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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 18-01-2023 / 11:01
SE INVENTÓ UNA PERICIA PARA IMPULSAR LA HIPÓTESIS DEL ASESINATO

A 8 años de la muerte de Alberto Nisman: Versiones e hipótesis sin sustento

A 8 años de la muerte de Alberto Nisman: Versiones e hipótesis sin sustento
En un nuevo aniversario del fallecimiento del fiscal Alberto Nisman, desde la fiscalía a cargo de la causa se difunden trascendidos que supuestamente avalarían la idea del asesinato, pero sigue sin poder acusar a nadie porque las evidencias indican que fue un suicidio. El hipotético homicidio sólo sirve para seguir estirando la causa que, como se sabe, es utilizada por Juntos por el Cambio para atacar al peronismo.
A ocho años de la muerte del fiscal Alberto Nisman desde la entente mediático-político-judicial macrista se continúa agitando la tesis del homicidio cuando hay muchas pruebas que evidencian que en el departamento no hubo terceras personas. El hipotético homicidio sólo sirve para seguir estirando la causa que, como se sabe, es utilizada por Juntos por el Cambio para atacar al peronismo. El informe de la Gendarmería repleto de errores que se convirtió en una pieza clave para sostener la causa, con citaciones convenientes e inconvenientes para el juez del caso, Julián Ercolini, el invitado de Clarín a Lago Escondido.
 
Todavía se continúa agitando la tesis del asesinato cuando hay muchas pruebas que evidencian que en el departamento 2 del piso 13 del edificio Le Parc no hubo terceras personas. La última gran maniobra que hubo en la causa para impulsar la tesis de que al fiscal de la UFI AMIA lo mataron fue la instalación de una pericia repleta de errores realizada por la Gendarmería en septiembre de 2017, es decir, cuando esa fuerza de seguridad respondía a Patricia Bullrich durante el gobierno de Mauricio Macri.
 
El juez Ercolini -que fue uno de los invitados por Clarín al vergonzoso viaje a Lago Escondido- se hizo eco del trabajo de la Gendarmería y tres meses después de presentado procesó a Diego Lagomarsino y a los custodios de Nisman. Lejos de convocar a quienes realizaron el peritaje trucho de la Gendarmería para responder sobre burdas inexactitudes, en parte de 2021 y el último año el juez y el fiscal Eduardo Taiano convocaron a decenas de agentes de la exSIDE para interiorizarse sobre sus movimientos.
 
Los espías siguen declarando en un expediente que está prácticamente estancado, ya que ni el juez ni el fiscal logran encontrar datos que den cuenta de que a Nisman lo asesinaron. Por eso, ante un nuevo aniversario y en un año electoral, hacen correr nuevas operaciones falsas como la que publicó La Nación sobre la aparición de una "nueva pista terrorista internacional".
 
Ante la falta de pruebas, la fiscalía a cargo de la causa hace el tradicional remix de versiones, hipótesis, elucubraciones, por supuesto que sin poder acusar a nadie de un homicidio inexistente. El único sostén del expediente es el peritaje armado por la Gendarmería, en tiempos de la polémica Bullrich.
 
Pero el fiscal Taiano y el juez viajero Ercolini se negaron sistemáticamente a que los peritos declaren bajo juramento y, sobre todo, que confronten con los expertos del Cuerpo Médico Forense, quienes sostuvieron que "no hay rastros de accionar homicida, desde el punto de vista de la evidencia médico legal".
 
O con los peritos de la Policía Federal, que concluyeron que "no había ninguna otra persona en el baño al momento del disparo". O con los especialistas del Ministerio Público de Salta, que analizaron las manos y afirmaron que "sobre las muestras analizadas se hallaron partículas consistentes con residuos de disparo".
 
A ocho años de la muerte de Nisman, la causa sigue abierta sólo por razones políticas. Y no debería asombrar: el juez a cargo, Ercolini, ya mostró para quién juega. No sólo porque fue pasajero del vuelo privado con funcionarios del PRO y empresarios de Clarín a Lago Escondido, sino también porque en los chats posteriores propone armar facturas falsas para tapar el escándalo. Aun así, sigue en su puesto.
 
