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“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
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Nacionales - 12-10-2019 / 10:10
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

La amenaza del dunga-dunga: Trump y el FMI quieren de Alberto la misma sumisión que hoy tienen de Macri

La amenaza del dunga-dunga: Trump y el FMI quieren de Alberto la misma sumisión que hoy tienen de Macri
A pedido de Macri, Donald Trump operó en el FMI para que realizara el mayor préstamo de su historia a la Argentina, al punto de transgredir sus propios reglamentos. Los desaires de Trump en la reunión del G-20 fueron una forma de explicarle que para agradecerle no basta con buenas maneras, sino que tiene que hacer Dunga-dunga. Necesitaba otro peón en la región para su estrategia de frenar a China y recuperar el petróleo venezolano.
"Mauricio lo da vuelta", "Mauricio lo da vuelta", indicaba el estrangulador de medios Hernán Lombardi. Y saltaba como monito rengo, con los deditos parados, antes de la presentación estelar del Presidente en los actos de campaña. La gente se prende, pero sabe que no lo da vuelta. Lo único que sabe a esta altura, esa gente, la ultrarrecontra macrista que asiste a esos actos, lo único que sabe es que no lo da vuelta, pero no le importa.
 
Porque pesa más su anti peronismo, su rechazo a los derechos humanos, su reacción de pañuelo celeste, su afán de diferenciarse de la negrada y los cabecitas. La masa que se movilizó hasta ahora en los 30 actos en 30 pueblos --en algunos lados un fracaso, en otros no tanto-- es la más recalcitrante, la que sabe que todo se fue al diablo pero le importa más su anti peronismo que la tragedia de todo el país.
 
Esa desesperanza que transmite la falta de convicción de los coros de Lombardi con el desvaído "Mauricio lo da vuelta", es porque ya nadie cree en Macri, ni esos que van a sus actos. El presidente perdió credibilidad ante la sociedad, fue un corte tajante. Es como si le dijeran "sabemos que sos de los nuestros, pero ya no podés hacer nada".
 
Así sucede con sus adeptos. Los demás, la mayoría, están juntando bronca. Cada vez se ve con más claridad la pavorosa ineptitud y el caos que han sido los últimos dos años de gobierno, unidos al descaro más grande para hacer negocios con sus empresas.
 
En política no hay espacios vacíos, los que pierde uno, los ocupa otro. Y Alberto Fernández crece, se afirma como candidato y atiende el mostrador como dueño de casa. Su convocatoria aumenta.
 
En su gira por Estados Unidos, como representante de Alberto Fernández, Sergio Massa se reunió en el Departamento de Estado con Mike Pompeo, otro dinosaurio yanqui de la corte imperial de Donald Trump. Pompeo no quiso mostrarse amigable. Pompeo quiso mostrarse como el amo. Es la relación que permitió Macri con Trump.
 
Pompeo quiso marcarle la cancha a Alberto Fernández. Le aclaró a Massa que Estados Unidos tiene dos temas que no son negociables. Uno es Venezuela, el otro es China: no quieren que expanda su presencia en Argentina.
 
Meter presión a un candidato, de un país extranjero, cuando todavía no asumió, es un acto patotero, que no tiene el mínimo respeto a la soberanía política del que se supone es un país amigo. Pero, Macri demostró que la obsecuencia con Trump no lleva a ninguna solución. Si demostró algo, es que por ese camino se va al despeñadero.

 
En la Facultad de Agronomía de la UBA, Alberto Fernández presentó su programa contra el hambre ante representantes de todo el espectro social, económico y cultural. El titular de la UIA, Miguel Acevedo, exhortó a la CGT a estudiar el acuerdo social que planteó el candidato del Frente de Todos. Tiene su propia versión, claro, pero el interlocutor es Fernández, no Macri.
 
