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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 07-03-2020 / 09:03
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

Macrismo piquetero imposible

Macrismo piquetero imposible
¿QUÉ HAY DETRÁS DEL PARO DE LAS PATRONALES RURALES? Esta semana la derecha histórica estuvo representada por los medios hegemónicos y las patronales del campo con un esquema sectario de bloquear puentes con el Gobierno pero sin propuesta alternativa. Estos medios critican al oficialismo, pero no se atreven a defender al macrismo que ellos respaldaron. Es insólito que el primer paro que le decretan a este Gobierno venga precisamente del sector que más ganó, se enriqueció, fugó la plata y es el responsable de la crisis que tiene la Argentina. Los eternos ganadores de la historia argentina no se resignan a poner algo más de su bolsillo.
El estilo de Alberto Fernández no es confrontativo, pero la corporación de medios que respaldó a Mauricio Macri salió con los tapones de punta tras su discurso en la Asamblea Legislativa. Tampoco buscó la guerra con las patronales del campo que formaron parte del gobierno macrista, pero ellas se la declararon a él. Hay un núcleo duro conservador, histórico, que estuvo a la cabeza de la anterior gestión, que se puso más agresivo tras la derrota electoral.
 
Hay dos climas opuestos que transcurren en paralelo. Mientras las encuestas hablan de que la imagen positiva del gobierno oscila entre el 60 y el 70 por ciento, la reacción intempestiva de las patronales rurales y la hostilidad mediática buscan crear la impresión de un rechazo extendido contra el gobierno.
 
La Mesa de Enlace quiere mostrar una gesta de reacción en cadena similar a la que se produjo en 2008 cuando apenas había asumido Cristina, a raíz de la resolución 125. La propuesta había sido diseñada por el entonces ministro de Economía Martín Lousteau, que ahora se opone a una medida mucho más estudiada y cuidadosa que la de su inspiración.
 
Hay un gobierno peronista que recién asume y que ha lanzado una propuesta de aumento de las retenciones. Hasta allí llegan los parecidos y allí se acaban. La confrontación con las patronales rurales está planteada por ellos mismos como una disputa de poder. Es desmedida la relación entre el nivel de la protesta y las medidas del gobierno.
 
Es evidente que no se trata de los tres puntos que aumentan las retenciones a la soja, sino de las discusiones futuras sobre plazos para la rendición de divisas, el blanqueo de las transacciones y su control. La medida de fuerza se anunció cuando aún no se sabía cómo serán afectados los productores.
 
En el Gobierno hay cierto malestar porque aseguran que el diseño de la segmentación detallista entre cultivos, zonas geográficas y niveles de producción fue propuesta por la Federación Agraria. El Gobierno, afirman, se apropió de la propuesta de la FA, que ahora protesta contra las medidas que ella misma propició.
 
La que propuso el lockout patronal de cuatro días fue CRA y los demás organismos no estaban muy de acuerdo. La Sociedad Rural, incluso, dudaba por el momento político, pero Coninagro y la FA estaban en contra. Entonces la CRA se cortó sola y anunció el lock out para la próxima semana y terminó por arrastrar a los otros tres organismos que no quisieron forzar un rompimiento de la Mesa de Enlace.
 
La segmentación para impedir que fueran afectados los pequeños y medianos productores no pudo frenar la protesta rural, pero generó muchas diferencias en el frente interno. Resulta una incongruencia que la mayoría de los involucrados en la protesta no son perjudicados.
 
De hecho, las seccionales de Pergamino y Tandil de la FA se declararon en contra de lo decidido por la dirección de la Federación. Y muchos otros representantes de pequeños y medianos productores empezaron a desmarcarse.

 
El conflicto de 2008 impactó en la sociedad porque pudo repercutir en las zonas urbanas. Pero era otra época. Ahora, la sociedad viene agotada por los cuatro años de gobierno de Mauricio Macri que destruyó la economía y en el que las patronales rurales fueron corresponsables. La medida de fuerza, más que conflicto gremial, es la escenificación de una disputa de poder, es una medida política del macrismo.
 
En 2008, esas patronales, aliadas con las grandes corporaciones mediáticas, podían embellecer una opción política hacia la derecha. Aprovecharse de la potencia mediática que las respaldaba para instalar un sentido común donde sus representantes eran celebrados como los más idóneos y desinteresados. Pero esa gente destruyó la economía en estos cuatro años y ahora son impresentables.
 
