La Opinión Popular
                  12:54  |  Jueves 18 de Septiembre de 2013  |  Entre Ríos
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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 12-12-2021 / 09:12

El gobierno debería prestarle más atención a un peronismo para el campo argentino

El gobierno debería prestarle más atención a un peronismo para el campo argentino
Lo que resulta indudable es que el peronismo no puede resignarse a ser la suma táctica de la Tercera Sección Electoral y el Norte empobrecido, y que debe elaborar una visión del desarrollo que incluya al campo e interpele a su sociedad.
Lo que los porteños que no podemos distinguir una planta de soja de una de maíz llamamos simplemente "el campo" constituye en realidad una trama socioeconómica tan heterogénea como densa, que incluye desde los puertos de las multinacionales sobre el Paraná y las grandes propiedades tradicionales a los nuevos pools de siembra, junto a los negocios de venta de maquinaria agrícola, los sindicatos vinculados, las oficinas de los profesionales y, adquiriendo cada día más centralidad, las empresas prestadoras de servicios, en donde se desempeña una creciente población de clase media de ingenieros agrónomos, veterinarios, mecánicos, pilotos de aviones fumigadores, transportistas...
 
El campo son los grandes terratenientes pero también los medianos y pequeños propietarios, surgidos con la partición hereditaria establecida en el Código Civil de Vélez Sarsfield y las leyes de congelamiento de los arrendamientos impulsadas por Perón en los años 40. El campo actual es también el resultado de un proceso de medio siglo, que comenzó con la "revolución verde" de los 60 y continuó con la introducción de la siembra directa en los 90.
 
Felipe Solá habrá cometido muchos errores en su vida política, pero Argentina le debe eterno agradecimiento por la temprana decisión de autorizar los transgénicos. En conjunto con la reducción del costo de la tecnología posibilitada por la convertibilidad, la siembra directa produjo un salto de productividad que se terminaría de consolidar una década después, cuando la demanda asiática impulsaría hacia arriba los precios de los commodities.
 
Esta transformación silenciosa desplazó el régimen de creación de riqueza rural, que tradicionalmente giraba alrededor de la tierra, a la tecnología, que hoy es no sólo la mediación que habilita los cambios productivos sino el principal vector de acumulación capitalista.
 
Insisto con este punto, desarrollado en profundidad por las investigadoras Carla Grass y Valeria Hernández (1), que me parece crucial: la creación de riqueza pasa menos por la tierra (que se hereda o se compra) que por la tecnología (que hay que saber aplicar profesionalmente, sufre de obsolescencia y por lo tanto hay que renovar, reinvirtiendo).
 
Las ciudades medianas son las protagonistas de esta extraordinaria transformación de la ruralidad. Todavía hablamos de Olavarría, Junín o Venado Tuerto como "pueblos", cuando en realidad podemos estar haciendo referencia a una ciudad de 100 mil habitantes con una concesionaria Toyota, locales multimarca que ofrecen los mismos jeans Jazmín Chebar que en los shoppings porteños y un PIB per cápita equivalente al de Recoleta o Madrid.
 
En la ciudad cordobesa de Villa María, que combina la prosperidad del campo con el influjo cultural de su universidad, no hay villas. Repito: en Villa María no hay villas. Asimismo, el chacarero de alpargatas y boina recién bajado del tractor tal vez disponga de: dos camionetas de 50 mil dólares, una sembradora de precisión que compró en Expoagro a 600 mil dólares, una casa en Sunchales que comparte con su mujer y un departamento en Rosario, frente al río.
 
Un peronismo con proyecto nacional no puede desentenderse del campo ni resignarse a perder sus votos. Al "peronismo pampeano" el gobierno debería prestarle más atención, atendiendo a sus particularidades de tradición y origen.
 
Por José Natanson
 

 
El mercado ya se ha enterado. Veamos si no el mapa de las sucursales de Cardón, una marca de ropa a mi gusto demasiado proclive al marrón y la gamuza pero que sintetiza este nuevo imaginario rural-urbano, y que funciona como una muestra de la prosperidad de los "pueblos del interior". La distribución de sus locales es una cartografía precisa de la zona núcleo; sus precios, un indicador de su prosperidad: camisa de lino Parera 15.400 pesos, piloto Río Grande 23.980 pesos, saco Biela ¡53.990 pesos!
 
