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El clima en Paraná

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“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
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Nacionales - 07-08-2020 / 10:08
PANORAMA EMPRESARIO SEMANAL

Ahora son todos guzmanistas de la primera hora

Ahora son todos guzmanistas de la primera hora
Hasta quienes le pedían el mes pasado a Alberto Fernández que lo eche -en público y en privado- se vistieron de guzmanistas de la primera hora. Todos salieron a gritar el gol que añoraban tanto la hinchada como el técnico, aun cuando está lejos de haber definido el partido.
Aunque hace tiempo que nadie en el poder se lo toma demasiado en serio ni le pide opinión, Guillermo Moreno pudo haber sido la excepción que confirmara la regla. El acuerdo que enhebró Martín Guzmán con los acreedores privados para aplazar y aliviar los pagos de la deuda jamás haría desdecirse al pintoresco exsecretario de Comercio, quien semanas atrás vaticinó que fracasaría porque le faltaba "haber pateado más la calle".
 
En el mundo empresario, entre los apostadores bursátiles y entre los consultores más cotizados de la City, en cambio, no hubo ningún reparo para la pirueta: hasta quienes le pedían el mes pasado a Alberto Fernández que lo eche -en público y en privado- se vistieron de guzmanistas de la primera hora. Todos salieron a gritar el gol que añoraban tanto la hinchada como el técnico, aun cuando está lejos de haber definido el partido.
 
Puertas adentro de la coalición, el primero en cantarlo fue Sergio Massa, quien no solo había convocado varias veces durante abril y mayo a su propio gabinete económico para interconsultas sino quien además entabló diálogos paralelos con Wall Street que obligaron al Presidente a avisar en tres ocasiones que el único interlocutor oficial era Guzmán.
 
Pasado pisado: tanto se apuró el jefe de Diputados en sacar pecho por el entendimiento que incluso primereó a Fernández. Pidió disculpas.
 
El recorrido de Guzmán antes del cierre de las negociaciones reflejó fielmente el equilibrio de fuerzas en el Frente de Todos
 

 
Tras haber pasado el fin de semana prácticamente instalado en Olivos con el Presidente, el lunes visitó personalmente a Cristina Fernández y conversó virtualmente con Massa y Máximo Kirchner. Los más conspirativos del gabinete están convencidos de que ese tándem excede lo parlamentario y constituye un proyecto de poder autónomo.
 
No olvidan la cena del 22 de junio en la mansión del banquero Jorge Brito en San Isidro, donde el exjefe de Gabinete les presentó al líder de La Cámpora al presidente de la UIA, Miguel Acevedo, al petrolero Marcos Bulgheroni, al zar de la energía Marcelo Mindlin y al constructor Hugo Dragonetti.
 
¿Será verdad lo que intuyen esos escultores del humo? ¿Que Máximo apuesta por ser quien le arrime la banda presidencial a Massa, consciente del límite que le imponen para calzársela él tanto su apellido como la imagen pública que supieron construirle los medios de comunicación más masivos?
 
¿Será un proyecto secreto o estará blanqueado también ante el Presidente, como aclaró el exintendente de Tigre cuando se supo de sus interconsultas con Martín Redrado, Santiago Montoya, Daniel Marx, Miguel Peirano y Guillermo Mitchell?
 
En los festejos del acuerdo con los acreedores tampoco faltaron los economistas de la gestión Cambiemos, que inflaron la deuda pública a una velocidad inédita en la historia del capitalismo y consiguieron batir dos récords: incumplir el pago de bonos emitidos en su propio gobierno y gastar la friolera de 22 pesos por cada 100 de presupuesto en intereses de esa deuda, como ocurrió en 2019.
 
Pero las felicitaciones de esa tribuna virtual visitante incluyeron pases de factura contra Mauricio Macri que solo se entienden a la luz de internas añejas que luego agigantaron la crisis y la derrota. La de Luis "Toto" Caputo, por ejemplo, destilaba hiel contra el líder veraneante.
 
El exministro de Finanzas todavía siente que lo sacrificaron en el altar de una ortodoxia cándida que resistió todo lo que pudo: primero cuando Macri decidió volver al Fondo Monetario y después cuando se fijaron las condiciones del primer programa, que estalló a los tres meses.
 
 
Más fondistas que el Fondo
 
Se lo confesó el italiano Roberto Cardarelli -el entonces encargado del caso argentino en el FMI, también eyectado por la crisis- a un amigo que se lo contó a su vez a BAE Negocios. 
 
