Nacionales - 16-11-2020 / 09:11
PIDEN AL FONDO QUE CONFIRME SI EL PRÉSTAMO ERA PARA LA CAMPAÑA ELECTORAL DE MACRI
Dura carta de senadores peronista al FMI: reclaman que se "abstenga de condicionar la política económica del país"
La misiva que lleva la firma del bloque de senadores del Frente de Todos fue entregada a la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) presente en el país tras recibir el visto bueno de Cristina Fernández. Dirigida a la titular del organismo, Kristalina Georgieva, la carta cuestiona duramente el préstamo otorgado en 2018 al entonces presidente Mauricio Macri.
El bloque de senadores del Frente de Todos le envió este domingo una dura carta al Fondo Monetario Internacional (FMI) en la que le pide al organismo que "se abstenga de condicionar la política económica" del Gobierno de cara a las negociaciones por la deuda al tiempo que brinda sus propias propuestas pensando en su refinanciación.
La misiva fue entregada a la misión del FMI presente en el país (vino para negociar justamente un acuerdo de reestructuración de dicha deuda), luego de haber recibido el visto bueno de la vicepresidenta Cristina Fernández, según consignó el medio macrista Clarín. En el comunicado, los legisladores apuntan con dureza al organismo por el préstamo de 44 mil millones de dólares otorgado en 2018 al entonces gobierno de Mauricio Macri.
En concreto, exigen que se explique bajó qué consideraciones decidieron otorgarlo: "Queremos saber cuáles fueron los cálculos que hicieron pensar que nuestro país podría obtener excedentes externos suficientes como para afrontar los vencimientos que se previeron en ese entonces; cuando en realidad resultaba claro desde el inicio que los mismos serían de pago imposible, como así lo manifestaron oportunamente analistas locales e internacionales", apuntan.
En un documento que contiene 33 puntos, los senadores del bloque oficialista también cuestionaron que la entidad multilateral haya roto su estatuto al otorgarle dólares al macrismo para "hacer frente a una salida considerable de capitales". Asimismo, solicitaron que el FMI dé cuenta de las medidas que llevó adelante para controlar (auditar) el destino del dinero del préstamo y así no se convierta en fuga de capitales.
Por otro lado, exigen que el organismo desmiente la versión que indica que el préstamo otorgado al gobierno de Cambiemos fue para allanarle a Macri el camino de cara a las elecciones presidenciales de 2019: "Sería necesario que el Fondo confirme o desmienta estas apreciaciones, puesto que estaríamos ante un antecedente gravísimo de influencia e injerencia del FMI para que un determinado sector político obtuviese el triunfo en las elecciones", consignaron.
El bloque hace alusión también al historial de acuerdos entre el país y el Fondo, lo que califica como una historia "larga y fracasada" y por ello pide que en este caso no interfiera con condiciones desfavorables para el país la política económica del gobierno de Alberto Fernández. "Siempre fue muy alto el deterioro social asociado a la aplicación de los programas del FMI a lo largo de la historia Argentina, con aumento de la pobreza, la indigencia y el desempleo", resaltaron.
En ese sentido, los legisladores lanzaron una serie de propuestas pensando en la "refinanciación de la deuda" que no implique un futuro dolor de cabeza para los argentinos: la reconsideración de los intereses, un período de espera para comenzar los pagos anuales a partir del 2025 y un plazo de amortización en varias décadas, "de modo que las erogaciones anuales no tornen insustentable la refinanciación de la deuda e impacten negativamente en la sociedad y economía argentina".
La Opinión Popular
¿ES POSIBLE UN EFF SIN GRANDES REFORMAS?
Una carta que desnuda tensiones internas y fragilidades heredadas
La carta del bloque de senadores del Frente de Todos desnuda la fragilidad en la que se encuentra el Gobierno a la hora de renegociar el préstamo récord de USD44.000 millones que Mauricio Macri acordó con el FMI en 2018. Para estirar los plazos, el oficialismo debió optar por transformar el Stand-By en un Extended Fund Facilities (EFF), que abre la posibilidad de un período de repago más largo a cambio de reformas "estructurales" con olor a ajuste neoliberal, algo que el Gobierno asegura que podrá evitar.
Justamente, el desafío de las autoridades es intentar limitar ese tipo de medidas y de ahí la actitud defensiva que comenzó a desplegar el oficialismo desde la semana pasada. El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, tomó la posta al pedir al Fondo que no exija esfuerzos a la administración que cancelará la deuda que tomó otro.
La misiva, que no suscribió Cristina Fernández de Kirchner pero que carga con su sello invisible, avanza en ese sentido. Repasa las irregularidades cometidas por la gestión de Cambiemos y por el propio organismo multilateral durante el último acuerdo y el componente político que significó la intención del Gobierno de Donald Trump de financiar el intento reeleccionista de Macri.
Y en base a eso, reclama un esquema laxo de refinanciación de la deuda a "varias décadas", un recorte de los intereses y que el FMI se abstenga de sus ya habituales condicionalidades.
Además de implicar un mensaje al interior de la coalición gobernante, el tono que adquirió la negociación con la carta de los legisladores oficialistas muestra la fragilidad fiscal que heredó la administración de Alberto Fernández: sin margen de superávit fiscal producto de la pandemia de coronavirus, el ministro de Economía, Martín Guzmán, proyecta un descenso paulatino en el rojo pero persistente, por el cual será incapaz de aplicar la estrategia de Néstor Kirchner.
Es que el expresidente se enfocó en acumular reservas y excedente en las cuentas públicas con los que pudo hacer frente al préstamo con el FMI hasta su cancelación total en 2006, sin tener que capitular con la firma de un EFF.
Las últimas dos ocasiones en donde Argentina firmó este tipo de crédito fue, precisamente, durante la hegemonía neoliberal de los noventas. Flexibilización laboral y privatizaciones fueron acaso los dos mayores traumas que dejó la experiencia del 1 a 1.
¿Podrá el Gobierno consensuar un EFF sin condicionalidades, tal como aseguran en los despachos oficiales? Un informe de Consultatio Plus precisa que, de los últimos programas de este tipo que el organismo multilateral firmó, en promedio los países debieron aplicar unas 13 reformas y que, cuanto menores son las imposiciones (Costa de Marfil, con siete, es el caso más alentador), mayor es el tiempo que demora en alcanzarse el acuerdo.
Luego de más de una década, Argentina volvió en 2018 a formar parte de ese "selecto" club de deudores, entre los que se cuentan Ecuador, Bosnia, Georgia, Pakistán y Angola, entre otros. Claro que, ninguno de ellos le debía USD44.000 millones. Y en este caso, como dice el refrán, cuando la deuda es muy abultada el problema también pasa a ser del prestamista.
Por Ignacio Ostera y Juan Strasnoy Peyre
Fuente: BAE Negocios