La Opinión Popular
                  07:18  |  Martes 23 de Diciembre de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

Por
“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
Recomendar Imprimir
Nacionales - 29-09-2023 / 10:09
SE APROBÓ CON 38 VOTOS AFIRMATIVOS Y 27 NEGATIVOS

Sergio Massa logró la sanción de la reforma de Ganancias que Mauricio Macri prometió y no cumplió

Sergio Massa logró la sanción de la reforma de Ganancias que Mauricio Macri prometió y no cumplió
El Gobierno rompió el bloqueo que había impuesto la oposición en el Congreso y, en tiempo record, logró que el Senado convirtiera en ley por clara mayoría, 38 votos a 27, la eliminación del impuesto a las Ganancias para las y los trabajadores impulsada por Sergio Massa. Solo 80.000 gerentes y jubilados de privilegio pagarán ahora el “Impuesto a los Mayores Ingresos”.
Sergio Massa, el ministro y candidato a presidente de Unión por la Patria, consiguió un logro político con la rápida aprobación de la eliminación del impuesto a los trabajadores tuvo en el Congreso y hoy celebrará al encabezar un gran acto de la CGT, la CTA y los movimientos sociales al Congreso. Anticipan que será el acto más masivo de la campaña hasta ahora, la antesala al primer debate de Massa con los demás candidatos presidenciales.
 
"Ningún trabajador volverá a pagar Ganancias", celebró anoche Massa, en una sesión presidida por Cristina Kirchner, la aprobación de la eliminación del tributo para la llamada "cuarta categoría", por lo que ahora sólo lo seguirán pagando menos de cien mil personas entre ejecutivos de empresas, altos funcionarios y jubilados de privilegio.
 
La iniciativa le representó a Massa la recuperación de la iniciativa política luego de las PASO mientras que para la oposición de Juntos por el Cambio se transformó en un dolor de cabeza, dado que nunca se pudo acomodar en el nuevo escenario. El candidato encabezará esta tarde una gran movilización que la CGT, la CTA y los movimientos sociales organizaron como modo de festejo a la sanción, junto al reconocimiento a todas las demás medidas de recomposición de los ingresos tomadas en los últimos días para hacer frente al pico inflacionario.
 
"El salario no es ganancia", fue el eslogan que instaló el oficialismo a lo largo del rápido tratamiento que tuvo el proyecto en el Congreso, de apenas dos semanas. Todo un logro en un Congreso que desde hace tiempo se caracterizó por la falta de acuerdos. "Hola, ¿qué tal? Tanto tiempo", ironizó la vicepresidenta al recibir a los senadores de la oposición que ingresaron al recinto luego de que el oficialismo consiguiera quórum con 38 legisladores. A los 31 de los bloques de Unión por la Patria se sumaron los cuatro peronistas disidentes y tres de fuerzas provinciales. Los mismos 38 que terminarían votando la iniciativa contra 27 de Juntos por el Cambio y la schiarettista Alejandra Vigo.
 
El argumento repetido por los representantes de la oposición fue que se trataba de una medida electoralista, inflacionaria y que desfinanciará a las provincias, dado que se trataba de un impuesto coparticipable. Otro de los argumentos fue que se trataba de una medida unilateral y que nadie los había consultado acerca de la conveniencia de aplicarla. Pero les resultó muy complicado convencer acerca de por qué algo que habían promovido una y otra vez -incluso fue una de las promesas incumplidas de la campaña de Mauricio Macri en 2015- ahora veían mal.
 
El jefe de la bancada del oficialismo, el formoseño José Mayans, se encargó de desbaratar los argumentos opositores. Por ejemplo, planteando que ellos se enojaban por no haber sido consultados antes del envío del proyecto cuando Mauricio Macri tomó una deuda sideral con el FMI por decreto, lo mismo que la que "Messi" (en referencia al ex ministro Luis "Toto" Caputo, bautizado "el messi de las finanzas" por el entonces jefe de gabinete Marcos Peña) tomó a 100 años. Y si hacían todo ese lío por un punto de coparticipación que se perderá sin Ganancias a los trabajadores, no quería pensar qué sucederá cuando Javier Milei la elimine de un plumazo como promete, algo que consideró inconstitucional.
 
