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“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
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Nacionales - 13-10-2020 / 10:10
DEBEN SER LOS GORILAS DEBEN SER…

Pese a la cuarentena, el Obelisco fue el epicentro de una nueva marcha opositora gurka

Pese a la cuarentena, el Obelisco fue el epicentro de una nueva marcha opositora gurka
Hay quienes se las ingenian para “robar cámara”, algo que ya es un clásico de estas marchas opositoras. Uno de los manifestantes se acerca a los movileros con su careta de gorila. “Quiero que me digan que soy gorila. Porque estoy orgulloso” afirmó. A continuación hizo un discurso encendido y endulzado de qué es ser gorila. Si lo escuchan los gorilas le dirían que no, que lo que él dijo no es ser antiperonista.
Una vez más, el sector minoritario de la oposición más gurka, encabezado por la polémica Patricia Bullrich, salieron a manifestarse expresando su rechazo a las políticas públicas impulsadas por el Gobierno, en una protesta convocada por el Grupo Clarín y las redes sociales bajo el hashtag #12O y que tuvo sus réplicas en varias ciudades de país.
 
En automóviles o a pie, y con variadas consignas escritas en carteles que emulaban banderas argentinas, los manifestantes cantaron el Himno Nacional y se pronunciaron en "defensa de la Justicia", de la "República" y en contra del aislamiento obligatorio dispuesto para evitar el avance del coronavirus.
 
"Si Cristina Fernández de Kirchner no va presa, este país no tiene solución", dice una señora en el Obelisco, desde la ventanilla de su lujoso auto, mientras grita y agita dos cacerolas en el aire. Su esposo, que está al volante tocando la bocina sin parar, agrega: "no existe el virus, eso es una farsa que inventaron ellos para tenernos presos a todos y hacer lo que se les canta el orto".
 
Un descerabrado al volante dice no existe el covid-19, que lo inventó Cristina. ¿Cómo se combate la pandemia en el país si la oposición talibán incentiva la aparición de estos imbéciles incurables? Por otra parte, a los empujones, manifestantes macristas echaron a la cronista de C5N en la quinta de Olivos y agredieron y amenazaron de muerte al equipo de Crónica TV en el Obelisco.
 
En Olivos, frente a la quinta presidencial, reunió a detractores del Gobierno, por un lado, y organizaciones políticas, gremiales y sociales en apoyo al presidente Alberto Fernández, por el otro, y, si bien en un primer momento hubo tensión entre ambos grupos, luego cada uno ocupó su propio espacio.


Mauricio Macri reapareció para mostrar su alegría y afinidad con la marcha organizada contra el Gobierno. Y se expresó con una provocación repudiable y golpista que generó controversia al destacar las "crecientes movilizaciones pacíficas, el coraje y la convicción de las personas que las acompañan", y expresó que por ello hay "que ser muy optimistas" sobre el futuro.

 
El Gobierno condenó la inclusión del domicilio de la vicepresidenta Cristina Fernández entre los puntos de convocatoria de la protesta opositora. "Disentir con un gobierno es parte de la democracia. Movilizarse, aun con el riesgo que implica en una pandemia, también. Pero promover una convocatoria a una protesta en el domicilio de una persona solo fomenta la grieta y daña esa convivencia democrática", expresó el Presidente en su cuenta de Twitter.
 
"Es muy claro que no defienden la República ni respetan las instituciones, son los profetas del odio", aseveró el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, también a través de Twitter, luego de repudiar "que se difunda como punto de protesta el domicilio de la vicepresidenta".
 
La Opinión Popular
 
 
EL OBELISCO FUE EL EPICENTRO DE UNA NUEVA MANIFESTACIÓN OPOSITORA
 
Otra marcha para pedir "que se vaya Ella"
 
Con consignas dispares, pero bien direccionadas en contra del gobierno y en especial de la vicepresidenta, la convocatoria del feriado tuvo la presencia estelar de Patricia Bullrich.
 
