La Opinión Popular
                  21:40  |  Jueves 23 de Octubre de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

Por
“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
Recomendar Imprimir
Nacionales - 28-09-2022 / 10:09
EL PLAN B PARA INTENTAR EVITAR LA FRACTURA SI SE SUSPENDEN LAS PRIMARIAS

En pánico total, el PRO sale a rechazar la eliminación de las PASO, dice que es una locura

En pánico total, el PRO sale a rechazar la eliminación de las PASO, dice que es una locura
El PRO entró en pánico total por la posibilidad de que el Frente de Todos logre eliminar las primarias y salió a calificar la maniobra como una "locura" y una "trampa". Luego de días de indecisión, el bloque del PRO marcó posición sobre el proyecto del oficialismo para suspender las PASO, mientras algunos sugerían esperar la posición de Javier Milei.
El diputado de Juntos Somos Río Negro, Luis Di Giácomo, habitual aliado del Gobierno nacional, anunció que presentará un proyecto de ley para pedir la eliminación de las primarias abiertas y obligatorias, como reclaman los gobernadores peronistas y Sergio Massa. "En ningún momento las primarias han cumplido la función para que fueron creadas. No es un sistema que satisface una cuestión electoral", afirmó el rionegrino.
 
Inmediatamente el PRO entró en pánico total por la posibilidad de que el Frente de Todos logre eliminar las primarias y salió a calificar la maniobra como una "locura" y una "trampa". Luego de días de indecisión, el bloque del PRO marcó posición sobre el proyecto del oficialismo para suspender las PASO, mientras algunos sugerían esperar la posición de Javier Milei.
 
El temor del PRO es cómo resolver la interna que tiene como mínimo a Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich como candidatos, si es que Mauricio Macri decide no competir, en un escenario en el que la UCR podría hacer valer su aparato en todas las provincias.
 
El PRO nunca terminó de desarrollar una base de afiliados y se apalancó justamente en la UCR para conseguir la estructura necesaria para ganar elecciones a nivel nacional y después convertir a la UCR en un "furgón de cola", sin voz ni voto.
 
"Nosotros vamos a internas igual en todo el país", dijeron altas fuentes dirigentes de la UCR. La postura desafiante de la UCR es lógica: si no hay primarias buscarán hacer pesar su estructura partidaria para derrotar a los candidatos del PRO que están mejor en las encuestas.
 
En Juntos por el Cambio recuerdan la interna de Fernando de la Rúa contra Graciela Fernández Meijide como un caso testigo de lo que puede suceder si el peronismo consigue eliminar las primarias obligatorias. En esa interna la UCR le tiró el aparato encima al Frepaso.
 
"Nos ganan de acá a Júpiter", se lamentó un alto dirigente del PRO en referencia a la potencia partidaria de los radicales. Y en el larretismo tienen una preocupación extra: que la bolsonarista Patricia Bullrich se corte sola y compita por afuera. Por eso hablan de un escenario como el de 2003 con la torta electoral repartida en cinco pedazos.
 
La Opinión Popular
 

 
ELECCIONES 2023
 
PASO: el plan B de JxC para evitar la fractura si se suspenden las primarias
  
Sin detalles, la oposición empezó a difundir una alternativa ante la presunta suspensión de las PASO para evitar el barro interno, contener posibles filtraciones y tranquilizar al electorado al garantizar la unidad.
 
Por Carla Pelliza
 
Mientras haya plan A, no habrá plan B. Mientras haya PASO, Juntos por el Cambio apostará por esa herramienta y hará lo posible para mantenerla vigente para las elecciones del año que viene. En caso de suspenderse, un escenario que irrumpió en las últimas semanas, la definición buscará concretarse dentro del marco de la unidad con la posibilidad de unas internas partidarias o de alianza, aún no debatida en detalle.
 
Su uso dependerá de los consensos dentro de la coalición para establecer reglas de juego claras, y su anticipada presentación en sociedad buscó llevarle tranquilidad al electorado propio. Pero también para contener posibles fugas.
 
Ubicado en el entorno de Facundo Manes, Federico Storani blanqueó la existencia de "contactos, conversaciones" con distintos actores de la política para conformar una nueva fuerza por fuera de los dos polos existentes, en caso de darse la oportunidad.
 
