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Nacionales - 07-12-2023 / 11:12
EL NUEVO GOBIERNO NEOLIBERAL PINOCHETISTA

Malas noticias para la aventura de Javier Milei: antes de asumir ya le marcaron la cancha

Malas noticias para la aventura de Javier Milei: antes de asumir ya le marcaron la cancha
La aventura Milei tiene, además, un contexto de realidad, el que generó el fenómeno que el ultraderechista encarna: la percepción generalizada sobre un estado de cosas que no da para más, una economía al borde del colapso y una sociedad dañada por la pobreza. Hay que darle a cualquier presidente recién asumido la chance de desplegar su proyecto, explicarlo y ponerlo a prueba en la realidad. Así será porque así lo decidió el voto, pero la crítica será inevitable y oportuna si, tal como lo sugirió sobradamente en la campaña, comienza barriendo consensos democráticos y normas de convivencia. La nueva Argentina ultraderechista nace muy tensa.
Este domingo, Javier Milei jurará como presidente y pondrá en marcha una aventura que nace cruzada por una dicotomía asombrosa: la intención de realizar el cambio económico y social más radical desde la redemocratización de 1983 y, en paralelo, una falta de recursos políticos sin precedentes. Malas noticias para Milei antes de asumir ya le "marcaron la cancha". Desde supuestas versiones de las FFAA, Mauricio Macri, mediante Eduardo Feinmann, lo condiciona a Luis Petri, flamante Ministro de Defensa.
 
Es que la aventura Milei tiene, además, un contexto de realidad, el que generó el fenómeno que el ultraderechista encarna: la percepción generalizada sobre un estado de cosas que no da para más, una economía al borde del colapso y una sociedad dañada por la pobreza. Hay que darle a cualquier presidente recién asumido la chance de desplegar su proyecto, explicarlo y ponerlo a prueba en la realidad. Así será porque así lo decidió el voto, pero la crítica será inevitable y oportuna si, tal como lo sugirió sobradamente en la campaña, comienza barriendo consensos democráticos y normas de convivencia. La nueva Argentina ultraderechista nace muy tensa.
 
Quienes apostaron por La Libertad Avanza se entusiasman con la idea de que el nuevo gobierno barra a "la casta", racionalice el aparato del Estado, relance la economía y genere oportunidades de progreso social y personal. Muchas de esas personas se dicen dispuestas a hacer sacrificios en pos de esos objetivos, a recortar presupuestos familiares desde hace mucho tiempo insuficientes, a afrontar tarifas más caras y a percibir salarios que no correrán a la misma velocidad que la inflación que viene.
 
A ellas y, es de esperar, a toda la ciudadanía -sin comenzar a dividir peligrosamente a la Argentina entre "la gente de bien" y la que supuestamente no lo es- el mandatario inminente les hablará desde la explanada del Congreso. Sin embargo, el hecho de que la situación sea delicada le pone un límite a la tolerancia social. Muy pronto, el ajuste -apenas el primero que se verá- dejará de ser el otro y comenzará a doler en carne propia. Que lo pague la política será una mentira que pronto se desvanecerá en el verano que se acerca.
 
La nueva Argentina de Milei será un laboratorio sin precedentes históricos: el intento de una reforma neoliberal pinochetista de la economía y la sociedad en democracia. Sobre ese experimento flota un exotismo de la ideología: un gobierno anarcocapitalista. En el camino, puede que el futuro jefe de Estado aprenda algo sobre la vida que no figura en los libros de la escuela austríaca, si no lo traiciona su conocida aversión a la frustración.
 
La ideología pesará, sobre todo al inicio y en base a alineamientos internacionales que privilegiarán a Estados Unidos, Israel y el "mundo libre" por encima de las oportunidades de negocios e inversiones de Brasil, China, los BRICS y hasta el Mercosur. Pronto, sin embargo, la realidad irá poniendo diques de contención, que habrá que ver cómo sobrellevan las nuevas autoridades, ocasión en la que, como distracción, podría ganar protagonismo una agenda ideológica de derecha dura. Lo que viene será una guerra entre dogma y pragmatismo, entre proyecto y realidad, entre posibilidades y limitaciones.
 