Desde hace unas semanas, Massa puso como eje de su mensaje la recuperación de los ingresos de los trabajadores y jubilados, un objetivo que pudo acompañar con medidas. Es lo que buscará mostrar en el acto en Congreso y también trasladarlo al primer debate presidencial que se realizará el domingo en Santiago del Estero. Es el candidato más formado para la presidencia y eso quedará claro durante la discusión.
 
La Opinión Popular
 

 
Senado: La reforma del impuesto a las Ganancias ya es ley
 
Pasadas las 10 de la noche, los palcos de la Cámara alta del Congreso estallaron en aplausos y comenzaron a cantar la marcha peronista: el Senado había sancionado la eliminación de la cuarta categoría y se había asegurado, así, de que ningún trabajador volviese a pagar el impuesto a las Ganancias a partir de 2024. Con Cristina Fernández de Kirchner presidiendo la sesión, el Frente de Todos logró aprobar, con 38 votos a favor y 27 en contra, el proyecto enviado por Sergio Massa --ausente en la sesión-- que establece que solo pagarán el gravamen aquellos que cobren por encima de los 15 salarios mínimos.
 
A menos de un mes de las elecciones, el Senado le obsequió al ministro de Economía su bandera principal de cara al 22 de octubre: ser el candidato que convirtió en ley la premisa "el salario no es ganancia". "Sin dudas, mi presidencia estará marcada por la recuperación del salario y el ingreso", celebró el ministro candidato de Unión por la Patria en sus redes sociales.
 
La jornada había comenzado a las 14 sin grandes sobresaltos, tal como el oficialismo había anticipado. Con 38 senadores presentes, al Frente de Todos pudo dar inicio a la sesión y romper así con más de cinco meses de parálisis legislativa.
 
Resultado de las negociaciones que había encabezado el jefe de la bancada frentetodista, José Mayans, dieron quórum, además de les 31 senadores oficialistas, los cuatro peronistas díscolos de Unidad Federal --el jujeño Guillermo Snopek, el entrerriano Edgardo Kueider, la puntana Eugenia Catalfamo y el correntino Carlos "Camau" Espínola-- y los tres aliados habituales: el rionegrino Alberto Weretilneck, la riojana Clara Vega y la misionera Magdalena Solari Quintana.
 
Apenas la pantalla del recinto mostró que el oficialismo había logrado llegar al quórum, les senadores de Juntos por el Cambio, que estaban esperando detrás de las cortinas, decidieron ingresar al recinto. "Qué tal, ¿cómo les va? Tanto tiempo", los recibió con ironía Cristina Fernández de Kirchner.
 
Solo dos eventos interrumpirían la tranquilidad y el buen humor oficialistas. Primero, cuando al comienzo de la sesión uno de los integrantes del Tercer Malón de la Paz --que vienen acampando afuera del Congreso hace semanas en contra de la reforma constitucional de Jujuy-- interrumpió a los gritos desde uno de los palcos.
 
El referente, sin embargo, fue rápidamente retirado por el personal de Seguridad. Más dolor de cabeza generó la aprobación del pliego de Ana María Figueroa, con negociaciones contrarreloj que terminaron en un empate que debió resolver la presidenta provisional Claudia Ledesma Abdala.
 
 
El salario no es ganancia: el debate
 
"Lo que se propone es no considerar ni al salario ni a las jubilaciones una ganancia, sino lo que son: una retribución al trabajo y, en caso el jubilaciones, un haber de retiro. Por eso se instituye que los salarios brutos superiores a 15 salarios mínimos mensuales no están sujeto al impuesto. Por el contrario, quienes perciban por encima de esta cifra, los denominados ingresos altos, si tributarán por la diferencia entre el mínimo no imponible y estarán sujetos a alícuotas que van del 27 al 35 por ciento", sintetizó el presidente de la comisión de Presupuesto, el riojano Ricardo Guerra, al momento de iniciar el debate.
 
La primera etapa de la discusión se desarrollaría con tranquilidad: luego de más de cuatro horas que consumió la aprobación de los pliegos judiciales, la mayoría de les senadores se había retirado del recinto para comer o estirar las piernas. Los primeros discursos fueron, incluso, los más apacibles.
 
El encargado de defender el dictamen de rechazo de Juntos por el Cambio fue el radical víctor Zimmermann, quien optó por enfocarse en el costo fiscal que tendría que más de 800 mil trabajadores dejasen de pagar Ganancias. "La pérdida de recaudación que van a tener las provincias argentinas de aprobarse este proyecto, a partir 2024, va a ser de un 1,7 billones", denunció el chaqueño.
 
