Nacionales - 24-07-2018 / 12:07
Macri romperá por decreto el consenso democrático sobre el rol de las Fuerzas Armadas
Amplio repudio al plan de Macri de volver a poner a los militares a las calles. Apenas Macri realizó el anuncio desde Campo de Mayo (uno de los centros clandestinos de detención emblemáticos del genocidio argentino), el repudio generalizado se propagó por todo el país. Todos los organismos de derechos humanos rechazan la medida anunciada ayer por el Presidente y alertan sobre las consecuencias nefastas que traerá para el pueblo trabajador.
El anuncio del Presidente sobre su deseo de cambiar el papel de las Fuerzas Armadas disuelve la barrera entre la seguridad interior y la defensa nacional. Si la sociedad no detiene a Mauricio Macri, la decisión oficial cambiará la vida de la Argentina para siempre. Y arruinará, inclusive, la vida de los propios militares. Una desgracia, porque la Ley de Defensa Nacional fue promulgada en 1988 por Raúl Alfonsín y garantizó 30 años donde se hizo lo que le correspondía.
Macri abrió las compuertas que llevan hacia México. En 2006 el presidente Felipe Calderón sumó a los militares a la lucha contra el narcotráfico. Los muertos por la guerra entre los narcos y la guerra militar antinarco, llegaron a 234 mil entre 2006 y 2017. Son datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía y del Sistema Nacional de Seguridad Pública de México.
Primera aclaración: el problema del narco en la Argentina no tiene nada que ver con el de México. Los cuates tienen del otro lado de su frontera norte -3100 kilómetros con los Estados Unidos- la mayor demanda de droga del mundo. Antes, de cocaína. Ahora también de opioides y drogas sintéticas. Segunda aclaración: la participación militar produjo más muertes pero no solucionó el problema del narco.
Otro argumento del Gobierno es que las amenazas no vienen solo de Estados extranjeros sino de agentes extra estatales. Es una verdad parcial, porque siempre hay Estados detrás. Los especialistas discuten, por ejemplo, el papel de Qatar en el sponsoreo del terrorismo en el Medio Oriente y fuera del Medio Oriente.
En términos biológicos es cierto que los actuales militares argentinos no tienen responsabilidad alguna en los crímenes de la dictadura. Un general de 55 años tenía 13 años en 1976. Pero la historia trasciende la biología.
A la Argentina le fue mal cuando militares yanquis y franceses impartieron la Doctrina de la Seguridad Nacional según la que, en síntesis, el enemigo estaba adentro y había que combatirlo con el mismo método que los colonialistas franceses aplicaron contra los insurgentes de Argelia: la tortura como fuente de inteligencia y el asesinato como método de solución final.
La democracia argentina, con el acuerdo de radicales y peronistas en materia de seguridad interior y defensa nacional, construyó una nueva legalidad. No es que los militares considerados individualmente sean adictos a la represión interna. Las instituciones se basaron en esa doctrina y en esa práctica y el resultado fueron miles de muertos y desaparecidos.
Ahora Macri abre otra vez el camino del desastre. Un camino que estaba sabiamente cerrado. Y sin motivos ni argumentos reales, nos lleva a la guerra. Macri está emprendiendo la senda de un suicida. El riesgo es que, como se trata de un presidente, el suicidio arrastraría a millones de argentinos que tienen cero ganas de morir.
Por Martín Granovsky
BLOQUES LEGISLATIVOS Y DIRIGENTES OPOSITORES ALERTARON SOBRE LAS POSIBLES CONSECUENCIAS
Para la oposición es ilegal y peligroso
En la oposición remarcaron que antecedentes como los de México y Colombia indicaban que era peor el remedio que la enfermedad. También advirtieron sobre la posibilidad de que se las utilice para reprimir la protesta social.
La decisión del presidente Mauricio Macri de involucrar a las Fuerzas Armadas (FF.AA.) en cuestiones de seguridad interior produjo el rechazo de gran parte del arco político opositor. "Fuerzas Armadas fuera de rol: una medida ilegal, ineficaz y peligrosa", sostuvo el bloque de diputados del Frente para la Victoria (FpV-PJ).
"Meter a las Fuerzas Armadas en seguridad empeoró el problema en todo el mundo", sumó Felipe Solá, mientras que el jefe de los diputados del peronismo federal, Pablo Kosiner, aclaró que "no estoy de acuerdo en patrullar ciudades o intervenir en conflicto sociales".