El candidato del Frente de Todos se dio el lujo de hacer un acto ayer en el Nacional Buenos Aires, con el aula magna al tope de adolescentes que lo escucharon junto al ex presidente uruguayo, Pepe Mujica. "Siempre tomo este compromiso con los jóvenes: les pido que si me ven defeccionar, salgan a la calle para decirlo", les dijo.
 
No hay mayor medida de credibilidad para un político que estos estudiantes siempre desconfiados y desafiantes. Son pocos los que pueden hacer un acto que exprese en forma tan ilustrativa la expectativa que hay en la sociedad. Lo que Macri se cae, crece Alberto Fernández.
 
Incluso hasta en el entorno del presidente circulan resentimientos y temores por la derrota y se habla de política de tierra arrasada, que se traduciría por ejemplo en dejar un Banco Central sin reservas. O en política exterior, romper relaciones con Venezuela.
 
Nada más que por embarrarle la cancha a Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. Para dejarlo inerme ante el FMI o para obligarlo a tomar una medida que moleste más a Donald Trump.
 
En la campaña electoral casi no se habla de las relaciones internacionales. Sin embargo es en ese ámbito de dónde provino una de las voces en defensa de Macri.
 
El embajador de los Estados Unidos, el ex juez de Texas, Edward Prado afirmó que su país "admira el liderazgo moral de Argentina con Venezuela". No habla de Argentina en general, sino de la Argentina que representa Mauricio Macri, como "líder moral" según los parámetros morales del gobierno de Donald Trump.
 
Las declaraciones del embajador, --un conservador en un estado conservador como Texas-- fueron el lunes en una cena de la Fundación del Centro de Estudios Americanos.
 
Ese mismo día, apenas unas horas antes, Alberto Fernández se había reunido con Daniel Martínez, el candidato del Frente Amplio a presidente, en Uruguay.
 
Durante el encuentro, había anunciado que si ganara las elecciones, sacaría a la Argentina del Grupo Lima, que se constituyó bajo la tutela norteamericana para hostigar a Venezuela, asociarse al bloqueo y preparar el terreno para un golpe de Estado o directamente para una invasión militar.
 
Fue una de las aclaraciones más precisas de lo que podría ser su gobierno en caso de ganar las elecciones. Señaló que la posición más correcta era la que habían tomado los gobiernos de México y Uruguay al retirarse del grupo para buscar soluciones por la vía del diálogo.
 
La rápida reacción del embajador Prado demostró por un lado la importancia que asigna Washington a recuperar el petróleo de Venezuela. Y por el otro lado puso en evidencia la vieja arrogancia que ha retomado Estados Unidos en el trato con los países latinoamericanos.
 
Meter presión a un candidato, de un país extranjero, cuando todavía no asumió, es un acto patotero, que no tiene el mínimo respeto a la soberanía política del que se supone es un país amigo.
 
En su gira por Estados Unidos, como representante de Alberto Fernández, Sergio Massa se reunió en el Departamento de Estado con Mike Pompeo, otro dinosaurio de la corte imperial de Donald Trump. Primero lo designó al frente de la CIA y después el presidente empresario norteamericano puso a este ex Tea Party como su canciller.
 
Pompeo no quiere mostrarse amigable. Pompeo quiere mostrarse como el amo. Es la política de la administración Trump hacia los países de América Latina, a los que considera una extensión de su territorio. Una especie de bantustanes del centro imperial. Es la relación que permitió Macri con Trump.
 
En la reunión del G-20 en Buenos Aires, Trump se cansó de despreciarlo pese a las reiteradas muestras de sumisión del presidente argentino. Fue público cuando Trump se quitó los auriculares de la traducción y los arrojó al suelo mientras Macri estaba hablando. Y fue más público cuando lo dejó pagando con la mano extendida encima del escenario. La política exterior de Trump y Pompeo no tiene sutilezas.
 
Pompeo quiso marcarle la cancha a Alberto Fernández. Le aclaró a Massa que Estados Unidos tiene dos temas que no son negociables. Uno es Venezuela, por eso reaccionaron de esa forma ante las declaraciones del lunes. El otro es China: no quieren que expanda su presencia en Argentina.
 