Eso colocaría al neurocientífico en latitudes extra Juntos por el Cambio, siempre y cuando las PASO quedaran formalmente suspendidas para el 2023. Sin posibilidad de competencia interna, el actual diputado no descuida sus relaciones con otros sectores, incluso peronistas, para, sea como sea, competir el año que viene por la Presidencia de la Nación.
 
"Si se mantienen las reglas de juego (PASO), uno no tiene por qué señalarlo, pero no quiere decir que no existan contactos, conversaciones y demás para conformar un espacio que es necesario para la Argentina, que se ubique fuera de los extremos de la grieta", reconoció el histórico dirigente radical en la AM 530.
 
La posible ruptura de Manes está en el centro de la mesa hace, al menos, un mes. El disparador fue su disidencia a la hora de acompañar el pedido de juicio político contra Alberto Fernández por unas declaraciones televisivas. Él se opuso y empezaron los rumores que terminó de confirmar Storani. Con Buenos Aires tachada, el actual diputado tiene la intención de pegar el salto grande y llegar a la Casa Rosada sin recorrido Ejecutivo, algo que hace ruido incluso dentro del espacio.
 
Pero ese todo o nada lo llevaría a competir en la boleta nacional sin lugar a discusión, ya sea dentro de una interna cambiemita o fuera de ella. Hasta ahora, el potencial quiebre no generó temores grandilocuentes en los aliados porque, se entiende, no lograría un arrastre masivo de dirigentes por tratarse de una aventura casi suicida. Incluso, pese a las idas y vueltas, todavía se cree que no habrá fisuras porque la unidad es uno de los factores que la alianza puede manejar, conservar y acordar mantener.
 
Si bien aún no se vislumbró un escenario de suspensión de PASO, obviamente empezaron a circular las alternativas para, por un lado, no tener que meterse en el barro de la decisión a dedo; por otro, mantener la coalición al permitir la competencia libre y evitar rupturas; finalmente, para decirle a la sociedad que la ausencia de Primarias no generará conflicto porque Juntos por el Cambio tiene un plan B que mantendrá la unidad y tendrá, como base, un plan común para el que gane. Sea quien sea.
 
Varios dirigentes blanquearon la posibilidad de apostar por internas abiertas. En los últimos días, lo plantearon Federico Pinedo, del equipo de Patricia Bullrich, y el propio ex presidente, Mauricio Macri. Los dos hicieron foco en lo "molesto" o "trabajoso" de una aventura de ese tamaño pero, al mismo tiempo, ponderaron lo sano de la competencia de candidatos para llegar con una fórmula sólida a las generales del 2023. Lo cierto es que, por el momento, no hubo una propuesta concreta, estudiada, trabajada y, mucho menos, aprobada por la mesa nacional de Cambiemos para disputar unas Primarias Abiertas y Simultáneas del principal espacio opositor.
 
Hasta ahora, casi como una coreografía, la dirigencia de la alianza se propuso defender las PASO y acusar al gobierno de querer "cambiar las reglas de juego" muy cerca del acto eleccionario. Las versiones de una interna propia están en las conversaciones de todas las tribus pero aún nadie decidió apostar por ella porque, hacerlo, implicaría resignar a mantener las obligatorias por ley. La divulgación del plan B, entonces, buscaría otra cosa: calmar a un electorado bastante difícil de interpretar.
 
La herramienta ya había sido discutida por la oposición. En junio, por ejemplo, hubo una reunión de la dirigencia PRO para abordar cuestiones administrativas del partido y uno de los temas centrales giró en torno a definir qué hacer en aquéllas provincias sin PASO. En ese entonces, se barajó la posibilidad de una PAS (que no son obligatorias) con la participación de los afiliados partidarios más independientes, algo que podría facilitar la Justicia electoral pero, siempre, con algunos riesgos, como que haya intervención de electores peronistas para inclinar la balanza para uno u otro lado.
 
A nivel país, el mecanismo debería ser definido por la conducción nacional después de un pormenorizado análisis de las propuestas y las probabilidades, que cada una aporte, de ganar. Podría ser una gran elección interna entre candidatos radicales, del PRO, de la Coalición Cívica y de Peronismo Republicano o podría agotarse solo a aquellas fuerzas que no logren dirimir, puertas adentro, la puja.
 
