La Opinión Popular
                  06:23  |  Sabado 27 de Diciembre de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná

Por
“Esta gloriosa Revolución Libertadora se hizo para que, en este bendito país, el hijo del barrendero muera barrendero”. Almirante Arturo Rial.
Recomendar Imprimir
Nacionales - 24-07-2019 / 10:07
EL CANDIDATO DEL FRENTE DE TODOS FUE ENTREVISTADO EN TN

Alberto Fernández dejó sin palabras al fanático macrista Morales Solá

Alberto Fernández dejó sin palabras al fanático macrista Morales Solá
Fue un diálogo tenso el que mantuvieron Alberto Fernández y el ultra macrista Joaquín Morales Solá en la pantalla de TN. Se trató de una de las entrevistas en las que el precandidato presidencial por el Frente de Todos logró rebatir uno por uno los penales que le pateó el fanático periodista del grupo Clarín, quien en más de una ocasión intentó relativizar el poder con el que contaría su entrevistado en una dupla con Cristina.
El ex jefe de Gabinete retrucó las chicanas del columnista ultra macrista del diario La Nación y realizó una dura crítica al gobierno de Mauricio Macri. Además, desarrolló como será la relación con CFK, la prensa, el FMI y los Estados Unidos, entre otros.
 
"¿Usted piensa que yo voy a poner el cepo? ¿Seriamente, después de lo que lo critiqué?". En línea con la política de dar entrevistas a periodistas muy afines al macrismo, Alberto Fernández protagonizó varios contrapuntos que dejaron sin respuesta a Joaquín Morales Solá.
 
Durante una nota en la señal del macrista Grupo Clarín, el precandidato del Frente de Todos sostuvo sus críticas a la gestión de Cristina y, al mismo tiempo, celebró que sea su compañera de fórmula.
 
También rescató a los integrantes de la Corte Suprema, desmintió los fantasmas sobre una eventual injerencia suya en el Poder Judicial y reiteró sus cuestionamientos a los jueces federales por las "detenciones arbitrarias".
 
"¿Usted no ve nada? ¿Usted se dio cuenta lo que pasó?", le retrucó al columnista del diario La Nación luego de desmenuzar la política "desastrosa" que llevó adelante Mauricio Macri.
 
"Cristina es una dirigente política de gran magnitud y la verdad es que es alguien que quiere colaborar a sacar a la Argentina de este tema", aseguró Alberto Fernández ante las reiteradas preguntas de Morales Solá sobre quién gobernará en caso de un triunfo del Frente de Todos.
 
En cuanto a la situación económica, Fernández sostuvo que la gestión de Cristina "dejó tres problemas: el cepo, la inflación y el déficit fiscal". En ese contexto, apuntó contra las políticas adoptadas por Macri para atacarlos.
 
"¿El cepo como lo resolvió Macri? lo levantó irresponsablemente y el primer año terminamos con un 40 por ciento de inflación. ¿Cómo resolvió la demanda de dólares que el cepo evitaba? con la toma de deuda. ¿Cómo terminamos? con la soga al cuello, endeudados al 95 por ciento del PBI".
 
"Cristina le dejó 25 puntos de inflación. ¿En cuánto estamos? En 55, ¿qué tiene que ver Cristina?", completó y remató con el tercer problema: "Cristina dejó 1,8, en algunos casos, 3 puntos, según quien lo tome. Tenemos más de 6 puntos de déficit fiscal. ¿La culpa de Cristina, Joaquín? Por favor, seamos serios".
 
Desorientado, el columnista del diario La Nación sostuvo que sus fuentes le daban otras cifras: "Usted me confunde porque acá la mayoría de los economistas, en este programa, dicen que Cristina dejó un déficit de 7 puntos". "Eso no es lo que dijo el Indec de Macri", lo remató Alberto.

 
Al referirse a la llamada "grieta", el ex jefe de Gabinete señaló que "la Argentina no soporta más la división que nació en la época de Cristina pero que nadie la explotó más que el macrismo". "Este conflicto no es solamente de un espacio. Es un conflicto generalizado. Estoy harto de soportar el juego de los trolls que viven haciendo cosas para ensuciarme", disparó y advirtió que con esta situación "lo que más se ha afectado es la convivencia democrática".
 
