En este hecho puntual pero determinante radica la trascendencia historia de "Pancho" Ramírez.
 
Escribe: Dr. Gonzalo García 

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                  17:48  |  Viernes 31 de Octubre de 2013  |  Entre Ríos
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Nacionales - 19-02-2011 / 19:02
1 DE FEBRERO DE 1820: LA BATALLA DE CEPEDA Y LA TRASCENDENCIA HISTÓRICA DE FRANCISCO “PANCHO” RAMÍREZ

Pancho Ramírez se levanta en armas contra el centralismo porteño

Pancho Ramírez se levanta en armas contra el centralismo porteño
Cuando las montoneras federales de Ramírez y López entran en un Buenos Aires y atan la caballada a la Pirámide de Mayo recién construida, comienza lo que la historia liberal denominó la "anarquía del año '20″. Más que "anarquía" en el año 20 comienza un proceso de reencuentro con la realidad desnuda de un pueblo que debía sustituir las jerarquías de la sociedad colonial por otras que incluyeran los valores igualitarios asumidos en la Revolución de Mayo.
El 1º de febrero de 1820 tuvo lugar la Batalla de Cepeda.  Se enfrenaron en ella dos visiones antagónicas del país que desde la Revolución de Mayo estaban en pugna: Por un lado  el poder económico de la minoría del puerto de Buenos Aires; y por el otro las masas populares enroladas en la causa federal de la Liga de los Pueblos libres que comandaba Artigas, y que tenía a Francisco Ramírez como uno de sus principales hombres.
 
El proyecto constitucional, unitario y elitista, ideado por los intelectuales europeizados del puerto fue el detonante. Los caudillos federales se alzaron en armas y la Batalla de Cepeda puso fin al proyecto oligárquico del Directorio de Buenos Aires.

 Las montoneras de Ramírez y Estanislao López entran en Buenos Aires y atan la caballada a la Pirámide de Mayo recién construida...
 
Comienza lo que la historia liberal mitrista denominó la "anarquía del año '20″. Más que "anarquía", en el año 20 se empieza con un proceso de reencuentro con la realidad  desnuda de un pueblo que debía sustituir las jerarquías de la sociedad colonial por otras que incluyeran los valores igualitarios asumidos en la Revolución de Mayo.

 En este hecho puntual pero determinante radica la trascendencia historia de "Pancho" Ramírez.
 
Escribe: Dr. Gonzalo García 

"El año 20, decían los aristócratas, era el que debía marcar el fin de la revolución, estableciendo el poder absoluto para consumar nuestro exterminio repartiéndose entre sí los empleos y riquezas del país a la sombra de un niño coronado que ni por sí ni por la impotente familia a que pertenece podía oponerse a la regencia intrigante establecida y sostenida por ellos mismos."  Francisco Ramírez.
 
Unitarios contra Federales
  
Desde comienzo mismo de la Revolución, los intereses imperialistas, especialmente los británicos, querían balcanizar y dividir al  virreinato del Río de la Plata. Pretendían debilitarlo políticamente para someterlo económicamente, inundando con sus mercancías, destruyendo el mercado interno y la industria local. Su aliado natural era la burguesía del puerto de Buenos Aires. La elite porteña quería ser intermediaria de un comercio sin restricciones con Inglaterra y Europa y administrar discrecionalmente las rentas de la Aduana de Buenos Aires.
 
Contra el centralismo de la oligarquía porteña que planteaba un país para pocos, se levantaron las montoneras. Especialmente la figura de José Artigas, el primer caudillo argentino y padre del federalismo en el Río de la Plata.
 
 
Nacen los caudillos
 
Refiriéndose a las causas y orígenes de nuestras luchas civiles, Juan Bautista Alberdi, liberal auténtico y una de las mentes más brillantes de la historia argentina, dice: "El motivo. El de siempre. Buenos Aires quiere gobernar el interior, y el interior no quiere que lo gobierne Buenos Aires. Le desconfían al porteño. Por algo es...Y esa lucha se prolonga a lo largo de toda nuestra historia y existe todavía. Con otras formas y caracterizaciones, pero es la misma."
 