Una vez más, el sector de la oposición encabezado por Patricia Bullrich salió en caravana a manifestarse al Obelisco -con convocatorias en otros puntos del país- en contra del gobierno de Alberto Fernández.
 
En esta ocasión, y al igual que en las marchas del 20 de junio y del 17 de agosto, los manifestantes repiten -casi de forma idéntica- discursos de odio centrados en la figura de la vicepresidenta. Distintos medios de comunicación también convocaron a la movilización y hasta pusieron la dirección de la casa de CFK, donde no se reunieron más de cincuenta personas.
 
Eduardo vino con su camioneta Hilux desde el barrio de Caballito y explica a este diario que "vengo a favor de la división de poderes y principalmente en contra de la impunidad de Cristina. Para mí el Gobierno está haciendo todo mal". "No tengo miedo de venir porque prefiero arriesgarme al contagio a no defender la democracia", aclara. Además, dice que no tiene miedo al colapso sanitario porque "el Gobierno de la Ciudad está haciendo todo bien".
 
Hay quienes se las ingenian para "robar cámara", algo que ya es un clásico de estas marchas opositoras. Uno de los manifestantes se acerca a los movileros con su careta de gorila. "Quiero que me digan que soy gorila. Porque estoy orgulloso. Ser gorila es estar a favor de la justicia, de los derechos humanos. No ser ladrón, no ser corrupto, no ser coimero. Vivo en Palermo, pago mis impuestos, no me puedo ir del país porque estamos encerrados, acuarentenados de por vida', grita el hombre.
 
Cerca de las 18 un grupo de personas se agolpa, agita fuerte sus banderas y golpea con furia sus cacerolas: en el medio del tumulto se encuentra el auto de Bullrich que intenta avanzar por Carlos Pellegrini para llegar al Obelisco, el epicentro de la movilización. Si bien las consignas en redes sociales subrayaban la "independencia" de la convocatoria, alrededor del auto de la exministra de Seguridad los cánticos aclaman: "volveremos, volveremos, volveremos otra vez", y "Pato presidente".
 
Lleva puesto un barbijo metalizado y una bandera de Argentina en sus hombros. Saca la mano y toca a todos los que se avalanzan contra el auto que ella misma conduce. Otros referentes de la oposición, como Elisa Carrió, prefirieron despegarse de la iniciativa. "No convoco a la marcha, cada uno según su conciencia. El que se radicalice está jugando en contra de la Argentina, ya sea por derecha o por izquierda", marcó la cancha interna.
 
Al pie del Obelisco una señora mayor se ubicó con una reposera y desde allí gritaba. Se llama Yolanda, tiene 88 años y se define como "una conservadora de la época brillante de la Argentina, en la que gobernaba Alvear".
 
"Adoro a Patricia, pero creo que nos falta un líder. Ellos tuvieron al viejo inmundo ese de Perón y ahora a esta hija de puta", expresa, en referencia a Cristina Fernández. Las hijas, dos rubias de unos 40 años, se miran y se ríen por la mala palabra que acaba de pronunciar la anciana desde su reposera. "Basta, basta, basta. No somos oligarcas. El problema de todo lo que pasa en este país es que el peronismo no dio educación", afirma furibunda.
 
Otra de las constantes son los carteles con consignas disparatadas: "basta de Kuarentena"; "Kuarentena tapa Korrupción"; "politikos bájense el sueldo", son algunas de ellas. También hay un señor que lleva en la frente un pañuelo azul que dice "ni un policía menos". Una chica joven, en cambio, tiene puesto un barbijo rojo con la imagen de "el Presto", el influencer que hace unas semanas amenazó de muerte a la vicepresidenta.
 
