La Opinión Popular
                  20:18  |  Jueves 10 de Julio de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

Por
“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
Recomendar Imprimir
Sociedad e Interés General - 31-07-2021 / 18:07
EL 1 DE AGOSTO DE 2016, MUERE A LOS 92 AÑOS EL LÍDER SINDICAL

Raimundo Ongaro: Unirse desde abajo, organizarse combatiendo

Raimundo Ongaro: Unirse desde abajo, organizarse combatiendo
Raimundo Ongaro, en 1999.
 
El 01 de agosto de 2016, en Los Polvorines, muere a los 92 años Raimundo José Ongaro. Fue un dirigente sindical peronista combativo, secretario general del gremio de los trabajadores gráficos y de la CGT de los Argentinos. Quienes tuvimos la suerte de conocerlo y frecuentarlo, sabemos que con él se fue una parte de la mejor historia del movimiento obrero argentino.

El golpe oligárquico de 1955 destruyó las conquistas sociales y políticas logradas por los trabajadores y el Movimiento Obrero durante el peronismo, quienes resistieron los planes de las dictaduras gorilas luchando por ellas.

La Confederación General del Trabajo de los Argentinos (CGT de los Argentinos o CGT A) fue la central obrera que reunió a dirigentes y movimientos sindicales que se oponían al establecimiento de un pacto de los gremios con la dictadura militar encabezada por Juan Carlos Onganía.

El Congreso Normalizador "Amado Olmos", realizado el 28 de marzo de 1968, elige al dirigente gráfico Raimundo Ongaro como secretario general de la CGT A, mientras se retiran los gremios colaboracionistas y vandoristas que constituyen la "CGT de Azopardo".

Pocos días después, la nueva Central dará a conocer el "Programa del 1º de Mayo de 1968", que sigue los lineamientos revolucionarios de los históricos Congresos sindicales peronistas de La Falda, en 1957, y Huerta Grande, en 1962, de contenido antiimperialista, anti monopólico y anti dictatorial.

La formación de la CGT A significó un cambio fundamental en el desarrollo político de la década, en la historia del peronismo y en el movimiento popular argentino. No ofrecía "a los trabajadores un camino fácil, un panorama risueño, una mentira más, sino a cada uno un puesto de lucha".

La CGT A, en la que confluyeron sindicalistas, agrupaciones estudiantiles, gremiales y políticas, tanto peronistas, como radicales, socialistas, comunistas y casi toda la amplia gama de la izquierda, sacerdotes del tercer mundo y diversos sectores socialcristianos, se convirtió en eje articulador de la resistencia contra la dictadura de Onganía.

Su marca sería indeleble y su herencia principal, el Cordobazo, detendría la embestida oligárquica iniciada en la "Revolución Libertadora", voltearía a la dictadura de Onganía, e iniciaría la contraofensiva popular que trajo de vuelta a Juan Perón al país y al peronismo al gobierno en 1973. 

Gustavo Rearte, fundador y líder de la JP, héroe de la Resistencia Peronista 
Escribe: Blas García 

 

RAYMUNDO ONGARO, UN HISTORICO DEL GREMIALISMO COMBATIVO
 
De la CGT de los Argentinos al Cordobazo
 
Denunció a la burocracia sindical y derrotó al vandorismo. Sufrió cárcel y exilio y uno de sus hijos fue asesinado por la Triple A. Fue reconocido por su coherencia y honestidad.
 
 
Hay amigos que dicen que, en realidad, a Raymundo Ongaro lo mataron en mayo de1975, el día que un comando de la Triple A asesinó de once balazos a su hijo mayor Alfredo Máximo. Ese día, Ongaro estaba en prisión.Por enésima vez, el dirigente gremial del peronismo revolucionario había sido detenido, esta vez por la policía de José López Rega. Se enteró del fusilamiento de su hijo por Radio Colonia. Ese día aceptó partir al exilio y muchos dicen que nunca volvió a ser el mismo. Otro de sus hijos ya había sido obligado a refugiarse en el exterior y su hijo menor fue salvado por numerosos transeúntes cuando intentaban secuestrarlo en el centro de la ciudad.
 