La dispersión del PRO, incluso, podría generar desorden en otros partidos de la alianza. Si los amarillos llevan varios candidatos, por qué no el resto. Tampoco se definió si sería una interna entre fórmulas o solo candidatos presidenciales para, después, optar por el compañero de boleta. Si se diera esta opción, el escenario sería muy similar al que planteó el radicalismo, en el Congreso, con un proyecto de ley para modificar las PASO. En el texto, se propusieron Primarias solo entre candidatos al sillón de Rivadavia para, luego, elegir al segundo de entre el bolsón de los perdedores.
 
En ese escenario, la presencia de Mauricio Macri aún es difusa. Son varios los que creen que no se presentará en las elecciones y que la posibilidad de ruptura, por su participación, es casi nula. El ex presidente apareció para ordenar el discurso hacia el extremo pero también desordenó el tablero electoral. No solo porque impulsó más candidatos de los establecidos en la línea de partida sino porque sembró algunas dudas en torno a la misión de un posible Gobierno de JxC, porque condicionó a los suyos y porque se dedicó a enfrentar al radicalismo. A diferencia de otros dirigentes, está poco extendida la creencia de un cambio en los modos de Mauricio. Ahora, nadie permitirá un retroceso al 2015, periodo de inconsulta casi total en la actual coalición opositora.
 
La discusión se mostró tan en pañales que los consensos se mostraron inciertos. "Espero que sí", le dijo una figura importante de la oposición a El Destape ante la consulta de si habría acuerdo generalizado para priorizar la competencia interna por sobre la elección a dedo. Más allá de las especulaciones según el proyecto, la defensa de la PASO se planteó indiscutible por la simple e importante razón de ser una herramienta ordenadora en una coalición al borde de la ruptura constante. Si eso no ocurrió, fue porque la unidad es un factor que la dirigencia decidió priorizar.
 
Fuente: El Destape
 

Agreganos como amigo a Facebook
23-10-2025 / 08:10
En el ocaso de una campaña sin épica, Javier "el Cipayo" Milei enfrenta el miedo más grande de su propio gobierno: quedar sin el tercio legislativo que sostiene su poder político seudo democrático. El que hace un año prometía "refundar la Argentina", llega a la elección del 26 de octubre devaluado, aislado y con un discurso cada vez más errático, mientras las encuestas anticipan una caída que podría dejar a La Libertad Avanza sin capacidad de defensa en el Congreso.
 
Consultado por Guillermo Andino sobre qué consideraría un "buen resultado", el presidente no habló de ganar ni de convencer, sino de sobrevivir: "Uno que me asegure un tercio en la Cámara, que es una pared de defensa", admitió Milei, resignado a celebrar un empate como si fuera un triunfo. Esa "pared" es lo único que separa al Gobierno anarco capitalista del colapso institucional. Sin ese tercio, el oficialismo perdería poder de veto sobre leyes opositoras, vería caer sus DNU y hasta quedaría a tiro de un eventual juicio político, algo que hoy se comenta en voz baja en despachos peronistas y radicales.
 
Según un informe elaborado por el politólogo Gonzalo Taboada, el Gobierno solo mantendría control con un 39 por ciento de los votos, cifra que nadie se anima a pronosticar. En el escenario más optimista, Milei llegaría a 104 diputados sumando el PRO y algunos gobernadores aliados; pero con un resultado más realista, cercano al 32 por ciento, el oficialismo quedaría a merced de bloques provinciales y de una oposición fortalecida, con 109 bancas y capacidad de bloquear cualquier iniciativa presidencial.
 
En el peor escenario, con un 30 por ciento o menos, La Libertad Avanza ni siquiera lograría conformar el tercio propio ni sumando al PRO, lo que significaría una catástrofe política. "Una elección de 30 por ciento o menos es el número del abismo", señaló Taboada. "En ese escenario el Gobierno dependería de los árbitros, perdería autonomía y quedaría sin margen de maniobra".
 
La situación no sorprende a quienes observan el deterioro del poder libertario. El desquiciado Milei, que se soñó emperador, terminó mendigando apoyo a Donald Trump, mientras su ministro de Economía intenta contener una recesión que ya acumula dos años consecutivos, con inflación persistente y un dólar que sigue escalando.
 
A la crisis económica se suma una soledad política creciente. Karina "la Coimera" Milei se atrincheró en la Secretaría General, Santiago Caputo perdió influencia y el vínculo con los gobernadores aliados se tensó al extremo. El PRO ya no se comporta como socio, sino como tutor de un Gobierno que no logra ordenar su propia tropa.
 