"Nosotros no lo podíamos creer, pero (Nicolás) Dujovne estaba a nuestra derecha. Cuando firmamos el primer acuerdo tratamos de convencerlo de que un control de capitales era indispensable, pero él nos respondió que eso era inconcebible para el gobierno", evocó.
 
Esos controles que hasta el Fondo consideraba necesarios en 2018 terminaron por llegar, pero recién cuando todo colapsó y el timón ya lo sostenía Hernán Lacunza. Ahora, insólitamente para un partido que se reivindica democrático y republicano como el PRO, sus economistas culpan al electorado por cómo sufragó en las PASO de 2019.
 
La del Fondo es la negociación que viene, aunque sus nuevos jerarcas supervisaron íntegro el diálogo con los acreedores privados. 
 
Guzmán se lo anticipó en abril a un grupo de empresarios que sí pueden jactarse hoy de seguirlo desde Cemento: el financista Pablo Peralta (BST), el presidente de Toyota, Daniel Herrero, el CEO del Grupo Sancor Seguros, Alejandro Simon, el director de Celulosa Argentina, José Urtubey, el dueño de Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, el fundador y director de Globant, Martín Umaran, el cafetero Martín Cabrales, la titular de la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART), Mara Bettiol, y el presidente de Fecoba, Fabián Castillo.
 
En aquel encuentro, a inicios de la pandemia, les dijo que sus objetivos eran cinco:
 
·         - Frenar la salida de capitales.
·         - Regularizar la deuda en pesos.
·         - Acordar con los acreedores.
·         - Equiparar las condiciones de la deuda en pesos y en dólares.
·         - Cerrar un nuevo programa con el FMI.
 
Ya con uno solo de esos objetivos por delante, la pregunta no es tanto a qué se dedicará después sino cómo hará para convivir con Kristalina Georgieva. Porque a diferencia del CEO de BlackRock, Larry Fink, que le dobló el brazo a Fernández al obligarlo a mejorar su última oferta pero después desapareció de la escena, el pacto con el Fondo incluye una supervisión permanente.
 
¿Será distinto lo que exijan desde la calle 19 ahora que no están más Christine Lagarde, Cardarelli ni David Lipton?
 
Que sea viable este acuerdo va a depender, entre otras cosas, de lo que se negocie ahora con el FMI. Georgieva jugó como aliada pero ya exige austeridad y va a seguir haciéndolo. El ministro, en ese sentido, tampoco es demasiado heterodoxo.
 
En el segundo encuentro con el grupo de empresarios "guzmanistas", en julio y cuando ya había empezado a reunirse con otros ejecutivos también, se jactó de no haber gastado tanto a inicios de la pandemia.
 
"Yo había hecho un plan para sostener la economía en cuarentena y eran 30 días hábiles de inactividad. Ahora que vamos más de 100, me alegro de no haber puesto en ese mes más de dos puntos del PBI", les dijo.
 
Un riesgo es que Georgieva le pida a Guzmán y a Fernández que le retribuyan su ayuda con los acreedores. Que les exija una mayor disciplina para exhibirla ella como trofeo ante el directorio, donde manda el G-7 pero especialmente Estados Unidos y donde desean recuperar en algún momento los U$S 44.000 millones que puso el Fondo como aporte de campaña para la fallida reelección de Macri. Pero el principal peligro es que quiera compartir el timón.
 
 
De Rocca al Mono
 
Que el Fondo vaya a auditar al Gobierno no solo condiciona decisiones de índole fiscal como una suba del IFE o un descongelamiento de las jubilaciones. También sigue gravitando sobre transformaciones más estructurales, y tal vez ésa sea la peor herencia que dejó Macri.
 
¿O aceptaría alegremente Georgieva el Ejecutivo ponga USD400 millones para capitalizar Vicentin, como pensaba hacer Gabriel Delgado, para que el Estado ponga un pie en el mercado de granos y por ende controle los dólares de la exportación?
 
Tras la derogación del decreto que intervino la cerealera, Fernández instruyó a todos en el Gobierno para que procuren cercar a los accionistas y al juez concursal de Reconquista, que le torció el brazo con mucho menos poder que Larry Fink.
 
El Banco Nación pidió que todo el patrimonio del grupo Vicentin y de los accionistas respondan ante el concurso. También apeló la decisión del fiscal Gerardo Policita de disponer la incompetencia del juez Julián Ercolini sobre la venta de Renova, la joya del grupo.
 
