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El clima en Paraná

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“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
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Nacionales - 13-03-2020 / 08:03
PANORAMA EMPRESARIO SEMANAL

Alberto Fernández y las diez plagas de Olivos

Alberto Fernández y las diez plagas de Olivos
Antes de cumplir los primeros 100 días, el Gobierno ya parece transitar las últimas de sus diez plagas bíblicas. Lo que se pregunta el establishment es si Alberto Fernández tendrá bajo la manga algún truco tan hábil como el de Moisés en el Mar Muerto. Lo de atravesar un desierto, después de dos años de recesión fiera con inflación récord en 30 años, ya no asusta a nadie.
Primero fueron las exigencias del Fondo Monetario. La gira presidencial por Europa y el lobby que desplegaron Jorge Argüello, Gustavo Béliz y Martín Guzmán ante la Casa Blanca consiguieron postergarlas. Después llegaron el dengue y el sarampión, cuyos rebrotes pudieron adjudicarse sin exagerar demasiado al evidente descuido de la salud pública por parte de Mauricio Macri.
 
Más tarde arreció la presión de los acreedores privados, que al principio se entusiasmaron con la "salida uruguaya" -sin quita nominal- pero que ahora amenazan con patear el tablero. En el medio hubo que navegar el ajuste a los jubilados que ganan más que la mínima y estallaron la pelea con los jueces y la interna por los "presos políticos", que todavía sangra.
 
Luego el ala más ideologizada del agronegocio macrista le impuso al resto de los productores un lockout sin gran impacto económico pero con un desgaste político innecesario. Finalmente llegaron la corona-crisis y el desplome del precio del petróleo, dos vendavales totalmente inesperados y de consecuencias todavía imprevisibles.
 
Antes de cumplir los primeros 100 días, el Gobierno ya parece transitar las últimas de sus diez plagas bíblicas. Lo que se pregunta el establishment es si Alberto Fernández tendrá bajo la manga algún truco tan hábil como el de Moisés en el Mar Muerto. Lo de atravesar un desierto, después de dos años de recesión fiera con inflación récord en 30 años, ya no asusta a nadie.
 
La oferta de Guzmán a los acreedores se conocerá en las próximas horas. No lo verá en vivo y en directo su mentor, el premio Nobel Joe Stiglitz, quien debió postergar sin fecha una conferencia que tenía prevista para el próximo viernes en el CCK. La CEPAL, que organizaba el seminario, decidió extremar las precauciones antes de que la obligación de guardar cuarentena para todos frustrara definitivamente el evento.
 
Es una ausencia que el ministro lamentó en la intimidad, porque entrevé por delante semanas de mucha presión, con pocas voces amigas en el escenario internacional.
 
La oferta, según dijeron tres fuentes del equipo económico, va a ser bastante más agresiva de lo que esperaba el mercado en un principio. Y aunque el desplome de los bonos de las últimas dos semanas haga aparecer la quita como algo menos doloroso, la debacle global no ayuda a embellecer los números.
 
Al fin y al cabo, los títulos de deuda de otros países latinoamericanos también pasaron a rendir menos que antes del virus. Y esos países no se balancean hacia una cesación de pagos.

 
Contagio
  
Aunque no tengan ejércitos, los fondos de inversión que tienen que subir o bajarle el pulgar a lo que ofrezca Guzmán son más poderosos que los gobiernos del G-7 a los que el Presidente convenció de apoyar a la Argentina en el directorio del FMI. "Son los mismos tipos a los que llaman para manguearles guita los ministros y secretarios de Finanzas con los que nos reunimos hasta ahora", graficó una de las fuentes.
 
Con los puentes aéreos cortados, el ministro prevé mantener videoconferencias con los jefes de todos esos fondos desde hoy hasta entrada la semana que viene. "Vamos a gastar el Skype", bromeó el informante.
 