Los productores rurales decretaron un conflicto político cuando son impotentes para plantear una alternativa política, porque la que podrían -el macrismo- está absolutamente desprestigiada. Con esa posibilidad tan limitada les será difícil hacer pie en las zonas urbanas, más allá de ese núcleo duro histórico de la derecha.
 
En contraposición al abroquelamiento del núcleo histórico de la derecha, el congreso del Partido Justicialista, que se realizó el jueves en el miniestadio de Ferro mostró un peronismo flexible para recomponerse, en un rumbo que parece definitivo.
 
El PJ no cambió. Prácticamente al comenzar la reunión, la mención a la vicepresidenta Cristina Kirchner produjo una fuerte ovación. José Luis Gioja está al frente del partido desde 2016 y lo encabezó cuando se produjeron las escisiones que regresaron el jueves.
 
Fue notoria la presencia de los delegados de Córdoba, que no habían participado en nueve años. Así como la participación de la delegación completa de la provincia de Salta, que también se había alejado.
 
Gran parte de los votos que logró el gobernador Juan Schiaretti en Córdoba fueron a Macri a nivel nacional. Es difícil que este acercamiento de Schiaretti se hubiera producido si una parte de ese voto no cambiaba a una posición de aceptación o expectativa hacia el gobierno de Alberto Fernández.
 
Algunos medios explican este acercamiento porque el Presidente habría empezado a pagar la deuda de la Nación con la provincia. Pero esta explicación resulta insuficiente porque la confluencia no es solamente de los cordobeses, sino también de otros sectores que se habían distanciado. Otros de los que regresaron explican que con el gobierno macrista les era imposible hacer una oposición dura porque después eran represaliados.
 
Es probable que cada uno de esos fenómenos haya aportado al proceso de recomposición del PJ. Del congreso salió un partido fortalecido, lo cual favorece también a las fuerzas no peronistas del oficialismo. Y de la misma manera resultó favorecido el gobierno, que obtuvo un respaldo muy claro y sin condicionamientos.
 
El documento respalda todas las decisiones del Gobierno y puntualiza en la resolución de la deuda externa, al tiempo que expresó su preocupación por la cantidad de "detenciones irregulares" y mencionó al lawfare como una práctica que debe ser extirpada.
 
Si bien se ha prestado a polémica el término para referirse a los presos políticos del macrismo, la mención implica que el tema constituye preocupación oficial del PJ.
 
El mismo día, el ex ministro Julio De Vido recuperó su libertad por decisión de un tribunal y Cristina Kirchner se refirió a las declaraciones del periodista de La Nación Carlos Pagni, quien reconoció que una tapa que había preparado ese medio para presionar a los jueces, disparó la escalada de prisiones preventivas irregulares.
 
La vicepresidenta agregó que La Nación buscaba una tapa sobre corrupción en el kirchnerismo para disimular el escándalo de los Panamá Papers que estaba obligada a publicar. Cristina Kirchner se preguntó qué esperaba la Corte para tomar medidas. "Ya veremos en su momento lo que corresponda hacer", respondió la jueza Elena Highton de Nolasco a la radio Futurock.
 
En las encuestas sobre el prestigio de las instituciones, el Poder Judicial, la Corte y los jueces son de los que tienen peor imagen, sobre todo los jueces, que no pasan del 12 por ciento de imagen positiva.
 
La corporación de medios no puede sonreír cuando Alberto Fernández habla de lawfare, porque fue protagonista principal de ese mecanismo. Está obligada a darse por ofendida. Cada vez que en Clarín tienen que mencionarlo, dicen: "lo que los kirchneristas califican como lawfare".
 
La pésima imagen del Poder Judicial demuestra que la mayoría de la sociedad reconoce esa forma de corrupción de la información y la justicia.
 
Esta semana, el congreso del PJ confirmó al peronismo como fuerza popular transformadora. Menemistas y aliados del macrismo prácticamente han desaparecido.
 
Esta semana la derecha histórica estuvo representada por los medios hegemónicos y las patronales del campo con un esquema sectario de bloquear puentes con el Gobierno pero sin propuesta alternativa. Estos medios critican al oficialismo, pero no se atreven a defender al macrismo que ellos respaldaron.
 