Los datos son estimativos, porque justamente una de las características del nuevo campo es que no queda del todo claro dónde empieza y dónde termina, pero se calcula que explica alrededor del 10% del PIB, otro tanto de la recaudación tributaria, 20% del empleo (si se incluye empleo directo e indirecto) y el 70% de los ingresos de divisas (2).
 
Cualitativamente, el campo es el sector más dinámico de la economía argentina y uno de los pocos sectores verdaderamente competitivos a nivel global; el único, por otra parte, que genera temor en los países desarrollados. En Serotonina, la novela en la que Michel Houellebecq describe la frustración de las clases rurales de la Francia profunda, un agricultor anticipa sus temores ante un posible acuerdo Mercosur-Unión Europea.
 
-Las exportaciones agrícolas de Argentina se disparaban literalmente desde hacía unos años, en todos los sectores, y no se habían acabado, los expertos estimaban que Argentina, con una población de cuarenta y cuatro millones de habitantes, podría a largo plazo alimentar a seiscientos millones de hombres, y el nuevo gobierno lo había entendido bien, con su política de devaluación del peso, estos cabrones literalmente iban a inundar Europa con sus productos, además no tenían ninguna legislación restrictiva sobre los transgénicos, estaba claro que estábamos en problemas.
 
-Su carne es deliciosa -objeté en un tono conciliador.
 
-Si sólo fuera la carne -respondió, cada vez más sombrío-: los cereales, la soja, el girasol, el azúcar, el maní, el conjunto de las producciones frutícolas, carne por supuesto e incluso leche: en todos estos sectores Argentina podría hacerle un gran daño a Europa, y eso en un breve lapso de tiempo.
 
 
Elogio del cordobecismo
 
Los clásicos límites entre lo rural y lo urbano se difuminaron y hoy el campo se articula cada vez más con las finanzas, la industria y los medios de comunicación, como quedó demostrado durante el conflicto entre el kirchnerismo y los productores rurales de 2008. Dotado de una novedosa conciencia para sí, el campo se transformó, a partir de esa disputa fundacional, en una fuerza sociocultural que funcionó como el eje de sucesivas coaliciones anti-kirchneristas, ganadoras de 5 de las últimas 7 elecciones nacionales. Por eso me parece que vale la pena tratar de entenderlo.
 
El campo retomaba así una larga tradición de reclamos contra el Estado. Como reconstruye Roy Hora, tan lejos como en el verano de 1911-1912 el campo produjo su primera rebelión fiscal articulada, en este caso en rechazo a un incremento del impuesto rural en la provincia de Buenos Aires.
 
Al igual que durante el conflicto del 2008, los productores se sentían protagonistas del gran momento que atravesaba la economía argentina, la de mayor crecimiento del mundo en el contexto de la "primera globalización", y rechazaban los aumentos impositivos.
 
Para complejizar una historia que jamás es lineal, Hora recuerda que la rebelión desafiaba al Partido Conservador, en ese entonces en el poder, y que de hecho el campo apoyó la candidatura de Hipólito Yrigoyen, cuya lista a diputados en la provincia de Buenos Aires estuvo encabezada por... un terrateniente (Leonardo Pereyra Iraola).
 
Volvamos al presente. El campo supo traducir su peso económico en potencia política, y detrás de ello está el hecho de que ya no se autopercibe, ni es percibido por buena parte de la sociedad, como un resabio conservador, oligárquico y rentista, como en el pasado.
 
Hoy es visto como un sujeto dinámico y competitivo, generador de divisas genuinas y adaptado a las exigencias del capitalismo globalizado. Importa poco si el campo es realmente así, lo central es que se ve de esta forma y que un sector importante de Argentina coincide con esta mirada.
 
Y que esta ética protestante de espíritu capitalista sintoniza casi naturalmente con ciertos tópicos del discurso opositor: el progreso concebido como modernización, el emprendedorismo como antítesis de la dependencia estatal y una inserción en el mundo que no cuestiona el rol subordinado en la división internacional del trabajo.
 
Como ya señalamos, el mapa del voto al macrismo coincide matemáticamente con el mapa del monocultivo, lo que no le impidió al peronismo conservar -y a veces recuperar- estos territorios, a punto tal que las provincias de la zona núcleo -Córdoba, Santa Fe, San Luis, La Pampa- están bajo el dominio de gobernadores peronistas.
 
