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Nacionales - 15-05-2020 / 09:05
PANORAMA EMPRESARIO SEMANAL

La cuarentena desigual agita a los dos extremos de la pirámide

La cuarentena desigual agita a los dos extremos de la pirámide
Esta vez no va a tener un nombre pregnante como el impuesto P.A.I.S. (Para una Argentina Inclusiva y Solidaria), cuya recaudación se vino abajo a la par de los gastos con tarjeta en dólares. El impuesto a las grandes fortunas se va a llamar "aporte solidario para contribuir a morigerar los efectos de la pandemia" y el proyecto ya está terminado.
Esta vez no va a tener un nombre pregnante como el impuesto P.A.I.S. (Para una Argentina Inclusiva y Solidaria), cuya recaudación se vino abajo a la par de los gastos con tarjeta en dólares. Se va a llamar "aporte solidario para contribuir a morigerar los efectos de la pandemia" y el proyecto ya está terminado, aunque falta definir cómo se va a aplicar sobre las tenencias de títulos públicos.
 
Como ese aspecto podría interferir en el alargue de la renegociación de la deuda, Martín Guzmán pidió que el texto definitivo recién se haga público después del 22 de mayo. Sabe que, aunque no se muestren, muchos de los acreedores bajo ley extranjera son argentinos y podrían sentirse doblemente afectados por la quita que propone y por el tributo.
 
Con la flexibilización de la cuarentena en jaque por el empinamiento de la curva de los últimos días, los dos extremos de la pirámide social empezaron a agitarse. En la base, donde las penurias no son nuevas pero donde el COVID-19 empieza a castigar con especial saña, no hay certezas siquiera sobre cuándo terminarán de cobrar la primera cuota del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) quienes no tienen cuenta bancaria. En la cúspide, donde el aislamiento es mucho más amable, la posibilidad de que el Gobierno entre en default y el impuesto a las grandes fortunas son las dos mayores preocupaciones.
 

 
Anteayer, en medio de la sesión semi-virtual que celebró Diputados, Cristina Álvarez Rodríguez les confirmó a varios miembros del bloque oficialista que Carlos Heller ya había terminado de redactar el texto. El jefe de la bancada, Máximo Kirchner, le encomendó al cooperativista que congeniara su letra con Economía.
 
Pero Guzmán está 100% abocado a la discusión con los acreedores, una labor que comparte con Gustavo Beliz y que lo lleva cada vez más frecuentemente a la Quinta de Olivos. Ahí, por ejemplo, los dos cenaron el domingo a solas con el Presidente para debatir los pasos a seguir después de la baja adhesión que obtuvo el canje en su primer tramo.
 
Heller discutió el proyecto con los técnicos que le envió Guzmán. Ellos preferían subir las alícuotas de Ganancias, especialmente sobre las sociedades, antes que gravar los altos patrimonios. Pero terminó por imponerse el criterio de Máximo Kirchner, quien lo había conversado previamente con Sergio Massa. Todos juran que el presidente de la Cámara, cuyos históricos mecenas de campaña serían alcanzados por el tributo, se cuidó de levantar la voz en su contra en todo momento.
 
El "aporte solidario" consiste en una alícuota sobre los bienes declarados ante la AFIP por personas físicas con patrimonios superiores a los 200 millones de pesos al 31 de diciembre de 2019, equivalentes a 2,9 millones de dólares al tipo de cambio oficial de ayer. La alícuota va del 2% para quienes atesoren entre 200 y 400 millones hasta el 3,5% para quienes registren a su nombre más de $3.000 millones (42,8 millones de dólares).
 
También habrá una sobrealícuota sobre los activos declarados en el extranjero, de la cual quedarán exentos quienes repatríen al menos un 20%. No se establece ninguna penalidad para quienes participaron del último blanqueo.
 
Aunque la discusión sobre el proyecto promete calentarse durante la última semana de mayo, en el oficialismo apuestan a lo difícil que resultará oponerse a un impuesto sobre 12.000 contribuyentes de altísimos patrimonios cuya recaudación se asignará de manera específica al combate a la pandemia, justo cuando se produzca el pico de infectados en Argentina.
 
Según los sondeos que le llegaron a Alberto Fernández esta semana, el 80% de la población coincide con la necesidad de que ese sector contribuya más.
 