Por Luis Bruschtein
 
Fuente: Página12
 

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15-11-2025 / 10:11
Desde mayo la tendencia inflacionaria es al alza pero el IPC del Indec está lejos del sufrimiento de los bolsillos argentinos. Fuertes subas sub representadas que marcan un pulso en la calle muy distinto al que registra la estadística oficial. Es la mentira de las canastas de pobreza e indigencia. En ese marco, el Gobierno de Javier "el Loco" Milei atraviesa un momento de creciente desgaste político y social, marcado por una serie de errores estratégicos, decisiones económicas controvertidas y promesas de campaña que se han diluido con el paso del tiempo.
 
Aunque el presidente continúa sosteniendo su discurso de reformas estructurales y combate contra la "casta", distintos sectores señalan falencias de gestión, inconsistencias doctrinarias y retrocesos que han afectado tanto su imagen como el rumbo de la administración. Uno de los principales focos de crítica apunta a la política económica. Pese a haber prometido libertad absoluta de mercados, el oficialismo implementó un esquema de devaluaciones administradas que contradice su discurso inicial.
 
Mientras se aplicó un crawling peg que deterioró salarios, jubilaciones y capacidad de consumo, también se produjo un reacomodamiento financiero que impactó sobre pymes y sectores productivos. El desarme de instrumentos financieros, como las letras estatales, generó un clima de incertidumbre que especialistas atribuyen a errores propios de gestión más que a herencias recibidas.
 
La gobernabilidad es otro frente de debilidad. Sin una base legislativa sólida y con tensiones internas, el oficialismo se apoyó recurrentemente en decretos, lo que debilitó la capacidad de negociación y profundizó la distancia con fuerzas aliadas y opositoras. A ello se sumó un episodio político costoso: la fallida estrategia de forzar un plebiscito anticipado, que derivó en una derrota y dejó al Presidente expuesto en su momento de mayor fragilidad.
 
La estructura de poder extremadamente concentrada, especialmente en el círculo íntimo más reducido, manejado autoritariamente por su hermana Karina, también es señalada como un factor que limita la capacidad de reacción ante crisis. Otro golpe duro llegó con el escándalo de la criptomoneda LIBRA, impulsada desde sectores cercanos al oficialismo y que terminó desplomándose abruptamente.
 
La polémica, bautizada como "Cryptogate", dañó la credibilidad presidencial, instaló dudas sobre el rol corrupto de funcionarios vinculados al proyecto y abrió interrogantes sobre eventuales responsabilidades políticas. A esto se suman los efectos sociales del ajuste. Los recortes profundos en salud pública redujeron programas, afectaron personal y dejaron en situación crítica a áreas sensibles, lo que despertó fuertes cuestionamientos desde organizaciones médicas y sociales. La contradicción entre el discurso de eficiencia estatal y la caída de prestaciones esenciales alimenta críticas sobre la orientación del ajuste.
 
En paralelo, varias promesas centrales de campaña quedaron inconclusas. La privatización de Vaca Muerta y de empresas estatales no avanzó; la ruptura de vínculos comerciales con países catalogados como "comunistas" quedó en declaraciones simbólicas más que en acciones concretas; y el supuesto desmantelamiento del sistema de planes sociales no llegó acompañado de mejoras sostenibles en la asistencia. Incluso afirmaciones erróneas sobre vacunas, como en el caso de la prevención del dengue, generaron malestar por la falta de precisión en cuestiones de salud pública. Con este panorama, Milei enfrenta un desgaste que combina problemas económicos, errores políticos y promesas que no lograron materializarse.
 
La Opinión Popular
 

15-11-2025 / 09:11
En una sincronía que se ha repetido en la historia, al tiempo que en Naciones Unidas el representante del gobierno argentino acusaba de corruptas a las víctimas de la dictadura y a sus familiares, en Washington se anunciaba un acuerdo con el gobierno de Javier "el Loco" Milei de subordinación y entrega. En Argentina, la violación de los derechos humanos, o su negación como en este caso, siempre tuvo su correlato con una relación de sumisión abyecta con Estados Unidos. La injerencia yanqui sobre su colonia argentina se profundiza. 

El miserable discurso pronunciado en la Comisión contra la Tortura de la ONU generó rechazo entre los demás presentes. En general, revictimizar a personas que han sufrido las peores aberraciones en torturas, violaciones, secuestros y desapariciones, genera repugnancia.

El funcionario al que le tocó jugar ese papel denigrante fue el subsecretario de Derechos Humanos, el siniestro Alberto Baños. Acusó a los organismos de derechos humanos, a las víctimas de la represión y a sus familiares de inventar la cifra de los 30 mil desaparecidos "para hacer negocio".
 