A este "peronismo pampeano" el gobierno debería prestarle más atención, atendiendo a sus particularidades de tradición y origen. Detengámonos por un momento en el más exitoso de todos, el cordobecismo de Jose Manuel de la Sota y Juan Schiaretti.
 
Como sostiene el historiador cordobés César Tcach (3), el peronismo provincial nació a partir de la convergencia de dos sectores: Acción Católica, que a partir de la fuerte tradición cordobesa proponía una nueva cara social para la Iglesia como camino para evitar el avance del comunismo, y un conjunto variopinto de caudillos y caudillejos del viejo conservadurismo, que aportaron el know how de los fiscales, las campañas y los votos, lo que hoy llamaríamos el aparato.
 
El conservadurismo originario del peronismo cordobés era tal que el 14 de julio de 1949 el diputado provincial Novillo Sarabia justificó la negativa de su bloque a prestar homenaje a la Revolución Francesa alegando en su discurso que prefería... la Edad Media.
 
Este conservadurismo primigenio, construido en buena medida como contrapunto al progresismo del radicalismo sabattinista y alentado por un primer Perón más pragmático de lo que muchos quieren aceptar, derivó en el flexible peronismo pro-mercado de De la Sota-Schiaretti.
 
Para el politólogo Federico Zapata (4), la clave del éxito del cordobecismo es haber logrado sintonizar con lo que denomina la "democracia de los farmers", esa corriente de piamonteses, lombardos y friulianos que poblaron Córdoba desde comienzos del siglo XX (también Santa Fe, San Luis, La Pampa).
 
No eran, sostiene Zapata, inmigrantes, sino colonos, es decir personas que dejaban una sociedad preexistente para construir en conjunto una nueva, dotados por lo tanto de un propósito colectivo y una voluntad de cambio (el ideal del colono es transformar el medio al que llega, mientras que la aspiración del inmigrante es superar el shock cultural y asimilarse).
 
La tesis de esta nota es que un peronismo con proyecto nacional no puede desentenderse del campo ni resignarse a perder sus votos.
 
Movidos por un agresivo espíritu emprendedor, una fuerte compulsión por el trabajo y una vocación casi calvinista por el ahorro (y su contraparte, la inversión), los colonos crearon cooperativas, empresas y asociaciones, un entramado de "capitalismo desde abajo" al que el Estado cordobés tuvo la inteligencia de adaptarse: el radicalismo de Eduardo Angeloz-Ramón Mestre y el peronismo de De la Sota-Schiaretti tienen en común la atenuación del componente popular (anti-alfonsinista el primero, anti-kirchnerista el segundo) y un espíritu neoliberal no beligerante.
 
Con matices y diferencias, transformaciones similares experimentaron otros peronismos provinciales, como el de San Luis, bajo el liderazgo modernizante de los Rodríguez Saá; el de La Pampa, con Carlos Verna, y el de Santa Fe: luego de años de dominio peronista bajo la conducción de una dupla al estilo cordobés, la que integraban Carlos Reutemann y Jorge Obeid, el peronismo santafesino sufrió una derrota histórica con el Partido Socialista que los candidatos identificados con el kirchnerismo (Agustín Rossi y Rafael Bielsa) no lograron revertir, hasta que otro dirigente de perfil moderado y sensible a los intereses del campo, Omar Perotti, consiguió recuperar la gobernación.
 
 
Es la hidrovía, estúpido
 
La tesis de esta nota es que un peronismo con proyecto nacional no puede desentenderse del campo ni resignarse a perder sus votos. Martín Rodríguez viene insistiendo desde hace años en la necesidad de "desconurbanizar" el peronismo, que no puede limitarse a ser el partido del AMBA.
 
Agregaría que el tema es "desconurbanizar" hacia dónde, y que un camino posible es hacia la nueva ruralidad. Esto es así por motivos pragmáticos (el 33 por ciento de la última elección) pero también por razones más profundas.
 