En el centro de la marcha hay un mini zeppelin que dice "Argentina y Venezuela libres". Minutos antes de las 18.30 la movilización llega a su clímax con una suelta de globos celestes y blancos, que desata gran emoción entre los manifestantes: las señoras bailan sobre la 9 de Julio y las radios de los autos reproducen a todo volumen la voz del periodista Alfredo Leuco, quien días antes de la marcha difundió la movilización.
 
Si bien la mayoría de los asistentes, tal como adelantó en una nota el diario La Nación, son "baby boomers", es decir, adultos mayores nacidos entre 1944 y 1965, también hay algunos jóvenes. Cinco se encuentran detrás de una bandera amarilla que dice "Somos libres. Pro-UBA".
 
 Camilo es el líder de la agrupación y en diálogo con este diario detalla que "estamos defendiendo la libertad ante un gobierno autoritario que quiere avanzar en el crecimiento de un poder total". Según explica, es estudiante de ingeniería y la agrupación tiene presencia en seis facultades de la Universidad de Buenos Aires. "Queremos que la empresa privada pueda crecer porque todos somos la empresa privada", opina.
 
Con respecto a la vacuna que se producirá en el país, expresa que "la produce un privado gracias a un convenio que generó Macri. No es logro del gobierno populista". A la vacuna también le dedican algunos carteles. Uno proclama: "no estamos en Estado de sitio. Hay emergencia sanitaria, no me pueden obligar a vacunar".
 
Por Melisa Molina
 
Fuente: Página12
 

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Pese a la cuarentena, el Obelisco fue el epicentro de una nueva marcha opositora gurka
La convocatoria a la casa de CFK fue una de las que más polémicas trajo. Sin embargo, el grueso de la concentración apuntó al Obelisco y solo un grupo pequeño fue allí. No faltaron los autos de alta gama que pasaron tocando bocina y también algún conductor que les hizo la V al pasar y les gritó: "Aguante Cristina".
16-12-2025 / 10:12
Las reformas que impulsa el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei, en especial la laboral, buscan sin disimulo convertir a nuestro país en una economía colonial de enclave, productor de materias primas, sin industria y en donde sobre más de la mitad de los argentinos. En el país cierra una empresa por hora y 400 trabajadores por día se quedan sin empleo. El cálculo surge de tomar en cuenta que "el Peluca" y su motosierra destruyeron 19.114 firmas dejando en la calle a algo más que 264 mil asalariados registrados en sus dos primeros años de gobierno.
 
Para Argentina es un cambio dramático, pues es uno de los países en donde la legislación laboral del siglo XX más avanzó en el sentido de proteger a los trabajadores. Por esa razón, por ese "mal ejemplo" para la región latinoamericana, el objetivo del FMI de retroceder más de un siglo en las condiciones bajo las cuales se desenvuelve el mundo laboral, haya sido tomado con tanta energía por los últimos gobiernos de derecha y mucho más ahora bajo el modelo reaccionario extremo que impulsan los desquiciados Milei, Sturzenegger, Caputo y cía.
 
Todos y cada uno de los puntos del extenso proyecto que acaba de aterrizar en el Congreso es un muestrario de la ideología conservadora y retrógrada que alienta a este gobierno como fiel representante de la elite económico-financiera también conocida como "círculo rojo". A tal extremo esto es así que el gobierno ni se molestó en desmentir lo que hace un tiempo se conoció: los autores materiales de este engendro son los estudios de abogados que prestan sus servicios a las corporaciones más poderosas, los llamados "dueños de la Argentina". Es el gobierno para los ricos.
 
El sueño húmedo de esta minoría enferma de codicia es voltear, una por una, todas las protecciones legales que tienen los trabajadores argentinos, aunque también debe decirse que buena parte de ellas ya fueron demolidas de hecho por el propio accionar de un mercado laboral que, con independencia de los gobiernos que se sucedieron desde el estallido social y la gran crisis económica de 2001, dejaron a casi la mitad de los asalariados desempeñándose "en negro", al margen de la formalidad.
 