Este personaje tenía que responder preguntas sobre la represión del gobierno de Javier Milei a la protesta social y por el cercenamiento de políticas de derechos humanos. Pero eligió el papel más repulsivo para desacreditar a los organismos de derechos humanos que han sido quizás el aporte más democratizador que tuvo el proceso de transición democrática en la Argentina.
 
Baños es un exponente típico de un amplio sector del Poder Judicial. Se incorporó al fuero civil de la ciudad de Buenos Aires durante la dictadura y fue designado juez en el gobierno de Carlos Menem. Tuvo a su cargo algunos casos de resonancia, como la desaparición del policía de la Ciudad Arshak Karshanyan, en la que estaban sospechados miembros de esa institución. Baños hizo que la misma policía sospechada participara en la investigación y después de un tiempo dejó el caso sin resolver.
 
En otro caso, declaró prescripta la corrupción por el vaciamiento de Aerolíneas, lo que después tuvo que ser reconsiderado por otro tribunal. Y cuando se reabrió la investigación por la desaparición de las manos de Perón, la carpeta donde estaban los resultados de la investigación fue misteriosamente sustraída de su despacho.
 
No sería el sujeto más indicado para hablar de corrupción o para ser la cara de los derechos humanos de un gobierno que los respete. Más bien, su función ha sido hasta ahora liquidar las políticas de derechos humanos que la sociedad construyó laboriosamente desde la retirada de la dictadura.
 
Y en su presentación en Ginebra ante la Comisión contra la Tortura intentó ocultar la violencia institucional del gobierno del estafador Milei que todos los miércoles es pública y notoria cuando reprime con violencia a los jubilados.
 
La presentación tan sucia de Baños coincidió con el anuncio del gobierno de Estados Unidos del acuerdo con Milei que levanta aranceles aduaneros a los productos de ese país, elimina controles de calidad, así como controles sanitarios y se compromete a obstaculizar el ingreso de productos de otros países.
 
La contrapartida es cero. Estados Unidos no se compromete a nada que favorezca a los productos argentinos. Lo que se conoce del acuerdo afectará gravemente a la industria local como advirtió el gobierno de la provincia de Buenos Aires, donde se asienta gran parte de esa actividad. Hay una regla invariable en la historia moderna del país: la violación sistemática de los derechos humanos ha estado siempre relacionada con gobiernos que al mismo tiempo entregaron soberanía. 
 

14-11-2025 / 09:11
La Casa Blanca de Estados Unidos dio a conocer unilateralmente los primeros lineamientos del acuerdo comercial entre Argentina y EE.UU., a espaldas de los argentinos y del debate en el Congreso. Anunciaron un acuerdo comercial y de inversiones que materializa el momento histórico de mayor subordinación colonialista de Argentina a Estados Unidos. Más apertura hacia la entrada de productos yanquis incluso agrarios, eliminación de barreras arancelarias y no arancelarias, entre otros puntos. Sin detalles, que todavía deben ser negociados, el texto muestra un completo alineamiento con todas las regulaciones norteamericanas, más allá del interés argentino, y la apertura total a sus mercaderías. El comunicado local no expresa claramente cuáles serían los "beneficios" para Argentina.
 
Los argentinos nos enteramos del acuerdo por el que Trump viene a cobrar su apoyo electoral a Milei, y que pagaremos todos los argentinos. Allí, se anuncia la firma de un convenio Marco para un Acuerdo sobre Comercio e Inversión Recíprocos con Argentina. Ambos países se comprometen en abrir sus mercados en "áreas clave", aunque en la letra del texto difundido es mucho más la Argentina abriendo sus fronteras a los productos norteamericanos que los "compromisos" asumidos por este último. Es una reversión de Pacto Roca-Runcimann de 1933, el Estatuto Legal del Coloniaje, que subordinó la economía argentina a los intereses británicos.
 
El acuerdo favorece mucho más a los Estados Unidos. Entre los puntos principales destaca que Argentina brindará "acceso preferencial a productos estadounidenses como medicamentos, maquinaria, tecnologías de la información y productos agrícolas". A su vez, Estados Unidos eliminará aranceles para "ciertos recursos naturales argentinos y bienes farmacéuticos no patentados" y considerará el impacto del acuerdo al aplicar medidas comerciales relacionadas con la seguridad nacional.
 