Y Alberdi, refriéndose a quienes encabezaban desde el Federalismo del Litoral esta lucha, de manera simple y didáctica se refiere al caudillo y explica su razón de ser histórica: "¿Qué hacían los pueblos para luchar contra España y contra Buenos Aires, en defensa de su libertad amenazada de uno y otro lado? No teniendo militares en regla, se daban jefes nuevos, sacados de su seno. Como todos los jefes populares, eran simples paisanos las más veces. Ni ellos ni sus soldados, improvisados como ellos, conocían ni podían practicar la disciplina militar. Al contrario, triunfar de la disciplina, que era el fuerte del enemigo, por la guerra a discreción y sin regla, debía ser el fuerte de los caudillos de la independencia. De ahí la guerra de recursos, la montonera y sus jefes, los caudillos; elementos de la guerra de pueblo; guerra de democracia, de libertad, de independencia. Antes de la gran revolución no había caudillos ni montoneras en el Plata. La guerra de la independencia le dio luz, y ni ese origen les vale para obtener perdón de ciertos demócratas. El realismo español fue el primero que llamó caudillos, por apodo, a los jefes americanos en que no querían ver generales."
 
Sobre las montoneras, Alberdi agregaba: "estos movimientos son conducidos por hombres del lugar, vinculados a sus paisanos. Estos hombres reciben en nuestra historia el nombre de "caudillos". El caudillo es un conductor de su pueblo. Casi generalmente un hombre de armas. La situación es de lucha y los hombres están con las armas en la mano. Nada más lógico que sigan a uno de ellos. El que más confianza les merezca, el que mejor se maneje con esas armas".
 
 
La Liga de los Pueblos Libres
 
Por aquellos días, promediando la primera década de vida nacional, las provincias del litoral (Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Misiones y Córdoba) se unen a la montonera oriental y forman la Liga de los Pueblos Libres. Como Protector de la Liga, Artigas luchó -junto con los jefes de las provincias del Litoral- contra el centralismo porteño del Directorio. Ramírez fue, a pesar del desgraciado enfrentamiento que tuvo luego con el oriental, el lugarteniente de Artigas en nuestra provincia y uno de sus hombres más valiosos.
 
Fueron muchos los caudillos que alzaron sus banderas federales y democráticas en este periodo de la historia nacional. Artigas fue tal vez el más grande y el más genuino entre todos, pero Francisco "Pancho" Ramírez, como él también fue trascendental, su verdadero significado político está en la victoria de Cepeda.
 
Pero antes es preciso que analicemos someramente como llegaron nuestros caudillos a una guerra contra las armas del puerto de Buenos Aires.
  

Una forma de gobierno

A mediados de la primera década del Siglo 19, el antiguo virreinato del Río de la Plata ya se perfilaba como un país, faltaba formalmente declarar la independencia de España. Las condiciones internacionales apremiaban y los movimientos revolucionarios la exigían. De tal manera el Congreso reunido en Tucumán en 1816 homologa estos hechos enunciando que "las Provincias de la Unión fuesen una Nación libre e independiente de los reyes de España y su metrópoli". Y ..."declaramos solemnemente a la faz de la tierra que es voluntad unánime e indubitable de estas Provincias romper los violentos vínculos que las ligaban a los reyes de España, recuperar los derechos de que fueron despojadas e investirse del alto carácter de nación libre e independiente del Rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli".
 
Una vez declarada la independencia quedaba un problema a resolver. La pregunta era la siguiente: ¿Qué forma de gobierno elegir? En el congreso de Tucumán se planteó seriamente la posibilidad de convertir al país en una monarquía. Napoleón había sido definitivamente vencido y en Europa señoreaba la Santa Alianza, que era un conjunto de monarquías aliadas muy reaccionarias, que se oponían a la constitución de repúblicas ya que éstas eran sinónimos de subversión, caos, ateísmo y jacobinismo.
 
Los que estaban por la monarquía no tenían todas las mismas motivaciones. No se puede equiparar el monarquismo de San Martín, que proponía además una monarquía parlamentaria, admitiendo en la monarquía la posibilidad de un gobierno fuerte adecuado a las características y las grandes extensiones del país. No se lo puede comparar, repito, con el concepto monárquico de  Manuel José García enajenado por fuerzas internacionales.

 
Algo parecido ocurría con los republicanos. Algunos  criollos republicanos coincidían en los intereses con Inglaterra.
 
 Gran Bretaña estaba  interesada en instalar una república en el Plata porque resultaba un régimen de fácil penetración y dominación, por las propias tendencias y contradicciones del republicanismo como sistema.
 
 Los federales de las primeras dos décadas revolucionarias eran republicanos porque asumían en el republicanismo la tendencia popular hacia el pluralismo democrático, por reacción histórica contra el unitarismo centralista establecido por los virreyes.
 
Algunos hombres importantes, Belgrano entre ellos, aconsejaron erigir una monarquía. La propuesta tuvo algunas posibilidades de cristalizar a través de gestiones diplomáticas muy complejas en Europa; también se barajó la idea de restaurar el trono de un Inca.
 