Lo que veremos en las próximas horas en el Congreso les dejará en claro a los argentinos quiénes son los senadores y diputados dignos de ser llamados oposición y quiénes se someterán ante las ofertas de dinero que ya está circulando por oscuras vías. Gobernadores dialoguistas también estarán en el "toma y daca" que este gobierno puso en marcha sin que la gran prensa porteña, convertida en vocera oficial de la Casa Rosada, hable como lo hacía habitualmente de "látigo y billetera" con otros gobiernos que nunca llegaron a extremos de manipulación de los recursos fiscales como el actual.
 
El triunfo electoral de octubre de Milei es el combustible que aceleró la decisión de avanzar con este proyecto y con otros que también buscan reconfigurar en profundidad el diseño social, económico e institucional de la Argentina. La llamada ley de tierras, de glaciares, la reforma educativa, la tributaria, etc. conforman una ofensiva de los sectores concentrados de la economía contra el conjunto social. Convertir a este país en una economía colonial, sin industria, sin ciencia, sin educación de calidad, sin protección social ni laboral para las mayorías populares es una meta que está en las mentes de los libertarios. La política de tierra arrasada que se proponen les resulta indiferente, pues la ambición de poder -político y económico- está por encima de todo.
 
La CGT convocó a una movilización a la Plaza de Mayo para el jueves a la que adhirieron las dos CTA, ATE y otros gremios, el peronismo, organizaciones sociales y partidos políticos de izquierda.  Para aterrorizar, la especialidad del mileísmo, aplicarán el protocolo antipiquetes. Si la movilización es masiva, cuesta creer que la amenaza de represión violenta se cumpla. Crispar el clima social en vísperas de fin de año, en nuestro país, nunca tuvo buenos resultados para los gobiernos.
 
La Opinión Popular
 

14-12-2025 / 09:12
Bajo el mote de reforma laboral se esconde la decisión de Javier "el Loco" Milei que pretende consagrar institucionalmente, en 2026, los objetivos que en 1976 se planteara la dictadura militar genocida. Los cambios en el proceso de acumulación en el marco del genocidio, el endeudamiento, la valorización financiera y la fuga de capitales, la desindustrialización, el modo de incorporación del cambio tecnológico y la llegada del capitalismo de plataformas, produjo una sustancial alteración de la relación capital-trabajo, obviamente en desmedro del conjunto de los trabajadores.
 
En ese marco de brutal regresividad en las condiciones materiales de vida de quienes trabajan, se sucedieron en las distintas administraciones conservadoras cambios normativos, todos con la misma dirección. 1. Abaratar el precio del trabajo. 2. Facilitar el despido. 3. Debilitar los convenios colectivos. 4. Limitar y destruir la organización sindical.
 
Estas orientaciones fueron parte de los cambios normativos que impulsó la dictadura militar, de las leyes que llevaron adelante Cavallo, Menem y De la Rúa, del frustrado intento de Macri y también del proyecto de Milei. Proyecto este cuya profundidad en términos de alteración de la Ley de Contrato de Trabajo solo es equiparable a lo planteado hace 50 años por la dictadura militar.
 
Además, se lleva a cabo la directa eliminación de los costos del despido a partir de la creación de un Fondo de Asistencia Laboral que se financiará con tres puntos de las actuales contribuciones patronales. A la vez, se les reduce en un punto adicional los aportes a los empresarios en relación a las obras sociales que dejarían de percibir un punto de los que están recibiendo en la actualidad.
 
En síntesis, cuatro puntos de los aportes patronales dejan de financiar las jubilaciones y la salud de los trabajadores, con el objeto de eliminar los costos del despido y reducir los costos laborales. Situación ésta que implica una redistribución de ingresos desde los trabajadores al capital, cercana a los 3000 millones de dólares.
 