Una vez presentada la oferta, Fernández siente que podría declarar la cesación de pagos sin el costo político que habría tenido hacerlo el 10 de diciembre. Y en su mesa chica, el crac global amplificó la voz de los defolteadores frente a los negociadores. "Cada dólar que pagamos de deuda es un dólar que no vamos a crecer. Esto no se puede estirar más, pero no porque no queramos sino porque se acaban los dólares", opinó la segunda fuente, más identificada con el primer bando.
 
Es una opinión cada vez más contagiosa, porque la promesa de encender la economía fue una de las centrales de la campaña del Frente de Todos y sigue lejos de cumplirse. Es lo que obsesiona por ejemplo al presidente del Banco Central, Miguel Pesce, cuyo directorio interrumpió ayer la sostenida rebaja de tasas de interés que venía impulsando, del 63% al 38% en apenas dos meses. Pero que prevé retomar la senda bajista apenas pueda. En principio, la semana que viene.
 
En el Central celebraron que la inflación de febrero haya sido del 2% y aseguran que deja espacio para rebajas adicionales en la tasa de referencia. En un escenario de recesión global como el que se avecina, dicen, es lo aconsejable para que los bancos ofrezcan más crédito y refinancien los que vienen ahogando a las empresas desde el macrismo. Algunos bancos respondieron bien al estímulo, como el Macro. Otros, como el Santander y el HSBC, están en la mira de los técnicos de la calle Reconquista por no haber trasladado la rebaja a sus clientes, en especial Pymes.
 
La contracara de la rebaja de tasas, que es haber vuelto a encender la "maquinita", no generó la inflación que vaticinaban los economistas de la City. En el Central lo adjudican a que el circulante se había reducido a un mínimo histórico. Y a que la expansión no fue a financiar gasto público con contrapartida de mayor consumo sino pagos de deuda en pesos.
 
¿Puede haber fogoneado esa emisión de pesos la suba de los dólares paralelos, como el blue o el contado con liqui? No es algo que preocupe a Pesce. "Están saliendo capitales de todos los países, y acá como hay control de cambios salen vía contado con liqui. Nada sorprendente", dicen cerca suyo.
 
 
Epidemia
  
En el mundo de la energía, el crac de la OPEP dejó todo patas para arriba. La ruptura entre Rusia y Arabia Saudita y el derretimiento del precio del barril llegó en pleno congelamiento de tarifas y combustible pero gatilló reclamos inmediatos en todo el sector. A todos les cambió todo: desde los petroleros de Guillermo Pereyra hasta el dueño de Panamerican Energy, Alejandro Bulgheroni, quien compartió mesa la semana pasada con Alberto en el Consejo Interamericano del Comercio y la Producción (CICyP).
 
El Gobierno ya definió una salida, aun cuando no se formalizará hasta la semana del 23 de marzo. Es el viejo barril criollo, un precio sostén para los petroleros que procurará mantener la actividad en los pozos al costo de sacrificar una potencial rebaja del precio de los combustibles que podría ayudar a cumplir con aquella promesa de encender la economía. Estará entre 42 y 52 dólares, bien por arriba de los 33 donde terminó ayer el Brent.
 
El problema no es que se queden sin trabajo los 8 o 10 mil petroleros que pueden prender fuego la Patagonia. Para los consumidores sería incluso más barato pagarles el sueldo y mandarlos a la casa que sostener un precio artificialmente alto para el barril extraído del suelo local. La razón es otra, según la tercera de las fuentes consultadas en el equipo económico. "Lo que pasa es que sin barril criollo, YPF se funde", graficó.
 
En rigor, a nadie en el sector le conviene abrir la importación y apagar los pozos. A las petroleras integradas (PAE e YPF), porque producen acá. A las refinadoras puras (Trafigura y Raizen), porque tienen más rentabilidad en sus refinerías locales que en las del exterior. Por eso prefieren trabajar a full. Mucho menos a los gobernadores, que necesitan cobrar regalías. Son ellos los que le pidieron a Matías Kulfas un barril criollo más caro, del orden de los 52 dólares.
 