Pero lo que lo decidió no fue eso sino otra proyección que le arrimó Economía: sin nuevas medidas de contención, la pobreza va camino a superar el 50% y la indigencia el 20% antes de fin de año. Un 2001-2002 en cámara rápida.
 
 
Para cobrarte mejor
  
En medio de tal sequía recaudatoria y de las crecientes demandas que enfrenta el Estado, Mercedes Marcó del Pont también apunta a tapar agujeros por los cuales se le escurren recursos al fisco.
 
La jefa de la AFIP ya dispuso un mes atrás que las empresas deban informar sus "beneficiarios finales" o dueños ocultos, algo inédito en América latina y que Europa viene impulsando para evitar los abusos con guaridas fiscales y las mamushkas de control societario como las que construyeron con especial dedicación magnates como Marcelo Mindlin y Paolo Rocca.
 
Ahora decidió ir tras las maniobras de grandes firmas para transferir ganancias a otras jurisdicciones donde se pagan menos impuestos, otra práctica muy difundida.
 
La Resolución General 4717/2020 que se publicará en el Boletín Oficial de hoy procura evitar esos abusos de compañías con filiales en el exterior. Desde hoy, por ejemplo, la lupa estará puesta sobre las consultorías y las compraventas de servicios intrafirma, un mecanismo muy usado para la contabilidad creativa y la planificación fiscal nociva. También sobre los pagos de deuda entre filiales, otro viejo truco para esmerilar la base imponible de Ganancias.
 
También hoy, el fiscal Federico Delgado formalizará su denuncia penal respecto de las 950 cuentas offshore sin declarar por más de un millón de dólares cada una que descubrió la AFIP en base a un intercambio de datos con la OCDE y que BAE Negocios reveló en exclusiva a principios de abril.
 
Delgado cerró su investigación preliminar tras corroborar que tanto durante la gestión de Alberto Abad como durante la de Leonardo Cuccioli hubo funcionarios que encubrieron a los dueños de esas cuentas negras. El principal sospechoso es Marcelo Costa, quien en ese lapso ascendió de subdirector de Fiscalización a jefe de la DGI y quien sigue siendo -aunque ya sin cargo ejecutivo- empleado de la AFIP.
 
La misión que le encomendó Fernández a Marcó del Pont es recaudar más como sea. El principal temor del Presidente es que el paquete de ayuda contra la crisis empuje al país a la hiperinflación, en un contexto en que el crédito externo estará cortado, pase lo que pase con el canje que propuso Guzmán.
 
Por ese mismo miedo es que empezaron a asomar las tijeras a la hora de discutir partidas presupuestarias. Las facultades extraordinarias que pidió Santiago Cafiero, lejos de ser un salvoconducto para gastar más, son un intento por evitarlo. Una de las discusiones internas más encarnizadas de las últimas horas giró en torno al IFE, cuya primera cuota de $10.000 nadie sabe cuándo se terminará de pagar a los 8 millones de postulantes habilitados.
 
Quienes creían dentro del Gobierno que era solo Alejandro Vanoli quien se oponía a que se usen billeteras electrónicas privadas para su pago (como MercadoPago o Ualá) se sorprendieron cuando Fernanda Raverta mantuvo sus reparos. ¿Llegará el Correo Argentino a liquidar el resto de los haberes antes de junio?
 
El problema es que, si no llega, esos beneficiarios no podrán cobrar la segunda cuota. Y cuando llegue el 24 de mayo, muchos habrán pasado más de 65 días en cuarentena sin ingresos. Un bomba de tiempo en términos sociales a la que se suma una interna insólita en Desarrollo Social: los referentes del Movimiento Evita, Emilio Pérsico y Fernando "Chino" Navarro, se opusieron desde un principio a la IFE en debates a puertas cerradas.
 
Argumentaron que era mejor repartir salarios sociales complementarios como los que cobran cerca de 500 mil cooperativistas del Evita y otros movimientos. "Se pusieron celosos porque reemplazamos al puntero por un algoritmo, pero era imposible tener el alcance de la IFE con esos planes", los descalifican cerca de Daniel Arroyo y de Guzmán.
 