Las diferencias ideológicas se dirimirán en lo político; en lo que pase con los derechos individuales y colectivos; en lo que ocurra con el consenso de memoria verdad y justicia; con la tolerancia en el debate público; con la paz social y con el manejo de la protesta social, pero también estarán presentes cuando se discuta el modelo económico. Lo que viene es la primacía absoluta del mercado, aun cuando sea monopólico, y el retiro voluntario del Estado. Esa es la paradoja del anarcocapitalismo, que en la práctica apenas puede ser un minarquismo: eliminar todo lo que sea posible de la autoridad estatal.
 
A eso seguirá un paquetazo de proyectos de ley, una masiva derogación de regulaciones, una liberación total de precios, una suba fuerte de tarifas y combustibles, suelta de remarcaciones, eliminación de dependencias enteras del Estado, despidos voluminosos y cese de contratos... Bienvenido, "mercado".
 
La Opinión Popular
 

 
¿QUÉ QUEDÓ DE LA MAGIA DE LA LIBERTAD AVANZA?
 
Milei desnudo se parece demasiado a Bullrich
  
El abandono de las promesas centrales del "libertario" plantea un escenario muy distinto al imaginado la noche del balotaje. Queda en pie la vieja receta de devaluación y ajuste que tanto defendió Juntos por el Cambio y con la que ya chocaron Martínez de Hoz, el menemismo y el macrismo.
 
Por Ernesto Tiffenberg
 
"Milei está desnudo", podría gritar cualquier chico que este domingo se acerque al Congreso para ver el despojado debut del que se autodenomina "el primer presidente libertario de la historia mundial". Abandonados la dolarización, la voladura del Banco Central, la inmediata apertura del cepo, la ruptura con China y Brasil y el repudio a la casta, poco queda de aquellos vestidos tan mágicos como extravagantes con que supo conquistar la imaginación de tantos argentinos.
 
A cambio, lo único que sobrevivió de su revulsivo discurso es la vieja receta de devaluación y recorte del déficit público, con el consiguiente impacto recesivo, explosión de precios, creciente desocupación y caída de los salarios reales y jubilaciones. En otras palabras, la vieja receta neoliberal que Patricia Bullrich convirtió en su principal oferta electoral con el resultado previsible: el fracaso en las urnas y la implosión de Juntos por el Cambio.
 
Aunque esta vez se busca una manera más marketinera de venderlo (hablan de inflación "reprimida" y de "liberación" de precios de la misma manera que se denominan "libertarios" para terminar con derechos y libertades), habrá que ver si finalmente este ajuste neoliberal tiene mejor final que sus tres tristes antecesores: con la dictadura, el menemismo y el macrismo.
 
Mientras tanto, para disimular un poco el gris del revival, la novela de la transición cambia cada día el eje de la trama. En un capítulo Javier Milei es un genio que fue derrotando en etapas a los que podían interponerse en su ascenso. En otro es una marioneta en manos del hacedor supremo, Mauricio Macri, que humilló a Rodríguez Larreta, Bullrich y finalmente al presidente electo. Cada giro, como en las mejores series de suspenso, resignifica todo lo anterior.
 
Pero si se deja de lado la ficción, solo quedan en pie dos cosas que casi nadie discute. Que se viene otro guadañazo sobre los ingresos populares y que no existe derecho al pataleo porque, como se pasan repitiendo los voceros periodísticos del futuro presidente, "el 80 por ciento de los argentinos votó el ajuste". Quizás convenga empezar a discutirlo.
 
 
Ajustes del dicho al hecho
  
Lo vetusto de la propuesta contrasta con la ingenuidad de su defensa. "Es la primera vez que quien llega a la presidencia lo hace diciendo que hay que ajustar. (...) A contramano de los Durán Barba de este mundo que te dicen no digas nada, un tipo que dijo la verdad ganó. No prometimos mentiras y anticipamos ajuste. Ahora es el momento de gobernar", dicen los voceros que Milei dijo a sus voceros.
 