En otro tramo de la nota, Alberto Fernández desnudó la presión del Poder Ejecutivo sobre los medios críticos. "Han puestos presos a dueños de canales opositores". "¿Cuál dueño? ¿Cristóbal López? --interrumpió Morales Solá-- él no está preso por ser dueño de un medio sino porque se quedó con 8 mil millones de pesos".
 
La réplica no le dejó mucho margen al editorialista de La Nación: "No, está preso porque le aplicaron una doctrina vergonzosa para tenerlo detenido. Podría estar procesado, en libertad. Pero por algo lo apresaron. Yo quisiera que el sistema judicial argentino funcionara de otro modo".
 
Sobre los episodios de los últimos días, en los que discutió con periodistas como el conductor cordobés Mario Pereyra, Fernández fue categórico: "el derecho de expresión lo tenemos todos pero un periodista no tiene derecho a llamarme mentiroso, como él me trató".
 
"El periodista no tiene derecho a ponerse en rol de opositor mío, puede no pensar como yo pero declararse opositor y hacer un reportaje franco es una contradicción", insistió. De todas maneras, recordó que él fue crítico del Gobierno durante las épocas de confrontación con un sector del periodismo antikirchnerista.
 
"Ningún periodista va a tener ningún problema en Argentina. Porque el problema de la Argentina no es el periodismo. El problema que tiene la Argentina es la pobreza, la desocupación, es la marginación", señaló. 
 
"Usted dijo que se van a revisar decisiones de la Justicia...", señaló el conductor del programa Desde el llano. Antes de que pudiera terminar, Fernández le salió al cruce "No dije eso. Eso malintencionadamente se interpretó así", remarcó y reveló que en un almuerzo le consultaron qué haría con la Corte Suprema en caso de llegar al poder.
 
"Nada hay que hacer con la Corte. La Corte tiene cinco jueces dignos. Tres de la gestión nuestra y los dos nuevos. A mí me puede gustar más o menos lo que Rosenkrantz resuelve pero es un hombre con antecedentes académicos incontrastables. Así como digo que con la Corte Suprema no hay que hacer absolutamente nada, le digo también que hay casos de la justicia federal ha dicho cosas increíbles. Yo no sé si Cristóbal López es inocente o culpable. Lo que sí le puedo decir es que en un Estado de Derecho que funciona a pleno no tiene ningún motivo para llevar dos años preso. Las detenciones arbitrarias han sido una regla de la justicia federal".
 
"Usted quiere que todos los presos estén en su casa", lo chicaneó Morales Solá. El ex jefe de Gabinete le respondió con sus herramientas de profesor de derecho penal: "No. Yo quiero que se haga justicia. Yo no defiendo gente, defiendo el Estado de derecho. Defiendalo usted también. Porque lo hacen hoy con ellos lo pueden hacer con usted también", le advirtió.
 
Además, volvió a repetir que con "revisar los fallos judiciales" no se refiere a una intervención del Poder Ejecutivo sino a que sea el Consejo de la Magistratura el que analice las decisiones de los magistrados de Comodoro Py. Además señaló que algunas decisiones de primera instancia fueron ratificadas sólo porque "el gobierno de Macri vació la Cámara Federal para llenarla de jueces amigos".
 
"Yo cuando a usted lo perseguían opinaba y estuve del lado suyo. Cuando se hacían los juicios públicos en la plaza de mayo. Siempre estuve del lado de ustedes ¿por qué piensan que voy a estar en contra?", insistió.
 
 
El FMI y la deuda
  
JMS: "¿Cómo va a ser la relación con el Fondo?"
 
AF: "La misma que tuvimos en el 2004. ¿O nosotros no recuperamos la relación con el Fondo y le terminamos pagando? El que no le puede pagar es Macri. Y el fondo lo sabe".
 
JMS: "Ninguno va a poder pagar..."
 