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LOS NUEVOS INVENTOS DE LA FISCALÍA Y LA REFUTACIÓN QUE SURGE DE LAS PRUEBAS
 
A 8 años de la muerte de Alberto Nisman: Versiones e hipótesis sin sustento
 
Estas son algunas de las versiones que difunde la fiscalía en los últimos días y que no tienen sustento probatorio. Sólo sirven para seguir estirando la causa que, como se sabe, es utilizada por Juntos por el Cambio contra el peronismo.
 
Un hombre de la AFI en Le Parc. Como ya reveló este diario, fue a declarar un exagente que en enero de 2015 revistaba en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). Durante el gobierno de Mauricio Macri se acercó a Bullrich y se fue a trabajar con ella. En las redes hay fotos del agente y su esposa con Bullrich y su marido en un sitio de veraneo (no se revela el nombre del agente por la Ley de Inteligencia). También el individuo aparece con la bandera norteamericana. El agente P contó que en la noche del 18 de enero de 2015 fue a Puerto Madero y eso indicaría -según lo que hace trascender la fiscalía- que se sabía que Nisman estaba muerto en el baño. En verdad, el espía concurrió a medianoche: el cuerpo había sido encontrado casi dos horas antes y ya se conocía el desenlace. Por lo tanto, que P haya ido a la puerta del edificio Le Parc, una medida que la AFI toma por protocolo cuando sucede algo importante, no significa nada. También mencionan que otro agente estuvo ese fin de semana en Puerto Madero. El espía no sólo contó con quién estuvo tomando un café, sino que pagó con su tarjeta. 
 
El inexistente comando iraní. De manera asombrosa, transcurridos ocho años, fuentes de la fiscalía difunden que en aquel enero de 2015 se estaba siguiendo la presencia de un grupo iraní en Buenos Aires. Página/12 consultó a quienes estaban al frente de la AFI y señalaron que "es absolutamente falso. Siempre había alertas por hechos en otros países del mundo, pero no se seguía a ningún grupo. Es ridículo que esto aparezca ocho años después. Todo muestra que es una mentira". Efectivamente nadie se lo mencionó jamás a la fiscal que trabajó la investigación, Viviana Fein, ni tampoco en los años en que el expediente pasó después a Comodoro Py. Ni siquiera Horacio Antonio Stiuso -el exjefe de espías ferozmente enfrentado a Cristina Kirchner, que lo echó de su puesto- mencionó la existencia de esa investigación. Y Stiuso ya declaró tres veces en la causa. En total, se calcula que en 20 años, desde los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA hasta la muerte de Nisman, hubo unas 170 alertas. En enero de 2015 se produjo una alerta por el atentado contra la revista francesa Charlie Hebdo, perpetrado por franceses de origen sunita, vinculados a Irak y a Al Qaeda, sin relación alguna con los iraníes de Hezbollah.
 
Diego Lagomarsino. Como todos los 18 de enero, la fiscalía difunde que las dudas sobre el técnico informático no están disipadas. El punto de partida ya es delirante: ninguna persona en su sano juicio aporta un arma, que está registrada a su nombre, para cometer un crimen. Menos todavía un hecho que tendría enorme repercusión mundial. Pero, además, Lagomarsino declaró al día siguiente de la muerte de Nisman y todo lo que dijo se comprobó por las cámaras de los peajes, las del complejo en el que vivía, las del edificio Le Parc y las comunicaciones vía chat. Hay una duda respecto de un mensaje del sábado 17 a la mañana, pero no está claro el informe pericial. El objetivo de introducir la incógnita es instalar la idea de que Nisman no le pidió prestada el arma a Lagomarsino, sino que hubo una comunicación anterior. Frente a eso, las investigaciones demostraron que Nisman buscaba un arma. Se la pidió a Rubén Benítez, su custodio de mayor confianza. E intentó pedírsela al comisario Ricardo Bogoliuk, con quien mantenía una vieja relación, pero estaba en Mar del Plata. Está probado que ese sábado a la tarde, Lagomarsino se fue de Le Park a las 20.30 con 54 segundos. Después de esa hora, Nisman todavía chateó y habló por celular.
 