A pedido de Macri, Donald Trump operó en el FMI para que realizara el mayor préstamo de su historia a la Argentina, al punto de transgredir sus propios reglamentos. Los desaires de Trump en la reunión del G-20 fueron una forma de explicarle que para agradecerle no basta con buenas maneras, sino que tiene que hacer Dunga-dunga. Necesitaba otro peón en la región para su estrategia de frenar a China y recuperar el petróleo venezolano.
 
En una versión periodística de las declaraciones del lunes del embajador Prado, la cuestión está clara:"No puede haber intercambio de ideas cuando estamos de acuerdo en todo, pero tampoco es posible si no hay acuerdo en las cosas importantes", advirtió.
 
Con el gobierno de Macri, Washington se convirtió en la llave para llegar al FMI. Lo que está diciendo el Departamento de Estado es que si Alberto Fernández se propone una negociación de la fenomenal deuda que Trump facilitó a Macri, entonces habrá que hacer Dunga-dunga sobre China y Venezuela.
 
Siempre hay varias opciones, caminos abiertos. Macri demostró que el de la obsecuencia con Trump no lleva a ninguna solución. Si demostró algo, es que por ese camino se va al despeñadero. Ha sido su aporte más valioso.
 
Trump ha manifestado su respaldo al presidente neoliberal de Ecuador, Lenin Moreno, que soporta una rebelión popular contra las políticas exigidas por el FMI. No es Macri la excepción que hace la regla, sino la confirmación de la regla. La suerte de Lenin Moreno está echada más allá de lo que suceda en los próximos días con la rebelión popular.
 
Por la rebelión popular o el ejercicio del voto soberano, las políticas de ajuste y miseria del Fondo Monetario son rechazadas en Ecuador y Argentina. Más pronto que tarde pasará lo mismo con Bolsonaro en Brasil.
 
Por Luis Bruschtein
 
Fuente: Página12
 

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11-12-2025 / 10:12
Turismo "con la nuestra". Nuevo papelón internacional de Javier "el Loco" Milei que fue a perder el tiempo a Noruega disfrazado con el mameluco de YPF, viajó 25.000 kilómetros para sacarse una foto... y se volvió sin nada. María Corina Machado faltó a su premiación como Nobel de la Paz. Viajó con su hermana Karina a Oslo en el avión presidencial, en un viaje que cuesta 300 mil dólares, y se alojó en el Gran Hotel de Oslo, en donde una habitación cuesta mil euros por noche. "El Peluca" volvió a las apuradas y de inmediato puso su firma en el funesto proyecto que apunta contra la justicia social y modifica la regulación de horas extras, vacaciones e indemnizaciones.
 
El fugaz y costoso paseo de Milei por Noruega terminó en un traspié político que expuso improvisación y falta de estrategia. La salida apresurada dejó al libertario sin el rédito simbólico que buscaba y reforzó las críticas sobre un viaje reducido a gestos vacíos, sin resultados concretos ni agenda internacional consistente. Tenía una agenda que incluía reuniones con el primer ministro y con el rey, además de la posibilidad de un encuentro cara a cara con Corina Machado, y los dejó "de garpe". Cosa de loco.
 
Milei regresó de apuro para evitar que una interna ponga en riesgo el tratamiento de la reforma laboral. Las explicaciones oficiales, en off the record, hablaban de la necesidad de "firmar la ley de reforma laboral" después de hacer "algún ajuste de último momento", sin embargo, tanto los cambios como la firma se pueden gestionar de manera remota. Lo que sucedió en realidad es que una nueva interna en el gobierno casi hace volar por los aires la Ley Rifle. Lo más llamativo, en este caso, es que los que frenaron el proyecto son dos enemigos íntimos: Santiago Caputo y Martín Menem.
 