AF: "La Argentina no va a poder pagar por las condiciones que dejó Macri. No me eche la culpa a mí, lo hizo Macri. Eso es lo que hay que asumir, Joaquín. Vamos a tener un serio problema pero hay que resolverlo. Ya los resolvimos en 2003. Eran problemas muy parecidos."
 
Consultado por una medida positiva de la actual gestión, Fernández rescató la recuperación de la confianza en las estadísticas públicas. Sin embargo, cuestionó la campaña que hace el oficialismo en torno al supuesto desarrollo de la obra pública. "Los gobernadores me cuentan que tuvieron que terminar un montón de obra pública dejó sin hacer porque se ocupó de hacerla en la provincia de Buenos Aires y dejó sin hacerla el resto del país", señaló.
 
 
Mercosur - Unión Europea
 
El precandidato del Frente de Todos aseguró que la primera reunión activa para avanzar en el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea se realizó durante su gestión como jefe de Gabinete, en 2006. Sin embargo, advirtió que lo que inicialmente consensuó el presidente Macri "no ha tenido en cuenta un montón de zonas sensibles que se descuidaron en la lógica de apertura". "Yo no tengo un problema con la apertura, tengo un problema si la apertura se lleva puesta a la Argentina", remarcó y remató: "esto que se firmó fue otra mentira de Macri. No fue un acuerdo con la Unión Europea, fue el comienzo de las negociaciones de 12 años".
 
 
La relación con EEUU
  
JMS: ¿Qué relación tendría usted con el gobierno de Trump que es un gobierno difícil?
 
AF: La que corresponde con un país como Estados Unidos. Con EEUU hay que convivir, simplemente. Hay que respetarse. ¿Si nosotros convivimos con Bush, como no vamos a poder convivir con Trump también? Esas son ficciones que ustedes crean. Miedos que crean los analistas. No es razonable.
 
 
Venezuela
  
JMS: "¿Qué piensa usted de lo que está pasando en Venezuela?"
 
AF: "Estoy muy preocupado. Hace mucho tiempo que vengo planteando que el gobierno de Venezuela tiene un sesgo autoritario. Que le ha dado un enorme problema institucional y un enorme problema autoritario. Tengo una enorme preocupación, que creció cuando vi el informe de Michelle Bachelet, que reveló una serie de datos que no conocía. Dicho esto, creo que la salida no es correr detrás de Trump y los marines. Eso es promover una guerra civil en Venezuela".
 
JMS: "No, pero tampoco ponerse del lado de Maduro".
 
AF: "No. La solución es hacer lo que propuso dignamente Uruguay y México. Generar un canal de diálogo que se abra y reponga institucionalidad y recupere la convivencia democrática y sale a Venezuela de la crisis humanitaria en la que está".
 
Fuente: Página12
 

Agreganos como amigo a Facebook
26-12-2025 / 07:12
Sea por la infatuación que le dio el triunfo en las elecciones de octubre, por un criterio equivocado o por simple ignorancia política, el gobierno de Javier "el Loco" Milei ha incurrido en un error que puede resultarle caro. Aunque no explícitamente, se ha indispuesto con la Iglesia Católica, porque esta defiende la Justicia Social.
 
Se sabe que esta institución, se diría que, desde siempre, ha sido el credo mayoritario en el país, con militancia de las clases altas y muchas de las jerarquías militares, y si no recordar los últimos meses del primer período de gobierno peronista, cuando hubo un abierto enfrentamiento con la Iglesia y los aviones que bombardearon a gente inocente en Plaza de Mayo lo hicieron con el claro signo de "Cristo Vence" escrito en el fuselaje de sus máquinas.
 
Aquí y ahora la situación no ha llegado a extremos semejantes, pero se manifiesta claramente en el tradicional cambio de saludos para fin de año que concretaron la Iglesia y el Gobierno. A una nota enviada por el arzobispo al Presidente en la que destaca "nuestro anhelo de una paz social sólida, fundada en el cuidado de cada persona y especialmente de quienes atraviesan mayores fragilidades: los pobres, los trabajadores que sostienen día a día la vida del país y los ancianos cuya sabiduría y experiencia necesitamos valorar y acompañar".
 