Lo mismo hizo la Unidad de Información Financiera (UIF). En la AFIP, por su parte, Mercedes Marcó del Pont ya preparó una demanda por subdeclaración de exportaciones.
 
Los directivos de Vicentin no parecen preocupados. Si se aprueba en el Senado la moratoria que empujó el oficialismo, el Nación no podría ejecutar siquiera sus créditos garantizados con prendas, hipotecas ni otros privilegios.
 
¿Conseguirá cambiar algo de su articulado Claudio Lozano, que lo gestiona incansable ante senadores del oficialismo? ¿Hará algo por evitar el desguace de Vicentin la senadora Anabel Fernández Sagasti, que "venía trabajando" en la expropiación el día del anuncio pero después no habló más del tema?
 
Ocurre que, además del Fondo, hay que acordar cómo reconstruir la Argentina con sus propios dueños. Y son consensos trabajosos pero que con esfuerzo se logran, como sabe Matías Kulfas.
 
Ayer, el ministro de Desarrollo Productivo presentó al mundo petrolero su proyecto para reactivar la cuenca gasífera. Lo pactó antes con Paolo Rocca, que renunció (al menos de acá en adelante) al reclamo al fisco que había iniciado cuando Gustavo Lopetegui le recortó los subsidios a la perforación.
 
Por Alejandro Bercovich
 
Fuente: BAE Negocios
 

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01-12-2025 / 09:12
En Diputados, con una impunidad ante la que vale detenerse, la legisladora macrista Marilú Quiroz organizó una jornada de seis horas contra "la obligatoriedad y compulsividad" de las vacunas, abarcando relacionarlas con el autismo. Vimos a un tipo que, a torso descubierto, se mostró imantado por efecto de la inoculación. En 2014 ya habían montado el mismo circo, en una actuación televisiva y con otro protagonista, y adjudicándoselo a otros factores. Los objetos metálicos "se le pegan al cuerpo", ratificaron esta vez tras varios intentos fallidos.
 
Lo más parecido a esto que se vio el jueves debe ser el conjunto de infradotados, vestidos de búfalo, que tomaron el Capitolio el 6 de enero de 2021. El acto, el de acá, fue autorizado por la presidencia de la Cámara de Diputados.
 
Al margen del espanto y las denuncias de toda autoridad científica, ya con siete niños muertos de sarampión y tos convulsa por no estar vacunados, se desconocen presentaciones judiciales o procederes de oficio. Hubo un delito. Un atentado contra la salud pública.
 
¿Hecho menor, por haberse tratado de un grupo de delirantes bien que ocupando parte del edificio parlamentario? ¿O símbolo gigantesco?
 
Basta recorrer por encima los temas dominantes de la agenda publicada para advertir el momento prácticamente bizarro de nuestra política. Es el accionar gubernamental, es la plancha desconcertante en que está sumida la oposición y son las consecuencias de ese estadio. ¿Será la calma o desviación temática que preceden a alguna tormenta o, acaso, un clima destinado a permanecer durante largo rato?
 
La guerra entre la AFA, el Gobierno y los medios oficialistas, operada desde el efectismo de un campeonato de escritorio y una formación de pasillo dando la espalda a los campeones, se lleva por varios cuerpos el conversatorio periodístico, digital y vaya a saberse si, también, masivo. Es de esos disparadores que invitan a la básica y poderosa pregunta de si no pasa nada más importante en el país.
 
Los títulos de casi toda la prensa ametrallan sin parar, incluso a través de "noticias" y variantes fragmentadas -sobre el mismo tópico- que se suceden una tras otra. Pocas veces se vio algo semejante, tan desembozado.
 
Hasta un imberbe percibiría que no destrozan a la AFA por sus desaguisados ni por arbitrajes escandalosos, que desde ya sobran. El centro indesmentible es privatizar la actividad futbolística hasta el extremo que sea posible, pero eso ni siquiera es mencionado de refilón por la militancia independiente de los bufones oficiales.
 
Desde el Presidente de la Nación hasta su ministra de Seguridad instalaron el asunto con rango de gravedad nacional. Se supone que una cosa es la pasión desenfrenada que el fútbol desata en Argentina. Y que otra, completamente distinta, es llevar el caso a una cuestión de Estado ligada a negociados formidables. Sólo se supone.
 