Aunque pueda servir para hacer equilibrio entre mantener planchado el precio de los combustibles y sostener la actividad en los pozos tradicionales, el barril criollo es solo un parche. El crac petrolero trajo otro problema: enterró a Vaca Muerta en la inviabilidad total y absoluta. Y de ahí pensaba Alberto sacar parte de los dólares que les va a prometer a los bonistas. Otra razón para el endurecimiento de Guzmán.
 
¿Y las tarifas de gas y luz? En el Ministerio de Desarrollo Productivo dicen que alcanza con subirlas un 25% en junio. Bastante menos que la inflación esperada para este año, pero bastante más que cero. Al fin y al cabo, la compañía mayorista eléctrica CAMMESA paga 62 dolares por megawatt de generación y los consumidores le pagan 46 dólares a las distribuidoras. Lo que hay en el medio es la cuenta de subsidios, que llegó a USD3.000 millones en 2019 y que alcanzaría USD4.700 millones este año de no mediar aumentos.
 
En términos reales, si se diera ese escenario, las tarifas se abaratarían. Pero en pesos subirían otra vez, con la economía todavía sin encenderse. Todo un desafío para quien puede haber sobrevivido a las diez plagas pero todavía no atisba la marea baja del Mar Muerto.
 
Por Alejandro Bercovich
 
Fuente: BAE Negocios
 

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18-12-2025 / 08:12
Tras conseguir la media sanción de un presupuesto 2026 que multiplica el ajuste, solo favorece a los más ricos y carga los costos sobre los desprotegidos, el Gobierno de Javier "el Loco" Milei sufrió un duro golpe con el rechazo al capítulo que derogaba el Financiamiento Universitario y la Emergencia en Discapacidad. También quedaron fuera la restricción de la ley de zona fría y la desindexación de la AUH.
 
El Gobierno consiguió la aprobación en general el Presupuesto 2026, pero sufrió una derrota clave: la oposición logró voltear completo el capítulo 11, donde se concentraba la derogación del financiamiento universitario y de la emergencia en discapacidad, dos leyes que el oficialismo insiste con incumplir. Tras una sesión que comenzó a las dos de la tarde y se extendió hasta la madrugada, Lule Menem y Diego Santilli ofrecieron concesiones de todo tipo a gobernadores y bloques aliados para blindar el capítulo entero.
 
Sin embargo, al momento de la votación sólo reunieron 117 votos afirmativos, mientras que la oposición alcanzó 123 rechazos y sumó además dos abstenciones. Es la tercera vez en un semestre que el Gobierno pierde frente al financiamiento universitario y la emergencia en discapacidad, si se cuentan la sanción original de las leyes, la insistencia parlamentaria tras el veto presidencial y ahora el intento de derogación vía presupuesto. También se rechazaron la eliminación de las actualizaciones automáticas de la Asignación Universal por Hijo y demás asignaciones familiares.
 
Envalentonado por el triunfo electoral de octubre, el oficialismo buscó acelerar la motosierra y eliminar dos normas que el Congreso sancionó, el Ejecutivo vetó y ambas Cámaras ratificaron con mayoría agravada, más de los dos tercios de los presentes. A pesar de las arduas negociaciones, el reparto de ATN y las promesas de la Casa Rosada a los gobernadores aliados, la catamarqueña Fernanda Avila, se les dio vuelta y voto en contra el capítulo 11, al igual que los tres tucumanos del bloque Independencia y los tres salteños de Innovación Federal.
 