Y hacen bien en difundirlo, pero no harían bien en creerlo. La gran ventaja de la campaña de Milei sobre la de Juntos por el Cambio fue que mientras Bullrich prometía sangre, sudor y lágrimas para todos, los libertarios prometían lo mismo, pero solo para la vilipendiada casta política. Y la gran mayoría de los votantes tienen toda la razón en considerar que no forman parte de esa casta y por lo tanto la amenaza no los alcanza.
 
La consultora Opina Argentina, dirigida por Facundo Nejamkis, lo puso en números en un estudio sobre las actuales expectativas. De las propuestas de Milei, sólo la de "Reducción de ministerios y cargos públicos" y "Privatización de los medios públicos" concitan la aprobación de más del 50%. Las demás, sobre todo la eliminación de los subsidios a la luz, el agua y el gas, generan un amplio rechazo.
 
 
La inflación de la inflación
  
Los analistas de todas las corrientes políticas coinciden en que la aceleración inflacionaria fue una de las principales causas de la derrota peronista. Y que una buena parte de la población, sobre todo entre los jóvenes, creyó que el mantra de la "dolarización" traería pronto algo de paz a sus bolsillos.
 
Archivada por ahora esa fantasía, la prometida devaluación a unos "razonables" (al decir de Guillermo Francos) 650 pesos por dólar, promete llevar la trayectoria de los precios a un nuevo, y mucho más elevado, escalón mensual. El propio Milei lo dio por cierto al asegurar que se avecinan dos años de "estanflación".
 
La minoría que tiene sus ahorros en dólares quizás pueda navegar por esas aguas. Pero surge la pregunta de cómo lo hará sin ahogarse la mayoría que verá subir vertiginosamente precios y tarifas mientras la pelea por sus salarios choca con la creciente desocupación.
 
¿Estará toda la gente de bien dispuesta a ver pacientemente cómo siguen cayendo sus ingresos mientras las mágicas mejoras prometidas por Milei siguen tan invisibles como el traje del emperador?
 
En el cuento de Hans Christian Andersen, la ceguera colectiva solo dura hasta que un chico grita "¡El rey está desnudo!" y la obviedad termina por despertarlos a todos. ¿Tendrá también moraleja la repetida historia argentina?
 
Fuentes: Pagina 12 y Letra P
 

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18-09-2025 / 09:09
Con una gigantesca multitud desbordando la Plaza del Congreso, la Cámara de Diputados le dio un golpe demoledor al oficialismo. Por una mayoría que superó con creces los dos tercios, rechazó los vetos de Javier "el Loco" Milei a la Emergencia en Pediatría (Ley Garrahan) y al Financiamiento Universitario. Con una mayoría arrasadora, la oposición consiguió lo que antes parecía imposible: voltear dos vetos presidenciales de un solo golpe. Fracasaron todos los manotazos de ahogado del Gobierno de los Hermanos Milei, que espera sin esperanzas el voto del Senado.
 
Milei solo logró sumar unos 60 votos para blindar el veto. Atrás quedaron los 87 "héroes" a los que el presidente había agasajado con una cena el año pasado, luego de que lo hubieran ayudado a blindar el primer veto al financiamiento universitario. La red de alianzas se había roto, y Milei perdía aliados a mansalva. En medio de la campaña electoral, con los armados libertarios que Karina "la Coimera" Milei y Lule Menem constituyó en las provincias para competirle a los gobernadores, los primeros en soltarle la mano fueron los jefes provinciales.
 
Sobre todo, el amplio repudio y la resistencia social pudieron más que la prepotencia y los aprietes del violento Gobierno libertario. Una enorme movilización de miles de trabajadores, estudiantes, jubilados y jubiladas se concentró fuera del Congreso. Son parte de quienes sostuvieron todos estos meses la persistente lucha que impuso esta derrota a La Libertad Avanza. La movilización se replicó en numerosos puntos del país. Hay que seguir ese camino.
 
La Ciudad de Buenos Aires fue escenario este miércoles de una multitudinaria movilización en defensa de la educación pública y la salud. Desde distintos puntos de la capital, columnas de estudiantes, gremios docentes y agrupaciones políticas confluyeron en el Congreso de la Nación para rechazar el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario y a la declaración de Emergencia en Pediatría.
 