 
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El establishment, en tanto, luce algo descoordinado. Nadie salió a responder, por caso, a la embestida de Fernández contra la Asociación Empresaria Argentina (AEA) en el peor momento de la relación entre el Presidente y los grupos Clarín y Techint. Varios socios de AEA sí tomaron nota amargamente y juraron venganza. Saben que la popularidad de un mandatario es un atributo más efímero que sus fortunas, incluso en tiempos de crisis severas como ésta.
 
El grupo "Resetear", un spin-off del grupo "Nuestra Voz", fue creado el 25 de abril por la mañana por Gonzalo Tanoira, uno de los miembros originales del whatsapp corporativo-macrista. Al principio se llamó "No nos aislemos" y se convocó a partir de la indignación que generó la noticia de que se iba Argentina de la mesa de negociaciones comerciales del Mercosur.
 
A varios los sorprendió la presencia de Marcelo Scaglione, el funcionario que designó Mauricio Macri en su momento para intentar hacer entrar a la Argentina a la OCDE. Después se sumaron María Eugenia Estenssoro y otros emprendedores de perfil más militante, lo cual mantuvo a Scaglione en un cómodo segundo plano.
 
El exfuncionario se mantuvo en silencio incluso cuando un participante preguntó si era un grupo opositor y el productor agropecuario Adolfo Storni respondió: "Acá no hay oposición. Solo hay gente como nosotros que quiere cambiar el sistema. Los políticos quieren seguir viviendo de su gasto y nosotros queremos invertir, exportar, progresar. Dos mundos distintos".
 
Por Alejandro Bercovich
 
Fuente: BAE Negocios
 

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23-10-2025 / 08:10
En el ocaso de una campaña sin épica, Javier "el Cipayo" Milei enfrenta el miedo más grande de su propio gobierno: quedar sin el tercio legislativo que sostiene su poder político seudo democrático. El que hace un año prometía "refundar la Argentina", llega a la elección del 26 de octubre devaluado, aislado y con un discurso cada vez más errático, mientras las encuestas anticipan una caída que podría dejar a La Libertad Avanza sin capacidad de defensa en el Congreso.
 
Consultado por Guillermo Andino sobre qué consideraría un "buen resultado", el presidente no habló de ganar ni de convencer, sino de sobrevivir: "Uno que me asegure un tercio en la Cámara, que es una pared de defensa", admitió Milei, resignado a celebrar un empate como si fuera un triunfo. Esa "pared" es lo único que separa al Gobierno anarco capitalista del colapso institucional. Sin ese tercio, el oficialismo perdería poder de veto sobre leyes opositoras, vería caer sus DNU y hasta quedaría a tiro de un eventual juicio político, algo que hoy se comenta en voz baja en despachos peronistas y radicales.
 
Según un informe elaborado por el politólogo Gonzalo Taboada, el Gobierno solo mantendría control con un 39 por ciento de los votos, cifra que nadie se anima a pronosticar. En el escenario más optimista, Milei llegaría a 104 diputados sumando el PRO y algunos gobernadores aliados; pero con un resultado más realista, cercano al 32 por ciento, el oficialismo quedaría a merced de bloques provinciales y de una oposición fortalecida, con 109 bancas y capacidad de bloquear cualquier iniciativa presidencial.
 
En el peor escenario, con un 30 por ciento o menos, La Libertad Avanza ni siquiera lograría conformar el tercio propio ni sumando al PRO, lo que significaría una catástrofe política. "Una elección de 30 por ciento o menos es el número del abismo", señaló Taboada. "En ese escenario el Gobierno dependería de los árbitros, perdería autonomía y quedaría sin margen de maniobra".
 
La situación no sorprende a quienes observan el deterioro del poder libertario. El desquiciado Milei, que se soñó emperador, terminó mendigando apoyo a Donald Trump, mientras su ministro de Economía intenta contener una recesión que ya acumula dos años consecutivos, con inflación persistente y un dólar que sigue escalando.
 
A la crisis económica se suma una soledad política creciente. Karina "la Coimera" Milei se atrincheró en la Secretaría General, Santiago Caputo perdió influencia y el vínculo con los gobernadores aliados se tensó al extremo. El PRO ya no se comporta como socio, sino como tutor de un Gobierno que no logra ordenar su propia tropa.
 
La estrategia electoral del oficialismo se limitó a campañas de miedo, spots improvisados y discursos cargados de enojo, sin propuestas ni respuestas ante el descontento social. Milei dejó de hablar de "reformas estructurales" para conformarse con conservar la silla presidencial y evitar el aislamiento total.
 