Para destrabar el trámite, el oficialismo había intentado a último momento una maniobra más: incorporó la adecuación de la coparticipación de la Ciudad de Buenos Aires y un refuerzo de 21.000 millones de pesos para el Poder Judicial, bajo la administración del Consejo de la Magistratura. El objetivo fue evitar el naufragio del capítulo completo. "Le ponen un condicionamiento al Poder Judicial para que ni se le ocurra judicializar el capítulo XI porque se les cae el financiamiento. Son unos chantas y eso es lo que están haciendo ahora", denunció el jefe del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez.
 
A la hora de votar, resultaron decisivas las abstenciones de los radicales Cipolini y Schneider. Desde sus redes, la diputada Cecilia Moreu celebró la victoria de la oposición. "Quisieron jugar sucio y les salió mal. Pese a las múltiples maniobras extorsivas con las que el oficialismo y los sectores cómplices intentaron blindar la derogación de las leyes de Emergencia en Discapacidad y Financiamiento Universitario, logramos sostenerlas. Basta de dilaciones, son leyes votadas y ratificadas por el Congreso Nacional. Vamos a seguir dando la pelea para que entren en vigencia y se apliquen como corresponde", escribió en X.
 
Durante el debate varios diputados habían advertido que judicializarían la norma, de aprobarse. Los diputados Maximiliano Ferraro y Eduardo Valdés, fueron los encargados de advertir que el intento del oficialismo vulneraba el artículo 20 de la Ley 24.156 de Administración Financiera que en relación al presupuesto establece que "no podrá contener disposiciones de carácter permanente, ni reformar o derogar leyes vigentes".
 
La Opinión Popular
 

17-12-2025 / 09:12
A días de cumplir su segundo año de gestión, el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei busca aprobar su primer presupuesto sin frenar en las curvas. Tras conseguir dictamen de mayoría con ayuda de gobernadores aliados, este miércoles se trata la "Ley de Leyes" en Diputados. Envalentonada, Patricia Bullrich buscará incluirlo también en la sesión del viernes 26, en la que se debatirá la reforma laboral en el Senado. Para sorpresa de la oposición, el dictamen deroga el Financiamiento Universitario y la Emergencia en discapacidad. Ambas iniciativas fueron sancionadas por el Congreso, vetadas por el Gobierno e insistidas en ambas cámaras. El nuevo proyecto deroga el ajuste automático de las asignaciones familiares y la Asignación Universal por Hijo y le da discrecionalidad al gobierno.
 
En un súper miércoles, la Casa Rosada intentará disciplinar al Congreso con la ley de "Disciplina Fiscal", que penaliza a quienes atenten contra el excel libertario y buscará avanzar con la aprobación de un blanqueo blue rebautizado "inocencia fiscal". La CGT llamó a movilizar contra el desfinanciamiento de la educación, la ciencia y la tecnología.
 
Al Gobierno le quedan menos de diez días hábiles para cumplir los deberes que le fijaron Donald Trump y el FMI: tener un presupuesto y sancionar una reforma laboral. Ayer, la Comisión de Presupuesto y Hacienda que preside Bertie Benegas Lynch dejó listo el dictamen que el oficialismo buscará aprobar este miércoles. Los apoyos para reunir las 28 firmas -sobre un total de 46- llegaron de la mano de sus aliados del PRO, la UCR y el MID, y de los gobernadores de Catamarca, Tucumán, San Juan, Mendoza y Misiones.
 
De esas 28 firmas, seis fueron en disidencia, lo que obliga al Gobierno a continuar las negociaciones si no quiere correr una suerte similar a la que atravesó durante el tratamiento de la Ley Bases, que perdió buena parte de su articulado en el camino.
 
Para asegurarse los respaldos, la administración de Milei abrió la billetera. En los últimos días, los gobernadores colaboracionistas recibieron Aportes del Tesoro Nacional. El misionero Hugo Passalacqua recibió 12 mil millones de pesos; el chaqueño Leandro Zdero, 11 mil millones; y el tucumano Osvaldo Jaldo, 20 mil millones. Esta última fue la cifra más generosa que el Gobierno envió a una provincia en todo 2025.
 