* Las cámaras no funcionaban. Los voceros de la fiscalía difunden la delirante versión de que las cámaras de Le Parc no funcionaban y por lo tanto no se vio quién entró o salió. La realidad es que la inmensa mayoría de las cámaras, 80 de 101, funcionaban y registraron los movimientos. Eso permitió saber no sólo quién llegó y se fue del complejo, sino también quién subió por el ascensor. Al punto que están registrados los movimientos de Lagomarsino, de los custodios de Nisman y, cuando el fiscal no respondía a los llamados, el ingreso de la madre de Nisman, Sara Garfunkel, de los médicos, el cerrajero, la fiscal Viviana Fein, el juez Manuel De CamposSergio Berni -quien llegó cuando el magistrado ya estaba-, los peritos y todo el resto del personal que actuó en el caso.
 
La versión de que las cámaras no funcionaban se difunde porque el punto clave es que nadie, ni la fiscalía ni el juzgado ni ningún perito, ha trazado siquiera una hipótesis sobre cómo pudo ingresar alguien -un comando dice la Gendarmería- al complejo de Le Parc, cómo subió al piso 13º, cómo ingreso a un departamento que estaba cerrado por dentro y cómo entró y salió de un baño en el que no hay una sola pisada ni una huella ni rastros de ninguna pelea. Tampoco fuera del baño se encontró una huella o una gota de sangre.
 
La Gendarmería trató de dibujar que a Nisman le suministraron una droga, ketamina, pero no pudo determinar cómo hicieron porque en el cuerpo no se encontraron pinchazos ni rastros de una inyección, ni pudieron establecer cuánto le dieron. Lo insólito es que la Gendarmería -que no hace autopsias- dictaminó que al fiscal le rompieron el tabique nasal, algo desmentido por la autopsia y por una junta de quince médicos. 
 
Por Raúl Kollmann
 
Fuente: Página 12
 

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22-10-2025 / 11:10
A cinco días de las elecciones legislativas de medio término, la economía argentina volvió a quedar atrapada en un torbellino de tensiones cambiarias y el Banco Central debió volver a intervenir para que el dólar mayorista no superara el techo de la banda de flotación.
 
Ni las intervenciones del Tesoro de Estados Unidos, ni la firma del swap con Washington, ni el anuncio de una recompra de bonos alcanzaron para calmar la incertidumbre del mercado, que se mueve bajo una sola lógica: cubrirse como sea ante el riesgo electoral, aun pagando precios récord por el dólar y desarmando posiciones en acciones y bonos soberanos.
 
El sueño de Javier "el Cipayo" Milei de conseguir un megacrédito internacional empieza a tambalearse. Los gigantes financieros de Wall Street pusieron el freno y exigen garantías concretas antes de liberar los 20 mil millones de dólares prometidos. En la Casa Rosada, el discurso libertario suena fuerte, pero los bancos no compran humo: quieren saber quién paga si el país vuelve a tropezar con su historia de impagos.
 
El plan oficial buscaba armar una línea de financiamiento para reforzar reservas y dar aire al Gobierno, pero el entusiasmo se pinchó rápido. Desde el JP Morgan hasta el Citi, todos coincidieron en algo: Argentina necesita mostrar activos reales o un respaldo estatal sólido, algo que Milei se resiste a ofrecer en su cruzada contra el "Estado elefante".
 
La tensión se siente en los despachos. Mientras el ministro Luis "Toto" Caputo negocia contrarreloj, los operadores financieros miran los indicadores y ven lo mismo que los argentinos: un déficit que sigue sin cerrarse y un dólar que sube como fiebre sin Paracetamol. Cada día sin definición profundiza la desconfianza y pone más presión sobre el presidente, que esperaba anunciar el acuerdo como una victoria política.
 
Para los banqueros, el problema no es ideológico sino contable. Quieren garantías, y las quieren por escrito. Sin eso, los 20 mil millones seguirán siendo una promesa tan etérea como las teorías de "mercado libre" que Milei repite frente a los micrófonos. En el país ya se habla de "default técnico disfrazado de negociación", y los rumores empujan los bonos argentinos a la baja.
 
Desde su entorno intentan minimizar la situación, pero las fuentes financieras son tajantes: el préstamo no está cerrado y no lo estará hasta que el Gobierno muestre números concretos. Entre tanto, en los pasillos del poder ya suena un murmullo incómodo: "Si ni los bancos le creen, ¿Quién va a prestarle a la Argentina?"
 
El Banco Central tuvo que vender divisas de las reservas, ya casi exhaustas, para que la demanda mayorista no hiciera volar el techo de la banda cambiaria. Los anuncios oficiales pasan desapercibidos.
 