Milei respondió diciendo que aprecia y valora "el llamado a la reflexión, a la paz social y el compromiso por el bien común" planteado por la jerarquía católica" y sostiene que "seguiremos trabajando incansablemente para generar las condiciones que permitan a cada argentino desarrollarse con dignidad, libertad y oportunidades reales de progreso, especialmente a quienes se encuentran en situaciones de mayor vulnerabilidad".
 
Es fácil advertir que ambas misivas rezuman protocolo. Es posible que en el proceder de la Presidencia se refleje la dudosa capacidad de sus colaboradores en la materia (tal como se ha hecho evidente en materia diplomática) pero en el asunto cuentan dos hechos altamente significativos.
 
El primero es la abierta confesión de Milei de su militancia en la religión judía, la que no sólo lo ha llevado a alineamientos internacionales con Israel que hicieron trizas la tradicional neutralidad argentina; y también a cometer algunas torpezas dentro del rito mismo. Imbuida de una tradición de presidentes católicos o poco menos, la Iglesia debió deglutir en silencio el sapo que representó su presencia en actos de profunda significación dentro de la fe católica.
 
El otro error fue más grosero. No solamente faltó el tradicional encuentro de Navidad y Fin de Año entre ambos sectores político-religiosos; desde el Ejecutivo ha habido una suspensión de fondos a obras sociales que eran administradas por la Iglesia Católica, con el agravante -se diría que casi ofensa-- de derivarlos hacia congregaciones protestantes y evangelistas, miembros de la llamada Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas (Aciera).
 
A primera vista parecería una áspera respuesta por elevación a las repetidas homilías que el Episcopado católico ha hecho públicas, claramente críticas de la actual política de gobierno. Tampoco hay que olvidar la presencia presidencial de hace algunos meses en la inauguración de un gran templo evangélico, que hasta contó con la concreción de pretendidos -y torpes-milagros. La falta de contactos efectivos mencionada antes tuvo un agravante: sus principales integrantes evangélicos sí fueron participantes de un encuentro con autoridades del Poder Ejecutivo.
 
"El presidente -ha dicho uno de los principales analistas en el tema- no invita a dialogar a las autoridades del Episcopado católico, mientras orienta fondos hacia los evangelistas de Aciera y celebra con ellos en Casa Rosada". Una relación que va de fría a congelada.
 
La Opinión Popular
 

24-12-2025 / 11:12
La guerra de las coimas. Daniel Garbellini, el hombre de los primos Menem al que Daniel Spagnuolo definía en sus audios como "un delincuente" y al que le echó toda la culpa por la corrupción con los remedios para discapacitados, declaró ante la Justicia que el verdadero culpable era el propio Spagnuolo. "El asumió la suma del poder en la Andis y era el único que tenía firma autorizada para realizar pagos", sostiene en un documento.
 
La causa sobre coimas, direccionamiento y sobreprecios en la compra de medicamentos en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) dejó expuesta una batalla entre los principales imputados. Después de que el exdirector del organismo, Spagnuolo, buscara en un escrito responsabilizarlo por las irregularidades, Garbellini -su exnúmero dos, extitular de Acceso a los Servicios de Salud- le devolvió en un descargo la gentileza.
 
En el marco de la causa que investiga las irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad, Garbellini, ex número dos del organismo, presentó un escrito ante la Justicia en el que negó todas las acusaciones y trasladó la responsabilidad de las decisiones operativas y administrativas a Diego Spagnuolo, ex abogado personal de Javier "el Loco" Milei y exdirector ejecutivo de la entidad.
 
Garbellini fue removido de su cargo tras el escándalo por sobornos en la compra de medicamentos y detalló que asumió la Dirección de Acceso a los Servicios de Salud en junio de 2024. Según su descargo, sus funciones se limitaban a la gestión del programa Incluir Salud, destinado a brindar cobertura médica a personas con discapacidad sin obra social, y no incluían facultades decisorias sobre contrataciones ni sobre bajas de pensiones.
 