El peronismo, la fuerza que en sus tres ciclos largos (Perón, Menem, Kirchner) logró situar a Argentina en el centro de los procesos de modernización del capitalismo, no puede desvincularse de los sectores más dinámicos de la economía: sin caer en el absurdo macrista, que apenas llegó al poder implementó el combo, único en el mundo, de devaluación y baja de retenciones, a tal punto que el propio FMI terminó pidiéndole que las restablezca, el peronismo debería ofrecerle al campo un programa que, en lugar de criticar su intrínseco egoísmo, lo interpele en el marco de una visión más amplia.
 
Esta "desafección estratégica" del peronismo se refleja en cuestiones bien concretas. Por ejemplo, ¿cuál es el enfoque del gobierno sobre la cadena del maní, que produjo 1.150 millones de dólares en la campaña del 2020, de los cuales el 90 por ciento se exportaron, y se convirtió en la economía regional más importante del país, superando a la vitivinicultura (el 80 por ciento del maní que se consume en Europa es argentino)?
 
Sabemos lo que propone el macrismo: retirar al Estado, liberar las fuerzas productivas, desregular y flexibilizar la legislación laboral. ¿Sabemos qué propone el peronismo? ¿Cuál es la "mirada peronista" sobre los nudos de infraestructura, los embotellamientos de camiones en los puertos, el drama de los caminos rurales?
 
¿Cómo puede ser que, sabiendo que expiraba el plazo de concesión, el peronismo haya llegado al gobierno sin un proyecto de Estado sobre la hidrovía, por donde pasan las exportaciones que generan el 80 por ciento de las divisas del país? ¿Cómo puede ser que el Ministerio de Medio Ambiente festeje el prohibicionismo a la cría de salmones en Tierra del Fuego, una provincia que es una aspiradora de dólares, mientras que el Ministerio de Desarrollo Productivo lo lamenta?
 
Por supuesto que hay políticas públicas para muchos de estos temas. El Estado es grande y arrastra miles de déficits, pero no es cierto que "no hace nada". En particular Matías Kulfas viene desplegando un interesante trabajo desde el Ministerio de Desarrollo Productivo; por momentos parece el único funcionario realmente preocupado por conseguir dólares. Sin embargo falta algo más.
 
Es materia discutible si la prosperidad del período 2003-2011 fue consecuencia de una política económica virtuosa o el mero resultado de un contexto internacional favorable, pero lo cierto es que desde hace al menos una década que Argentina perdió la brújula del desarrollo.
 
Quizás porque es cordobés, Zapata elabora una propuesta interesante, a la que llama "biodesarrollismo". Podrá ser esa, u otra, pero lo que resulta indudable es que el peronismo no puede resignarse a ser la suma táctica de la Tercera Sección Electoral y el Norte empobrecido, y que debe elaborar una visión del desarrollo que incluya al campo e interpele a su sociedad.
 
1. Radiografía del nuevo campo argentino. Del terrateniente al empresario transnacional, Siglo XXI, Buenos Aires, 2016.
 
2. http://agro.unc.edu.ar/~economia/wp-content/uploads/2018/03/El-campo-argentino-en-n%C3%BAmeros-2017.pdf
 
3. https://historiasocialargentinaunlp.com.ar/wp-content/uploads/2018/04/cesar-tcach.pdf
 
4. https://panamarevista.com/la-democracia-de-los-farmers/
 
Fuente: Le Monde
 

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18-09-2025 / 09:09
Con una gigantesca multitud desbordando la Plaza del Congreso, la Cámara de Diputados le dio un golpe demoledor al oficialismo. Por una mayoría que superó con creces los dos tercios, rechazó los vetos de Javier "el Loco" Milei a la Emergencia en Pediatría (Ley Garrahan) y al Financiamiento Universitario. Con una mayoría arrasadora, la oposición consiguió lo que antes parecía imposible: voltear dos vetos presidenciales de un solo golpe. Fracasaron todos los manotazos de ahogado del Gobierno de los Hermanos Milei, que espera sin esperanzas el voto del Senado.
 
Milei solo logró sumar unos 60 votos para blindar el veto. Atrás quedaron los 87 "héroes" a los que el presidente había agasajado con una cena el año pasado, luego de que lo hubieran ayudado a blindar el primer veto al financiamiento universitario. La red de alianzas se había roto, y Milei perdía aliados a mansalva. En medio de la campaña electoral, con los armados libertarios que Karina "la Coimera" Milei y Lule Menem constituyó en las provincias para competirle a los gobernadores, los primeros en soltarle la mano fueron los jefes provinciales.
 