"La experiencia del mundo nos indica que termina siendo un remedio peor que la enfermedad, como en México y Colombia", opinó Ricardo Alfonsín, como parte de un grupo de radicales que se oponen a la medida.
Desde el Frente de Izquierda (FIT) no hay dudas de que la resolución presidencial apunta a reprimir la protesta social: "Quieren tener las FF.AA. a mano para utilizarlas en la represión a la protesta social que se multiplicará para enfrentar el duro ajuste que exige el FMI", dijo el diputado Nicolás del Caño (FIT-PTS), en tanto el legislador porteño Gabriel Solano (FIT-PO) lo asoció al "plan represivo diseñado por el Pentágono".
"Desde 1983 es una política de Estado separar la defensa nacional de la seguridad interior. Involucrar a las FFAA en asuntos de narcotráfico es ilegal y en países como México, Colombia y Brasil fracasó, lo que generó una revisión de esa decisión", dice el comunicado de la bancada del FpV-PJ.
"Casualmente cuando recrudece la crisis social por el ajuste y el pacto con el FMI, Macri apela a la demagogia punitiva y continua su degradación de la democracia y el estado de derecho", plantean los legisladores al tiempo que reclamaron que exigieron que "el debate pase por el Congreso".
Otros dirigentes del mismo espacio hicieron lo propio. "La reforma de las FF.AA. jaquea leyes básicas del estado democrático y nos alinea automáticamente con la agenda de seguridad de Estados Unidos. Los argentinos aún sufrimos las consecuencias de esas políticas", sumó el ex canciller y diputado del Parlasur, Jorge Taiana.
"El único motivo por el que Macri quiere cambiar la misión de las FF.AA. y volcarlas a la 'seguridad interior' es la persecución y la represión de los sectores populares y sus representantes", sostuvo el titular de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella.
"No es conveniente para un país que ha tenido un partido militar, que las FFAA estén a cargo de la seguridad interior. Si tenemos que derogar leyes que vengan al Congreso", reclamó Solá en declaraciones periodísticas.
El diputado fue uno de los escasos massistas en cuestionar la decisión. "El narcotráfico se combate en red con los adictos en recuperación, con sus familias, con las madres que denuncian dónde se vende drogas y con una policía especializada, profesional y bajo control civil", completó.
"La política de 'seguridad interior' está regulada claramente en la Ley 24059 del Congreso Nacional que en su artículo 3 está definida por el uso de los elementos de fuerzas policiales y de seguridad de la Nación como principio general", vertió en las redes sociales el salteño Kosiner.
Pero el jefe del bloque Argentina Federal se encolumnó con la línea dialoguista de los gobernadores peronistas: "Es necesario debatir la respuesta del estado en materia de seguridad frente a los flagelos del narcotráfico y el terrorismo internacional, en un contexto distinto a 1991/1992 pero deberían buscar consensos en políticas de Estado y no grietas".
"No es su función están preparadas para otro cosa. La experiencia del mundo nos indica que termina siendo un remedio peor que la enfermedad, como en México y Colombia", dijo Alfonsín en declaraciones periodísticas y marcó que "el Gobierno sigue tomando decisiones que nos afectan a todos sin dialogar".
En Twitter, el presidente de la UCR porteña, Guillermo de Maya, fue la única voz institucional partidaria: "Un soldado se prepara toda su vida para matar al enemigo. Un policía estudia para prevenir el delito. Suplir a los segundos con los primeros es de un amateurismo que asusta. Y además es ilegal. Ningún radical debe apoyar el uso de las FF.AA. en seguridad interior".
"Grave error de Macri comprometer a las FF.AA. en la seguridad interior. Argentina tiene un espacio terrestre y marítimo enorme repleto de recursos por proteger. Necesitamos una política de Defensa Nacional que garantice nuestra soberanía, independencia e integridad territorial", agregó en la red social el senador porteño Fernando "Pino" Solanas.
Para la izquierda no hay duda del sentido que Macri le quiere dar a su decisión."La reforma de las FFAA que anunció Macri tiene una clara función. Moviliza efectivos hacia la frontera para volcar la Gendarmería contra los trabajadores, ante la brutal ofensiva en marcha, de la mano del FMI", sumó Néstor Pitrola (FIT-PO). La legisladora porteña Myriam Bregman (FIT-PTS) enumeró los pasos de la política gubernamental: "1-Acuerdo con FMI y mayor ajuste. 2-Reinsertar a las Fuerzas Armadas a tareas de seguridad. 3-Construir a los que lo enfrenten como 'enemigos'. Este es el próximo paso".
Fuente: Página12