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21-10-2025 / 11:10
El yanqui Donald Trump hizo un demoledor diagnóstico sobre la desatrosa situación económica en la Argentina para justificar el "rescate" al gobierno anarco capitalista de Javier "el Cipayo" Milei, un tema que le está generando muchas críticas internas. "No tienen nada, están muriendo", afirmó el presidente. Con ese análisis, el swap no alcanzó, caen las acciones y el dólar quedó a 1% de la banda.
 
Cuestionado por una periodista por la posibilidad de que EEUU compre carne argentina, una medida que perjudicaría a los productores estadounidenses como ya pasó con la soja, Trump se ofuscó y respondió: "Señorita usted no sabe nada de esto, Argentina está luchando por su vida". "Están luchando por su vida. A Argentina no los beneficia en nada. ¿Entiendes lo que eso significa? No tienen dinero, no tienen nada. Están luchando muy duro por sobrevivir, están muriendo", justificó Trump. Lo dijo a pesar de que no se vean cadáveres en las calles.
 
Trump dijo que intentará ayudar a la Argentina a "sobrevivir en un mundo libre" porque le "gusta" el presidente Milei. "Creo que está intentando hacerlo lo mejor que puede, pero no hagas que parezca que lo están pasando bien, están muriendo. Están muriendo", lanzó. Se trata de la segunda vez en menos de una semana que el presidente de EEUU intenta ayudar al chupamedia Milei, pero lo termina hundiendo.
 
El martes pasado, durante la reunión en la Casa Blanca, le reiteró el apoyo, pero advirtió que está atado al resultado de las elecciones del 26 de octubre. "Si pierde, no seremos generosos con la Argentina", dijo Trump generando un desplome en los mercados. El gobierno de Milei tuvo que salir a aclarar por todos lados que se refería a las elecciones de 2027, pero Trump reiteró en sus redes que se refería a las de medio término. Días después, Milei se enojó con un periodista que le preguntó sobre esa frase y enojado respondió que fue malinterpretada por el Grupo Clarín.
 
Las palabras del mandatario yanqui obligaron a una rápida reacción oficial. El vocero presidencial, Manuel "Cara de Piedra" Adorni, buscó relativizar el impacto y pidió "entender el contexto". Sin embargo, terminó admitiendo que "claramente no somos un país al que le vaya bien", al enumerar inflación mensual del 2%, riesgo país en torno a los 1.000 puntos y un clima electoral enrarecido.
 
El Banco Central (BCRA) firmó el acuerdo de swap con EE. UU. por U$S 20.000 millones. A pesar del anuncio, el riesgo país se ubicó por encima de los 1000 puntos, los ADRs de empresas argentinas cayeron hasta 5% y el dólar cerró en $1495. Otro anuncio de la Secretaría de Finanzas, de toma de deuda con el JP Morgan, hizo revertir algo la caída de bonos. No alcanzó con el Tesoro, se suman los "bancos internacionales amigos" al saqueo y la rapiña.
 
Mientras Trump describió a la Argentina como un país "sin dinero" y "peleando por sobrevivir", la respuesta libertaria se redujo a relativizar el golpe y aceptar, a medias, el diagnóstico externo. Como sea, el mercado parece ya no creer en las promesas de ayuda de Trump y espera hechos concretos. Ni siquiera las intervenciones de Scott Bessent comprando pesos han logrado frenar la volatilidad del dólar.
 
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20-10-2025 / 10:10
La relación entre José Luis Espert y Fred Machado, el acusado por narcotráfico que financió su campaña presidencial en 2019, sigue complicando a La Libertad Avanza, aunque el economista, al que todavía defiende Javier "Cipayo" Milei, ya no encabeza la lista libertaria oficialista. En el último reportaje que otorgó el día que se confirmó su extradición a los Estados Unidos, se reveló el mensaje que Machado le pasó al Gobierno. Soltó una bomba que hizo temblar a más de uno en La Rosada.
 
En una entrevista de ocho horas con la periodista Caro Fernández, de Splendid AM 990, lanzó una advertencia que suena a ultimátum: "Si hablo, se cae el país". Con la extradición a Estados Unidos autorizada por la Corte Suprema, Machado no se guardó nada y apuntó directo al corazón del poder libertario, salpicando a figuras como José Luis Espert, Patricia Bullrich y Alberto Weretilneck con acusaciones que, de probarse, podrían destruir al Gobierno de Javier Milei.
 