Ellos son los dos interlocutores más fluidos que tiene la CGT dentro de la estructura libertaria y vienen advirtiendo desde hace tiempo que así como la estaba planteando Federico Sturzenegger, la reforma laboral corre el riesgo de empantanarse en el Congreso y terminar siendo rechazada, modificada hasta volverla irreconocible o aprobada a un costo demasiado alto. El recuerdo de la reforma previsional de Mauricio Macri en 2017 está presente en todos los cálculos.
 
Las partes observadas son justamente las que apuntan contra el andamiaje financiero y normativo que sostiene a los sindicatos, los llamados "derechos colectivos" que la CGT prioriza antes que las condiciones de trabajo individuales. De hecho, este lunes Sturzenegger estuvo reunido con los diputados de LLA, en un encuentro del que Menem no participó, y ante las consultas sobre estos asuntos el ministro prometió una "versión light", más sencilla de aprobar.
 
Sin embargo, el anuncio que hizo el vocero con sueldo de jefe de gabinete, Manuel Adorni, al día siguiente, no contempla la mayoría de esos recortes e incluye cláusulas inaceptables para el más dialoguista de los líderes gremiales. Dicen en la Casa Rosada que la orden de ir a fondo la dio el mismo Milei. El proyecto ya estaba listo para ingresar al Senado cuando Caputo y los Menem lograron frenarlo. Ese fue el motivo por el que el presidente tuvo que volver de apuro.
 
Patricia Bullrich, en tanto, defiende la redacción de Stuzenegger pero reclama que la situación se destrabe porque cree que si la reforma no tiene un tratamiento express y media sanción antes de las fiestas, después puede empantanarse. Su plan original de dictaminar esta misma semana, incluso el viernes a última hora, se fue diluyendo con el correr de las horas. El escenario más optimista apunta a sesionar en vísperas de noche buena. Sería un verdadero milagro navideño, mientras la CGT y el peronismo se abroquelan contra la reforma laboral anti obrera y pro patronal de Milei.
 
La Opinión Popular
 

10-12-2025 / 09:12
La denuncia por la compra de chatarra militar suma un nuevo capítulo. A la venta por un euro de los F-16 a Rumania, se añade el inminente acuerdo entre Polonia y Estados Unidos para la comprar de 250 vehículos blindados Stryker por sólo el valor simbólico de un dólar.
 
Los Stryker forman parte del catálogo militar yanqui que fueron utilizados en Afganistán e Irak y están diseñados para el transporte ágil de tropas y equipamiento. Según versiones oficiales, la elección del modelo responde a una planificación que prioriza la movilidad, la protección y la capacidad de respuesta ante diversas situaciones operativas.
 
Se trata de unidades adaptadas a distintos escenarios urbanos y misiones, con posibilidad de implementación progresiva conforme a los requerimientos logísticos y de capacitación establecidos por el Ejército Argentino.
 
Ya en julio que había opciones mejores que estaban siendo barajadas como el Guaraní de Brasil, que son vehículos muy similares a los que se usan en Argentina con el aditamento que los componentes mecánicos son argentinos como el motor y transmisión de IVECO.
 
Según publicó el medio ecuatoriano El Universal en base a un informe de Interesting Engineering, con esta oferta se pretende que los Strykers, que actualmente están desplegados en Europa, no vuelvan a territorio estadounidense, sino que sean entregados directamente a Polonia como parte del proceso de disminución de presencia militar norteamericana en la región.
 
Un análisis de Breaking Defense detalla que los Strykers llegarían en condiciones deterioradas, lo que implicaría reparaciones costosas, modernización y la creación de un nuevo sistema de soporte y entrenamiento, especialmente complejo para una plataforma que Argentina nunca operó.
 
Por otra parte, sostiene el informe, también hay dudas sobre el impacto industrial que traería la llegada de estos blindados, ya que puede desplazar la demanda de vehículos de fabricación nacional, como el Rosomak. En efecto, como ocurre con los F-16, se confirma que Estados Unidos y sus aliados de la OTAN están deshaciéndose de la buena parte de su material militar por considerarlo vetusto y desactualizado.
 