Las acciones comenzaron en la noche del martes con un "apagón educativo" organizado por universidades de todo el país, que apagaron sus edificios en señal de protesta. Este miércoles, desde las 17, la Marcha Federal Universitaria tomó las calles porteñas con miles de manifestantes que avanzaron hacia el Parlamento, donde la Cámara de Diputados debatía los vetos de Milei.
 
La protesta también tuvo un fuerte componente sanitario: trabajadores del Hospital Garrahan realizaron un paro y se sumaron a la movilización, en defensa de los recursos destinados a la atención pediátrica. Fue la persistencia de la lucha de las trabajadoras y los trabajadores del Garrahan, que vienen peleando hace meses contra el desfinanciamiento, enfrentando campañas de desprestigio y las mentiras del ministro del área, el empresario Mario Lugones.
 
Entre los dirigentes presentes se destacó el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, quien encabezó la columna del espacio Movimiento Derecho al Futuro. También el senador nacional Martín Lousteau marchó junto a la Unión Cívica Radical, en respaldo al financiamiento universitario y a los fondos para la salud infantil, marcando el pulso de una jornada en la que la defensa de la educación pública volvió a convertirse en bandera de miles.
 
En medio de la terrible paliza, los diputados "héroes" de La Libertad Avanza, el PRO y la UCR con peluca se levantaron y huyeron del recinto. Minutos después, Martín Menem dio por concluida la sesión. Lo que se viene es la modificación de la ley que regula los DNU. Ahí se termina esto de gobernar como un monarca, por DNU y vetando leyes.
 
La Opinión Popular
 

17-09-2025 / 09:09
Javier "el Loco" Milei es un mentiroso consuetudinario. Se dedica a "mandar fruta", hablar sin saber realmente del tema, exagerando, inventando o diciendo cosas sin sentido, con la intención de engañar. Todas las organizaciones especializadas en Educación, Jubilaciones y Discapacidad destruyeron los anuncios presidenciales sobre mejoras para esas áreas. Se basan solo en dibujos numéricos y ajustes encubiertos. Los gremios revelaron que el porcentaje del PBI dedicado a la enseñanza, que fue de 1,48 en 2023 y de 0,88 en 2025, baja al 0,75 en 2026. Los rectores aseguran que se congela el gasto universitario en sus peores niveles.
 
El discurso de Milei por el cual presentó el Presupuesto 2026 está plagado de números mentirosos y mensajes al "mercado", a los grandes empresarios y financistas. A los ricos. El presupuesto reduce fuertemente la partida destinada a cancelar deudas previsionales; mientras que la partida para pagar la deuda pública a los especuladores financieros crece un 20%. Hay deudas y deudas para el Gobierno.
 
Milei aseguró al presentar el Presupuesto 2026 que habrá un aumento del 17% de suba en términos reales (por encima de la inflación) en materia de salud, 8% en materia de educación, y 5% en jubilaciones y en pensiones por discapacidad. Además, anunció que se le asignará $4,8 billones a las universidades nacionales, lo que representa una suba nominal del 13% frente a una inflación proyectada del 10%.
 
Sin embargo, anteriormente, el Presidente reveló que el proyecto presenta "una regla de estabilidad fiscal": "si los ingresos caen o los gastos superan a lo previsto se deberán ajustar partidas para mantener el equilibrio fiscal". Es decir, cualquier variable proyectada en el Presupuesto que se modifique, como una inflación anual de 10% o un dólar debajo de $1.350, "obligará" a Milei a no cumplir con estos aumentos. Además, también lanzó que su proyecto estipula el "menor nivel de gasto sobre PBI de los últimos 30 años". Contradicciones que desnudan que sus promesas son incumplibles.
 