El empresario, con un tono que mezcla bronca y desesperación, mandó un mensaje filoso a Santiago Caputo, estratega clave de Milei: "A Santiago Caputo le hago llegar un mensaje: Yo no quiero ir a Estados Unidos. Si esto explota, yo fundo todo. Yo hablo y se cae el país mañana". La respuesta fue: "Mensaje recibido". ¿Qué sabe Machado que pone tan nervioso al entorno presidencial?
 
Con Espert, su exaliado, no fue menos duro. Financió su campaña en 2019, pero ahora lo acusa de darle la espalda. "Espert no tendría que haberme negado. ¿Por qué me negó?", dijo, recordando una advertencia que le hizo en marzo de 2021 sobre los riesgos que corrían. "Le expliqué que irían por él. Pero no me escuchó", disparó con amargura.
 
Las acusaciones también alcanzaron a Patricia Bullrich. Según Machado, habría una triangulación de fondos para su campaña presidencial de 2023, con más de 3 millones de pesos movidos a través de una empresa de la familia Bada Vázquez, de los cuales al menos 215.000 pesos habrían ido a parar a su campaña.
 
Sobre Weretilneck, señaló un supuesto entramado de negocios en Río Negro, con permisos de explotación de arenas silíceas otorgados a Claudio Cicarelli, presunto testaferro del gobernador.
 
En un intento por limpiar su nombre, Machado insistió: "Es una cuestión de plata, no de droga". Sin embargo, la noticia de su extradición lo desmoronó. Entre el ladrido de sus perros y la tensión del momento, suplicó a Fernández: "No me dejes solo". Horas después, un operativo policial lo trasladó para enfrentar su destino en Estados Unidos.
 
La Opinión Popular
 

19-10-2025 / 08:10
Entre el colapso económico, la pérdida de relato y el avance de sus propios aliados, Javier "el Cipayo" Milei enfrenta el tramo final de la campaña convertido en símbolo de su propio fracaso: un presidente sin respuestas, cercado por la realidad y por quienes financiaron su ascenso. El plan "llegar" se quedó sin nafta cuando todavía falta una semana para alcanzar la meta. La impotencia es la tónica en la recta final antes de unas elecciones que se convirtieron en un delicado plebiscito sobre el futuro del gobierno y del país.
 
El proyanqui Milei volvió de Washington DC con una hoja que dice "amigo" y el fibrón que usó Donald Trump para estampar esa dedicatoria. A su regreso dio dos entrevistas en las que se peleó con sus interlocutores (le dijo "marxista" a Eduardo Feinmann y a Esteban Trebucq que le hacía el "caldo gordo a los psicópatas kirchneristas") y confesó que no tiene una solución para los problemas de los argentinos.
 
- El ochenta por ciento apenas si puede llegar a fin de mes y el sesenta por ciento, setenta, llega al día veinte. Les falta dinero en el bolsillo.
- ¿Qué quiere? ¿Que lo emita?
- No, yo no...
- A ver, entonces, emitiendo no se arregla. ¿Cómo quiere que lo arregle? Vamos, dígame. ¿Cómo le pongo plata a la gente?
- El economista es usted.
- No, bueno, pero digo o sea, a ver, digamos.
 
Un día más tarde insistió:
 
- ¿Y la gente que no puede esperar, presidente?
- A ver. A ver, pero, de vuelta. Te hago una pregunta, no puede esperar, a ver, ¿cómo lo resolvemos?
- Es que yo no lo sé.
- No, bueno, entonces.
- Sólo le pregunto.
- No, bueno, pero si vas a hacer el punto, digamos, a ver, empecemos a discutir cómo se resuelve.
 
Para Milei la escasez y la mala calidad de vida de millones de personas es en todo caso un problema intelectual, teórico, en el que no tiene demasiado interés. Dos años después de asumir le sugiere a su interlocutor (no un funcionario, no un asesor, ni siquiera un consultor sino un periodista en el contexto de una entrevista televisiva en vivo) que empiece la discusión.
 