Sin embargo, y más allá de las tratativas, estos proyectos no fueron más que sondeos de opinión que por más insignificantes que fuesen, repudiaban la posibilidad de un monarca en Buenos Aires y eso habría sido el fin de la Revolución iniciada en 1810 que encontraba en Mariano Moreno a su pro hombre.

 
 El Pueblo, a pesar de ser en ese entonces (como lo es ahora) una entidad heterogénea, variopinta, impalpable, rechazaba esa posibilidad y prefería una opción más abierta y democrática.
 
El Congreso en principio descarta el sistema monárquico. Pero deja aun abierta la posibilidad para que siga siendo tratado en Buenos Aires cuando continúe sesionando el Congreso para dictar una constitución.
  

La Constitución de la oligarquía porteña
 
 Como resultado de lo dicho, en abril de 1819, el Congreso sanciona una Constitución, unitaria y absolutista, que no era ni monárquica ni republicana, pero que dejaba las puertas abiertas para la entrada de un príncipe o un infante. Se trataba de una Carta Magna aristocratizante, con un Senado formado por delegados de las provincias, pero que al mismo tiempo incluía personajes designados por su propio carácter, tales como: rectores de universidad, generales, obispos etc. El texto no mencionaba la palabra república.
 
La llamada constitución de 1819, no tuvo prácticamente vigencia y no funcionó porque la disidencia federal era ya muy grande, como profunda era también la desconfianza de los pueblos frente a las intrigas monárquicas de los porteños.

 
Así las cosas, y después de una serie de hechos políticos y militares menores se sanciona la constitución y esto resultó una afrenta, una provocación para los pueblos del interior que conducidos por Ramírez y López marchan con sus montoneras gauchas hacia la ciudad Buenos Aires. 


La Batalla de Cepeda, bautismo de fuego del federalismo
 
Ramírez, como lugarteniente del Protector Artigas, asumirá la función de jefe supremo del ejército federal. Estanislao López, el caudillo santafesino, se une a las fuerzas en calidad de aliado histórico del caudillo oriental. Se le pliegan también algunos desterrados del régimen: Alvear que prometía el apoyo de importantes sectores porteños y el chileno Miguel Carreras que aporta alguna tropa y una imprenta que había comprado en Estados Unidos. Esta imprenta, volante, editaba un boletín, "La Gaceta Federal", explosivo en su contenido.
 
En octubre de 1819 se reúnen los dos jefes, Ramírez y López, en Coronda (Santa Fe) para establecer planes comunes. Días después, el entrerriano lanza una proclama declarándole la guerra al Directorio, sostén político de la constitución aristocrática y antipopular, e invitando a sus paisanos a compartir la insurrección.
 
Allí está ahora, Francisco "Pancho" Ramírez, como jefe supremo de los ejércitos federales en el umbral de la historia. Está frente a sus "Dragones de la Muerte" como se llamaban las disciplinadas montoneras entrerrianas. Conduce también a los dragones santafesinos de López, los guaraníes de Misiones, los mocovíes del Chaco y toda la montonera artiguista. En ese momento el régimen directorial se derrumba.
 
Pueyrredón renuncia al Directorio (organismo político de la autoridad nacional que residía en Buenos Aires) y asume Rondeau. El mismo Rondeau que nueve años antes fuera convencido por Ramírez para desertar del ejército español e ingresar a las filas revolucionaria artiguistas. El mismo Rondeau que está ahora frente a él comandando las tropas porteñas.
 
El Director Rondeau pide auxilio a los ejércitos regulares que estaban llevando adelante las empresas libertadoras. Ya se sabe que el General San Martín, fiel a su conducta patriótica, popular y revolucionaria, se niega a desenvainar su gloriosa espada en esta guerra civil, mucho menos en contra del pueblo. Sólo le queda al Directorio el veterano ejército del Norte comandado por Belgrano al que Rondeau pide auxilio. Esta fuerza se niega también a participar en la contienda civil, se amotina en Arequito y esa sublevación deja al Directorio -ya debilitado políticamente- en un estado de total vulnerabilidad militar.
 
El 1º de febrero de 1820 en la cañada de Cepeda, en una atropellada de las montoneras federales se sella la suerte del Directorio oligárquico.
 
El historiador entrerriano Aníbal Vásquez escribe en su libro "Ramírez": "El triunfo de Cepeda debe considerarse como el bautismo de sangre del federalismo argentino, y como la primera afirmación colectiva de la mayoría popular a favor de la organización nacional, republicana, democrática y federal".
 