Les senadores cambiemitas --que fueron cuestionados sistemáticamente por el oficialismo por haber cambiado de opinión respecto a la eliminación de la cuarta categoría apenas Sergio Massa envió el proyecto al Congreso-- optaron por dos objeciones: el costo fiscal que tendría la medida, por un lado, y el carácter electoralista de la medida, por otro.
 
"El Presupuesto no contempla ni un rediseño tributario del impuesto a las Ganancias, no contempla la caída en la recaudación, no contempla el impacto en déficit, no contempla el impacto en la emisión, no contempla el impacto en la inflación", cuestionó Martín Lousteau (Evolución).
 
"Ustedes son una bolsa de gatos. Quiero que sepan que no van a terminar ni con el kirchnerismo ni con el peronismo. Y tampoco van a terminar con los trabajadores, porque esta es una justa reivindicación y se lo merecen", los chicaneó el chaqueño Antonio Rodas (FdT).
 
Una de las defensas más encendidas del proyecto provino, sin embargo, de Alberto Weretilneck. "Estamos viviendo un momento absolutamente histórico desde el punto de vista de derechos de los trabajadores al terminar con 87 años de un impuesto que gravó el salario de las mujeres y hombres", celebró el gobernador electo de Río Negro, quien optó finalizar el discurso felicitando a Sergio Massa: "Estoy absolutamente orgulloso que mi amigo el ministro haya tomado esta decisión".
 
"Nosotros sostenemos el principio de que sin justicia social no hay paz social. Sin paz social hay violencia social. Y trabajar por la justicia social es trabajar por la dignidad humana", arrancó, al momento del cierre, José Mayans. Para entonces CFK ya había regresado al recinto y los palcos se habían colmado de dirigentes sindicales. Estaban el triunviro de la CGT, Pablo Moyano, el diputado Sergio Palazzo (La Bancaria), Omar Plaini (Canillitas), el candidato a diputado nacional, Mario "Paco" Manrique (Smata), y Norberto Di Próspero (Legislativos).
 
Los cinco se habían reunido previamente con CFK en su despacho. Sergio Massa, mientras tanto, había pasado por el Senado por la tarde, pero no estuvo presente en el recinto. Este viernes hablará en el acto que la CGT realizará frente al Congreso.
 
Mayans despachó durante casi media hora contra Mauricio Macri, Javier Milei y JxC en general. "Acá han presentado proyectos y ahora no le gusta porque es del Ejecutivo. Gataflorismo puro. Estamos hablando de un proyecto que beneficia a casi 900 mil trabajadores", los chicaneó. CFK se reía. "Ya está, basta, terminá", le empezó a gritar, furioso, el radical Alfredo Cornejo. CFK intentó poner orden, pero el propio Mayans, risueño, decidió finalizar. Apenas unos minutos después, el recinto estalló en aplausos: con 38 votos a favor y 27 en contra, el Senado convirtió en ley la reforma de Ganancias. Todes les senadores que habían dado quórum acompañaron la incitativa, incluso Solari Quintana, que se había ausentado durante la votación del pliego de Figueroa.
 
Mientras la CGT compartía un documento celebrando la sanción, los sindicalistas en los palcos comenzaron a cantar la marcha peronista. Primero tímidos, y después con fuerza, le siguieron les senadores del FdT.
 
Por María Cafferata
 
Fuente: Página 12
 

Agreganos como amigo a Facebook
22-12-2025 / 10:12
Las joyas de la abuela que remata el gobierno. A espaldas del Congreso, el Gobierno ya vendió 40 valiosos terrenos del Estado (pertenecientes a las fuerzas armadas, instituciones científicas y hasta predios de ex centros clandestinos de detención) y tiene 140 inmuebles más para subastar. Luis "Toto" Caputo sueña con conseguir unos mil millones de dólares mientras las grandes inmobiliarias amigas del gobierno, con Eduardo Costantini a la cabeza, se quedan con el botín.
 
Tierras del Plan Procrear, de las Fuerzas Armadas, ferroviarias, de instituciones científicas, predios de ex Centros Clandestinos de Detención y hasta un pedazo de montaña en Mendoza. Todo eso incluye la lista de más de 180 terrenos e inmuebles públicos que conforman el plan de ventas de bienes del Estado que ya avanza en el Gobierno de Javier "el Loco" Milei.
 