Decir que no le quita el sueño sería una exageración: ni siquiera lo considera un problema, algo que deba resolver. La economía se encargará de hacerlo, cuando deje de existir el riesgo kuka. Suena estúpido, pero es exactamente el argumento presidencial, palabra por palabra.
 
Para la mayoría de los argentinos se trata en cambio de una cuestión muy concreta, a veces de vida o muerte. Este miércoles, en Congreso, en la marcha semanal por el reclamo de una mejora en las jubilaciones, una pareja daba su testimonio a las cámaras de televisión.
 
Él está atravesando un tratamiento contra el cáncer, le sacaron la cobertura de los remedios para aliviar los dolores y los vómitos cuando le hacen quimioterapia. En el hospital sólo le entregan la mitad. Desde los estudios, la cronista sugiere que den un "alias" bancario para recibir transferencias de gente que pueda ayudarlos. No tienen teléfono: tuvieron que venderlo para comprar medicinas. Milei no tiene una respuesta para ellos ni va a tenerla. 
 

18-10-2025 / 09:10
Un 17 de octubre en la recta final de una campaña electoral, donde dos de sus figuras principales son el secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent por el oficialismo y por la oposición la expresidenta Cristina Kirchner con prisión domiciliaria. Que dos de las figuras que más pesan en una puja electoral sean el ministro de Economía de una potencia extranjera y la principal dirigente de la oposición proscripta, constituye un síntoma de descomposición del sistema político.
 
Con las ventas de dólares del Tesoro de los Estados Unidos y con una catarata de mensajes con promesas de campaña, Bessent se puso al hombro la campaña del oficialismo. Prometió como si fuera candidato, pidió el voto para las listas de los falsos libertarios y aseguró que, si ganaban los seguidores de Javier "el Cipayo" Milei, Argentina sería bendecida por Estados Unidos. El gobierno casi no mostró sus candidatos. El yanqui Bessent ha sido hasta ahora su carta principal.
 
La intervención del alto funcionario norteamericano no fue oculta, sino que ha sido pública, ciertamente impúdica, y en situaciones normales se juzgaría como intervencionismo de una potencia en la política interna de otro país. Lo paradójico ha sido que no fue una intervención impuesta o forzada, sino solicitada por el mismo presidente Milei.
 
Si el oficialismo no tiene candidatos más fuertes que el ministro de Economía de una potencia extranjera y, si al mismo tiempo, la principal dirigente de la oposición fue encarcelada, son datos muy fuertes que al cruzarlos inducen a pensar que la expresidenta fue proscripta porque sus adversarios son incapaces de generar un liderazgo similar y tienen que recurrir a una potencia extranjera que cobrará caro por su intervención.
 
La intervención de Bessent puso en evidencia la falta de propuestas del oficialismo que, de esta manera, lo único que se le ocurrió fue ofrecer una dependencia ruinosa en lo material e indigna en lo moral. La dependencia colonial del gobierno con Washington es evidente porque es el único recurso que tiene en política y en la economía.
 
Los últimos diez días mostraron a un gobierno desesperado en esa dependencia. Todo el equipo económico -la mayoría de ellos tienen residencia en Estados Unidos- en procesión entre Washington y Nueva York para rogar por ayuda. Como si fueran creyentes que le piden a la virgen de Luján. Con la diferencia que Estados Unidos no es la virgen y cobrará caro cada gesto.
 
La falta de cuadros políticos, de dirigentes y candidatos en el oficialismo agrandó aún más el liderazgo que mostró Cristina Kirchner en la convocatoria al acto de ayer. La expresidenta planteó que así como en 1945, la consigna fue "Braden o Perón", en las próximas elecciones se trata de "Milei o Argentina".
 
Mientras la multitud se congregaba en Constitución, frente al edificio donde Cristina Kirchner permanece prisionera, el oficialismo tenía dificultades para reunir un puñado de simpatizantes en Caseros, en el conurbano. Al mismo tiempo se juntaba a protestar un grupo espontáneo de vecinos y se repitió la escena que frustró la mayoría de los actos de campaña de Milei.
 
El presidente se movilizó en helicóptero y alcanzó a explicar con un megáfono que no había que abandonar en mitad del río. Su discurso se resumió en que hace falta más esfuerzo. Pero el presidente estuvo pocos minutos y no hizo la caminata que estaba prevista. Reaccionó a la defensiva tras un discurso a la defensiva: "Hay que aguantar".
 

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