Por eso, en el Ejército argentino preferían El Guaraní brasileño dado no se impone límite de cantidad, son nuevos, se transfiere tecnología de fabricación de partes y es interoperable con Brasil.
 
"Los EEUU limitan la cantidad, nos entregan un lote de usados que Chile descartó oportunamente. No son anfibios y puede ser que venga una flota final heterogénea, con menor ciclo de vida útil y mayor costo de mantenimiento. Es relevante que no sean anfibios. No van a poder varear nuestros ríos", detalló un militar activo en ese momento.
 
Para armas, plata hay. De los 27 vehículos que el gobierno le compró a Estados Unidos el valor total fue de 100 millones de dólares. La propuesta de Brasil por los Guaraní era de 161 vehículos (156 + 5 de entrenamiento) por 400 millones de dólares, quedando cada unidad en valor de 2,5 millones de dólares cada uno contra los 3,7 de los Stryker. Es decir, si se hubiesen comprado la misma cantidad a Brasil, hubiera gastado 67 millones, 32 millones menos que lo que gastó ahora. ¿Aliados a EEUU? Las pelotas... A Milei, los yanquis lo toman de gil.

 

 

09-12-2025 / 08:12
La compra de los 24 aviones F-16 daneses, que entregarán 6 por año, expone el negociado millonario de Javier Milei con los aviones chatarra que no cambian la correlación estratégica ante un eventual conflicto en el Atlántico Sur. Los F-16 son antiguos e inútiles para nuestra principal hipótesis de conflicto. El avión elegido carece de misiles modernos de largo alcance, capacidades SEAD/DEAD, apoyo AWACS y autonomía suficiente para operar a grandes distancias. Y la infraestructura de mantenimiento de la Fuerza Aérea está por debajo de los estándares necesarios. La OTAN jamás lo permitiría.
 
Estados Unidos y el Reino Unido -ambos miembros de la OTAN- mantienen restricciones tecnológicas que limitan cualquier avance argentino en términos de disuasión real. Seguimos igual de indefensos que antes, a pesar de la celebración marketinera del Gobierno libertario. Las críticas a la compra de los aviones F-16 por parte de Argentina son variadas y provienen de diferentes sectores, abarcando aspectos económicos, militares y geopolíticos. Un resumen de los principales puntos de crítica:
 
Alto Costo de Operación: la hora de vuelo de un F-16 es muy cara (rondan entre los $10.000 y $20.000 dólares). En un contexto de ajuste fiscal, esto generaría dudas sobre si el país tendrá los fondos necesarios para mantener los aviones operativos y entrenar adecuadamente a los pilotos.

Prioridades de Gasto: Hay críticas sobre destinar una suma importante del presupuesto de defensa (alrededor de $650 millones de dólares para el paquete completo contra un euro que pagó Rumania) a aviones, en lugar de utilizar esos recursos en áreas con mayores necesidades sociales o productivas. Esos dólares que nos prestan no son para un Procrear, son para comprar aviones obsoletos y equipos en mal estado.

Inversión en Infraestructura: Además del costo de compra y operación, se requiere una inversión adicional significativa para actualizar y readecuar las bases aéreas, pistas, talleres y sistemas logísticos para poder soportar la operación de estas aeronaves.

Aviones Usados y Desfase Tecnológico: Aunque modernizados, los aviones son de segunda mano (Europa los está reemplazando por F-35 de quinta generación) y tienen 40 años de antigüedad. Esto no representa la "última tecnología" y Argentina queda rezagada frente a los avances en aviación de combate, cuando los drones y los sistemas no tripulados están redefiniendo el combate aéreo.

Insuficiente para la Extensión Territorial: Argentina es el octavo país más extenso del mundo. Una flota de 24 aviones no es suficiente para cubrir eficazmente todo el territorio nacional y su espacio aéreo.
 