Los remates, que esta semana fueron noticia por la venta de tierras destinadas originalmente a viviendas sociales, se concentran por ahora en la Ciudad de Buenos Aires con las empresas de Eduardo Costantini como principales beneficiarias y otros grandes jugadores del sector, como el Grupo IRSA, codiciando las tierras.
 
A través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), y sin pasar por el Congreso, la fuerza libertaria ya vendió cerca de 40 bienes y tiene en lista otros 140 lotes e inmuebles publicados para subastar en lo que le queda de mandato.
 
La lista de subastas futuras cuenta con terrenos de hasta 300 hectáreas a vender en el interior del país con destino al negocio agropecuario o a grandes proyectos inmobiliarios. Especialistas y organizaciones ambientalistas advierten que se trata "de uno de los procesos de descapitalización pública más agresivos de nuestra historia reciente".
 
"Vamos a vender muchos de los activos de la AABE y eso va a generar un ingreso de miles de millones". No mentía el ministro de Economía, "Toto" Caputo, cuando a principios de junio reconocía que el gobierno remataría las tierras del Estado para intentar sostener las reservas, en conjunto con los procesos de privatizaciones y concesiones.
 
Sólo desde ese mes la Agencia abrió subastas para un total de 26 terrenos e inmuebles a los que hay que sumarle otros 17 procesos de remate que se habían abierto desde fines de 2023. En paralelo a las subastas de la AABE, el gobierno remata también las tierras que estaban destinadas al ya disuelto Plan Procrear y apunta a recaudar una suma de entre 800 y 1000 millones de dólares por todo el paquete. Aunque hubo ventas en Mendoza, La Plata, Pinamar y Córdoba, la mayor parte de los bienes vendidos hasta ahora se concentran en la Ciudad de Buenos Aires.
 
El terreno más grande de ese paquete es el predio de cuatro hectáreas que pertenecía al Ejército y que Eduardo Costantini adquirió por más de 120 millones de dólares. El mismo empresario se quedó con un lote de la Policía Federal en Bajo Belgrano a través de la firma Argencons, que controla desde mayo, en una subasta peleada en la que la empresa le ganó incluso al peso pesado de Eduardo Elsztain y su Grupo IRSA.
 
Antes, Costantini también había sumado otro terreno a pocos metros del Campo Argentino de Polo. En los tres casos se construirán desarrollos inmobiliarios.
 

21-12-2025 / 09:12
Cuando los cimientos están agrietados, todo lo que se construye es frágil e inestable. Cincuenta días tardó Javier "el Loco" Milei, tras una sorpresiva e impactante victoria en las elecciones de medio término, en fagocitarse el crédito político, de la misma forma que se fagocitó -durante los últimos dos años- una cantidad récord de divisas sin poder acumular reservas.
 
Ahora, tiene por delante dos años en los que su suerte está atada a la voluntad de aliados poco confiables. El FMI volvió a intervenir la economía, forzando un volantazo; los gobernadores pasaron por caja y después le votaron en contra. Un poco de su propia medicina. Hola incertidumbre, mi vieja amiga, podría cantar el presidente. Dos años, en Argentina, es mucho tiempo.
 
Después de la sesión del miércoles en la Cámara de Diputados, la mayoría de los medios titularon con un triunfo del oficialismo por la media sanción de diputados y apenas destinaron alguna línea en la bajada para comentar, como algo secundario, la inesperada derrota en el Capítulo 11 que se votó de madrugada. Con el correr de las horas, la realidad se encargó de corregir ese evidente error de criterio.
 
La derrota del gobierno fue completa y sus consecuencias están teniendo ramificaciones imprevistas. Milei amenazó con vetar su propio presupuesto y Patricia Bullrich tuvo que anunciar la postergación del tratamiento de la reforma laboral, justo a la hora que la CGT desconcentraba la Plaza de Mayo. Una derrota indisimulable.
 
El debate sobre la Ley de Presupuesto en la Cámara Baja era la primera y la más sencilla de todas las sesiones que tiene por delante el Gobierno para aprobar las reformas que anunció. La dificultad insalvable que encontró esta semana echa dudas sobre la viabilidad del resto de sus planes, justo cuando tiene que convencer a los acreedores que le vuelvan a prestar el dinero que no podrá devolver en 20 días.
 