Las experiencias internacionales y la propia experiencia nacional indican que estas propuestas solo profundizan la desocupación, la informalidad y la pobreza. Es más, aspectos laborales de esta naturaleza son los que contenía la Ley Bases y que ya tuvieron dos años de aplicación en el curso del gobierno de Milei. Años que lejos de promover el empleo registrado, coexisten con la destrucción de 222 mil puestos de trabajo formales registrados de los cuales 139 mil son del propio sector privado, al tiempo que el monotributo y los asalariados no registrados constituyen las formas de inserción laboral de mayor importancia en los últimos dos años.
 
Por si esto fuera poco, los modelos que pregonan los funcionarios libertarios como objetivos a alcanzar por la Argentina, no hacen más que negar con la evidencia lo que el propio gobierno pregona para justificar lo que propone. Poner como ejemplo a seguir países como Paraguay o Perú, que prácticamente carecen de legislación laboral, resulta inentendible. Estos dos países exhiben, aún sin legislación laboral, niveles de informalidad superiores a los que hoy exhibe la Argentina.
 
Para frenar esta ofensiva hay que convocar a la sociedad a discutir la necesidad de relaciones laborales diferentes para un país distinto al que construye Milei. Para eso necesitamos relaciones laborales que se edifiquen en base a la redistribución del ingreso, la revalorización del trabajo y la necesidad de expandir derechos para todos aquellos que trabajan independientemente del tipo de inserción laboral que tengan.
 
La Opinión Popular
 

13-12-2025 / 09:12
El proyecto de país que perfila el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei tomó el aspecto de una sociedad sin derechos organizada por el mercado. El mercado elimina el concepto de soberanía y decidirá quién irá preso y quién se tomará vacaciones. A su vez, el mercado está organizado por una escala jerárquica según el poder económico.
 
O sea: la libertad de los libertarios es como la milanesa tucumana hecha con papel higiénico. Y de postre: inflación. Si alguno pensó que el esfuerzo valía la pena, el 2,5 de inflación -medido por un Indec que todo el mundo sabe trucho-- le dio una mala noticia: se quedó sin trabajo, se quedó sin empresa, y además tiene inflación.
 
En la misma semana asumió Joaquín Mogaburu como subsecretario de Derechos Humanos y se presentó el proyecto de reforma laboral en el Congreso. El nuevo funcionario es un personaje ligado a los represores y da cursos en los cuarteles sobre "memoria completa".
  
Mogaburu aboga por la conciliación y el perdón a los genocidas. El combo es coherente con el protocolo de seguridad que criminalizó la protesta social, el decreto que permitió a las fuerzas armadas intervenir en conflictos internos y la eliminación del derecho a huelga y otros derechos como lo estipula la reforma laboral enviada al Congreso.
 
Durante el mes hubo decenas de actos sobre derechos humanos en centros culturales, casas de la memoria y en plazas de todo el país. Y el jueves se realizó un festival en la Plaza de Mayo encabezado por Madres, Abuelas y el Serpaj de Adolfo Pérez Esquivel. Al mismo tiempo, la CGT anunciaba un acto público para oponerse al proyecto de ley enviado al Congreso.
 
No hay derechos humanos y no hay derechos laborales. No hay derecho a la protesta y no hay derecho que proteja contra la tortura y la violación como reclaman los que piden la libertad de torturadores y violadores que actuaron tras haber usurpado el Estado durante el golpe genocida. No hay sujetos de derecho en esta sociedad que conciben los libertarios y que ha sido votada por muchos que perderán los derechos que tenían.
 
Con el mercado se come, con el mercado se educa, con el mercado se cura. Si eso era difícil con la democracia, el mercado ni se lo plantea porque el único derecho que reconoce es el del que tiene más capital. El mercado habla de méritos, pero los derechos no se ganan. Los derechos implican también responsabilidades, pero no se ganan por méritos. Al menos la democracia reconoce que todos tienen derecho a comer, a la educación y a la salud. Después dependerá de los gobiernos proveer esos derechos.
 
