuentro cara a cara con Corina Machado, y los dejó "de garpe". Cosa de loco.
 
Milei regresó de apuro para evitar que una interna ponga en riesgo el tratamiento de la reforma laboral. Las explicaciones oficiales, en off the record, hablaban de la necesidad de "firmar la ley de reforma laboral" después de hacer "algún ajuste de último momento", sin embargo, tanto los cambios como la firma se pueden gestionar de manera remota. Lo que sucedió en realidad es que una nueva interna en el gobierno casi hace volar por los aires la Ley Rifle. Lo más llamativo, en este caso, es que los que frenaron el proyecto son dos enemigos íntimos: Santiago Caputo y Martín Menem.
 
Ellos son los dos interlocutores más fluidos que tiene la CGT dentro de la estructura libertaria y vienen advirtiendo desde hace tiempo que así como la estaba planteando Federico Sturzenegger, la reforma laboral corre el riesgo de empantanarse en el Congreso y terminar siendo rechazada, modificada hasta volverla irreconocible o aprobada a un costo demasiado alto. El recuerdo de la reforma previsional de Mauricio Macri en 2017 está presente en todos los cálculos.
 
Las partes observadas son justamente las que apuntan contra el andamiaje financiero y normativo que sostiene a los sindicatos, los llamados "derechos colectivos" que la CGT prioriza antes que las condiciones de trabajo individuales. De hecho, este lunes Sturzenegger estuvo reunido con los diputados de LLA, en un encuentro del que Menem no participó, y ante las consultas sobre estos asuntos el ministro prometió una "versión light", más sencilla de aprobar.
 
Sin embargo, el anuncio que hizo el vocero con sueldo de jefe de gabinete, Manuel Adorni, al día siguiente, no contempla la mayoría de esos recortes e incluye cláusulas inaceptables para el más dialoguista de los líderes gremiales. Dicen en la Casa Rosada que la orden de ir a fondo la dio el mismo Milei. El proyecto ya estaba listo para ingresar al Senado cuando Caputo y los Menem lograron frenarlo. Ese fue el motivo por el que el presidente tuvo que volver de apuro.
 
Patricia Bullrich, en tanto, defiende la redacción de Stuzenegger pero reclama que la situación se destrabe porque cree que si la reforma no tiene un tratamiento express y media sanción antes de las fiestas, después puede empantanarse. Su plan original de dictaminar esta misma semana, incluso el viernes a última hora, se fue diluyendo con el correr de las horas. El escenario más optimista apunta a sesionar en vísperas de noche buena. Sería un verdadero milagro navideño, mientras la CGT y el peronismo se abroquelan contra la reforma laboral anti obrera y pro patronal de Milei.
 
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