La estrategia electoral del oficialismo se limitó a campañas de miedo, spots improvisados y discursos cargados de enojo, sin propuestas ni respuestas ante el descontento social. Milei dejó de hablar de "reformas estructurales" para conformarse con conservar la silla presidencial y evitar el aislamiento total.
 
"Pasar de un balotaje con 55 por ciento a una legislativa que arranque con un 20 y pico sería un golpe devastador", reconoció un operador libertario que, en privado, admite que el Gobierno festejará si logra un empate técnico. La foto final podría marcar un antes y un después. Si Milei no alcanza el tercio, su relato de liderazgo "anticasta" trucho quedará pulverizado y su futuro político dependerá de los mismos actores a los que prometió "dinamitar". La elección del domingo, más que una prueba electoral, será un plebiscito sobre su propia capacidad de gobernar.
 
La Opinión Popular
 

22-10-2025 / 11:10
A cinco días de las elecciones legislativas de medio término, la economía argentina volvió a quedar atrapada en un torbellino de tensiones cambiarias y el Banco Central debió volver a intervenir para que el dólar mayorista no superara el techo de la banda de flotación.
 
Ni las intervenciones del Tesoro de Estados Unidos, ni la firma del swap con Washington, ni el anuncio de una recompra de bonos alcanzaron para calmar la incertidumbre del mercado, que se mueve bajo una sola lógica: cubrirse como sea ante el riesgo electoral, aun pagando precios récord por el dólar y desarmando posiciones en acciones y bonos soberanos.
 
El sueño de Javier "el Cipayo" Milei de conseguir un megacrédito internacional empieza a tambalearse. Los gigantes financieros de Wall Street pusieron el freno y exigen garantías concretas antes de liberar los 20 mil millones de dólares prometidos. En la Casa Rosada, el discurso libertario suena fuerte, pero los bancos no compran humo: quieren saber quién paga si el país vuelve a tropezar con su historia de impagos.
 
El plan oficial buscaba armar una línea de financiamiento para reforzar reservas y dar aire al Gobierno, pero el entusiasmo se pinchó rápido. Desde el JP Morgan hasta el Citi, todos coincidieron en algo: Argentina necesita mostrar activos reales o un respaldo estatal sólido, algo que Milei se resiste a ofrecer en su cruzada contra el "Estado elefante".
 
La tensión se siente en los despachos. Mientras el ministro Luis "Toto" Caputo negocia contrarreloj, los operadores financieros miran los indicadores y ven lo mismo que los argentinos: un déficit que sigue sin cerrarse y un dólar que sube como fiebre sin Paracetamol. Cada día sin definición profundiza la desconfianza y pone más presión sobre el presidente, que esperaba anunciar el acuerdo como una victoria política.
 
Para los banqueros, el problema no es ideológico sino contable. Quieren garantías, y las quieren por escrito. Sin eso, los 20 mil millones seguirán siendo una promesa tan etérea como las teorías de "mercado libre" que Milei repite frente a los micrófonos. En el país ya se habla de "default técnico disfrazado de negociación", y los rumores empujan los bonos argentinos a la baja.
 
Desde su entorno intentan minimizar la situación, pero las fuentes financieras son tajantes: el préstamo no está cerrado y no lo estará hasta que el Gobierno muestre números concretos. Entre tanto, en los pasillos del poder ya suena un murmullo incómodo: "Si ni los bancos le creen, ¿Quién va a prestarle a la Argentina?"
 
El Banco Central tuvo que vender divisas de las reservas, ya casi exhaustas, para que la demanda mayorista no hiciera volar el techo de la banda cambiaria. Los anuncios oficiales pasan desapercibidos.
 
La Opinión Popular
 

21-10-2025 / 11:10
El yanqui Donald Trump hizo un demoledor diagnóstico sobre la desatrosa situación económica en la Argentina para justificar el "rescate" al gobierno anarco capitalista de Javier "el Cipayo" Milei, un tema que le está generando muchas críticas internas. "No tienen nada, están muriendo", afirmó el presidente. Con ese análisis, el swap no alcanzó, caen las acciones y el dólar quedó a 1% de la banda.
 
Cuestionado por una periodista por la posibilidad de que EEUU compre carne argentina, una medida que perjudicaría a los productores estadounidenses como ya pasó con la soja, Trump se ofuscó y respondió: "Señorita usted no sabe nada de esto, Argentina está luchando por su vida". "Están luchando por su vida. A Argentina no los beneficia en nada. ¿Entiendes lo que eso significa? No tienen dinero, no tienen nada. Están luchando muy duro por sobrevivir, están muriendo", justificó Trump. Lo dijo a pesar de que no se vean cadáveres en las calles.
 