Limitaciones Logísticas y Técnicas: el F-16 tiene un sistema de reabastecimiento en vuelo por pértiga rígida, lo cual es un problema, ya que la Fuerza Aérea Argentina utiliza un sistema de cesta y manguera, lo que obligaría a readecuar la flota de tanqueros o a depender exclusivamente del sistema rígido.
 
La compra de armamento estadounidense fomenta un claro alineamiento cipayo con Estados Unidos y la OTAN. Esto limita la soberanía en política exterior y que todo el control logístico, mantenimiento y la provisión de repuestos queden sujetos al visto bueno de los EEUU (y a las restricciones impuestas por el Reino Unido), como ha ocurrido históricamente con otras ventas militares. La elección del F-16 priorizó el alineamiento internacional por sobre otras opciones, como los aviones chinos JF-17 (más modernos y que incluían armamento), los cuales fueron objetados por Gran Bretaña.
 
La Opinión Popular


08-12-2025 / 08:12
Al anular las convocatorias a proyectos de investigación que ya estaban adjudicadas (de 2022) y cerrar definitivamente las siguientes, la Agencia I+D+i, el organismo encargado del financiamiento científico, terminó de cerrar el círculo de destrucción del conocimiento levantado por el gobierno de Javier "el Loco" Milei. El año que viene, Argentina será el único país de América latina que no invierte un peso en ciencia.
 
Cuando una situación atroz se presenta en reiteradas ocasiones, cada vez tiende a generar un menor impacto. Desde que Milei asumió la Presidencia de la Nación en diciembre de 2023, la comunidad científica advirtió -más de una vez- la desidia a la que se enfrentaba el sector. Organizaron marchas, manifestaciones, feria de investigadores y alzaron la voz en cada oportunidad en la que el Poder Ejecutivo daba otro paso en pos de desmantelar la ciencia del país.
 
Ahora, la Agencia I+D+i, que depende de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, anuló las convocatorias a proyectos de investigación PICT 2022 - que ya estaban adjudicados- y cerró definitivamente la convocatoria 2023. Es decir, el próximo año, Argentina será el único país de América Latina que no invierte en ciencia, según explicaron desde la Red de Autoridades de Institutos de Ciencia y Tecnología (Raicyt).
 
"El jueves 4 de diciembre de 2025 quedará tristemente en la historia como una fecha clave para el desmantelamiento del sistema científico de la Argentina", anunciaron desde la organización que agrupa a más de 400 directivos de organismos científicos-tecnológicos con el objetivo de articular medidas para frenar lo que ellos denominan como un "cientificidio". El próximo miércoles, la comunidad científica se concentrará en el Polo Científico de Palermo para rechazar y denunciar los nuevos recortes.
 
La Agencia I+D+i, desde que se creó en 1996, financió las actividades del sistema con convocatorias para que los investigadores reciban fondos para llevar adelante sus investigaciones. Anteriormente dependía del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Desde 2023, el Ministerio desapareció y la agencia pasó a depender de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, bajo la órbita de Darío Genua.
 
El cambio de gestión trajo consigo el desmantelamiento de la Agencia I+D+i, según cuentan desde Raicyt. La principal herramienta del organismo era la financiación de los Proyectos de Investigación Científico/Tecnológicos (PICTs). Cada año se convocaban a los PICTs y se financiaban aproximadamente 1500 proyectos. Desde la asunción del gobierno de Milei esta línea de financiamiento desapareció.
 
Para los PICTs, las diferentes entidades científicas debían presentar sus proyectos -que abarcaban todas las áreas del conocimiento-, para luego ser evaluados por la Agencia I+D+i que, en caso de aprobarlos, los ejecutaría aproximadamente dos años después. En 2024, aquellos proyectos aprobados por el Directorio de la agencia en el 2022 no se ejecutaron, cuando ya había cerca de 800 adjudicados.
 