Bisagra histórica
 
La batalla de Cepeda desde el punto de vista del aspecto militar fue de las más "pobres" en la historia argentina, pero en sus proyecciones políticas fue de las más fecundas.
 
Las milicias directoriales, formadas en mayor parte por esclavos comprados por el gobierno para convertirlos en soldados, se desbandaron ante el ataque montonero. Una sola carga bastó para desmoronar a los porteños que "en menos de un minuto" se dispersaron dejando la artillería en poder de los gauchos entrerrianos.
 
Políticamente, en lo institucional, había caído por primera vez desde 1810 la autoridad nacional y desaparecía una entidad estatal que había ejercido, a veces solo formalmente, el poder sobre todo el antiguo virreinato.
 
Los sectores oligárquicos de Buenos Aires entran en pánico ante la supuesta posibilidad de "invasión" de las tropas federales. Vicente Fidel López, el ensayista quintaesencia de la versión mitrista de nuestra historia, expresa su repugnancia cuando relata el episodio: ... "numerosas escoltas (de Ramírez y López) compuestas de indios sucios y mal trajeados a término de dar asco ataron sus caballos en los postes y cadenas de la Pirámide de Mayo mientras sus jefes se solazaban en el salón del ayuntamiento".

 Relato que habla por sí solo  del desprecio y el odio que siente el pensamiento de la oligarquía por la causa federal y el recuerdo de la batalla de Cepeda.
 
Las montoneras de Ramírez y López entran en un Buenos Aires y atan la caballada a la Pirámide de Mayo recién construida...
Comienza lo que la historia liberal denominó la "anarquía del año '20″. Más que "anarquía" en el año 20 se inicia un proceso de reencuentro con la realidad natural y desnuda de un pueblo que debía sustituir las jerarquías de la sociedad colonial por otras que contuvieran los valores igualitarios asumidos en la Revolución de Mayo.
 
Ese es el valor de Cepeda y de la entrada de los caudillos del litoral a Buenos Aires.

Fue una directa confrontación con la verdad nacional, que en 1820 era ruda, brava e indomable. Para aprender esa verdad no servían los doctores y sus leyes. Servían sí esos hombres espontáneamente surgidos de sus realidades comarcales. Ellos, los caudillos, tuvieron la responsabilidad histórica de encauzar de manera pragmática y progresiva esa fluída verdad nacional que desfilaba a caballo por las calles de Buenos Aires.
 
Esta es la gran gloria histórica de nuestro "Pancho" Ramírez.
 
Escribe: Dr. Gonzalo García para La Opinión Popular

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31-10-2025 / 09:10
El triunfo electoral del domingo le allanó el camino al Gobierno para la sanción del Presupuesto 2026 que exigen tanto el Tesoro Norteamericano como el Fondo Monetario Internacional. A pedido de Washington, el presidente Javier "el Cipayo" Milei reunió en la Casa Rosada a unos veinte referentes provinciales -entre gobernadores y vices- y buscó transmitir una foto de gobernabilidad. Exigido por Donald Trump y Scott Bessent, aun con tensiones, el nuevo esquema político busca materializar la agenda conservadora y reaccionaria de la contrarreforma laboral y tributaria.
 
El gobierno anarco capitalista de Milei tomó el triunfo electoral como un cheque en blanco para destruir derechos laborales y aumentar la transferencia de riquezas a los grandes empresarios, empobreciendo a trabajadores y jubilados. Es lo que quiere el presidente yanqui Trump y lo que firmaron con sangre en la deuda con el FMI, para ganar las elecciones. Hay que preparar la resistencia popular. Se los enfrentará y derrotará en las calles.
 
Único orador por parte del oficialismo, Milei confirmó que convocará a sesiones extraordinarias y anunció el envío de tres proyectos clave que se tratarán en ese período: la reforma laboral, la reforma del Código Penal y la reforma tributaria. Además, pidió la colaboración de los mandatarios provinciales para aprobar el Presupuesto 2026. La oposición en Diputados tenía previsto emitir dictamen el próximo martes, pero el cambio en la correlación de fuerzas dentro de la Cámara baja podría dilatar los tiempos. "O hay un acuerdo político para prorrogar el debate o nosotros vamos a votar nuestro proyecto", advierten cerca de Martín Menem.
 
Las negociaciones para incorporar los planteos de la oposición -como los impulsados por Nicolás Massot, que proponían sumar las partidas destinadas a las emergencias en discapacidad y pediatría, además del financiamiento universitario- se diluyeron tras la victoria en las urnas.
 