"Pasar de un balotaje con 55 por ciento a una legislativa que arranque con un 20 y pico sería un golpe devastador", reconoció un operador libertario que, en privado, admite que el Gobierno festejará si logra un empate técnico. La foto final podría marcar un antes y un después. Si Milei no alcanza el tercio, su relato de liderazgo "anticasta" trucho quedará pulverizado y su futuro político dependerá de los mismos actores a los que prometió "dinamitar". La elección del domingo, más que una prueba electoral, será un plebiscito sobre su propia capacidad de gobernar.
 
La Opinión Popular
 

22-10-2025 / 11:10
A cinco días de las elecciones legislativas de medio término, la economía argentina volvió a quedar atrapada en un torbellino de tensiones cambiarias y el Banco Central debió volver a intervenir para que el dólar mayorista no superara el techo de la banda de flotación.
 
Ni las intervenciones del Tesoro de Estados Unidos, ni la firma del swap con Washington, ni el anuncio de una recompra de bonos alcanzaron para calmar la incertidumbre del mercado, que se mueve bajo una sola lógica: cubrirse como sea ante el riesgo electoral, aun pagando precios récord por el dólar y desarmando posiciones en acciones y bonos soberanos.
 
El sueño de Javier "el Cipayo" Milei de conseguir un megacrédito internacional empieza a tambalearse. Los gigantes financieros de Wall Street pusieron el freno y exigen garantías concretas antes de liberar los 20 mil millones de dólares prometidos. En la Casa Rosada, el discurso libertario suena fuerte, pero los bancos no compran humo: quieren saber quién paga si el país vuelve a tropezar con su historia de impagos.
 
El plan oficial buscaba armar una línea de financiamiento para reforzar reservas y dar aire al Gobierno, pero el entusiasmo se pinchó rápido. Desde el JP Morgan hasta el Citi, todos coincidieron en algo: Argentina necesita mostrar activos reales o un respaldo estatal sólido, algo que Milei se resiste a ofrecer en su cruzada contra el "Estado elefante".
 
La tensión se siente en los despachos. Mientras el ministro Luis "Toto" Caputo negocia contrarreloj, los operadores financieros miran los indicadores y ven lo mismo que los argentinos: un déficit que sigue sin cerrarse y un dólar que sube como fiebre sin Paracetamol. Cada día sin definición profundiza la desconfianza y pone más presión sobre el presidente, que esperaba anunciar el acuerdo como una victoria política.
 
Para los banqueros, el problema no es ideológico sino contable. Quieren garantías, y las quieren por escrito. Sin eso, los 20 mil millones seguirán siendo una promesa tan etérea como las teorías de "mercado libre" que Milei repite frente a los micrófonos. En el país ya se habla de "default técnico disfrazado de negociación", y los rumores empujan los bonos argentinos a la baja.
 
Desde su entorno intentan minimizar la situación, pero las fuentes financieras son tajantes: el préstamo no está cerrado y no lo estará hasta que el Gobierno muestre números concretos. Entre tanto, en los pasillos del poder ya suena un murmullo incómodo: "Si ni los bancos le creen, ¿Quién va a prestarle a la Argentina?"
 
El Banco Central tuvo que vender divisas de las reservas, ya casi exhaustas, para que la demanda mayorista no hiciera volar el techo de la banda cambiaria. Los anuncios oficiales pasan desapercibidos.
 
La Opinión Popular
 

21-10-2025 / 11:10
El yanqui Donald Trump hizo un demoledor diagnóstico sobre la desatrosa situación económica en la Argentina para justificar el "rescate" al gobierno anarco capitalista de Javier "el Cipayo" Milei, un tema que le está generando muchas críticas internas. "No tienen nada, están muriendo", afirmó el presidente. Con ese análisis, el swap no alcanzó, caen las acciones y el dólar quedó a 1% de la banda.
 
Cuestionado por una periodista por la posibilidad de que EEUU compre carne argentina, una medida que perjudicaría a los productores estadounidenses como ya pasó con la soja, Trump se ofuscó y respondió: "Señorita usted no sabe nada de esto, Argentina está luchando por su vida". "Están luchando por su vida. A Argentina no los beneficia en nada. ¿Entiendes lo que eso significa? No tienen dinero, no tienen nada. Están luchando muy duro por sobrevivir, están muriendo", justificó Trump. Lo dijo a pesar de que no se vean cadáveres en las calles.
 