Sobre todo, el amplio repudio y la resistencia social pudieron más que la prepotencia y los aprietes del violento Gobierno libertario. Una enorme movilización de miles de trabajadores, estudiantes, jubilados y jubiladas se concentró fuera del Congreso. Son parte de quienes sostuvieron todos estos meses la persistente lucha que impuso esta derrota a La Libertad Avanza. La movilización se replicó en numerosos puntos del país. Hay que seguir ese camino.
 
La Ciudad de Buenos Aires fue escenario este miércoles de una multitudinaria movilización en defensa de la educación pública y la salud. Desde distintos puntos de la capital, columnas de estudiantes, gremios docentes y agrupaciones políticas confluyeron en el Congreso de la Nación para rechazar el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario y a la declaración de Emergencia en Pediatría.
 
Las acciones comenzaron en la noche del martes con un "apagón educativo" organizado por universidades de todo el país, que apagaron sus edificios en señal de protesta. Este miércoles, desde las 17, la Marcha Federal Universitaria tomó las calles porteñas con miles de manifestantes que avanzaron hacia el Parlamento, donde la Cámara de Diputados debatía los vetos de Milei.
 
La protesta también tuvo un fuerte componente sanitario: trabajadores del Hospital Garrahan realizaron un paro y se sumaron a la movilización, en defensa de los recursos destinados a la atención pediátrica. Fue la persistencia de la lucha de las trabajadoras y los trabajadores del Garrahan, que vienen peleando hace meses contra el desfinanciamiento, enfrentando campañas de desprestigio y las mentiras del ministro del área, el empresario Mario Lugones.
 
Entre los dirigentes presentes se destacó el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, quien encabezó la columna del espacio Movimiento Derecho al Futuro. También el senador nacional Martín Lousteau marchó junto a la Unión Cívica Radical, en respaldo al financiamiento universitario y a los fondos para la salud infantil, marcando el pulso de una jornada en la que la defensa de la educación pública volvió a convertirse en bandera de miles.
 
En medio de la terrible paliza, los diputados "héroes" de La Libertad Avanza, el PRO y la UCR con peluca se levantaron y huyeron del recinto. Minutos después, Martín Menem dio por concluida la sesión. Lo que se viene es la modificación de la ley que regula los DNU. Ahí se termina esto de gobernar como un monarca, por DNU y vetando leyes.
 
La Opinión Popular
 

17-09-2025 / 09:09
Javier "el Loco" Milei es un mentiroso consuetudinario. Se dedica a "mandar fruta", hablar sin saber realmente del tema, exagerando, inventando o diciendo cosas sin sentido, con la intención de engañar. Todas las organizaciones especializadas en Educación, Jubilaciones y Discapacidad destruyeron los anuncios presidenciales sobre mejoras para esas áreas. Se basan solo en dibujos numéricos y ajustes encubiertos. Los gremios revelaron que el porcentaje del PBI dedicado a la enseñanza, que fue de 1,48 en 2023 y de 0,88 en 2025, baja al 0,75 en 2026. Los rectores aseguran que se congela el gasto universitario en sus peores niveles.
 
El discurso de Milei por el cual presentó el Presupuesto 2026 está plagado de números mentirosos y mensajes al "mercado", a los grandes empresarios y financistas. A los ricos. El presupuesto reduce fuertemente la partida destinada a cancelar deudas previsionales; mientras que la partida para pagar la deuda pública a los especuladores financieros crece un 20%. Hay deudas y deudas para el Gobierno.
 
Milei aseguró al presentar el Presupuesto 2026 que habrá un aumento del 17% de suba en términos reales (por encima de la inflación) en materia de salud, 8% en materia de educación, y 5% en jubilaciones y en pensiones por discapacidad. Además, anunció que se le asignará $4,8 billones a las universidades nacionales, lo que representa una suba nominal del 13% frente a una inflación proyectada del 10%.
 
Sin embargo, anteriormente, el Presidente reveló que el proyecto presenta "una regla de estabilidad fiscal": "si los ingresos caen o los gastos superan a lo previsto se deberán ajustar partidas para mantener el equilibrio fiscal". Es decir, cualquier variable proyectada en el Presupuesto que se modifique, como una inflación anual de 10% o un dólar debajo de $1.350, "obligará" a Milei a no cumplir con estos aumentos. Además, también lanzó que su proyecto estipula el "menor nivel de gasto sobre PBI de los últimos 30 años". Contradicciones que desnudan que sus promesas son incumplibles.
 