Ayer a los 91 años murió Raymundo Ongaro, dirigente del gremio gráfico desde los años '50, secretario general de la CGT y de la CGT de los Argentinos durante los años de la dictadura de Onganía, una parte de la mejor historia del movimiento obrero argentino.
 
Como dirigente sindical enfrentó a las corrientes del vandorismo que negociaban con los militares y dejó como legado su propia historia, la del sindicalista que defendió consecuentemente los intereses de los trabajadores, que sufrió persecución y ataques y que murió en la misma sencillez con que había empezado su carrera como dirigente sindical.
 
Su casa en el barrio de Los Polvorines fue en los años '60 un punto de encuentro de las agrupaciones del peronismo combativo, sobre todo las que militaban en el campo gremial. Había nacido en 1925 y en 1943 comenzó a trabajar como obrero gráfico. Había estudiado en colegios católicos y esa formación lo acompañó también en su militancia. Ongaro se asumía como un cristiano revolucionario y los comunicados de la Gráfica, cuya conducción ganó como candidato de la Lista Verde, estaban encabezados por una cruz verde y comenzaban siempre con la frase "Hermanos en Cristo".
 
De una honestidad franciscana, junto con Jorge Di Pasquale, del gremio de Farmacia, expresó al ala más radical del peronismo gremial, aunque nunca se enroló en ninguna de las organizaciones revolucionarias de la época. Pero esa militancia le costó encarcelamientos, persecuciones, exilios y el asesinato de uno de sus hijos.
 
Ongaro había fundado la Lista Verde de la Gráfica pero durante los gobiernos peronistas no tuvo cargos gremiales ni políticos. En 1955 asumió como secretario general de la Lista Verde, que fue enrolándose con los sectores más duros del peronismo, primero en las 62 Organizaciones y después en las 62 de Pie.
 
En noviembre de 1966 ganó las elecciones en la Federación Gráfica Bonaerense y en la Federación Argentina de Trabajadores de la Imprenta. Los medios comienzan a reconocerlo, hay una tapa de Primer Plana con la foto de un hombre de buen porte y traje y corbata. Lo anuncian como expresión de la nueva dirigencia sindical.
 
En 1968 ganó la elección en el Comité Central Confederal y el hombre que denunciaba a la burocracia sindical resultó elegido secretario general de la CGT por el voto de la mayoría de los congresistas . Derrotado, el vandorismo se retiró, desconoció el Congreso y creó la CGT de Azopardo.
 
La CGT que dirigía Ongaro pasó a llamarse CGT de los Argentinos. El Cordobazo se produjo entre el 28 y el 30 de mayo de 1969. Un mes después fue acribillado a balazos Augusto Timoteo Vandor y Ongaro fue detenido junto con Elpidio Torres y Agustín Tosco, que habían encabezado el Cordobazo. Ongaro estuvo preso varios años. Al salir en libertad respaldó la creación de la corriente Peronismo de Base.
 
Tras la muerte del general Perón, a fines de 1974 creó junto a otros sindicalistas combativos la Coordinara de Gremios, Comisiones Internas y Fábricas en Lucha por lo que fue detenido en 1975. Lo presionaron para que se fuera del país pero se negó y comenzó la persecución a su familia hasta que finalmente decidió exiliarse. Fue un largo y doloroso destierro en España con el peso del recuerdo de su hijo fusilado.
 
Al regresar en 1984, fue recibido por su gremio y volvió a ocupar un lugar ya no como conducción, sino más bien como referente histórico y ético, en la dirección de la Federación Gráfica Bonaerense.
 