Además, el lunes por la noche la Casa Rosada envió al Congreso la reforma de la Ley de Glaciares. La iniciativa habilita a las provincias a avanzar con proyectos mineros sobre reservas estratégicas de agua. De aprobarse, Catamarca, Mendoza y San Juan quedarían entre las principales beneficiadas para hacer negocios con las multinacionales yanquis que miran de reojo.
 
Si bien existe consenso entre la mayoría de los bloques en que el Gobierno no puede seguir administrando el Estado sin un presupuesto, el proyecto no contempla partidas para recomponer los ingresos de los jubilados, no prevé mecanismos para reactivar la obra pública ni incluye un solo artículo orientado a impulsar la actividad económica.
 
Todo el andamiaje se reduce a blindar el equilibrio fiscal, que Milei alcanzó a fuerza de recortar en todas las áreas sensibles del Estado, a excepción del pago de los intereses de la deuda. Además, las metas que fija parecen a simple vista difíciles de cumplir. El proyecto prevé un crecimiento de la economía del 5 por ciento del PBI, una inflación anual del 10,1 por ciento y proyecta un dólar a 1423 pesos para diciembre de 2026. Esto último está por debajo del precio actual.
 

16-12-2025 / 10:12
Las reformas que impulsa el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei, en especial la laboral, buscan sin disimulo convertir a nuestro país en una economía colonial de enclave, productor de materias primas, sin industria y en donde sobre más de la mitad de los argentinos. En el país cierra una empresa por hora y 400 trabajadores por día se quedan sin empleo. El cálculo surge de tomar en cuenta que "el Peluca" y su motosierra destruyeron 19.114 firmas dejando en la calle a algo más que 264 mil asalariados registrados en sus dos primeros años de gobierno.
 
Para Argentina es un cambio dramático, pues es uno de los países en donde la legislación laboral del siglo XX más avanzó en el sentido de proteger a los trabajadores. Por esa razón, por ese "mal ejemplo" para la región latinoamericana, el objetivo del FMI de retroceder más de un siglo en las condiciones bajo las cuales se desenvuelve el mundo laboral, haya sido tomado con tanta energía por los últimos gobiernos de derecha y mucho más ahora bajo el modelo reaccionario extremo que impulsan los desquiciados Milei, Sturzenegger, Caputo y cía.
 
Todos y cada uno de los puntos del extenso proyecto que acaba de aterrizar en el Congreso es un muestrario de la ideología conservadora y retrógrada que alienta a este gobierno como fiel representante de la elite económico-financiera también conocida como "círculo rojo". A tal extremo esto es así que el gobierno ni se molestó en desmentir lo que hace un tiempo se conoció: los autores materiales de este engendro son los estudios de abogados que prestan sus servicios a las corporaciones más poderosas, los llamados "dueños de la Argentina". Es el gobierno para los ricos.
 
El sueño húmedo de esta minoría enferma de codicia es voltear, una por una, todas las protecciones legales que tienen los trabajadores argentinos, aunque también debe decirse que buena parte de ellas ya fueron demolidas de hecho por el propio accionar de un mercado laboral que, con independencia de los gobiernos que se sucedieron desde el estallido social y la gran crisis económica de 2001, dejaron a casi la mitad de los asalariados desempeñándose "en negro", al margen de la formalidad.
 
Lo que veremos en las próximas horas en el Congreso les dejará en claro a los argentinos quiénes son los senadores y diputados dignos de ser llamados oposición y quiénes se someterán ante las ofertas de dinero que ya está circulando por oscuras vías. Gobernadores dialoguistas también estarán en el "toma y daca" que este gobierno puso en marcha sin que la gran prensa porteña, convertida en vocera oficial de la Casa Rosada, hable como lo hacía habitualmente de "látigo y billetera" con otros gobiernos que nunca llegaron a extremos de manipulación de los recursos fiscales como el actual.
 