En el ámbito agrícola, ambas partes se comprometieron a mejorar las condiciones de acceso al mercado de carne vacuna y aviar, así como a facilitar el comercio de productos como menudencias, carne de cerdo y productos lácteos. También se acordó no restringir el uso de ciertos términos cárnicos y lácteos.
 
El documento subraya que Argentina eliminará barreras no arancelarias como licencias de importación y formalidades consulares, y se comprometió a desmantelar gradualmente el impuesto estadístico para productos estadounidenses. Asimismo, se alineará con estándares internacionales en múltiples sectores y reconocerá certificaciones de organismos estadounidenses como la FDA. Este último punto implica un mazazo para la industria farmacéutica nacional.
 
Es un acuerdo con costos. El Marco de Comercio Recíproco e Inversión se presenta como un paso histórico para el vínculo bilateral. Sin embargo, la letra fina sugiere que Milei es un títere de los yanquis y los principales beneficios inmediatos recaerán sobre la economía de la potencia del norte: mayor acceso a sectores industriales y tecnológicos argentinos, influencia regulatoria ampliada, apertura en agroalimentos y una posición reforzada en cadenas de valor estratégicas. Para Argentina, los potenciales beneficios -posible llegada de inversiones- dependerán de cómo se implementen las reformas y de si el país puede evitar que la apertura derive en una nueva dependencia comercial asimétrica.
 
Milei celebró la difusión del acuerdo por parte del gobierno de Estados Unidos (que en Argentina no se oficializó formalmente). Para los norteamericanos, los "recates" al gobierno anarco capitalista tras haber fracasado no una, sino dos veces en menos de seis meses (salvataje del FMI en abril y de EEUU en octubre), están rindiendo con el sometimiento de Argentina en forma de entrega de soberanía.
 
La Opinión Popular

13-11-2025 / 09:11
Se perdieron más de 220.000 puestos de trabajo durante el gobierno cipayo, vende patria y pro oligarca de Javier "el Loco" Milei. Es la caída de empleo registrado privado, público y trabajadoras de casas particulares en agosto en relación a noviembre de 2023. En el mismo período creció el monotributo (+121.740). La precarización laboral avanza. En ese marco, Milei puso nuevamente en agenda la reforma laboral con el falso argumento de crear empleo. En la historia del país ya se demostró que eso no ocurrió, solo avanzó la precarización laboral, con salarios por el piso, que aumentó las ganancias de los empresarios.
 
El impensable y contundente resultado electoral de hace unos domingos atrás agrandó al gobierno anarco capitalista, que pasó a la ofensiva. La punta de lanza de esta ofensiva es la promocionada reforma laboral. ¿Se trata de una modernización equitativa y democrática de las relaciones capital trabajo, o se trata de una regresión a formas de dominio absoluto del capital sobre el trabajo?
 
Aprovechando el envión dado por las urnas, Milei está decidido a cumplir con las imposiciones del FMI. Que el Congreso apruebe el presupuesto 2026 en las sesiones extraordinarias de diciembre y sancione las leyes que impongan las reformas laboral esclavista y la tributaria, también exigidas por el Círculo Rojo, en enero. La previsional quedaría para más adelante.
 
Así como desde el inicio de su gestión creó una suerte de sentido común acerca de las bondades del equilibrio fiscal, que ya nadie en la oposición sistémica discute. Así ha buscado imponer un ambiente favorable a las reformas, particularmente la que tiene que ver en contra de los derechos del trabajo.
 
Los argumentos son por demás conocidos. Modernizar la legislación y sus normativas que estarían obsoletas frente a los nuevos procesos de producción y comercialización, que no se adaptarían a las nuevas tecnologías en continuo cambio, que su rigidez impediría la creación de empleo y por lo tanto obstaculizaría la reducción de la informalidad. Cuando el desempleo en Argentina llegó al 7,9% en el primer trimestre de 2025, según el INDEC. Casi 1,8 millones de personas estuvieron sin trabajo en ese período.
 
No se trata de ninguna modernización, es una regresión a las condiciones laborales del pre peronismo, si se quiere de fines del siglo XIX y principios del XX, que maximizan las ganancias de las empresas sobre la base de rebajar aún más el ingreso de los trabajadores. La experiencia demuestra que este tipo de reformas solo traen más precarización y pérdida de derechos. (Recordar "Ley de Empleo", 1991 y "Ley de Empleo, productividad y equidad", 2000 (Ley Banelco). La creación de empleos formales, que baja la informalidad, no depende de este tipo de normativas sino del crecimiento de la inversión productiva y la expansión de la actividad económica.
 