Los libertarios inventaron una democracia con voto, pero sin derechos. Y los derechos son para todos porque son inherentes a la condición del ser humano. Si son para pocos, no califica. La democracia se construye sobre los derechos ciudadanos. Sin esos derechos básicos no hay sistema democrático. Este gobierno habla de democracia y libertad, pero cuando hace la milanesa, le pone papel higiénico en vez de libertad y democracia.
 

12-12-2025 / 10:12
El gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei mandó al Senado un proyecto de contrarreforma para eliminar derechos laborales, sindicales y de huelga que atrasa un siglo. Contra la Constitución desconoce hasta la jornada de 8 horas y el derecho a huelga. Redactado por los abogados de las grandes empresas, de Paolo Rocca, Galperin y Eurnekian, en cada rubro empeora la posición de los trabajadores. Perjudica también a monotributistas e informales y se propone financiar los despidos con la plata de los jubilados.
 
El gobierno libertario demoró la presentación de la contrareforma laboral, que no registra precedentes desde la dictadura genocida de 1976, para estirar los tiempos de negociación y definir cuán a fondo iría en su ofensiva contra los trabajadores y el sindicalismo. El proyecto que ingresó al Senado retoma lo peor de todas las versiones anteriores y lo condensa en 71 páginas y 191 artículos.
 
Enmascarada en una supuesta "modernización", la iniciativa retrocede más de un siglo y desconoce pilares básicos del derecho laboral como la jornada de ocho horas y restringe el derecho a huelga. Lejos de mejorar la vida de los trabajadores, crear empleo o incorporar a los informales al mercado formal, la reforma sólo busca abaratar costos para que el empleador pueda despedir y amplía la desprotección sobre el sector más débil.
 
Los especialistas coinciden en que "invierte la presunción de laborabilidad" perjudicando a monotributistas y trabajadores "independientes". El texto final del proyecto confirma la transferencia regresiva de los derechos de los trabajadores en favor del gran capital, debilita su capacidad de organización y faculta al empleador para modificar condiciones laborales según sus necesidades.
 
La reforma laboral, firmada por Milei, fue elevada al Congreso de manera errónea por parte de Gobierno. Legisladores opositores y abogados laboralistas cuestionaron el ingreso por el Senado, ya que la reforma laboral contiene un capítulo tributario que modifica impuestos centrales. Al respecto, la Constitución fija que toda ley de carácter impositivo debe originarse en Diputados.
 
La reforma laboral que impulsa Milei atrasa porque reinstala un modelo previo al propio nacimiento del derecho laboral. La abogada Natalia Salvo advierte que es "una novedad de museo que nos devuelve a un tiempo sin normas". El proyecto permite jornadas de hasta 12 horas, un retroceso a antes de la Ley 11.544, conquistada después de las huelgas y masacres de la Patagonia y la Semana Trágica.

También elimina ítems remunerativos para achicar aguinaldo y vacaciones, ahora fraccionadas como en etapas de precariedad anteriores a cualquier estándar moderno. Al mismo tiempo, remarca que la iniciativa desconoce los avances globales sobre las plataformas: mientras en Europa los tribunales y países como España o Portugal ya reconocen a esos trabajadores como dependientes, aquí se los deja en un limbo jurídico. Modernizar sería ampliar la protección, no recortarla. Con un 43 por ciento de informalidad, el proyecto empuja al país hacia un pasado sin resguardo, donde la relación laboral quedaba librada a la voluntad de la patronal.

Un Gobierno que miente en todo, presenta el argumento principal en la supuesta "creación de trabajo formal". Silogismo falaz, acaba de ser refutado por un hombre del gran capital, el abogado Julián de Diego. Dijo que "sin crecimiento, no habrá generación de empleo". Ese crecimiento se presenta, como promesa lejana, relato de un provenir etéreo, medido en décadas. Equiparada a Irlanda, Alemania, y otras naciones. Por ahora, lo que hay es recesión, inflación en alza y deuda. Cada vez más deuda.