30-11-2025 / 12:11
La concentración de fachos en Plaza de Mayo para pedir por la libertad de los represores fue un fracaso. No fue nutrida ni contó con la asistencia de las caras más conocidas del reclamo pro-dictadura. Sus organizadores debieron levantar sus petates a las apuradas cuando un efectivo de la Policía Federal Argentina (PFA) se acercó para avisarles que estaba llegando la manifestación por Palestina, que los sextuplicaba en participantes.
 
El que recibió el mensaje fue Guillermo Sottovia, uno de los organizadores de la movida fallida, que dice ser piloto civil e hijo de un oficial de la Aeronáutica. A Sottovia no le quedó más remedio que agarrar el megáfono maltrecho que tenían e iniciar la retirada. -Nos tenemos que ir, no por cobardes, sino para demostrar que ellos son los violentos -dijo.
 
Hasta segundos antes, Sottovia había estado a los abrazos con Carlos Pampillón, el dirigente neonazi marplatense procesado por atacar un monumento a la Memoria, la Verdad y la Justicia. Pampillón palmeaba a algunos hombres con uniformes y los llamaba "héroes" mientras se abría paso por la Plaza de Mayo.
 
Asunción Benedit estaba contenta porque casi había más fotógrafos que concurrentes. Ella se había puesto un pañuelo negro en la cabeza como forma de identificarse: no solo en oposición a las Madres de Plaza de Mayo sino porque también dice estar de "luto" por los represores presos.
 
Según las estadísticas de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad (PCCH), hay 22 criminales de lesa humanidad presos en cárceles comunes y 63 en la Unidad 34 de Campo de Mayo, considerada una prisión VIP por sus comodidades.
 
Tanto Asunción como su hermano, el diputado nacional entrerriano Beltrán Benedit, suelen visitar a los condenados y procesados por secuestrar, torturar y desaparecer personas. Ella sostiene que no solo hay que pedirle al gobierno de Javier "el Loco" Milei por su libertad, sino también reivindicar su accionar represivo.
 
"La esperanza es lo último que se pierde", dijo la mujer que pululó por distintas organizaciones pro-dictadura. "De hecho podemos estar haciendo este reclamo. Si fuera con otro gobierno, ya estaríamos presos", concedió, aunque no esconde su desazón porque la administración de La Libertad Avanza (LLA) no hizo más para tener al genocida Alfredo Astiz y compañía fuera de las cárceles.
 
Conformaron un grupúsculo que se dio en llamar Unidos por la Sangre Derramada, pero, en realidad, lo que derramaron fueron peleas internas. Hasta hace diez días, Orlando González se presentaba como el coordinador general de la iniciativa. El tema se complicó cuando se contó quién era el personaje: un represor de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) condenado a prisión perpetua y que se encuentra en arresto domiciliario. Aficionado a la fotografía, el "Hormiga" González solía retratar a sus víctimas.
 
En Plaza San Martín se hicieron grandes actos para oponerse a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia del kirchnerismo y para reclamar una amnistía general. Las concentraciones eran mucho más nutridas que las de este sábado en Plaza de Mayo. Pese a eso, con megáfono en mano, Sottovia afirmaba: "Tenemos poder ahora de cambiar la historia. Nunca se hizo un acto como éste". Patético.
 
La Opinión Popular
 

29-11-2025 / 10:11
Con un señor en cueros haciendo equilibrio para que no se le caiga un pedazo de fierro que sostenía en sus grandes pectorales flácidos empezó en el Congreso la reunión antivacunas que convocó la diputada oficialista Marilú Quiroz.
 
El hombre quedó "imantado" por las vacunas, según denunciaron, mientras el Senado retrasaba, hasta que ingresen los nuevos senadores, la discusión sobre la incorporación de la rionegrina oficialista Lorena Villaverde, ya rechazada por la comisión de Asuntos Constitucionales por sus antecedentes vinculados con el narcotráfico.
 
El INDEC retocó los índices de crecimiento para ocultar que el país está en recesión desde principios de año. Pero cuando se habla con los industriales, parecen vacas que van al matadero al balbucear que igual respaldan a este gobierno "porque es el único que se preocupó por la macro".
 
La pobreza de pensamiento de la clase empresarial produce hasta molestia física. Cuestionan aspectos como los antivacunas o la corrupción del famoso tres por ciento, pero no pueden ver que se intenta cambiar la matriz productiva y que el primer paso es el industricidio.
 