En su presentación, sostuvo que el control total del sistema informático, las compulsas de precios y los pagos estaban en manos exclusivas de la Dirección Ejecutiva. "Tanto el suscripto como el resto de los funcionarios éramos usuarios del sistema", afirmó, y remarcó que el acceso pleno e irrestricto a la información dependía únicamente del director ejecutivo.
 
Garbellini insistió en que no tenía atribuciones para transparentar o abrir las contrataciones, y que cualquier falta de publicidad o control público fue una decisión ajena a su responsabilidad. Incluso aseguró haber sugerido cambios estructurales que fueron rechazados con el argumento de que "todo se hacía por urgencia".
 
El caso se originó a partir de grabaciones que involucraban a Spagnuolo, aunque esas pruebas no fueron consideradas válidas por el fiscal Franco Picardi. En esos registros también se mencionaba un vínculo entre Garbellini y Karina Milei, a través de un colaborador cercano, aunque esa línea no avanzó formalmente.
 
Hasta ahora, el único testimonio oral fue el de Roger Grant, quien admitió irregularidades en las contrataciones del programa PACBI y aseguró que actuaba bajo órdenes directas de Garbellini, a quien señaló como la figura que definía la operatoria. Sin embargo, evitó referirse a presuntas coimas. El expediente también incorpora anotaciones secuestradas en un allanamiento que vuelven a comprometer al exfuncionario libertario y refuerzan la disputa de responsabilidades en la causa.
 
La Opinión Popular
 

23-12-2025 / 09:12
Un fallo de Cámara obliga al Gobierno a explicar ante la Justicia dónde está el oro que, en junio de 2024, el gobierno de Javier "el Loco" Milei sacó del Banco Central para enviar al exterior. Para los jueces, esa información constituye "un asunto de indudable interés público como es la administración de las reservas". La presentación la hizo La Asociación Bancaria, el gremio que descubrió y denunció la maniobra con los lingotes de oro. El presidente del Banco central, Santiago Bausili, ya se negó a contestar un requerimiento de la Auditoría General de La Nación. Junto a "Toto" Caputo sacaron el oro del país y nunca informaron sobre su destino.
 
En un operativo clandestino de ribetes policiales, comenzó una saga de ocultamiento de las autoridades sobre el destino de uno de los principales activos líquidos del organismo monetario. El diputado nacional y líder de La Bancaria, Sergio Palazzo, presentó varios pedidos de informes exigiendo a las autoridades que expliquen donde está el oro y que tipo de cauciones lo afectan. Caputo nunca quiso explicar su destino, se limitó a comentar muy por arriba en un programa de televisión que se giró a un banco para cobrar intereses. No explicó quien lo tiene ni qué tipo de operación se hizo con ese importante activo.
 
Ahora, la Justicia Federal ordenó este lunes al Banco Central que entregue información precisa sobre el destino del oro. En una resolución firmada por los jueces Guillermo Treacy y Pablo Gallegos Fedriani, la Sala V de la Cámara Contencioso Administrativa Federal, consideró que la autoridad monetaria no justificó de manera suficiente su decisión de no informar sobre el destino del activo y sostuvo que la negativa vulneró los principios de transparencia.
 
Es que Caputo y Bausili sostienen que la operación forma parte de la "administración" de las reservas y por ende es secreta. El mismo criterio opaco que Caputo utiliza para no dar precisiones sobre el swap firmado con Estados Unidos y los bonos que le entregó al Tesoro para que rentabilice la venta de dólares que hizo sobre el cierre de la campaña.
 
Los jueces fueron punzantes sobre el lamentable manejo de Caputo sobre información que debería ser pública. "La configuración de alguna de las excepciones legales a la entrega de información pública no puede depender de una apreciación unilateral del sujeto obligado", sostiene el fallo y subraya que es el Estado quien debe demostrar, de manera concreta, que la difusión de los datos solicitados causaría un daño a un interés legítimamente protegido.
 
El Banco Central respondió apenas con un comunicado formal que "había completado transferencias de parte de sus reservas en oro entre sus diferentes cuentas", sin precisar monto, destino ni motivo concreto. La respuesta evasiva del BCRA encendió alarmas. Porque ese oro no es un adorno: según informes oficiales, las reservas de oro rondan unos USD 4.900 millones, un componente significativo del total de activos extranjeros del Central.
 