Trump dijo que intentará ayudar a la Argentina a "sobrevivir en un mundo libre" porque le "gusta" el presidente Milei. "Creo que está intentando hacerlo lo mejor que puede, pero no hagas que parezca que lo están pasando bien, están muriendo. Están muriendo", lanzó. Se trata de la segunda vez en menos de una semana que el presidente de EEUU intenta ayudar al chupamedia Milei, pero lo termina hundiendo.
 
El martes pasado, durante la reunión en la Casa Blanca, le reiteró el apoyo, pero advirtió que está atado al resultado de las elecciones del 26 de octubre. "Si pierde, no seremos generosos con la Argentina", dijo Trump generando un desplome en los mercados. El gobierno de Milei tuvo que salir a aclarar por todos lados que se refería a las elecciones de 2027, pero Trump reiteró en sus redes que se refería a las de medio término. Días después, Milei se enojó con un periodista que le preguntó sobre esa frase y enojado respondió que fue malinterpretada por el Grupo Clarín.
 
Las palabras del mandatario yanqui obligaron a una rápida reacción oficial. El vocero presidencial, Manuel "Cara de Piedra" Adorni, buscó relativizar el impacto y pidió "entender el contexto". Sin embargo, terminó admitiendo que "claramente no somos un país al que le vaya bien", al enumerar inflación mensual del 2%, riesgo país en torno a los 1.000 puntos y un clima electoral enrarecido.
 
El Banco Central (BCRA) firmó el acuerdo de swap con EE. UU. por U$S 20.000 millones. A pesar del anuncio, el riesgo país se ubicó por encima de los 1000 puntos, los ADRs de empresas argentinas cayeron hasta 5% y el dólar cerró en $1495. Otro anuncio de la Secretaría de Finanzas, de toma de deuda con el JP Morgan, hizo revertir algo la caída de bonos. No alcanzó con el Tesoro, se suman los "bancos internacionales amigos" al saqueo y la rapiña.
 
Mientras Trump describió a la Argentina como un país "sin dinero" y "peleando por sobrevivir", la respuesta libertaria se redujo a relativizar el golpe y aceptar, a medias, el diagnóstico externo. Como sea, el mercado parece ya no creer en las promesas de ayuda de Trump y espera hechos concretos. Ni siquiera las intervenciones de Scott Bessent comprando pesos han logrado frenar la volatilidad del dólar.
 
La Opinión Popular
 

20-10-2025 / 10:10
La relación entre José Luis Espert y Fred Machado, el acusado por narcotráfico que financió su campaña presidencial en 2019, sigue complicando a La Libertad Avanza, aunque el economista, al que todavía defiende Javier "Cipayo" Milei, ya no encabeza la lista libertaria oficialista. En el último reportaje que otorgó el día que se confirmó su extradición a los Estados Unidos, se reveló el mensaje que Machado le pasó al Gobierno. Soltó una bomba que hizo temblar a más de uno en La Rosada.
 
En una entrevista de ocho horas con la periodista Caro Fernández, de Splendid AM 990, lanzó una advertencia que suena a ultimátum: "Si hablo, se cae el país". Con la extradición a Estados Unidos autorizada por la Corte Suprema, Machado no se guardó nada y apuntó directo al corazón del poder libertario, salpicando a figuras como José Luis Espert, Patricia Bullrich y Alberto Weretilneck con acusaciones que, de probarse, podrían destruir al Gobierno de Javier Milei.
 
El empresario, con un tono que mezcla bronca y desesperación, mandó un mensaje filoso a Santiago Caputo, estratega clave de Milei: "A Santiago Caputo le hago llegar un mensaje: Yo no quiero ir a Estados Unidos. Si esto explota, yo fundo todo. Yo hablo y se cae el país mañana". La respuesta fue: "Mensaje recibido". ¿Qué sabe Machado que pone tan nervioso al entorno presidencial?
 
Con Espert, su exaliado, no fue menos duro. Financió su campaña en 2019, pero ahora lo acusa de darle la espalda. "Espert no tendría que haberme negado. ¿Por qué me negó?", dijo, recordando una advertencia que le hizo en marzo de 2021 sobre los riesgos que corrían. "Le expliqué que irían por él. Pero no me escuchó", disparó con amargura.
 