La forma en la que intentó, sin éxito, salvar esa dificultad, repercutió negativamente en la relación con todos sus aliados, a los que necesita para que el Congreso le siga dando una pátina de legitimidad a sus decisiones, muchas veces ilegales e inconstitucionales.
 
La caída del artículo 75, el corazón de la derrota, está cargada de significado político porque fue una rebelión contra la cláusula de la humillación. Enceguecido por una mala lectura de las urnas, Milei no se contentó con ganar sino que quiso escenificar un triunfo absoluto y definitivo sometiendo a los legisladores que antes de la elección habían apoyado las leyes que daban presupuesto a la Universidad Pública y a las personas con discapacidad, para que votaran explícitamente en contra de esas mismas leyes. Ese era el corazón político del proyecto que había enviado el Poder Ejecutivo. Las partidas pueden reconducirse por decreto. Lo importante era coronar a Milei.
 
Así, el solsticio de verano no sólo marca hoy el final de la primavera, sino también, en coincidencia, el de la primaverita política que había comenzado para el gobierno con el resultado de las elecciones de medio término y que terminó sin que pudiera capitalizar de manera alguna ese éxito. La realidad muestra que, al fin y al cabo, las cosas no son tan malas como parecían en septiembre ni tan buenas como nos quisieron hacer creer después de octubre.
 
Todo sigue más o menos parecido a lo que fue el largo 2025: precario, inestable, violento, cada vez más autoritario y deteriorado. Este año Milei necesitó tres rescates del FMI, de Trump y de las urnas, para llegar hasta acá. Va a necesitar uno más, de los Senadores, antes del brindis del 31. Y con el 2026 comenzará una historia diferente.
 

20-12-2025 / 10:12
Agrandado como alpargata de pobre, en pocas semanas el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei dilapidó el resultado favorable de las urnas, resquebrajó su alianza con el PRO al romper la promesa de un lugar en la AGN; soportó un masivo acto de protesta de la CGT; debió postergar la reforma laboral, y le rechazaron en el Congreso su intento de derogar las leyes de presupuestos universitario y para discapacidad.
 
El efecto colateral del resultado favorable pero inesperado en las urnas fue confiarse demasiado y tomar de su propia medicina para creerse el relato sobre la estupidez humana. No ganó las elecciones porque los ciudadanos piensen que están bien. Es posible que así piense una pequeña parte de sus votantes. La mayoría sabe que está mal y votó -o no fue a votar- entre el discurso gorila antiperonista y la amenaza de un apocalipsis argentino inminente revoleado por el presidente norteamericano Donald Trump.
 
Javier Milei insiste en que la gente está bien. Es una mala lectura de la realidad que dibujan el Indec, el ministro Toto Caputo y Santiago Bausili en el Banco Central. Es el peor mensaje para mentir porque cualquier hijo de vecino puede constatar su falsedad. No importa si la inflación es cero o diez, ni si los medios dicen que bajó la pobreza. El sueldo no llega a fin de mes. O para que llegue hay que hacer sacrificios en calidad de vida, en calidad de salud y alimentación, en las vacaciones y el transporte. Todos saben que el padre, el tío o los abuelos están en el horno con las jubilaciones.
 
La lista de desgracias es más larga porque hay que anotar a los que perdieron negocios o el trabajo, que son cientos de miles. El gobierno hizo una mala lectura y sobre esa base tomó decisiones equivocadas. Una de ellas fue prometerles a sus aliados del PRO un puesto en la Auditoría General de la Nación que no podría otorgarle.
 
Se habló de una negociación con Unión por la Patria, pero en realidad, el puesto que estaba en discusión fue el que asumió la salteña Pamela Calleti que responde al gobernador Gustavo Sáenz. Si hubo negociación no fue por los votos. Los diputados de Unión por la Patria rechazaron las propuestas del Gobierno en todas las votaciones siguientes. Desde el intento oficial de derogar las leyes de financiamiento universitario y para la discapacidad, hasta el presupuesto. No hubo votos de Unión por la Patria en ninguna de esas votaciones.
 