Aunque la entidad insiste en que las operaciones no alteran el volumen agregado de las reservas, nadie sabe realmente dónde están físicamente esos lingotes y si siguen efectivamente en poder del Estado o se remataron en algunas de las operaciones de préstamos igualmente opacas que concretó Caputo. El balance del BCRA, en ciertos trimestres, llegó incluso a no mostrar ese componente con claridad, como si hubiera desaparecido entre páginas y cifras.
 
La Auditoría General de la Nación (AGN) reveló recientemente que el Banco Central se negó a entregar documentación sobre dónde están los lingotes, bajo qué condiciones se conservan y si parte del oro fue transformado en instrumentos financieros. El argumento oficial: la información es "confidencial" y su difusión podría poner en riesgo la seguridad de los activos. Como sea, la pregunta es: ¿dónde está el oro? Eso es lo que la Justicia ahora exige que responda Milei.
 
La Opinión Popular
 

22-12-2025 / 10:12
Las joyas de la abuela que remata el gobierno. A espaldas del Congreso, el Gobierno ya vendió 40 valiosos terrenos del Estado (pertenecientes a las fuerzas armadas, instituciones científicas y hasta predios de ex centros clandestinos de detención) y tiene 140 inmuebles más para subastar. Luis "Toto" Caputo sueña con conseguir unos mil millones de dólares mientras las grandes inmobiliarias amigas del gobierno, con Eduardo Costantini a la cabeza, se quedan con el botín.
 
Tierras del Plan Procrear, de las Fuerzas Armadas, ferroviarias, de instituciones científicas, predios de ex Centros Clandestinos de Detención y hasta un pedazo de montaña en Mendoza. Todo eso incluye la lista de más de 180 terrenos e inmuebles públicos que conforman el plan de ventas de bienes del Estado que ya avanza en el Gobierno de Javier "el Loco" Milei.
 
Los remates, que esta semana fueron noticia por la venta de tierras destinadas originalmente a viviendas sociales, se concentran por ahora en la Ciudad de Buenos Aires con las empresas de Eduardo Costantini como principales beneficiarias y otros grandes jugadores del sector, como el Grupo IRSA, codiciando las tierras.
 
A través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), y sin pasar por el Congreso, la fuerza libertaria ya vendió cerca de 40 bienes y tiene en lista otros 140 lotes e inmuebles publicados para subastar en lo que le queda de mandato.
 
La lista de subastas futuras cuenta con terrenos de hasta 300 hectáreas a vender en el interior del país con destino al negocio agropecuario o a grandes proyectos inmobiliarios. Especialistas y organizaciones ambientalistas advierten que se trata "de uno de los procesos de descapitalización pública más agresivos de nuestra historia reciente".
 
"Vamos a vender muchos de los activos de la AABE y eso va a generar un ingreso de miles de millones". No mentía el ministro de Economía, "Toto" Caputo, cuando a principios de junio reconocía que el gobierno remataría las tierras del Estado para intentar sostener las reservas, en conjunto con los procesos de privatizaciones y concesiones.
 
Sólo desde ese mes la Agencia abrió subastas para un total de 26 terrenos e inmuebles a los que hay que sumarle otros 17 procesos de remate que se habían abierto desde fines de 2023. En paralelo a las subastas de la AABE, el gobierno remata también las tierras que estaban destinadas al ya disuelto Plan Procrear y apunta a recaudar una suma de entre 800 y 1000 millones de dólares por todo el paquete. Aunque hubo ventas en Mendoza, La Plata, Pinamar y Córdoba, la mayor parte de los bienes vendidos hasta ahora se concentran en la Ciudad de Buenos Aires.
 
El terreno más grande de ese paquete es el predio de cuatro hectáreas que pertenecía al Ejército y que Eduardo Costantini adquirió por más de 120 millones de dólares. El mismo empresario se quedó con un lote de la Policía Federal en Bajo Belgrano a través de la firma Argencons, que controla desde mayo, en una subasta peleada en la que la empresa le ganó incluso al peso pesado de Eduardo Elsztain y su Grupo IRSA.
 