La opción que analizan cerca del presidente de la Cámara baja, Martin Menem, es estirar los plazos y votar el Presupuesto durante las sesiones extraordinarias, con la nueva composición parlamentaria. Los bloques opositores desconfían de esa maniobra. Consultado sobre esta posibilidad, un diputado involucrado en las negociaciones advirtió: "Si el Gobierno llama a extraordinarias mediante un decreto y se compromete en una conferencia de prensa a que se trabaje e incorporen los reclamos de los gobernadores y las leyes vetadas, nosotros estamos en condiciones de rever lo del 4".
 
No parece ser el caso. En Unión por la Patria creen que el Gobierno buscará dictaminar y tratar el Presupuesto con la nueva composición de la Cámara, "salvo que arreglen con los gobernadores". Durante el encuentro del jueves, Milei dio una extensa exposición ante los mandatarios presentes, con excepción de Axel Kicillof, Ricardo Quintela, Gustavo Melella y Gildo Insfrán, que no fueron invitados. Allí adelantó el envío al Congreso de las reformas laboral, tributaria y del Código Penal, aunque evitó entrar en detalles. "Se fueron con una idea no muy concreta", señalaron cerca de los gobernadores.
 
Horas antes, Axel Kicillof sostuvo que si se le extendía la invitación hubiera participado por una cuestión institucional. En este camino, calificó como "un error" que no lo hayan convocado a la provincia de Buenos Aires representa casi la mitad del país. "Milei busca la foto que le pidieron Trump, su jefe de campaña, y Bessent", lanzó. Extraña búsqueda de consenso solo entre los que piensan igual que el agrandado Milei.
 
La Opinión Popular
 

30-10-2025 / 11:10
El gran triunfo de La Libertad Avanza a lo largo de todo el país todavía encandila. El Gobierno de Javier Milei ganó en 15 de los 24 distritos nacionales, derrotó a 11 gobernadores y terminó finalmente pintando el país de violeta, algo que en la previa muy pocos creían posible. Como frutilla del postre, la boleta libertaria se impuso por centésimas en la PBA, donde el armado libertario dio vuelta la paliza de más de 13 puntos de distancia que se comió el 7 de septiembre pasado en los comicios provinciales.
 
Milei es el gran ganador de todo el proceso. Luego de un 2025 electoral que le venía resultando esquivo al Gobierno en las provincias, con apenas dos triunfos en los 10 comicios locales que se desarrollaron antes de este domingo, la definición del oficialismo fue poner al presidente como centro de la oferta electoral libertaria para las legislativas nacionales. Con muchos candidatos ignotos e inexpertos en buena parte de las provincias, Milei decidió plebiscitar su presidencia a riesgo de quedar como el gran derrotado de la jornada. Sucedió todo lo contrario.
 
Sin embargo, y más allá del aplastante triunfo a nivel nacional y en los principales distritos del país, el otro gran protagonista de la jornada fue el ausentismo electoral. El 67% de participación ciudadana en las urnas marcó el peor nivel de asistencia a unos comicios desde el retorno de la democracia. Esto expresa un distanciamiento de la sociedad con la política que no puede pasarse por alto. Las personas que no fueron a votar este domingo deben ser pensadas como votos perdidos por cualquier sector que pretenda constituirse en una alternativa de representación política.
 
Con este panorama puede arriesgarse una reflexión contraintuitiva en el día del gran triunfo libertario. Si Milei planteó una elección a todo o nada, casi en clave de supervivencia, como si fuera un balotaje como el del 2023 donde la alternativa era LLA o el kirchnerismo; si el presidente se planteó a él mismo como el centro único de la campaña y de la propuesta libertaria, para bien o para mal; si buena parte de la ciudadanía argentina decidió no votar, en una posible expresión de disconformidad con el sistema; entonces podría trazarse una comparación, algo forzada quizás aunque tal vez no tanto, con el resultado de la segunda vuelta del 2023.
 
Como salvedades es preciso aclarar que en esa instancia sólo había dos opciones, Milei o Massa, sin todas las alternativas provinciales y de los gobernadores que se pusieron en juego este domingo. También que en ese momento se definían unas elecciones ejecutivas y no la conformación del Congreso que se decidió ayer. Con estos asteriscos plantados, cabe la pregunta: ¿Cuántos votos perdió Milei desde su pico de 2023?
 