Trump dijo que intentará ayudar a la Argentina a "sobrevivir en un mundo libre" porque le "gusta" el presidente Milei. "Creo que está intentando hacerlo lo mejor que puede, pero no hagas que parezca que lo están pasando bien, están muriendo. Están muriendo", lanzó. Se trata de la segunda vez en menos de una semana que el presidente de EEUU intenta ayudar al chupamedia Milei, pero lo termina hundiendo.
 
El martes pasado, durante la reunión en la Casa Blanca, le reiteró el apoyo, pero advirtió que está atado al resultado de las elecciones del 26 de octubre. "Si pierde, no seremos generosos con la Argentina", dijo Trump generando un desplome en los mercados. El gobierno de Milei tuvo que salir a aclarar por todos lados que se refería a las elecciones de 2027, pero Trump reiteró en sus redes que se refería a las de medio término. Días después, Milei se enojó con un periodista que le preguntó sobre esa frase y enojado respondió que fue malinterpretada por el Grupo Clarín.
 
Las palabras del mandatario yanqui obligaron a una rápida reacción oficial. El vocero presidencial, Manuel "Cara de Piedra" Adorni, buscó relativizar el impacto y pidió "entender el contexto". Sin embargo, terminó admitiendo que "claramente no somos un país al que le vaya bien", al enumerar inflación mensual del 2%, riesgo país en torno a los 1.000 puntos y un clima electoral enrarecido.
 
El Banco Central (BCRA) firmó el acuerdo de swap con EE. UU. por U$S 20.000 millones. A pesar del anuncio, el riesgo país se ubicó por encima de los 1000 puntos, los ADRs de empresas argentinas cayeron hasta 5% y el dólar cerró en $1495. Otro anuncio de la Secretaría de Finanzas, de toma de deuda con el JP Morgan, hizo revertir algo la caída de bonos. No alcanzó con el Tesoro, se suman los "bancos internacionales amigos" al saqueo y la rapiña.
 
Mientras Trump describió a la Argentina como un país "sin dinero" y "peleando por sobrevivir", la respuesta libertaria se redujo a relativizar el golpe y aceptar, a medias, el diagnóstico externo. Como sea, el mercado parece ya no creer en las promesas de ayuda de Trump y espera hechos concretos. Ni siquiera las intervenciones de Scott Bessent comprando pesos han logrado frenar la volatilidad del dólar.
 
La Opinión Popular
 

20-10-2025 / 10:10
La relación entre José Luis Espert y Fred Machado, el acusado por narcotráfico que financió su campaña presidencial en 2019, sigue complicando a La Libertad Avanza, aunque el economista, al que todavía defiende Javier "Cipayo" Milei, ya no encabeza la lista libertaria oficialista. En el último reportaje que otorgó el día que se confirmó su extradición a los Estados Unidos, se reveló el mensaje que Machado le pasó al Gobierno. Soltó una bomba que hizo temblar a más de uno en La Rosada.
 
En una entrevista de ocho horas con la periodista Caro Fernández, de Splendid AM 990, lanzó una advertencia que suena a ultimátum: "Si hablo, se cae el país". Con la extradición a Estados Unidos autorizada por la Corte Suprema, Machado no se guardó nada y apuntó directo al corazón del poder libertario, salpicando a figuras como José Luis Espert, Patricia Bullrich y Alberto Weretilneck con acusaciones que, de probarse, podrían destruir al Gobierno de Javier Milei.
 
El empresario, con un tono que mezcla bronca y desesperación, mandó un mensaje filoso a Santiago Caputo, estratega clave de Milei: "A Santiago Caputo le hago llegar un mensaje: Yo no quiero ir a Estados Unidos. Si esto explota, yo fundo todo. Yo hablo y se cae el país mañana". La respuesta fue: "Mensaje recibido". ¿Qué sabe Machado que pone tan nervioso al entorno presidencial?
 
Con Espert, su exaliado, no fue menos duro. Financió su campaña en 2019, pero ahora lo acusa de darle la espalda. "Espert no tendría que haberme negado. ¿Por qué me negó?", dijo, recordando una advertencia que le hizo en marzo de 2021 sobre los riesgos que corrían. "Le expliqué que irían por él. Pero no me escuchó", disparó con amargura.
 