La Opinión Popular


11-12-2025 / 10:12
Turismo "con la nuestra". Nuevo papelón internacional de Javier "el Loco" Milei que fue a perder el tiempo a Noruega disfrazado con el mameluco de YPF, viajó 25.000 kilómetros para sacarse una foto... y se volvió sin nada. María Corina Machado faltó a su premiación como Nobel de la Paz. Viajó con su hermana Karina a Oslo en el avión presidencial, en un viaje que cuesta 300 mil dólares, y se alojó en el Gran Hotel de Oslo, en donde una habitación cuesta mil euros por noche. "El Peluca" volvió a las apuradas y de inmediato puso su firma en el funesto proyecto que apunta contra la justicia social y modifica la regulación de horas extras, vacaciones e indemnizaciones.
 
El fugaz y costoso paseo de Milei por Noruega terminó en un traspié político que expuso improvisación y falta de estrategia. La salida apresurada dejó al libertario sin el rédito simbólico que buscaba y reforzó las críticas sobre un viaje reducido a gestos vacíos, sin resultados concretos ni agenda internacional consistente. Tenía una agenda que incluía reuniones con el primer ministro y con el rey, además de la posibilidad de un encuentro cara a cara con Corina Machado, y los dejó "de garpe". Cosa de loco.
 
Milei regresó de apuro para evitar que una interna ponga en riesgo el tratamiento de la reforma laboral. Las explicaciones oficiales, en off the record, hablaban de la necesidad de "firmar la ley de reforma laboral" después de hacer "algún ajuste de último momento", sin embargo, tanto los cambios como la firma se pueden gestionar de manera remota. Lo que sucedió en realidad es que una nueva interna en el gobierno casi hace volar por los aires la Ley Rifle. Lo más llamativo, en este caso, es que los que frenaron el proyecto son dos enemigos íntimos: Santiago Caputo y Martín Menem.
 
Ellos son los dos interlocutores más fluidos que tiene la CGT dentro de la estructura libertaria y vienen advirtiendo desde hace tiempo que así como la estaba planteando Federico Sturzenegger, la reforma laboral corre el riesgo de empantanarse en el Congreso y terminar siendo rechazada, modificada hasta volverla irreconocible o aprobada a un costo demasiado alto. El recuerdo de la reforma previsional de Mauricio Macri en 2017 está presente en todos los cálculos.
 
Las partes observadas son justamente las que apuntan contra el andamiaje financiero y normativo que sostiene a los sindicatos, los llamados "derechos colectivos" que la CGT prioriza antes que las condiciones de trabajo individuales. De hecho, este lunes Sturzenegger estuvo reunido con los diputados de LLA, en un encuentro del que Menem no participó, y ante las consultas sobre estos asuntos el ministro prometió una "versión light", más sencilla de aprobar.
 
Sin embargo, el anuncio que hizo el vocero con sueldo de jefe de gabinete, Manuel Adorni, al día siguiente, no contempla la mayoría de esos recortes e incluye cláusulas inaceptables para el más dialoguista de los líderes gremiales. Dicen en la Casa Rosada que la orden de ir a fondo la dio el mismo Milei. El proyecto ya estaba listo para ingresar al Senado cuando Caputo y los Menem lograron frenarlo. Ese fue el motivo por el que el presidente tuvo que volver de apuro.
 
Patricia Bullrich, en tanto, defiende la redacción de Stuzenegger pero reclama que la situación se destrabe porque cree que si la reforma no tiene un tratamiento express y media sanción antes de las fiestas, después puede empantanarse. Su plan original de dictaminar esta misma semana, incluso el viernes a última hora, se fue diluyendo con el correr de las horas. El escenario más optimista apunta a sesionar en vísperas de noche buena. Sería un verdadero milagro navideño, mientras la CGT y el peronismo se abroquelan contra la reforma laboral anti obrera y pro patronal de Milei.
 
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