Las acusaciones también alcanzaron a Patricia Bullrich. Según Machado, habría una triangulación de fondos para su campaña presidencial de 2023, con más de 3 millones de pesos movidos a través de una empresa de la familia Bada Vázquez, de los cuales al menos 215.000 pesos habrían ido a parar a su campaña.
 
Sobre Weretilneck, señaló un supuesto entramado de negocios en Río Negro, con permisos de explotación de arenas silíceas otorgados a Claudio Cicarelli, presunto testaferro del gobernador.
 
En un intento por limpiar su nombre, Machado insistió: "Es una cuestión de plata, no de droga". Sin embargo, la noticia de su extradición lo desmoronó. Entre el ladrido de sus perros y la tensión del momento, suplicó a Fernández: "No me dejes solo". Horas después, un operativo policial lo trasladó para enfrentar su destino en Estados Unidos.
 
La Opinión Popular
 

19-10-2025 / 08:10
Entre el colapso económico, la pérdida de relato y el avance de sus propios aliados, Javier "el Cipayo" Milei enfrenta el tramo final de la campaña convertido en símbolo de su propio fracaso: un presidente sin respuestas, cercado por la realidad y por quienes financiaron su ascenso. El plan "llegar" se quedó sin nafta cuando todavía falta una semana para alcanzar la meta. La impotencia es la tónica en la recta final antes de unas elecciones que se convirtieron en un delicado plebiscito sobre el futuro del gobierno y del país.
 
El proyanqui Milei volvió de Washington DC con una hoja que dice "amigo" y el fibrón que usó Donald Trump para estampar esa dedicatoria. A su regreso dio dos entrevistas en las que se peleó con sus interlocutores (le dijo "marxista" a Eduardo Feinmann y a Esteban Trebucq que le hacía el "caldo gordo a los psicópatas kirchneristas") y confesó que no tiene una solución para los problemas de los argentinos.
 
- El ochenta por ciento apenas si puede llegar a fin de mes y el sesenta por ciento, setenta, llega al día veinte. Les falta dinero en el bolsillo.
- ¿Qué quiere? ¿Que lo emita?
- No, yo no...
- A ver, entonces, emitiendo no se arregla. ¿Cómo quiere que lo arregle? Vamos, dígame. ¿Cómo le pongo plata a la gente?
- El economista es usted.
- No, bueno, pero digo o sea, a ver, digamos.
 
Un día más tarde insistió:
 
- ¿Y la gente que no puede esperar, presidente?
- A ver. A ver, pero, de vuelta. Te hago una pregunta, no puede esperar, a ver, ¿cómo lo resolvemos?
- Es que yo no lo sé.
- No, bueno, entonces.
- Sólo le pregunto.
- No, bueno, pero si vas a hacer el punto, digamos, a ver, empecemos a discutir cómo se resuelve.
 
Para Milei la escasez y la mala calidad de vida de millones de personas es en todo caso un problema intelectual, teórico, en el que no tiene demasiado interés. Dos años después de asumir le sugiere a su interlocutor (no un funcionario, no un asesor, ni siquiera un consultor sino un periodista en el contexto de una entrevista televisiva en vivo) que empiece la discusión.
 
Decir que no le quita el sueño sería una exageración: ni siquiera lo considera un problema, algo que deba resolver. La economía se encargará de hacerlo, cuando deje de existir el riesgo kuka. Suena estúpido, pero es exactamente el argumento presidencial, palabra por palabra.
 
Para la mayoría de los argentinos se trata en cambio de una cuestión muy concreta, a veces de vida o muerte. Este miércoles, en Congreso, en la marcha semanal por el reclamo de una mejora en las jubilaciones, una pareja daba su testimonio a las cámaras de televisión.
 
Él está atravesando un tratamiento contra el cáncer, le sacaron la cobertura de los remedios para aliviar los dolores y los vómitos cuando le hacen quimioterapia. En el hospital sólo le entregan la mitad. Desde los estudios, la cronista sugiere que den un "alias" bancario para recibir transferencias de gente que pueda ayudarlos. No tienen teléfono: tuvieron que venderlo para comprar medicinas. Milei no tiene una respuesta para ellos ni va a tenerla. 
 

NicoSal soluciones web

© Copyright 2009 LA OPINIÓN POPULAR – www.laopinionpopular.com.ar - Todos los derechos reservados.

E-mail: contacto@laopinionpopular.com.ar