Las acusaciones también alcanzaron a Patricia Bullrich. Según Machado, habría una triangulación de fondos para su campaña presidencial de 2023, con más de 3 millones de pesos movidos a través de una empresa de la familia Bada Vázquez, de los cuales al menos 215.000 pesos habrían ido a parar a su campaña.
 
Sobre Weretilneck, señaló un supuesto entramado de negocios en Río Negro, con permisos de explotación de arenas silíceas otorgados a Claudio Cicarelli, presunto testaferro del gobernador.
 
En un intento por limpiar su nombre, Machado insistió: "Es una cuestión de plata, no de droga". Sin embargo, la noticia de su extradición lo desmoronó. Entre el ladrido de sus perros y la tensión del momento, suplicó a Fernández: "No me dejes solo". Horas después, un operativo policial lo trasladó para enfrentar su destino en Estados Unidos.
 
La Opinión Popular
 

19-10-2025 / 08:10
Entre el colapso económico, la pérdida de relato y el avance de sus propios aliados, Javier "el Cipayo" Milei enfrenta el tramo final de la campaña convertido en símbolo de su propio fracaso: un presidente sin respuestas, cercado por la realidad y por quienes financiaron su ascenso. El plan "llegar" se quedó sin nafta cuando todavía falta una semana para alcanzar la meta. La impotencia es la tónica en la recta final antes de unas elecciones que se convirtieron en un delicado plebiscito sobre el futuro del gobierno y del país.
 
El proyanqui Milei volvió de Washington DC con una hoja que dice "amigo" y el fibrón que usó Donald Trump para estampar esa dedicatoria. A su regreso dio dos entrevistas en las que se peleó con sus interlocutores (le dijo "marxista" a Eduardo Feinmann y a Esteban Trebucq que le hacía el "caldo gordo a los psicópatas kirchneristas") y confesó que no tiene una solución para los problemas de los argentinos.
 
- El ochenta por ciento apenas si puede llegar a fin de mes y el sesenta por ciento, setenta, llega al día veinte. Les falta dinero en el bolsillo.
- ¿Qué quiere? ¿Que lo emita?
- No, yo no...
- A ver, entonces, emitiendo no se arregla. ¿Cómo quiere que lo arregle? Vamos, dígame. ¿Cómo le pongo plata a la gente?
- El economista es usted.
- No, bueno, pero digo o sea, a ver, digamos.
 
Un día más tarde insistió:
 
- ¿Y la gente que no puede esperar, presidente?
- A ver. A ver, pero, de vuelta. Te hago una pregunta, no puede esperar, a ver, ¿cómo lo resolvemos?
- Es que yo no lo sé.
- No, bueno, entonces.
- Sólo le pregunto.
- No, bueno, pero si vas a hacer el punto, digamos, a ver, empecemos a discutir cómo se resuelve.
 
Para Milei la escasez y la mala calidad de vida de millones de personas es en todo caso un problema intelectual, teórico, en el que no tiene demasiado interés. Dos años después de asumir le sugiere a su interlocutor (no un funcionario, no un asesor, ni siquiera un consultor sino un periodista en el contexto de una entrevista televisiva en vivo) que empiece la discusión.
 
Decir que no le quita el sueño sería una exageración: ni siquiera lo considera un problema, algo que deba resolver. La economía se encargará de hacerlo, cuando deje de existir el riesgo kuka. Suena estúpido, pero es exactamente el argumento presidencial, palabra por palabra.
 
Para la mayoría de los argentinos se trata en cambio de una cuestión muy concreta, a veces de vida o muerte. Este miércoles, en Congreso, en la marcha semanal por el reclamo de una mejora en las jubilaciones, una pareja daba su testimonio a las cámaras de televisión.
 
Él está atravesando un tratamiento contra el cáncer, le sacaron la cobertura de los remedios para aliviar los dolores y los vómitos cuando le hacen quimioterapia. En el hospital sólo le entregan la mitad. Desde los estudios, la cronista sugiere que den un "alias" bancario para recibir transferencias de gente que pueda ayudarlos. No tienen teléfono: tuvieron que venderlo para comprar medicinas. Milei no tiene una respuesta para ellos ni va a tenerla. 
 

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