En las últimas semanas, el Gobierno libertario redujo en $40.267 millones las transferencias a las universidades nacionales. De esta manera, Milei terminará 2025 con una reducción del 9,4% real del presupuesto universitario con respecto a 2024 y del 32% frente a 2023. Para equiparar los gastos realizados el año pasado, el Gobierno debería invertir $4,6 billones en lo que resta de 2025 y $6,2 billones para igualar el nivel de 2023. Es decir, la promesa de $4,8 billones para el 2026 no absorbe la pérdida registrada.
 
Si bien Milei prometió que las jubilaciones aumentarán 5% por arriba de la inflación en 2026, no alcanza para equiparar lo perdido durante su gestión. En 2024, el recorte en dicha partida fue del 14%, y sin contar el bono para el haber mínimo cuyo monto está congelado hace 18 meses frente a una inflación superior al 100%.

Además, más allá de su promesa, si la inflación anual es más del 10% como se proyecta, ¿mantendrá el aumento de las jubilaciones 5% por encima de la inflación? "Si los gastos superan lo previsto se deberán ajustar partidas", afirmó en su discurso.

En otros rubros, las partidas presupuestarias en Educación acumulan un ajuste del 41% entre 2023 y 2025, según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA). El 8% anunciado por Milei queda chico. En cuanto a discapacidad, la ANDIS sufrió un recorte del 14%. Sobre este punto, Milei supone una suba del 5% real sobre las pensiones. El proyecto ensaya un recitado de mentiras expresadas en números que no cierran ni aseguran la continuidad de las áreas con normalidad. Lo peor todavía no pasó.

La Opinión Popular


16-09-2025 / 11:09
La bala entró. La derrota electoral en la provincia de Buenos Aires sacudió al Gobierno de Javier "el Loco" Milei de tal manera que se vio obligado a cambiar el tono discursivo. La administración libertaria se niega a modificar su brutal política económica de ajuste y motosierra, pero ayer el presidente brindó un discurso atípico: fue moderador, evitó los insultos, las provocaciones, anunció mejoras en el Presupuesto 2026 para los sectores más vulnerables y llamó a trabajar "codo a codo" con los Gobernadores.
 
Además, el jefe de Estado envió un mensaje a la población y aseguró que "lo peor ya pasó, no aflojemos". De esta manera, Milei acusó recibo del fuerte descontento social. Sin embargo, no fue la primera vez que el mandatario prometió que los momentos más difíciles quedaron atrás y que lo mejor estaba por venir.
 
El 10 de diciembre de 2024, el libertario afirmaba que ya habíamos "superado la prueba de fuego". "Estamos saliendo del desierto. La recesión terminó y el país finalmente ha comenzado a crecer. Gracias por confiar en este gobierno. Esto no quiere decir que hayamos llegado a puerto, pero sí quiere decir que podemos terminar el año con alivio y de que hemos dejado atrás lo peor", decía entonces en otra cadena nacional.
 
Un mes antes, el 11 de noviembre de 2024, decía exactamente lo mismo. "Hoy ya podemos decir que la recesión se terminó y de ahora en adelante todo lo que queda es crecimiento. De acá para adelante son todas buenas noticias", exclamaba. Pero lo frase no le pertenece exclusivamente a Milei. Años antes, en 2018, el entonces presidente Mauricio Macri también prometía frente al Congreso nacional que "lo peor" ya había pasado y vaticinaba años de crecimiento qué nunca llegaron.

Un Milei "sosegado" confirmó que profundizará el rumbo de ajuste fiscal exigido por el FMI. Y, tras una paliza electoral, La Libertad Avanza reflota la vieja promesa de que lo más difícil queda atrás. Sin embargo, y a pesar de algunas mejoras anunciadas, el Presupuesto 2026 es una ley de ajuste que no modifica los planes del Gobierno y del Fondo Monetario Internacional. Son mentiras, falsas promesas de aumentos para ganar las elecciones y más ajuste en jubilaciones, salud y educación.

En las calles, se manifestó el hartazgo total, hubo una ola de cacerolazos en el AMBA contra la cadena nacional de Milei. Desde Palermo y Recoleta hasta La Plata, cientos de personas en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires manifestaron su rechazo al Presidente mientras lanzaba el Presupuesto 2026. La sociedad no compró las mentiras de la cadena nacional y repentinamente salió a las ventanas y los balcones a manifestarse en contra de las medidas de ajuste del Gobierno anarco capitalista. La noche quedó marcada por una ola de cacerolazos en todo el AMBA.

