Entre Ríos - 21-03-2012 / 09:03
LA COMUNIDAD EDUCATIVA SEGUIRÁ MOVILIZADA
La Uader lejos de la democracia
Todos por la Uader. La comunidad educativa seguirá movilizada. Foto AIM
La asamblea inter-facultades de la comunidad educativa de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader), que se reunió esta noche en la sede de la Escuela Normal de Paraná, decidió seguir movilizada en defensa de la normalización de la Casa de Estudios, registró AIM. Sin embargo, no descartó medidas de fuerza "más contundentes".
La Uader está lejos de la democracia que una casa de altos estudios debe practicar. Es parte de su historia fundacional y se ha convertido -más allá de muchos avances en su normalización- en algo cíclico de sus diferentes rectores normalizadores.
EDITORIAL
La Uader lejos de la democracia
La Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) está lejos de la democracia que una casa de altos estudios debe practicar. Es parte de su historia fundacional y se ha convertido -más allá de muchos avances en su normalización- en algo cíclico de sus diferentes rectores normalizadores.
Hay que aclarar que la anterior rectora normalizadora, Graciela Mingo de Bevilacqua, no cumplió con sus promesas de gestión de completar los concursos ordinarios de profesores e incluso renunció antes de cumplir su mandato. Un fracaso que revive de alguna manera la partidización (no la política educativa o universitaria) que ha caracterizado a la Uader.
El actual rector normalizador, Marino Schneeberger, al igual que su antecesora y los anteriores catedráticos que ocuparon su cargo (todos designados por el "dedo mágico del gobierno de turno") promete normalización. Es de anhelar que alguna vez alguien cumpla con la palabra, por la propia salud de la Uader.
La Justicia hizo lugar a los amparos presentados por un grupo de docentes de esta casa de altos estudios, y así se logró modificar el calendario de elecciones establecido en Consejo Superior.
Hay que recordar que el lunes por la noche, el juez de Instrucción Nº 3, Alejandro Grippo, hizo lugar a los amparos de siete docentes que pedían la suspensión del proceso electoral hasta tanto se sustancien los concursos de los que participarían y, de este modo, accederían a la condición de docentes titulares, gozando de su "ciudadanía universitaria".
Esto hay que entenderlo porque desde 2008 hasta fines del año pasado se realizaron 350 concursos, y este año están previstos otros 94.
Algo bueno hay que destacar en los esfuerzos -muchos fallidos- de normalizar a la Uader: más allá de sus conflictos e irregularidades, hoy se está en condiciones de afirmar que sus títulos no corren riesgos ni están en riesgo sus diferentes y necesarias actividades académicas.
De todos modos, las elecciones de los claustros universitarios son siempre muy importantes para la vida universitaria, dado que se eligen de manera democrática los órganos de cogobierno de una casa de altos estudios.
El propio rector normalizador dio una cifra sobre los concursos ordinarios docentes. Negó que se haya completado el 39 por ciento de los mismos y se sinceró que ese índice apenas llega al 25 por ciento. Si se completan los previstos para este año, se habrá llegado al 35 por ciento. Un índice que habla por sí mismo de que las distintas gestiones de los rectores normalizadores han sido un fracaso y esa ha sido la constante en la historia de la Uader.
Mientras tanto los decanos y rector no serán elegidos democráticamente como en cualquier universidad, sino que dependerán del "dedo" del gobierno de turno. Hoy -como ayer- eso aparece como una gran conveniencia para la gestión provincial, aunque en ello se lesione la propia democracia.
Fuente: Editorial de El Argentino