En las últimas semanas, el Gobierno libertario redujo en $40.267 millones las transferencias a las universidades nacionales. De esta manera, Milei terminará 2025 con una reducción del 9,4% real del presupuesto universitario con respecto a 2024 y del 32% frente a 2023. Para equiparar los gastos realizados el año pasado, el Gobierno debería invertir $4,6 billones en lo que resta de 2025 y $6,2 billones para igualar el nivel de 2023. Es decir, la promesa de $4,8 billones para el 2026 no absorbe la pérdida registrada.
 
Si bien Milei prometió que las jubilaciones aumentarán 5% por arriba de la inflación en 2026, no alcanza para equiparar lo perdido durante su gestión. En 2024, el recorte en dicha partida fue del 14%, y sin contar el bono para el haber mínimo cuyo monto está congelado hace 18 meses frente a una inflación superior al 100%.

Además, más allá de su promesa, si la inflación anual es más del 10% como se proyecta, ¿mantendrá el aumento de las jubilaciones 5% por encima de la inflación? "Si los gastos superan lo previsto se deberán ajustar partidas", afirmó en su discurso.

En otros rubros, las partidas presupuestarias en Educación acumulan un ajuste del 41% entre 2023 y 2025, según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA). El 8% anunciado por Milei queda chico. En cuanto a discapacidad, la ANDIS sufrió un recorte del 14%. Sobre este punto, Milei supone una suba del 5% real sobre las pensiones. El proyecto ensaya un recitado de mentiras expresadas en números que no cierran ni aseguran la continuidad de las áreas con normalidad. Lo peor todavía no pasó.

La Opinión Popular


16-09-2025 / 11:09
La bala entró. La derrota electoral en la provincia de Buenos Aires sacudió al Gobierno de Javier "el Loco" Milei de tal manera que se vio obligado a cambiar el tono discursivo. La administración libertaria se niega a modificar su brutal política económica de ajuste y motosierra, pero ayer el presidente brindó un discurso atípico: fue moderador, evitó los insultos, las provocaciones, anunció mejoras en el Presupuesto 2026 para los sectores más vulnerables y llamó a trabajar "codo a codo" con los Gobernadores.
 
Además, el jefe de Estado envió un mensaje a la población y aseguró que "lo peor ya pasó, no aflojemos". De esta manera, Milei acusó recibo del fuerte descontento social. Sin embargo, no fue la primera vez que el mandatario prometió que los momentos más difíciles quedaron atrás y que lo mejor estaba por venir.
 
El 10 de diciembre de 2024, el libertario afirmaba que ya habíamos "superado la prueba de fuego". "Estamos saliendo del desierto. La recesión terminó y el país finalmente ha comenzado a crecer. Gracias por confiar en este gobierno. Esto no quiere decir que hayamos llegado a puerto, pero sí quiere decir que podemos terminar el año con alivio y de que hemos dejado atrás lo peor", decía entonces en otra cadena nacional.
 
Un mes antes, el 11 de noviembre de 2024, decía exactamente lo mismo. "Hoy ya podemos decir que la recesión se terminó y de ahora en adelante todo lo que queda es crecimiento. De acá para adelante son todas buenas noticias", exclamaba. Pero lo frase no le pertenece exclusivamente a Milei. Años antes, en 2018, el entonces presidente Mauricio Macri también prometía frente al Congreso nacional que "lo peor" ya había pasado y vaticinaba años de crecimiento qué nunca llegaron.

Un Milei "sosegado" confirmó que profundizará el rumbo de ajuste fiscal exigido por el FMI. Y, tras una paliza electoral, La Libertad Avanza reflota la vieja promesa de que lo más difícil queda atrás. Sin embargo, y a pesar de algunas mejoras anunciadas, el Presupuesto 2026 es una ley de ajuste que no modifica los planes del Gobierno y del Fondo Monetario Internacional. Son mentiras, falsas promesas de aumentos para ganar las elecciones y más ajuste en jubilaciones, salud y educación.