¿Qué tipo de reforma es necesaria? Una que compense la asimetría entre capital y trabajo, que no incline la cancha más de lo que está. Que por ejemplo reduzca la jornada para crear empleo. Que reconozca la calidad de trabajadores y por lo tanto sus derechos a quiénes se desempeñan en los servicios de plataformas. Que otorgue derechos a quienes trabajan en la Economía Popular. Que reconozca las licencias por paternidad y regule las tareas de cuidados...
 
Las condiciones de vida de los trabajadores no mejorarán con la reforma laboral de Milei, hay que rechazar el proyecto y conquistar trabajo con derecho para todos. No hay nada que negociar. Por el contrario, hay que resistir y luchar contra esta reforma antiobrera y antisindical que beneficia a los ricos y perjudica a los pobres. 
 
La Opinión Popular
 

12-11-2025 / 11:11
Gobierno libertario solo para la casta de los más ricos. Los "héroes" del Presidente. Marcos Galperín, ferviente defensor de que el Estado no intervenga en la economía, recibe millonarias exenciones impositivas. En un contexto de ajuste fiscal y debates por la reforma tributaria, el Formulario 10-Q presentado por Mercado Libre ante la SEC de Estados Unidos expone una vez más los jugosos beneficios fiscales que el gobierno de Javier Milei le otorga al "unicornio" fundado por Galperín, el hombre más rico de la nación con un patrimonio de 8.300 millones de dólares, según Forbes.
 
La empresa, valorada en más de 106 mil millones de "verdes", reportó ingresos netos de 7.400 millones en el tercer trimestre, un 39 por ciento más que el año anterior, y ganancias de 421 millones de dólares. Sin embargo, detrás de estos números relucientes se esconde un "secreto a voces": exenciones impositivas que superan los 350 millones de dólares en los últimos cinco años.
 
Bajo el régimen de promoción de la Economía del Conocimiento, Mercado Libre accedió en los primeros nueve meses de 2025 a beneficios por 50 millones en Ganancias y 17 millones de dólares en aportes previsionales, un 52 por ciento más que en 2024. "Es un subsidio injusto a una multinacional que no lo necesita", critica el Observatorio del Trabajo Informático (OTI), vinculado a la Asociación Gremial de Computación.
 
A Galperín le perdonaron en 2021: US$ 59 millones, en 2022: US$ 81 millones, en 2023: US$ 109 millones, en 2024: US$ 57 millones, en 2025: US$ 67 millones. Total: US$ 373 millones de impuestos le perdonaron a Galperin en cinco años. Pero los sectores populares tienen que pagar el IVA de los fideos sin chistar.
 
Sectores gremiales y la industria financiera coinciden: con su tamaño colosal, Javier Milei abusa del esquema al encuadrar áreas menores bajo un solo CUIT, mientras evade contribuciones que podrían destinarse a pymes o servicios públicos en crisis. Galperín, exiliado fiscal en Uruguay, predica la libre competencia, pero no duda en alzar la voz contra rivales como Temu y Shein, las plataformas chinas que inundan el mercado con productos baratos.
 
En el Foro Abeceb, Juan Martín de la Serna, presidente de la filial argentina de Mercado Libre, exigió "reglas claras" para importaciones, advirtiendo que amenazan el 90 por ciento de ventas de pymes en la plataforma y el empleo local. "Abrir indiscriminadamente da trabajo a chinos, no a argentinos", sentenció.
 
Ironía pura: el defensor del no intervenciónismo estatal ahora pide regulaciones que protejan su imperio. El cruce en X con Miguel Ángel Pichetto lo desnuda todo. El diputado peronista instó a gravar a estas "economías de plataformas" para cuidar la industria nacional.

Galperín replicó con arrogancia: "No estoy preocupado, competimos exitosamente". Pichetto no se quedó atrás: "Mejor empezá a preocuparte, porque te van a pasar por arriba y ya impactan en empleos de distribución".

Mientras, el Gobierno de Milei discute bajar cargas patronales, pero calla sobre estos privilegios elitistas de los más ricos empresarios. Esta disparidad fiscal alimenta el descontento: ¿por qué el gobierno de Milei regala millones a un magnate mientras mientras los salarios deprimidos de jubilados y trabajadores pagan la crisis?

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