Fuente: Página12

Agreganos como amigo a Facebook
Raimundo Ongaro: Unirse desde abajo, organizarse combatiendo
Encuentro de Raimundo Ongaro de la CGT A y Agustín Tosco, líder de la sede cordobesa, uno de los principales artífices del Cordobazo. Circa 1968
Raimundo Ongaro: Unirse desde abajo, organizarse combatiendo
Raimundo Ongaro de la CGT A. Circa 1968
10-07-2025 / 08:07
09-07-2025 / 10:07
09-07-2025 / 10:07
09-07-2025 / 10:07
Como cada 9 de Julio reivindicamos la lucha de las masas populares contra la permanente agresión política, económica y cultural neocolonial e imperialista, que busca disolver la identidad nacional y condenar a nuestra Patria a la condición de colonia dependiente como factoría de las metrópolis imperiales, mera proveedora de materias primas y alimentos baratos. 

El 09 de julio de 1816, el histórico Congreso, reunido en Tucumán, declara la independencia de las Provincias Unidas del Sur, que así rompe los lazos de dependencia con España y proclama la existencia de una nueva nación, libre e independiente. Lo hacía cuando la Santa Alianza, de Austria, Rusia y Prusia, promovía en Europa la restauración monárquica y combatía los movimientos liberales y democráticos.

Es el momento culminante de la gesta revolucionaria iniciada en 1810 y se realizó en Tucumán por el creciente malestar de los pueblos del interior contra Buenos Aires. Desde la supresión de la Junta Grande por el Primer Triunvirato en 1811 y hasta el Directorio de Carlos María de Alvear, la elite porteña había impuesto sus criterios centralistas, desconociendo el sentimiento federal de la mayoría del interior. La independencia, que se proclama en la sesión presidida por el sanjuanino Francisco Narciso de Laprida, es el fundamento a partir del cual José de San Martín impulsará la campaña para liberar Chile y luego Perú, consolidando la independencia argentina.

Las masas populares, con sus lanzas y su fuerte sentimiento de libertad, construyeron la Patria independiente con San Martín, las montoneras bravías del interior que nos legaron el federalismo, los ciudadanos revolucionarios de don Hipólito Irigoyen que cimentaron la democracia del Pueblo y las multitudes obreras movilizadas por Juan Perón que combatieron por la Justicia Social.
 
Invariablemente, la alternativa histórica fue siempre: independencia económica o subdesarrollo y miseria, e implica optar entre aceptar resignadamente la dependencia del país al FMI o luchar por la Liberación, por una Nación Justa, Libre y Soberana.
 
Tomamos el valiente ejemplo de San Martín que, para la Declaración de la Independencia, se impuso militarmente a los españoles y políticamente a aquellos sectores vinculados a la elite porteña que ya estaban negociando, tanto con el Imperio español como con el Reino Unido de Gran Bretaña, una nueva dependencia.
 
La nuestra es una historia de caudillos y masas populares. Los líderes pesaron profundo en los procesos. En 1816, San Martín, Belgrano, Güemes, Pueyrredón, Artigas, Juana Azurduy... Y la participación de las masas populares es una herencia del período independentista revolucionario, por la importancia que tempranamente tuvo la movilización popular, política y militar, en nuestra historia, desde la formación de las milicias urbanas para derrotar a los invasores británicos, y la voluntad del Pueblo que jugó un papel sin precedentes en la destitución de un virrey y el nombramiento de su sucesor.
 
Como decía don Arturo Jauretche"La historia es la política del pasado y la política es la historia del presente". Hoy, como siempre, peleamos por nuestra única, verdadera e irrenunciable independencia, evidenciando el aparato de colonización mental montada por los países centrales y sus operadores internos, como el macrismo y el mileismo, para perpetuar la dependencia.
 
Gustavo Rearte, fundador y líder de la JP, héroe de la Resistencia Peronista
Escribe: Blas García 

07-07-2025 / 19:07
NicoSal soluciones web

© Copyright 2009 LA OPINIÓN POPULAR – www.laopinionpopular.com.ar - Todos los derechos reservados.

E-mail: contacto@laopinionpopular.com.ar