En las calles, se manifestó el hartazgo total, hubo una ola de cacerolazos en el AMBA contra la cadena nacional de Milei. Desde Palermo y Recoleta hasta La Plata, cientos de personas en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires manifestaron su rechazo al Presidente mientras lanzaba el Presupuesto 2026. La sociedad no compró las mentiras de la cadena nacional y repentinamente salió a las ventanas y los balcones a manifestarse en contra de las medidas de ajuste del Gobierno anarco capitalista. La noche quedó marcada por una ola de cacerolazos en todo el AMBA.

El ruido metálico se convirtió en un grito unánime contra las políticas que solo traen más hambre, despidos y desesperación. "No se puede más, nos están matando de a poco", gritaban en Plaza de Mayo, donde las cacerolas parecían tambores de guerra. El fantasma de la crisis del 2001 sobrevoló la noche, con la misma bronca, la misma impotencia y las mismas calles llenas de familias cansadas.
 
El Gobierno de Milei, mientras tanto, respondió con silencio y un operativo de seguridad notorio en los puntos calientes. Sin embargo, la bronca ya no se calla con policías ni patrulleros. La pregunta que queda flotando es si este rugido metálico será apenas un desahogo pasajero o el comienzo de un estallido más grande que termine por arrinconar a la hermana coimera, al libertario desquiciado y a su nefasto plan neoliberal.
 
La Opinión Popular
 

15-09-2025 / 09:09
Un Gobierno anarco capitalista sin cuadros políticos y sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado, se enfrenta a la profundización de su propia distopía tras la paliza electoral. La hermanísima copó el Ejecutivo y con Jamoncito, hasta acá, se demostraron como una unidad indivisible. El Gobierno está completamente en manos político-administrativas de Karina "el Jefe" Milei y se resolvió que sólo sea Luis "Toto" Caputo quien conduzca el único plan existente: pisar el dólar hasta las elecciones de octubre. No hay más que eso. No hay más certezas que ésas.
 
Respecto de la primera, podrían apuntarse dos observaciones. Una es que La Hermanísima Karina siempre estuvo a cargo de la ejecutividad gubernamental, excepción hecha de lo económico. La otra consiste en que, como fuere, no habría mayores novedades porque desde un comienzo la gestión fue un quilombo. Basta con repasar los centenares de funcionarios echados o renunciados, que supieron llegaron al promedio de uno por día.
 
Y esto tampoco sería novedoso, porque se corresponde con las características de un Gobierno arribado como tal sin la más mínima preparación institucional. Sin cuadros políticos. Sin la más remota idea sobre el funcionamiento del Estado. En otros términos conocidos, Javier "el Loco" Milei fue un armado del establishment, desde el panelismo televisivo y las redes, para segmentar parte de los votos peronistas y antiperonistas.
 
Pero el Frankestein adquirió una fuerza propia inusitada, a tono con endilgarle ese carácter de accidente insólito en la historia argentina. Y después no hubo nada que hacer. Así, el país quedó al arbitrio de unos Hermanos & Cía. exclusivamente relacionables con un escenario distópico. ¿Cuál es la noticia, entonces? Es que, tras el resultado electoral, la distopía se profundizó. Ya no hay Presidente, al menos por ahora, en su acepción de figura con aptitudes básicas para tomar decisiones autónomas. Milei está paralizado, totalmente fuera de eje.
 
Es así desde la noche del domingo pasado, cuando, aunque siga sin poder creerse, hasta último momento imaginó que perdía por muy poca diferencia. Incluso, de acuerdo con las mesas testigo del indescriptible Sebastián Pareja, pensó que llegarían a ganar por unos 8 puntos. Eran 50 de esas mesas, según pudo constatarse, de calidad irrelevante. Al aterrizar con los números reales entró en colapso (político, aclaremos, porque los diagnósticos psiquiátricos incumben a especialistas y nunca a la bartola periodística). Continúa en ese estado.
 
Se verá si para la cadena nacional de este lunes a la noche puede recomponerse como para dar una imagen atildada, llamémosle. Hablamos del continente, desde ya. El contenido será la provocación de redoblar su rumbo. La hermana, en consecuencia, asumió enteramente el rol presidencial. Y, hasta ahora sin visos de modificaciones, se cargó con desprecio todo intento de cambios siquiera por maquillaje.
 