El triunfo electoral de octubre de Milei es el combustible que aceleró la decisión de avanzar con este proyecto y con otros que también buscan reconfigurar en profundidad el diseño social, económico e institucional de la Argentina. La llamada ley de tierras, de glaciares, la reforma educativa, la tributaria, etc. conforman una ofensiva de los sectores concentrados de la economía contra el conjunto social. Convertir a este país en una economía colonial, sin industria, sin ciencia, sin educación de calidad, sin protección social ni laboral para las mayorías populares es una meta que está en las mentes de los libertarios. La política de tierra arrasada que se proponen les resulta indiferente, pues la ambición de poder -político y económico- está por encima de todo.
 
La CGT convocó a una movilización a la Plaza de Mayo para el jueves a la que adhirieron las dos CTA, ATE y otros gremios, el peronismo, organizaciones sociales y partidos políticos de izquierda.  Para aterrorizar, la especialidad del mileísmo, aplicarán el protocolo antipiquetes. Si la movilización es masiva, cuesta creer que la amenaza de represión violenta se cumpla. Crispar el clima social en vísperas de fin de año, en nuestro país, nunca tuvo buenos resultados para los gobiernos.
 
La Opinión Popular
 

14-12-2025 / 09:12
Bajo el mote de reforma laboral se esconde la decisión de Javier "el Loco" Milei que pretende consagrar institucionalmente, en 2026, los objetivos que en 1976 se planteara la dictadura militar genocida. Los cambios en el proceso de acumulación en el marco del genocidio, el endeudamiento, la valorización financiera y la fuga de capitales, la desindustrialización, el modo de incorporación del cambio tecnológico y la llegada del capitalismo de plataformas, produjo una sustancial alteración de la relación capital-trabajo, obviamente en desmedro del conjunto de los trabajadores.
 
En ese marco de brutal regresividad en las condiciones materiales de vida de quienes trabajan, se sucedieron en las distintas administraciones conservadoras cambios normativos, todos con la misma dirección. 1. Abaratar el precio del trabajo. 2. Facilitar el despido. 3. Debilitar los convenios colectivos. 4. Limitar y destruir la organización sindical.
 
Estas orientaciones fueron parte de los cambios normativos que impulsó la dictadura militar, de las leyes que llevaron adelante Cavallo, Menem y De la Rúa, del frustrado intento de Macri y también del proyecto de Milei. Proyecto este cuya profundidad en términos de alteración de la Ley de Contrato de Trabajo solo es equiparable a lo planteado hace 50 años por la dictadura militar.
 
Además, se lleva a cabo la directa eliminación de los costos del despido a partir de la creación de un Fondo de Asistencia Laboral que se financiará con tres puntos de las actuales contribuciones patronales. A la vez, se les reduce en un punto adicional los aportes a los empresarios en relación a las obras sociales que dejarían de percibir un punto de los que están recibiendo en la actualidad.
 
En síntesis, cuatro puntos de los aportes patronales dejan de financiar las jubilaciones y la salud de los trabajadores, con el objeto de eliminar los costos del despido y reducir los costos laborales. Situación ésta que implica una redistribución de ingresos desde los trabajadores al capital, cercana a los 3000 millones de dólares.
 
Las experiencias internacionales y la propia experiencia nacional indican que estas propuestas solo profundizan la desocupación, la informalidad y la pobreza. Es más, aspectos laborales de esta naturaleza son los que contenía la Ley Bases y que ya tuvieron dos años de aplicación en el curso del gobierno de Milei. Años que lejos de promover el empleo registrado, coexisten con la destrucción de 222 mil puestos de trabajo formales registrados de los cuales 139 mil son del propio sector privado, al tiempo que el monotributo y los asalariados no registrados constituyen las formas de inserción laboral de mayor importancia en los últimos dos años.
 