Antes, Costantini también había sumado otro terreno a pocos metros del Campo Argentino de Polo. En los tres casos se construirán desarrollos inmobiliarios.
 

21-12-2025 / 09:12
Cuando los cimientos están agrietados, todo lo que se construye es frágil e inestable. Cincuenta días tardó Javier "el Loco" Milei, tras una sorpresiva e impactante victoria en las elecciones de medio término, en fagocitarse el crédito político, de la misma forma que se fagocitó -durante los últimos dos años- una cantidad récord de divisas sin poder acumular reservas.
 
Ahora, tiene por delante dos años en los que su suerte está atada a la voluntad de aliados poco confiables. El FMI volvió a intervenir la economía, forzando un volantazo; los gobernadores pasaron por caja y después le votaron en contra. Un poco de su propia medicina. Hola incertidumbre, mi vieja amiga, podría cantar el presidente. Dos años, en Argentina, es mucho tiempo.
 
Después de la sesión del miércoles en la Cámara de Diputados, la mayoría de los medios titularon con un triunfo del oficialismo por la media sanción de diputados y apenas destinaron alguna línea en la bajada para comentar, como algo secundario, la inesperada derrota en el Capítulo 11 que se votó de madrugada. Con el correr de las horas, la realidad se encargó de corregir ese evidente error de criterio.
 
La derrota del gobierno fue completa y sus consecuencias están teniendo ramificaciones imprevistas. Milei amenazó con vetar su propio presupuesto y Patricia Bullrich tuvo que anunciar la postergación del tratamiento de la reforma laboral, justo a la hora que la CGT desconcentraba la Plaza de Mayo. Una derrota indisimulable.
 
El debate sobre la Ley de Presupuesto en la Cámara Baja era la primera y la más sencilla de todas las sesiones que tiene por delante el Gobierno para aprobar las reformas que anunció. La dificultad insalvable que encontró esta semana echa dudas sobre la viabilidad del resto de sus planes, justo cuando tiene que convencer a los acreedores que le vuelvan a prestar el dinero que no podrá devolver en 20 días.
 
La forma en la que intentó, sin éxito, salvar esa dificultad, repercutió negativamente en la relación con todos sus aliados, a los que necesita para que el Congreso le siga dando una pátina de legitimidad a sus decisiones, muchas veces ilegales e inconstitucionales.
 
La caída del artículo 75, el corazón de la derrota, está cargada de significado político porque fue una rebelión contra la cláusula de la humillación. Enceguecido por una mala lectura de las urnas, Milei no se contentó con ganar sino que quiso escenificar un triunfo absoluto y definitivo sometiendo a los legisladores que antes de la elección habían apoyado las leyes que daban presupuesto a la Universidad Pública y a las personas con discapacidad, para que votaran explícitamente en contra de esas mismas leyes. Ese era el corazón político del proyecto que había enviado el Poder Ejecutivo. Las partidas pueden reconducirse por decreto. Lo importante era coronar a Milei.
 
Así, el solsticio de verano no sólo marca hoy el final de la primavera, sino también, en coincidencia, el de la primaverita política que había comenzado para el gobierno con el resultado de las elecciones de medio término y que terminó sin que pudiera capitalizar de manera alguna ese éxito. La realidad muestra que, al fin y al cabo, las cosas no son tan malas como parecían en septiembre ni tan buenas como nos quisieron hacer creer después de octubre.
 
Todo sigue más o menos parecido a lo que fue el largo 2025: precario, inestable, violento, cada vez más autoritario y deteriorado. Este año Milei necesitó tres rescates del FMI, de Trump y de las urnas, para llegar hasta acá. Va a necesitar uno más, de los Senadores, antes del brindis del 31. Y con el 2026 comenzará una historia diferente.
 

NicoSal soluciones web

© Copyright 2009 LA OPINIÓN POPULAR – www.laopinionpopular.com.ar - Todos los derechos reservados.

E-mail: contacto@laopinionpopular.com.ar