Aquel 19 de noviembre, dos años atrás, el entonces candidato libertario obtuvo 14.550.288 de votos, lo cual le valió haber sido objetivamente el presidente que nominalmente más votos sacó en una elección en toda la historia. Esa impresionante cantidad de votos resultó el 55,69% del total, prácticamente la suma directa del 30% que Milei había obtenido en la primera vuelta y el 23% que había sacado Patricia Bullrich.
 
Desde esa cumbre hasta ayer, Milei perdió 15 puntos porcentuales y más de cinco millones de votos. En concreto, los 9.342.526 que sumaron las 24 listas libertarias ayer, representan una caída de 5.207.762 de votos frente a lo que Milei cosechó en el balotaje 2023.
 
Milei perdió votos en todas las provincias con respecto al balotaje. Si bien es concreto que ayer LLA derrotó a casi todos los gobernadores que la enfrentaron, también hay que poner la lupa en la cantidad de votos que la propuesta libertaria perdió en cada territorio, a riesgo de que no hacerlo signifique suponer que el presidente sostiene intacta la legitimidad social que obtuvo en el balotaje 2023.
 

29-10-2025 / 09:10
La reforma laboral esclavista de Javier "el Explotador" Milei fue anticipada hace varias semanas, pero sus detalles no se dieron a conocer sino hasta después de las elecciones de medio término. Dos días más tarde, finalmente trascendió la letra chica del proyecto del Gobierno para "modernizar" el régimen de trabajo. La diputada libertaria Romina Diez presentó la llamada Ley de Promoción de Inversiones y Empleo, que amplía la jornada laboral, flexibiliza convenios y reduce costos para las empresas. Una ofensiva contra los derechos conquistados de la clase trabajadora durante más de 100 años de lucha.
 
El texto, como se esperaba, incluye varios puntos que despertarán fuerte resistencia en su tratamiento en el Congreso, entre ellos la ampliación de los despidos sin causa y la introducción de cambios en las jornadas, indemnización, vacaciones y horas extra. La iniciativa lleva el respaldo de la diputada Diez y de varios legisladores libertarios -entre ellos el narco José Luis Espert, hoy en uso de licencia- y Milei tiene la intención de darle tratamiento durante el período de sesiones extraordinarias en el verano, en tándem con la propuesta de reforma previsional.
 
El proyecto fue denominado "Ley de Promoción de Inversiones y Empleo". Se espera que sea objeto de una discusión parlamentaria ajustada en los números y agitada debido a su controversial contenido. Algunos de los puntos más salientes del texto son:
 
- Ampliación de la jornada laboral, que podría llegar hasta las 12 horas consecutivas. La medida sería acompañada por una flexibilización de las horas extra a decisión de los empleadores, que podrían dejar de pagarlas y, en su lugar, ofrecerle a los trabajadores la posibilidad de "recuperarlas" el mismo mes.
- Indemnización en cuotas para las micro, pequeñas y medianas empresas. Deberían abonarlas a lo largo de 12 pagos mensuales consecutivos y con una tasa de interés a definir.
- Ampliación de las causales de despido sin causa. Según el mencionado medio, "el empleador podrá introducir cambios" en materia de movilidad y disciplina laboral siempre y cuando "no resultan irrazonables ni alteren aspectos esenciales del contrato". Si el trabajador no los cumple, podría ser desvinculado sin consecuencias para la empresa.
- Cambios en el sistema de vacaciones. La ley le permitiría a los empleadores otorgar días en cualquier momento del calendario siempre y cuando el empleado pueda "gozar de sus vacaciones en temporada de verano al menos una vez cada dos años, salvo que opte en contrario".
- Reglamentación de un "salario dinámico" que establecería que "los aumentos tengan correlación con una mayor productividad de cada empleado y no aumentos generales negociados por el sindicato".
- Descentralización de la negociación colectiva de convenios para que primen los acuerdos empresariales por sobre los sectoriales.
- Implementación de incentivos al empleo a través de bonos para los empleadores que inicien nuevas relaciones laborales en los primeros 18 meses de vigencia de la reforma. Los beneficios se extenderían por doce meses y variarían según el tamaño de la compañía.
 
Con el impulso del anarco capitalismo, tras el resultado electoral, y bajo las recomendaciones del FMI y los grandes grupos empresarios, el Gobierno de Milei volvió a poner en agenda la reforma laboral, una de las piezas centrales de su programa económico ultra conservador, fascista y reaccionario, que promueven las llamadas "ideas de la libertad" y un modelo de mercado sin regulaciones estatales ni derechos laborales colectivos. La iniciativa busca abaratar despidos, bajar salarios, debilitar convenios y ampliar el poder patronal sobre las condiciones de trabajo.
 