Aplauden como focas un proyecto de reforma laboral que atrasa 200 años las relaciones de trabajo, mientras tienen que cerrar sus propias empresas. Esta semana Whirlpool cerró la fábrica de Pilar, que había inaugurado hace tres años con una inversión de 50 millones de dólares.
 
Desde noviembre de 2023, cerraron más de quince mil empresas. Las patronales del campo pensaban que tenían la vaca atada pero ahora, con un dólar barato, tienen que afrontar insumos inflacionados, rutas abandonadas e inundaciones y sequias sin asistencia.
 
"Unos 220 obreros quedaron en la calle por el cierre de Whirlpool" adujo el periodista. El economista oficialista Miguel Boggiano, hijo de un ex juez de la Corte menemista, explicó: "Pero ahora tenés a 850 mil que van a comprar más barato el lavarropa". Aplazado el economista Boggiano, porque los desocupados y los que tienen bajos salarios dejaran de comprar lavarropas, heladeras, televisores, bicicletas, motos, etc., etc. Sin comprar nada de eso, la mayoría de los argentinos no llega a fin de mes con lo que gana.
 
Con este proyecto de país, industriales y comerciantes se van al bombo o se ajustan y los patrones rurales se achican. En contrapartida, las tecnológicas, extremistas del discurso anti Estado, reciben subsidios. El capital concentrado trata de volcarse a la energía, la minería y la timba financiera, que son los únicos que crecieron realmente. Y el INDEC funciona como vaselina con dibujos de los índices de crecimiento, de inflación o de consumo, para que el infierno parezca paraíso.
 
El Gobierno que salió airoso de las elecciones de medio término, ahora se dirige a cobrar el premio. Un Consejo de Mayo inútil, que no resuelve nada, pensado para una foto mentirosa que quiera dar la imagen de "diálogo", anunció que antes de fin de año el gobierno enviará al Congreso un proyecto de Reforma Laboral, que no tuvo consenso ni fue aprobado por ese Consejo por el nivel esclavista que propone para los trabajadores.
 

28-11-2025 / 10:11
El presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Ricardo Diab, alertó por el cierre de empresas en Argentina, y entre las principales causas detalla la baja en el consumo y la apertura de importaciones que impulsa el gobierno de Javier "el Loco" Milei. Diab mencionó el reciente cierre de Whirlpool, que dejó a 220 personas sin trabajo, y el de la láctea La Suipachense señalando que estas no son "grandes empresas" pero si son significativas.
 
Vale recordar que la CAME tomó partido por Milei antes del balotaje con Sergio Massa, apoyó públicamente el mega DNU del presidente en diciembre de 2023 sobre la desregulación total de la economía y respaldó junto a otras cámaras de grandes empresas el endeudamiento de Luis Caputo ante el FMI.
 
En primer lugar, el presidente de CAME sostuvo que la baja en el consumo "hace que el comercio en sí mismo no demande a la industria producto por este mismo motivo. Nosotros solicitamos otras alternativas de incentivo al consumo, en lo que tenía que ver con los planes de cuota a largo plazo que dio en un momento facilidades en la forma de estirar el salario".
 
Sin embargo, indicó que no tuvo éxito porque el Estado no interviene en las cuestiones de los privados: "Si los bancos no acceden, no aceptan o las plataformas de tarjeta, es muy difícil llevarlo a cabo". A esto se le suma la apertura de importaciones: "Muchas empresas ven que no son competitivas con respecto a productos que vienen fundamentalmente de China". El empresario señaló que incluso en rubros como el alimenticio se observa un aumento de productos importados que compiten con los nacionales.
 
Aunque el comercio internacional es "imprescindible", para Diab en el crecimiento económico en tecnología y materias primas, ciertos sectores nacionales no logran ser competitivos, lo que "lleva al cierre". Observó, además, que la tendencia es "creciente", al punto que empresarios que no tenían entre sus proyectos ser importadores, ahora lo están analizando.
 
El dirigente también destacó el impacto de la carga tributaria en la competitividad de las empresas argentinas. "Si sabemos que automáticamente cualquiera de nuestros productos tiene un 50% de impuesto, ya partimos de una situación impositiva muy difícil de resolver", afirmó, y comparó la situación con otros países que tienen menores cargas o distintos estilos de producción.
 