El bochorno mayor fue con la compra de voluntades con los ATN (Aportes del Tesoro Nacional) previo a la votación. Las provincias más fieles a las decisiones del bloque, como Buenos Aires, La Pampa, Tierra del Fuego, La Rioja y Formosa quedaron fuera del reparto. Milei repartió 66 mil millones de pesos de ATN para comprar esos votos. Lo hizo en forma descarada.
 
Al tucumano Osvaldo Jaldo, el más favorecido, lo hizo llegar hasta Buenos Aires para que le bese el anillo y para escracharlo con una fotografía en la Rosada. Votos en remate para el Presupuesto y la Reforma Laboral, que son parte de las políticas del Gobierno que está destruyendo la industria y expulsando inversiones.
 
Se ha naturalizado esa actitud como un acto "responsable" de los gobernadores, como si el gobierno pudiera usar con ese fin los ATN que son para problemas concretos y no para comprar votos. Usado de esa manera, ese mecanismo es directamente extorsivo.
 
Los diputados que representan a las provincias de Misiones, Salta, San Juan y Mendoza, que originalmente habían votado a favor del aumento del presupuesto a las universidades y a la discapacidad, cambiaron su voto luego de que sus gobernadores recibieran los ATN.
 

19-12-2025 / 10:12
La central obrera, acompañada de otras centrales sindicales, organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, gritaron el rechazo a la reforma laboral y avisaron que comenzó un plan de lucha. Una masiva movilización desbordó la Plaza de Mayo, y muchas otras plazas de todo el país, en el primer paso del plan de lucha de la CGT y otras centrales sindicales contra la "reforma laboral" esclavista. Desde el escenario, los dirigentes de la CGT marcaron que irán escalando hasta un paro nacional.  El Gobierno tomó nota de la creciente resistencia y, cagado en las patas, pateó su tratamiento hasta febrero.
 
"Ojo con lo que hacen, porque el pueblo y la patria se defienden", advirtió, en el acto, primero Octavio Argüello. Luego llegó el turno de Cristian Jerónimo: "El proyecto está escrito y redactado maliciosamente a favor de las grandes corporaciones y de las grandes empresas de la Argentina", afirmó. El último en hablar fue Jorge Sola: "Este es el primer paso, sigan sin escucharnos, terminaremos en un paro nacional en todo el país", aseguró.
 
Las frases retumbaban en Plaza de Mayo. Los triunviros de la CGT hablaban en el escenario -que le daba la espalda a la Casa Rosada- acompañados por todo el universo sindical y referentes del peronismo, la izquierda, organismos de derechos humanos y organizaciones sociales. No eran pocos, como especulaba y afirmaba el oficialismo, era una multitud.
 
Los bombos, platillos y bronces marcaban el ritmo de los discursos sin saber, al menos en ese instante, que el gobierno reculaba y desactivaba el tratamiento exprés de la dañina reforma laboral. Todo quedaba para febrero porque habían confirmado que el proyecto sumaba más detractores que aplaudidores. Y se asustaron con la movilización masiva.
 
Al menos por ahora, los derechos de los trabajadores y trabajadoras, quedaron a salvo. No es poco para estos tiempos de crueldad que corren. Una señal clara de debilidad. La decisión es el resultado de las limitaciones de una administración acostumbrada a gobernar por DNU y que choca contra la realidad parlamentaria cuando intenta avanzar sobre derechos laborales consolidados.
 
El apuro por aprobar modificaciones estructurales sin diálogo ni consenso encontró un freno en un Congreso que todavía funciona. El mensaje de la oposición fue contundente: no habrá cheque en blanco para desmantelar conquistas sociales mientras se niegan recursos a discapacitados y universidades. La ratificación de estas leyes pese al veto presidencial marca un límite que la Casa Rosada no puede ignorar.
 
Patricia Bullrich reculó en chancletas y ya anunció que habrá nuevas extraordinarias del 2 al 27 de febrero para insistir con las reformas que exigen el FMI y los empresarios. Sin embargo, las fechas elegidas confirman lo que todos intuyen: el Gobierno deberá prometer el Presupuesto como condición para obtener votos opositores.
 
La estrategia de avanzar sin negociar nada tiene precio. Lo que pretendía ser un trámite exprés se convirtió en un recordatorio de que gobernar requiere construir mayorías, no imposiciones. Mientras Milei insiste con su agenda autoritaria de ajuste brutal, lo que ocurrió en las calles y el Congreso demuestra que aún queda capacidad de resistencia popular dispuestas a defender derechos básicos. La reforma laboral esperará, pero las dudas sobre la capacidad del Loco Mlei para aprobar sus iniciativas anarco capitalista, y gobernar a favor de los ricos, crecen. El gobierno de la oligarquía no se puede llevar todo por delante.
 