El hazmerreír de una mesa política con los mismos rostros de la derrota y el nombramiento de un ministro de Interior que ya lo era de facto, tras el pase de Guillermo Francos a la Jefatura de Gabinete, es todo de ella. Es de ella -en todo caso, junto con el edecán de Francos- llamar al diálogo con los gobernadores mientras se vetan los fondos de ATN a las provincias, para no hablar de la "profunda autocrítica" que en simultáneo rechaza el financiamiento a las Universidades y la emergencia pediátrica Garrahan incluido.
 
Es de ella haberse animado a un acto de lanzamiento de LLA en Tucumán, ante un estadio cuyas tribunas debieron cubrir con lonas negras para ocultar el vacío; en el que brilló por su ausencia cualquier cántico de aliento y donde, en poco más de dos minutos de balbuceos, volvió a incurrir en el espectáculo de su terrorismo sintáctico. Sin más vueltas, he aquí la Presidenta real en ejercicio directo de la función.
 

14-09-2025 / 09:09
El miserable Gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei no solo canceló los fondos destinados a las personas discapacitadas, a los inundados o a la ciencia, también se apropió de los dólares de los créditos internacionales otorgados específicamente para esas actividades. Solo en Discapacidad figuran 560 millones en divisas que nadie sabe a dónde fueron, con la excepción de dos viajes de Spagnuolo a Israel. El Gobierno libertario no explica dónde está la plata que debería ir a ciencia o discapacidad. La hipótesis del Congreso de que los fondos están en el Tesoro para contener el esquema cambiario.
 
Pocas horas después de la paliza electoral en la Provincia de Buenos Aires, Milei recibió en Casa Rosada al presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn. El lunes al mediodía, ambos posaron para la foto junto a Luis "Toto" Caputo, Guillermo Francos y la motosierra de bronce que corona el despacho presidencial. El titular del organismo también había sido muy requerido para entrevistarse con dirigentes de la oposición, pero alegó estar muy ocupado.
 
Desde la comisión bicameral Revisora de Cuentas del Congreso, que conducen el diputado Miguel Pichetto (Encuentro Federal) y el senador Mariano Recalde (Fuerza Patria), querían citarlo para indagar en la letra chica de los créditos que el organismo le otorgó al país en los últimos meses.
 
La preocupación, que se hizo explícita en la última sesión de la comisión, es que muchos de esos fondos --cientos de millones de dólares-- en principio destinados a financiar obra pública y programas de inclusión como la discapacidad o la investigación científica, registran niveles de ejecución nulos o muy por debajo de lo pactado a la firma. Lo cual habilita la hipótesis de que el Gobierno desvía esos recursos hacia las cuentas del Tesoro para contener el actual esquema cambiario y favorecer la bicicleta financiera.
 
En lo que va del año, el Gobierno reconoció haber gastado unos 277 mil millones de pesos (algo menos de 250 millones de dólares) de lo que ingresó vía los distintos créditos de inversión del BID y otros organismos. En total hay unos 140 programas de desarrollo vigentes, desde los pautados para financiar el Progresar hasta la extensión y fortalecimieinto de la red de agua potable, pero el país hasta ahora vió poco y nada de esos fondos.
 
A esta altura del año (en ocho meses), los dos gobiernos anteriores (Cambiemos y Frente de Todos) ya habían ejecutado en promedio más de 1.500 millones de dólares. Es decir, la ejecución de Caputo es prácticamente del 20 por ciento de lo esperable. En paralelo, el Tesoro utilizó 500 millones de dólares para pisar el dólar en las semanas previas de la elección bonaerense.
 
El BID aprobó en julio de este año la "Estrategia País 2025-2028" para la Argentina, un paquete de apoyo financiero por un total de 10.000 millones de dólares (7.000 para el sector público y 3.000 para la inversión privada).
 
Si bien el organismo trabaja con todos los gobiernos y cada uno tiene una orientación específica, en este caso respalda a una administración que solo se preocupa por mantener el esquema cambiario-electoral, mientras tiene un desprecio palpable hacia la obra pública y pasa la motosierra por sectores sensibles. Lo contrario a lo que, a priori, buscan los organismos de crédito cuando apoyan a los países. Pese a todo, Goldfajn sigue apostando por Milei.
 

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