Nacionales - 13-12-2019 / 09:12
LOS 4.000 CEOS QUE TRAJO MACRI AL GOBIERNO INTENTAN VOLVER AL ÁMBITO PRIVADO CON POCO ÉXITO
El Gobierno anulará el decreto de Macri que perpetuaba 3.000 funcionarios macristas en el Estado
El régimen de ingreso que había dispuesto Macri tiene exigencias mucho más laxas de idoneidad técnica y profesional que el vigente, un sistema de remuneraciones desproporcionadamente alto con respecto al resto y otro indemnizatorio inédito para el caso de pérdida de la función -con retención de categoría-, pergeñado con la obvia intención de facilitar la permanencia de los funcionarios designados discrecionalmente por el Gobierno saliente.
El gobierno de Mauricio Macri inició su mandato en diciembre de 2015 con miles de despidos en todas las dependencias de la administración pública y estigmatizaba a los trabajadores que resistían las cesantías como "ñoquis" y "grasa militante".
Pero a menos de dos semanas de finalizar el mandato, Macri creaba por decreto el "Régimen de Alta Dirección Pública" que daba "estabilidad laboral" a unos 3.000 funcionarios jerárquicos nacionales nombrados por su gestión, garantizando su perpetuidad en el cargo.
Además establecía que para removerlos debía pagarse una indemnización equivalente a los sueldos del tiempo que resta para completar ese plazo de cinco años. A modo de ejemplo, en el caso de un director general que estuviera en el rango más bajo (inicial), la indemnización superaría los $10 millones si ingresó este último año.
Pero, el Gobierno de Alberto Fernández suspenderá el decreto que Macri firmó 14 días antes de dejar la Casa Rosada. El decreto 788 del año 2019, implica "una grave distorsión de los principios establecidos en relación con el Empleo Público, afectando derechos y deberes de empleados y funcionarios y atentando contra los recursos del Estado", sostuvo la secretaria de Gestión y Empleo Público de la Nación, Ana Castellani.
La norma pretendía dejar una gruesa capa geológica del macrismo en puestos clave de administración pública, para sabotear al gobierno entrante, y les garantizaba millonarias indemnizaciones en caso que fueran despedidos. El decreto había sido cuestionado y denunciado desde los propios abogados del Estado y el gremio de ATE.
Castellani argumentó la decisión del nuevo Gobierno en que el decreto de Macri modifica el Convenio Colectivo del Sector Público, estableciendo un nuevo régimen de acceso, retribución, permanencia, promoción y egreso de la Alta Dirección Pública e involucra a más de 3.000 cargos, creando un escalafón de "privilegio para funcionarios y quebrando la carrera administrativa, generando un sistema diferencial y privilegiado para altos funcionarios".
El régimen que se buscó establecer dispone "una carrera paralela con una exclusiva escala remunerativa, flexibilizando los requisitos de formación y experiencia acreditables para acceder a la alta dirección pública, además de garantizar la posesión de los cargos por un período de 5 años o, en su defecto, una indemnización fuera de toda proporción", señalaron fuentes de la Jefatura de Gabinete.
Hay un intento claro de colonizar el Estado nacional con la elite macrista que se está yendo. Le quieren agregar una dificultad más al presidente que llega. Los 4.000 CEOs que trajo Macri al Estado intentan volver al ámbito privado con poco éxito por la recesión económica que ellos mismos provocaron.
La Opinión Popular
REINSERCIÓN COMPLICADA
Unos 4.000 ejecutivos que trajo Macri al Estado intentan volver al ámbito privado con poco éxito
Cuando el ex presidente Mauricio Macri llegó al poder, convocó a empresarios y ejecutivos que, en muchos casos, nunca habían trabajado para el Estado. Con el fin de su mandato, ahora tienen que volver a reinsertarse en el ámbito privado.
Un informe de FESA Group, empresa de reclutamiento, selección y consultoría estratégica en capital humano, señala "se estima que hay 4.000 ejecutivos que hace cuatro años se volcaron al Estado para aportar su experiencia en Ministerios tales como Economía, Producción y Energía. Ahora están tratando de reinsertarse laboralmente en el ámbito privado".
El perfil de estos ejecutivos es muy bueno, el problema es que la mayoría de las empresas viene de atravesar años de ajustes y muchas no están pensando en incorporar nuevos talentos con cargos altos.
Los cargos que quedan libres no son reeemplazados o son ocupados por un perfil más junior. Algo que preocupa y mucho a los ex funcionarios o asesores de la gestión macrista.
"Son candidatos que cuentan con una gran experiencia profesional. Han ganado un know how muy importante en situaciones críticas en los últimos años de gobierno, que sumado a la experiencia previa corporativa, se vuelve un mix más que interesante que las empresas van a demandar", señala el informe de FESA.
El punto crítico es que hoy no existe una plaza laboral dispuesta a incorporarlos en el corto plazo. Pero tienen una ventaja: "Tienen un desfasaje de salario respecto a ajustes y beneficios de ejecutivos del mismo porte del ámbito privado. Esto, transforma a estos candidatos en mucho más flexibles y dispuestos a una negociación contractual".
Una de las primeras que dejó la gestión pública fue Isela Costantini, quien condujo la gestión de Aerolíneas Argentinas, previo a ser la ex número uno de General Motors. Se fue en diciembre de 2016 del Estado y cinco meses después se sumó como gerente general del Grupo de Servicios y Transacciones (GST).
Por su perfil intachable, Costantini logró reposicionarse en poco tiempo y hoy es además, directora independiente de IRSA, de San Miguel y del Banco Latinoamericano de Comercio Exterior (Bladex).
Distinto es lo que pasa ahora, cuando son mucho más los que buscan trabajo y ofrecen sus servicios al mismo tiempo y en un contexto mucho más complicado.
Algunos pocos como Alejandro Fontán Balestra que venía de ser el vicepresidente de IEASA (la ex ENARSA) fue uno de los primeros en reubicarse como director financiero de Mercado Pago.
Trabajó 16 años en Ternium, empresa del grupo Techint, hasta que en abril de 2016 se incorporó a la Jefatura de Gabinete de Ministros como Coordinador de Políticas Interministeriales.
Otros ex funcionarios buscan socios y clientes y están ultimando detalles para abrir consultoras. Un gerente que ocupó cargos en empresas líderes contó a BAE Negocios: "La situación está muy complicada, estuve en varios procesos de búsqueda que tras la devaluación se suspendieron. Es más difícil encontrar trabajo hoy en cargos gerenciales que en 2001".
Un ejecutivo que pasó del mundo de las comunicaciones corporativas a ser vocero ministerial, y que pide no ser nombrado, lo dice claro: "Ni hablar de los sueldos que ofrecen, son entre un 30% y 40% menos de lo que ganaba hace un año y para ocupar similares posiciones. Aunque aceptes menos, igual la mayoría de las búsquedas se han suspendido".
Por Graciela Moreno
Fuente: BAE Negocios