La Opinión Popular
 

18-12-2025 / 08:12
Tras conseguir la media sanción de un presupuesto 2026 que multiplica el ajuste, solo favorece a los más ricos y carga los costos sobre los desprotegidos, el Gobierno de Javier "el Loco" Milei sufrió un duro golpe con el rechazo al capítulo que derogaba el Financiamiento Universitario y la Emergencia en Discapacidad. También quedaron fuera la restricción de la ley de zona fría y la desindexación de la AUH.
 
El Gobierno consiguió la aprobación en general el Presupuesto 2026, pero sufrió una derrota clave: la oposición logró voltear completo el capítulo 11, donde se concentraba la derogación del financiamiento universitario y de la emergencia en discapacidad, dos leyes que el oficialismo insiste con incumplir. Tras una sesión que comenzó a las dos de la tarde y se extendió hasta la madrugada, Lule Menem y Diego Santilli ofrecieron concesiones de todo tipo a gobernadores y bloques aliados para blindar el capítulo entero.
 
Sin embargo, al momento de la votación sólo reunieron 117 votos afirmativos, mientras que la oposición alcanzó 123 rechazos y sumó además dos abstenciones. Es la tercera vez en un semestre que el Gobierno pierde frente al financiamiento universitario y la emergencia en discapacidad, si se cuentan la sanción original de las leyes, la insistencia parlamentaria tras el veto presidencial y ahora el intento de derogación vía presupuesto. También se rechazaron la eliminación de las actualizaciones automáticas de la Asignación Universal por Hijo y demás asignaciones familiares.
 
Envalentonado por el triunfo electoral de octubre, el oficialismo buscó acelerar la motosierra y eliminar dos normas que el Congreso sancionó, el Ejecutivo vetó y ambas Cámaras ratificaron con mayoría agravada, más de los dos tercios de los presentes. A pesar de las arduas negociaciones, el reparto de ATN y las promesas de la Casa Rosada a los gobernadores aliados, la catamarqueña Fernanda Avila, se les dio vuelta y voto en contra el capítulo 11, al igual que los tres tucumanos del bloque Independencia y los tres salteños de Innovación Federal.
 
Para destrabar el trámite, el oficialismo había intentado a último momento una maniobra más: incorporó la adecuación de la coparticipación de la Ciudad de Buenos Aires y un refuerzo de 21.000 millones de pesos para el Poder Judicial, bajo la administración del Consejo de la Magistratura. El objetivo fue evitar el naufragio del capítulo completo. "Le ponen un condicionamiento al Poder Judicial para que ni se le ocurra judicializar el capítulo XI porque se les cae el financiamiento. Son unos chantas y eso es lo que están haciendo ahora", denunció el jefe del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez.
 
A la hora de votar, resultaron decisivas las abstenciones de los radicales Cipolini y Schneider. Desde sus redes, la diputada Cecilia Moreu celebró la victoria de la oposición. "Quisieron jugar sucio y les salió mal. Pese a las múltiples maniobras extorsivas con las que el oficialismo y los sectores cómplices intentaron blindar la derogación de las leyes de Emergencia en Discapacidad y Financiamiento Universitario, logramos sostenerlas. Basta de dilaciones, son leyes votadas y ratificadas por el Congreso Nacional. Vamos a seguir dando la pelea para que entren en vigencia y se apliquen como corresponde", escribió en X.
 
Durante el debate varios diputados habían advertido que judicializarían la norma, de aprobarse. Los diputados Maximiliano Ferraro y Eduardo Valdés, fueron los encargados de advertir que el intento del oficialismo vulneraba el artículo 20 de la Ley 24.156 de Administración Financiera que en relación al presupuesto establece que "no podrá contener disposiciones de carácter permanente, ni reformar o derogar leyes vigentes".
 
La Opinión Popular
 

NicoSal soluciones web

© Copyright 2009 LA OPINIÓN POPULAR – www.laopinionpopular.com.ar - Todos los derechos reservados.

E-mail: contacto@laopinionpopular.com.ar