Nacionales - 16-11-2022 / 10:11
TIRONEOS ENTRE LA CORTE SUPREMA Y EL SENADO DE LA NACIÓN
Cristina desafía a Rosatti y propone que el Senado vote en el recinto tres senadores peronistas para la Magistratura
La vice presidenta Cristina Fernández propuso a tres senadores peronistas como representantes del Consejo de la Magistratura hasta 2026, dos por la mayoría y uno por la segunda minoría del recinto, pese al fallo de la Corte que la semana pasada declaró ilegítima la división del bloque Frente de Todos en abril para sumar un representante y derivó en un reclamo del PRO para darle ese lugar al macrista Luis Juez.
El sistema republicano establece la división de poderes. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia, controlada por el macrismo, avanza sobre facultades legislativas, que le están vedadas. En diciembre del año pasado la Corte derogó la ley del Consejo de la Magistratura sancionada en 2006 y avanzó aún más: le dio un plazo de 120 días al Congreso para sancionar una nueva norma, pasado el cual volvería a regir la ley derogada en aquel año. Ello fue lo que ocurrió y hoy está vigente aquella ley, que establecía que el CM se integra con 20 miembros y es presidido por el presidente de la Corte. Horacio Rossatti pasó a tener la suma del poder dentro de la Justicia, al presidir la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura.
Por ello, la vice presidenta Cristina Fernández propuso a tres senadores peronistas como representantes del Consejo de la Magistratura hasta 2026, dos por la mayoría y uno por la segunda minoría del recinto, pese al fallo de la Corte que la semana pasada declaró ilegítima la división del bloque Frente de Todos en abril para sumar un representante y derivó en un reclamo del PRO para darle ese lugar al macrista Luis Juez.
El decreto con las designaciones fue firmado este martes por Claudia Ledesma (Cristina ejerce la presidencia por el viaje de Alberto) y será revalidado el miércoles en el recinto por la mayoría oficialista, durante la sesión para sancionar el presupuesto. No es habitual que estás designaciones se traten en el pleno, pero Cristina intenta sumar un elemento para que el presidente de la Corte y de la Magistratura, el cortesano Rosatti, tome los juramentos y no se judicialicen los nombramientos, lo que dejaría sin senadores el organismo que selecciona y sanciona a los jueces.
El tema a dilucidar no es tanto este mandato que vence el próximo viernes, sino cómo deben considerarse las mayorías y minorías en el Senado para la elección de sus representantes ante el CM, para el período 2022-2026. La Corte resolvió que los bloques son los constituidos al momento del recambio legislativo, el 10 de diciembre de 2021, sin embargo, es el reglamento del Senado el que tiene validez para esa cuestión. Nuevamente, la Corte macrista se entromete en asuntos internos de otro poder del Estado. Incluso la oposición realizó cambios en su bloque después de esa fecha.
El problema excede la designación de un miembro más o menos en el CM, ya que ni el oficialismo ni la oposición cuentan con la mayoría necesaria para decidir sobre la designación o destitución de un juez o una jueza. Lo preocupante es que el organismo se encuentra paralizado desde hace años, a pesar del fallo de la Corte que resolvió que volviera a tener 20 integrantes, en lugar de los 13 de la ley anterior. El fundamento judicial fue que había que respetar el "equilibrio" entre los estamentos, cuestión que tampoco se ha resuelto, a tenor de la disputa actual.
La paralización del CM impide designar titulares en los tribunales que se encuentran vacantes en la Justicia Nacional, un 25 por ciento. Y se deben resolver situaciones irregulares de magistrados designados "a dedo" por el macrismo, como Bertuzzi y Bruglia en la Cámara de Casación, mantenidos allí por decisión (otra más) de la Corte Suprema.
Es evidente la grave crisis que atraviesa el Poder Judicial de la Nación, presidido por una Corte alineada con los poderes concentrados económico y mediático, y a favor de la oposición macrista. Durante el gobierno de Macri funcionó una "Mesa Judicial" que iniciaba causas para perseguir opositores y decidía la destitución de jueces que hubieran fallado en contra de ese gobierno. Así fue removido el juez laboral Luis Arias, que dictó sentencia en contra de los tarifazos en los servicios públicos del entonces ministro de Energía y ex CEO de Shell, Juan José Aranguren.