En cuanto al mercado laboral, Diab fue contundente al señalar que "en línea genérica, no hay actividad que esté demandando empleo". Explicó que, aunque una adecuación de la legislación laboral es necesaria, no será suficiente "si no hay demanda productiva". El presidente de CAME reconoció que, si bien la gente no consume porque "no tiene salarios buenos", las propias empresas, en especial las PyMEs, están imposibilitadas de mejorar esos salarios sustancialmente debido a la falta de rentabilidad y la fragilidad del contexto económico.
 
La industria nacional, a contramano de los datos que promociona el Gobierno de Milei, sigue en un pozo del que no puede salir. "Estamos inmersos casi en un círculo negativo donde los mismos que declamamos no lo podemos llevar a cabo fácilmente", afirmó. Además, el dirigente mencionó que, si bien han dialogado con el Gobierno, "el Estado hoy no interviene absolutamente en nada que tenga que ver los privados".
 
La Opinión Popular
 

27-11-2025 / 10:11
El industricidio avanza gracias a las políticas neoliberales de Javier "el Loco" Milei y Luis "Toto" Caputo. Ya pasó un mes de aquellas elecciones legislativas donde Milei logró un triunfo que hizo crecer la soberbia de su gobierno, lo cual impulsa la reforma laboral que propone. No obstante, se enfrenta a un panorama complicado que lo desafía por completo.

A un mes de la "Argentina" violeta, se acumulan los despidos en fábricas ante la apertura de importaciones. Whirlpool cerró la planta de Pilar inaugurada en 2022 y despidió a sus 220 trabajadores. Asimismo, el consumo continúa en caída libre mientras que diciembre se avecina con nuevos aumentos que sigue golpeando más de un bolsillo. Por su parte, el salario continúa congelado y no hay sueldo que aguante.

Sin embargo, el Gobierno anarco capitalista hace vista ciega y avanza a fondo por la reforma laboral. Tal es así que el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, reunió este miércoles (26/11) en Casa Rosada a los miembros del Consejo de Mayo y, pese a la falta de consensos, anunció que la administración libertaria enviará el proyecto al Congreso el próximo 9 de diciembre.

Si los tiempos avanzan como pretende Milei, la reforma laboral se debatirá al filo o durante la Navidad y Año Nuevo anticipando semanas difíciles para aquellos trabajadores que perdieron su empleo, lo que se intensificó en los últimos días luego de la victoria electoral de La Libertad Avanza, donde nada cambió para la economía real pese al rescate del INDEC.

Las pálidas continúan y están a la vista de todos los argentinos. Sin ir más lejos, los datos del último informe de CEPA, que abarca hasta agosto, sostienen que desde que Milei inició su gestión, por día cierran 30 empresas y, en total, se destruyeron 276.000 puestos de trabajo registrados. "Creer o reventar", dice la frase.

Por su parte, el INDEC que conduce Marco Lavagna quedó en el centro de una nueva polémica por una sugestiva corrección de los datos del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) para evitar que la economía entre en recesión técnica. El organismo que en septiembre la actividad económica tuvo un incremento de 0,5% en comparación con agosto, un dato mucho mejor que el estimado por las consultoras privadas que preveían una caída de entre 0,1% y 0,3%. Dibujando los números, el gobierno logró evitar ese título negativo pese que el tercer trimestre fue el más afectado por la inestabilidad económica consecuencia de las elecciones.

En tanto, los principales bancos y consultoras nacionales e internacionales recortaron sus previsiones de crecimiento para la economía argentina en 2026. Según el relevamiento de FocusEconomics, el Producto Bruto Interno se expandirá menos de la estimación previa. El ajuste refleja un escenario menos optimista y expone el desgaste del discurso libertario, que hasta ahora muestra más promesas que resultados.

El relato libertario remacha que la economía empieza a mostrar signos de recuperación, pero la realidad en las góndolas y en los bolsillos cuenta otra historia. El consumo masivo sigue estancado, sin el menor atisbo de mejora en la segunda mitad del año. Los datos publicados por el Indec este miércoles son contundentes: las ventas en supermercados cayeron a nivel intermensual y ya suman seis meses consecutivos de baja hasta septiembre. El golpe al consumo es tan fuerte que, en la comparación interanual, las ventas también retrocedieron. El ingreso de productos importados que compiten con los de fabricación nacional, el dólar barato y el encarecimiento de los costos productivos alientan la desindustrialización y el desempleo.

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