El ruido metálico se convirtió en un grito unánime contra las políticas que solo traen más hambre, despidos y desesperación. "No se puede más, nos están matando de a poco", gritaban en Plaza de Mayo, donde las cacerolas parecían tambores de guerra. El fantasma de la crisis del 2001 sobrevoló la noche, con la misma bronca, la misma impotencia y las mismas calles llenas de familias cansadas.
 
El Gobierno de Milei, mientras tanto, respondió con silencio y un operativo de seguridad notorio en los puntos calientes. Sin embargo, la bronca ya no se calla con policías ni patrulleros. La pregunta que queda flotando es si este rugido metálico será apenas un desahogo pasajero o el comienzo de un estallido más grande que termine por arrinconar a la hermana coimera, al libertario desquiciado y a su nefasto plan neoliberal.
 
La Opinión Popular
 

15-09-2025 / 09:09
Un Gobierno anarco capitalista sin cuadros políticos y sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado, se enfrenta a la profundización de su propia distopía tras la paliza electoral. La hermanísima copó el Ejecutivo y con Jamoncito, hasta acá, se demostraron como una unidad indivisible. El Gobierno está completamente en manos político-administrativas de Karina "el Jefe" Milei y se resolvió que sólo sea Luis "Toto" Caputo quien conduzca el único plan existente: pisar el dólar hasta las elecciones de octubre. No hay más que eso. No hay más certezas que ésas.
 
Respecto de la primera, podrían apuntarse dos observaciones. Una es que La Hermanísima Karina siempre estuvo a cargo de la ejecutividad gubernamental, excepción hecha de lo económico. La otra consiste en que, como fuere, no habría mayores novedades porque desde un comienzo la gestión fue un quilombo. Basta con repasar los centenares de funcionarios echados o renunciados, que supieron llegaron al promedio de uno por día.
 
Y esto tampoco sería novedoso, porque se corresponde con las características de un Gobierno arribado como tal sin la más mínima preparación institucional. Sin cuadros políticos. Sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado. En otros términos conocidos, Javier "el Loco" Milei fue un armado del establishment, desde el panelismo televisivo y las redes, para segmentar parte de los votos peronistas y antiperonistas.
 
Pero el Frankestein adquirió una fuerza propia inusitada, a tono con endilgarle ese carácter de accidente insólito en la historia argentina. Y después no hubo nada que hacer. Así, el país quedó al arbitrio de unos Hermanos & Cía. exclusivamente relacionables con un escenario distópico. ¿Cuál es la noticia, entonces? Es que, tras el resultado electoral, la distopía se profundizó. Ya no hay Presidente, al menos por ahora, en su acepción de figura con aptitudes básicas para tomar decisiones autónomas. Milei está paralizado, totalmente fuera de eje.
 
Es así desde la noche del domingo pasado, cuando, aunque siga sin poder creerse, hasta último momento imaginó que perdía por muy poca diferencia. Incluso, de acuerdo con las mesas testigo del indescriptible Sebastián Pareja, pensó que llegarían a ganar por unos 8 puntos. Eran 50 de esas mesas, según pudo constatarse, de calidad irrelevante. Al aterrizar con los números reales entró en colapso (político, aclaremos, porque los diagnósticos psiquiátricos incumben a especialistas y nunca a la bartola periodística). Continúa en ese estado.
 
Se verá si para la cadena nacional de este lunes a la noche puede recomponerse como para dar una imagen atildada, llamémosle. Hablamos del continente, desde ya. El contenido será la provocación de redoblar su rumbo. La hermana, en consecuencia, asumió enteramente el rol presidencial. Y, hasta ahora sin visos de modificaciones, se cargó con desprecio todo intento de cambios siquiera por maquillaje.
 