La Opinión Popular
La jugada desconcertó a Juntos por el Cambio que inició una consulta con los abogados que los asesoran, mientras que en la Justicia destacaron la picardía de Cristina de lanzar la jugada sabiendo que el miércoles es feriado en tribunales por el Día del Judicial, lo que achica el margen para la interposición de una demanda de Luis Juez o los bloques opositores.
Si el trío de senadores kirchneristas asumiera, la vicepresidenta podría bloquear las ternas y los pedidos de juicio político hasta 2026, aún si en 2023 la oposición ganara la elección presidencial. Necesitaría mantener su alianza con el representante de los jueces Alberto Lugones.
El decreto del Senado cita el fallo de la Corte que habilitó la realización de sesiones remotas en abril de 2020, basado en el artículo 66 de la Constitución que delega en cada Cámara la definición de sus reglamentos.
De esta manera, se oficializa la elección de los tres consejeros actuales del interbloque Frente de Todos cercanos a Cristina: María Inés Pilatti Vergara, Mariano Recalde y Martín Doñate. La UCR propone al correntino Eduardo Vischi, apadrinado por el gobernador Gustavo Valdés.
Recalde y Pilatti Vergara representan al bloque Frente Nacional y Popular; y Doñate a Unidad Ciudadana. Eran una sola bancada hasta abril pero se partieron cuando la Corte Suprema cambió la composición del Consejo de la Magistratura en un fallo que revitalizó una ley derogada en 2006 y sumó un cuarto lugar para las segundas minorías legislativas.
La semana pasada, un fallo de la mayoría de la Corte Suprema resolvió que la elección de Doñate fue ilegal. Fue firmado por Rosatti, que en abril le había tomado juramento a los nuevos consejeros del Congreso.
Los senadores oficialistas anunciaron que no lo acatarían porque consideraron que la Constitución impide a la justicia interferir en las asociaciones legislativas y así quedó plasmado en el decreto de designación de los consejeros. Además, consideraron que Rosatti no debió firmar el fallo porque al presidir la Magistratura fue juez y parte.
Como los mandatos de todos los representantes del Congreso en la Magistratura vencen el viernes, la semana pasada el presidente del bloque del PRO, Humberto Schiavoni, pidió nombrar a Juez hasta 2026, pero Cristina lo ignoró.
"Rosatti no puede tomarle juramento a los senadores sin una notificación de las presidencias de las cámaras", destacaban en el oficialismo de la Cámara alta. En el máximo tribunal ya decidieron que en los próximos días incorporarán a los consejeros elegidos por los estamentos de abogados, jueces y académicos y la situación de los senadores se tratará en el acuerdo del próximo jueves, confirmaron a LPO fuentes judiciales.
En el Senado, el peronismo tiene otra lectura. Calculan que sin senadores el Consejo podría paralizarse, aunque si hay cambio de gobierno en diciembre de 2023 la Corte podría reabrir el juego para los nombramientos. "No nos va a quedar otra que ganar las elecciones. Con el candidato que sea", concluían.
Como sea, Cristina también definió este martes los suplentes: la santiagueña Claudia Ledesma y el pampeano Pablo Bensusán en el Frente Nacional y Popular; y la mendocina Anabel Fernández Sagasti en Unidad Ciudadana. Por la UCR la reserva quedó para la jujeña Silvia Giacoppo.
No son cargos menores: asumen si vence el mandato de un titular y evitan que una nueva mayoría legislativa defina el reemplazo para otro bloque. Fue lo que pasó en Diputados cuando asumió Mauricio Macri.
Fernández Sagasti tiene mandato hasta 2027, por lo que su inclusión es para que en 2025 pueda reemplazar a Doñate y no surjan nuevas interpretaciones reglamentarias. Así de ajedrecística es la pelea por las sillas de la Magistratura.
Antes del viernes Diputados debe definir sus cuatro consejeros y dos serían para el Frente de Todos, que hasta ahora tuvo uno. Sumaría otro por ser el bloque más grande y los otros quedarían para la UCR y el PRO.
En el oficialismo aseguran que al menos hasta ahora no hubo objeciones, porque la vacante que ocuparán es la de Graciela Camaño, de un bloque minoritario, que no es la segunda minoría. El decreto de Cecilia Moreau llegará en estos días.
Por Mauricio Cantando
Fuente: La Política Online