Por si esto fuera poco, los modelos que pregonan los funcionarios libertarios como objetivos a alcanzar por la Argentina, no hacen más que negar con la evidencia lo que el propio gobierno pregona para justificar lo que propone. Poner como ejemplo a seguir países como Paraguay o Perú, que prácticamente carecen de legislación laboral, resulta inentendible. Estos dos países exhiben, aún sin legislación laboral, niveles de informalidad superiores a los que hoy exhibe la Argentina.
 
Para frenar esta ofensiva hay que convocar a la sociedad a discutir la necesidad de relaciones laborales diferentes para un país distinto al que construye Milei. Para eso necesitamos relaciones laborales que se edifiquen en base a la redistribución del ingreso, la revalorización del trabajo y la necesidad de expandir derechos para todos aquellos que trabajan independientemente del tipo de inserción laboral que tengan.
 
La Opinión Popular
 

13-12-2025 / 09:12
El proyecto de país que perfila el gobierno anarco capitalista de Javier "el Loco" Milei tomó el aspecto de una sociedad sin derechos organizada por el mercado. El mercado elimina el concepto de soberanía y decidirá quién irá preso y quién se tomará vacaciones. A su vez, el mercado está organizado por una escala jerárquica según el poder económico.
 
O sea: la libertad de los libertarios es como la milanesa tucumana hecha con papel higiénico. Y de postre: inflación. Si alguno pensó que el esfuerzo valía la pena, el 2,5 de inflación -medido por un Indec que todo el mundo sabe trucho-- le dio una mala noticia: se quedó sin trabajo, se quedó sin empresa, y además tiene inflación.
 
En la misma semana asumió Joaquín Mogaburu como subsecretario de Derechos Humanos y se presentó el proyecto de reforma laboral en el Congreso. El nuevo funcionario es un personaje ligado a los represores y da cursos en los cuarteles sobre "memoria completa".
  
Mogaburu aboga por la conciliación y el perdón a los genocidas. El combo es coherente con el protocolo de seguridad que criminalizó la protesta social, el decreto que permitió a las fuerzas armadas intervenir en conflictos internos y la eliminación del derecho a huelga y otros derechos como lo estipula la reforma laboral enviada al Congreso.
 
Durante el mes hubo decenas de actos sobre derechos humanos en centros culturales, casas de la memoria y en plazas de todo el país. Y el jueves se realizó un festival en la Plaza de Mayo encabezado por Madres, Abuelas y el Serpaj de Adolfo Pérez Esquivel. Al mismo tiempo, la CGT anunciaba un acto público para oponerse al proyecto de ley enviado al Congreso.
 
No hay derechos humanos y no hay derechos laborales. No hay derecho a la protesta y no hay derecho que proteja contra la tortura y la violación como reclaman los que piden la libertad de torturadores y violadores que actuaron tras haber usurpado el Estado durante el golpe genocida. No hay sujetos de derecho en esta sociedad que conciben los libertarios y que ha sido votada por muchos que perderán los derechos que tenían.
 
Con el mercado se come, con el mercado se educa, con el mercado se cura. Si eso era difícil con la democracia, el mercado ni se lo plantea porque el único derecho que reconoce es el del que tiene más capital. El mercado habla de méritos, pero los derechos no se ganan. Los derechos implican también responsabilidades, pero no se ganan por méritos. Al menos la democracia reconoce que todos tienen derecho a comer, a la educación y a la salud. Después dependerá de los gobiernos proveer esos derechos.
 
Los libertarios inventaron una democracia con voto, pero sin derechos. Y los derechos son para todos porque son inherentes a la condición del ser humano. Si son para pocos, no califica. La democracia se construye sobre los derechos ciudadanos. Sin esos derechos básicos no hay sistema democrático. Este gobierno habla de democracia y libertad, pero cuando hace la milanesa, le pone papel higiénico en vez de libertad y democracia.
 

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