El hazmerreír de una mesa política con los mismos rostros de la derrota y el nombramiento de un ministro de Interior que ya lo era de facto, tras el pase de Guillermo Francos a la Jefatura de Gabinete, es todo de ella. Es de ella -en todo caso, junto con el edecán de Francos- llamar al diálogo con los gobernadores mientras se vetan los fondos de ATN a las provincias, para no hablar de la "profunda autocrítica" que en simultáneo rechaza el financiamiento a las Universidades y la emergencia pediátrica Garrahan incluido.
 
Es de ella haberse animado a un acto de lanzamiento de LLA en Tucumán, ante un estadio cuyas tribunas debieron cubrir con lonas negras para ocultar el vacío; en el que brilló por su ausencia cualquier cántico de aliento y donde, en poco más de dos minutos de balbuceos, volvió a incurrir en el espectáculo de su terrorismo sintáctico. Sin más vueltas, he aquí la Presidenta real en ejercicio directo de la función.
 

14-09-2025 / 09:09
El miserable Gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei no solo canceló los fondos destinados a las personas discapacitadas, a los inundados o a la ciencia, también se apropió de los dólares de los créditos internacionales otorgados específicamente para esas actividades. Solo en Discapacidad figuran 560 millones en divisas que nadie sabe a dónde fueron, con la excepción de dos viajes de Spagnuolo a Israel. El Gobierno libertario no explica dónde está la plata que debería ir a ciencia o discapacidad. La hipótesis del Congreso de que los fondos están en el Tesoro para contener el esquema cambiario.
 
Pocas horas después de la paliza electoral en la Provincia de Buenos Aires, Milei recibió en Casa Rosada al presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn. El lunes al mediodía, ambos posaron para la foto junto a Luis "Toto" Caputo, Guillermo Francos y la motosierra de bronce que corona el despacho presidencial. El titular del organismo también había sido muy requerido para entrevistarse con dirigentes de la oposición, pero alegó estar muy ocupado.
 
Desde la comisión bicameral Revisora de Cuentas del Congreso, que conducen el diputado Miguel Pichetto (Encuentro Federal) y el senador Mariano Recalde (Fuerza Patria), querían citarlo para indagar en la letra chica de los créditos que el organismo le otorgó al país en los últimos meses.
 
La preocupación, que se hizo explícita en la última sesión de la comisión, es que muchos de esos fondos --cientos de millones de dólares-- en principio destinados a financiar obra pública y programas de inclusión como la discapacidad o la investigación científica, registran niveles de ejecución nulos o muy por debajo de lo pactado a la firma. Lo cual habilita la hipótesis de que el Gobierno desvía esos recursos hacia las cuentas del Tesoro para contener el actual esquema cambiario y favorecer la bicicleta financiera.
 
En lo que va del año, el Gobierno reconoció haber gastado unos 277 mil millones de pesos (algo menos de 250 millones de dólares) de lo que ingresó vía los distintos créditos de inversión del BID y otros organismos. En total hay unos 140 programas de desarrollo vigentes, desde los pautados para financiar el Progresar hasta la extensión y fortalecimieinto de la red de agua potable, pero el país hasta ahora vió poco y nada de esos fondos.
 
A esta altura del año (en ocho meses), los dos gobiernos anteriores (Cambiemos y Frente de Todos) ya habían ejecutado en promedio más de 1.500 millones de dólares. Es decir, la ejecución de Caputo es prácticamente del 20 por ciento de lo esperable. En paralelo, el Tesoro utilizó 500 millones de dólares para pisar el dólar en las semanas previas de la elección bonaerense.
 
El BID aprobó en julio de este año la "Estrategia País 2025-2028" para la Argentina, un paquete de apoyo financiero por un total de 10.000 millones de dólares (7.000 para el sector público y 3.000 para la inversión privada).
 
Si bien el organismo trabaja con todos los gobiernos y cada uno tiene una orientación específica, en este caso respalda a una administración que solo se preocupa por mantener el esquema cambiario-electoral, mientras tiene un desprecio palpable hacia la obra pública y pasa la motosierra por sectores sensibles. Lo contrario a lo que, a priori, buscan los organismos de crédito cuando apoyan a los países. Pese a todo, Goldfajn sigue apostando por Milei.
 

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