La Opinión Popular
 

28-10-2025 / 11:10
El yanqui Donald Trump se adjudicó el triunfo libertario en la lejana Argentina y felicitó a su propio equipo por el resultado. Javier Milei se deshizo en agradecimientos. Para buena parte de los consultores, lo decisivo fue el factor miedo: temor a que las cosas exploten si no ganaba Milei; caos, disparada del dólar; precios en aumento incontenible. Para otros consultores, las cosas se combinaban con que hay un 40 por ciento de la población que (todavía) califica con un bien o muy bien al presidente, es decir que tienen expectativas de que las cosas mejoren. Y, por supuesto, en ese 40 por ciento anida el temor al regreso del peronismo.
 
Desde ya que ni la propia Casa Rosada tenía un diagnóstico, algún estudio, que indicara la posibilidad de ganar en el territorio de la Provincia de Buenos Aires. Se preveía que LLA ponía ganar en Córdoba y en Santa Fe, pero no por tanta distancia y, en cambio, eran previsibles los triunfos libertarios en Mendoza, CABA y Entre Ríos. En todos los casos, los números finales fueron mejores que las previsiones, pero el salto cualitativo y cuantitativo fue el bonaerense. Nadie lo vio venir.
 
"La campaña del miedo, que fue armada directamente desde Estados Unidos, en la que participó Scott Bessent y el propio Trump, no fue casualidad -analiza Roberto Bacman, del CEOP-. El presidente norteamericano dijo que los argentinos nos estamos muriendo y que si no nos queremos morir tienen que confiar en Milei. Esa campaña, además, se produjo en una semana en que el dólar crypto había llegado a 1.600 y se vivía una fuerte inestabilidad. Eso pegó mucho en Provincia de Buenos Aires, Córdoba, CABA, Santa Fe, Mendoza, los lugares con mayores centros urbanos".
 
La situación más bien dramática en el plano económico, vivida durante la semana anterior a las elecciones, derivó también en una polarización: se cayeron fuertemente las fuerzas del centro. El dato objetivo es que el peronismo, en Provincia de Buenos Aires, perdió únicamente 256.000 votos -bajó de 3.861.000 a 3.558.000 votos, algo que se puede adjudicar a que no votaron los extranjeros esta vez y, obviamente, a que las listas de concejales, en los que además figuraban muchos intendentes, esta vez traccionaron menos. No mucho menos. También ocurrió que hubo varias listas peronistas disidentes que sumaron 220.000 votos. Pero lo decisivo fue que LLA subió en 850.000 sufragios -de 2.755.000 a 3.605.000 votos-, consiguiendo la ventaja. La elección se convirtió casi en un blanco o negro, desapareciendo las fuerzas que transitaban por el medio, en especial en el interior bonaerense y, en especial, subió la cantidad de votantes (computando votos válidos) en casi 1.200.000, que gran parte se fue también a la lista libertaria.
 
El gobierno tiene una base. "El gobierno obtuvo el 40 por ciento y es evidente que no hay un 40 por ciento al que le vaya bien económicamente -diagnostica Federico Aurelio, de Aresco-. Pero yo observo que al núcleo duro de acompañamiento que tiene el gobierno, un 25 por ciento del electorado, se suma un núcleo esperanzado que considera que vale la pena el esfuerzo y que Milei es el que puede encabezar o intentar de alguna manera solucionar las problemáticas. Para mí, el peronismo no hizo una mala elección. En muchas provincias perdió por márgenes muy bajos. A nivel nacional no sacó muchos menos votos que los previstos. Lo que ocurrió es que LLA consiguió en las últimas horas una mayor polarización del voto, a costa de las terceras opciones. Estaba prevista una mala elección de Provincias Unidas, pero no tanto. Y todo eso que perdió Provincias Unidas en Córdoba, Santa Fe y otras terceras opciones, fue a LLA".
 
Redondea Hugo Haime, de Haime y Asociados- "Si viene el presidente de Estados Unidos diciendo que ustedes se están muriendo y tienen una sola alternativa, indefectiblemente pega. A esto hay que sumarle el temor a la vuelta del peronismo. La campaña de LLA se centraba en el peligro del regreso del kirchnerismo, que, además, había ganado de forma impactante en septiembre en la Provincia de Buenos Aires. No tengo dudas que eso sembró temor. Yo creo que las peleas del peronismo, la falta de autocrítica y balance del gobierno que terminó en 2023, también tienen su peso. Todos fueron factores concurrentes para que LLA se quedará con los votos de las fuerzas del medio y sumara ese 40 por ciento que te dice que tiene esperanzas".
 