La convocatoria del 2023 -a ejecutarse en 2025- fue prorrogada en 7 ocasiones y ahora, con el anuncio del 4 de diciembre, definitivamente desapareció del mapa. En 2024 y 2025 no hubo nuevas convocatorias.
 

07-12-2025 / 09:12
La profecía de Javier "el Loco" Milei vuelve a atormentarlo: no hay plata. Esa frase que en el comienzo de su mandato el presidente utilizaba como un mantra para justificar su motosierra ahora se convirtió en el principal obstáculo para alcanzar su único objetivo económico concreto, que es recuperar el acceso genuino a los mercados de crédito voluntario internacional de los que estamos vedados por insolvencia desde la primera gestión del actual ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo.
 
Ante la imposibilidad de cumplir esa meta, el gobierno argentino ensayó una pantomima guionada, que sólo elude el papelón gracias a los bolsillos generosos y la mirada permisiva de grandes capitales nacionales jugados all-in en el experimento de Milei a partir de los resultados de las elecciones de medio término. El resultado es una farsa montada sobre otra farsa, un engaño consentido para un público diminuto, que lejos de mostrar fortaleza, echa luz sobre su fragilidad.
 
Caputo es un tahúr habilidoso, pero el suyo no deja de ser un oficio que se ejerce siempre al borde de perderlo todo. Quedar expuesto con una mentira es apenas un accidente cotidiano del que uno debe reponerse rápido y seguir adelante. Pero cada vez se paga un costo de credibilidad y el prontuario del ministro ya tiene muchas páginas. Los 20 mil millones de dólares que preparaban los bancos se convirtieron en seis o siete. Esos seis o siete no aparecieron.
 
Es por eso que el gobierno, ante la cercanía de un vencimiento de 4000 millones de dólares en enero que no tiene cómo pagar, tuvo que salir a recaudar un "bono patriótico" entre empresarios amigos que se vieron beneficiados y tienen promesas de más negocios en la Argentina que proyecta Milei, directamente interesados también en la aprobación de un nuevo blanqueo y de las reformas laborales, tributarias, previsionales y penales en carpeta para los próximos meses.
 
Para eso les armaron una pasarela que una vez más les garantiza a jugadores muy específicos a través de herramientas direccionadas pret a porter un negocio redondo con fondos públicos. Tal como advirtió el economista de CEPA Hernán Letcher, "el gobierno publicó una resolución que permite a las aseguradoras endeudarse a una tasa baja en dólares para usar esos fondos en la licitación primaria del miércoles y así mostrar una demanda inflada por el nuevo título".
 
Sin embargo, los acreedores externos no compran esas mentiras autoindulgentes. Por eso fracasó el primer crawling peg, por eso fracasó el esquema de bandas y por eso va en firme camino al fracaso el nuevo crawling peg disfrazado de esquema de bandas que funciona (es una manera de decir) desde las elecciones de octubre. Por eso, no importa con qué le tiren, el riesgo país no baja. Nadie va a volver a prestar hasta no ver la plata. No es que no quieran creerle, es que no le creen.
 
Las voces que advierten sobre la fragilidad intrínseca que trae consigo la falta de dólares se multiplican y a esta altura ya conforman un coro, en el que se lleva el rol solista la vocera del Fondo Monetario Internacional, Julie Kozack, que esta semana reclamó "un camino más ambicioso en la acumulación de reservas", sobresaliendo entre otras melodías similares, de bancos internacionales como JP Morgan y Barclays, consultoras locales y hasta "próceres" liberales como Domingo Cavallo.
 
Caputo ya avisó: no va a acumular reservas. Eso va en contra de su único credo que es la fuga de divisas. Todo dólar que entra tiene que salir. Una gestión bulímica que es incapaz de retener riqueza y necesita atracones de miles de millones de dólares varias veces por año para no colapsar. Puro flujo, nada de stock. Es un país que funciona bajo la tiranía de compulsiones y apuestas arriesgadas pero no tiene una red que lo sostenga cuando algo salga mal.
 

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