En 24 horas se convirtió en un lugar común el paralelismo con la elección legislativa que Mauricio Macri ganó en 2017, con más amplitud todavía que LLA, y que terminó en su derrota en las presidenciales de 2019.
 
La Opinión Popular
 

27-10-2025 / 08:10
Aunque bajó 15 puntos desde 2023, el Gobierno de Javier "el Cipayo" Milei consiguió el triunfo que buscaba. La ola violeta recorrió el país y hasta ganó por décimas la provincia de Buenos Aires. Apoyado en la intervención extorsionadora de Donald Trump, Milei convocó a los gobernadores derrotados para alcanzar el respaldo parlamentario que necesita para profundizar el ajuste sobre los trabajadores, los jubilados, la educación y la salud pública. El mandatario yanqui escribió un mensaje en el que destacó el triunfo libertario en las legislativas. "Cuente conmigo para dar la batalla por la civilización occidental", le respondió Milei.
 
La Libertad Avanza llegó en crisis a la elección, pero, con polarización y el salvataje multimillonario de Trump, logró un triunfo electoral este domingo en comicios con muy baja participación. Sin embargo, no resuelve su problema de fondo, que consiste en la falta de fortaleza política para aplicar los próximos ajustes y reformas estructurales que le exigen Estados Unidos, el FMI y los grandes empresarios. Derrota del peronismo y fracaso de su estrategia de moderación y pasivización como vía para enfrentar a Milei.
 
Nadie muere en la víspera, tampoco se suicida antes. Al parecer esto se puede aplicar a un conglomerado más complejo como es el pueblo e incluso podría servir como una primera explicación del resultado electoral de estas elecciones legislativas de medio término. El miedo que el gobierno distribuyó de manera equitativa (la única distribución que hizo desde que asumió) con la inminencia de la debacle si no se conseguían los salvatajes de Donald Trump fue uno de los factores que provocó este resurgimiento electoral.
 
En la vereda de enfrente, el peronismo contuvo su núcleo duro, pero la continuidad de la disputa interna dejó al movimiento nacional y popular sin un mensaje que convoque y aglutine, sobre todo a ese votante más laxo. Así, La Libertad Avanza obtuvo, a nivel nacional, 40,84 por ciento (15 puntos menos que en 2023), contra un peronismo que sumó en todas las provincias 34,8 por ciento.
 
Una elección absolutamente polarizada que dejó al experimento Provincias Unidas prácticamente hundida con un 5,12 por ciento de votos. Pero este resultado, que le permitirá al Presidente enfrentar unas semanas con más tranquilidad, lo deja ya sin la red de última instancia que representaba la herencia del gobierno anterior. A partir de ahora, todo lo que haga, todo lo que toque, todo lo que rompa, será pura y exclusivamente su responsabilidad.
 
En cada elección los partidos invierten dinero para la campaña. Reciben donaciones, pero también una cuota que le corresponde por ley y que entrega el gobierno. Ahora, para estos comicios el presidente Milei consiguió un récord histórico porque su triunfo lo garantizó con un incremento neto de la deuda externa en 40 mil millones de dólares que le mandan desde la Casa Blanca. Por ahora superó el primer escollo, el electoral. Ahora tiene que garantizar gobernabilidad, pero sobre todo la entrega del país a los capitales norteamericanos que visitan de manera asidua la Argentina. Es lo que le reclama Trump y Scott Bessent. Los recursos naturales del país son la garantía de esos miles de millones de dólares que llegarán.
 
Estas elecciones reavivan un debate. ¿Qué lleva a muchas personas a votar en contra de sus propios intereses? Entendiendo por intereses, no sólo los económicos, sino también los culturales, los políticos, los derechos en general. La explicación de moda tiene que ver con la "política identitaria": esto es, quien vota en contra de sus intereses lo hace por defender una identidad, una autopercepción de su persona. Por ejemplo, el pobre que vota a la derecha que lo va a sumergir aún más en la indigencia, lo haría porque se auto percibe como miembro de una clase superior en la que se cree bienvenido.
 
Sin embargo, estos análisis a veces olvidan una explicación bastante más sencilla, que nunca debería descartarse como explicación de la conducta humana: la estupidez, que siempre encuentra el justificativo moral en la pertenencia a un sistema colonizador de conciencias. La estupidez es la conducta de quien produce un daño a otros sin que de ello derive un beneficio propio.
 
La Opinión Popular
 

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