Nacionales - 17-03-2017 / 07:03
LEJOS DEL ESCENARIO QUE VENDEN MACRI, TRIACA Y DUJOVNE
El desaliento ante la persistente recesión hace que menos gente salga a buscar empleo
Para el Indec la baja de la desocupación del 8,5 por ciento en el tercer trimestre de 2016 al 7,6 por ciento en el cuarto trimestre, está ligada a una disminución de "la actividad y la desocupación, por refugio en la inactividad", lo que en otras palabras significa que en ese período menos gente salió a buscar trabajo porque no tienen expectativa de encontrarlo.
El desempleo refleja el número de personas pertenecientes al sector económicamente activo, integrado al mercado de trabajo remunerado, que no tienen empleo a pesar de estar dispuestas a desarrollar una actividad laboral y haber emprendido acciones concretas para obtenerla. El desocupado es el que busca trabajo y no lo consigue. El que está sin trabajar y no busca, no se considera desocupado.
El desaliento de la población ante la tenaz recesión del año pasado hizo que cerca de 285.000 personas desocupadas dejaran de buscar empleo en el tramo final del año y dejaron de ser desocupados. El descenso de la desocupación no fue porque se crearon más empleos, sino porque más personas sin ocupación dejaron de buscarlo. Y encontraron "refugio en la inactividad", según consigna el comunicado del Indec. Así, el gobierno de Macri "mejoró" los indicadores de desempleo.
Por el llamado "factor desaliento", relacionado con las pocas perspectivas de encontrar un trabajo, el INDEC puede mostrar una baja de la desocupación al 7,6%, que se refleja en la tercera medición de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), correspondiente al cuarto trimestre de 2016 que arrojó leves bajas tanto en la oferta (45,3%) como en la demanda laboral (41,9%), respecto del anterior.
La información disponible no muestra el escenario de recuperación del empleo que promocionan desde enero el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y el titular del Palacio de Hacienda, Nicolás Dujovne.
Junto con la pérdida de puestos de trabajo concentrada en la industria manufacturera y la construcción, el aumento en el desempleo a lo largo de 2016 se explica porque, ante el deterioro en la capacidad de compra, más individuos salieron a buscar empleo pero no lo consiguieron.
Por su parte, la subocupación llegó a 10,3 por ciento que representa a 1.278.000 personas con problemas de empleo. Los aglomerados urbanos con los mayores niveles de desocupación fueron Mar del Plata y el Gran Buenos Aires donde alcanzaron a 10,6 y 9,4 por ciento, respectivamente.
La población subocupada creció, donde la demandante (que trabaja menos de 35 horas semanales pero quiere hacerlo más) es el 7,2% de la población (1,8 millón a nivel nacional). Mientras que los subocupados no demandantes llegaron al 5,6% (1,3 millón).
El Indec estimó que hay 937.000 personas desocupadas y 1,2 millones con problemas de empleo o subocupadas en los aglomerados relevados. Es decir, más de dos millones de argentinos tienen problemas de empleo.
Estos datos desmienten las afirmaciones realizadas por el presidente Mauricio Macri, y por el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne, respecto de que ya a fin de año se habría iniciado la recuperación de la economía y se estaría creando empleo desde entonces.
La Opinión Popular
Con menos personas que buscan empleo, la desocupación bajó a 7,6%
El desempleo fue 7,6% en el último trimestre del año. Si bien bajó frente al 8,5% de entre julio y septiembre, también cayó el porcentaje de personas que buscan trabajo. La tasa de actividad fue la más baja en 13 años.
El 7,6% implica que 937.000 personas que buscaron empleo no lo consiguieronEl 7,6% implica que 937.000 personas que buscaron empleo no lo consiguieron
De la mano de la segunda tasa de actividad más baja de los últimos 13 años para el cuarto trimestre, el desempleo disminuyó a 7,6% hacia fines del año pasado cuando se lo mira respecto al 8,5% alcanzado entre julio y septiembre, según datos del Indec difundidos ayer. Si bien estadísticamente no debería realizarse esta comparación (entre distintos trimestres), no se cuenta con la información de fines de 2015 ya que se había suspendido la publicación de este indicador.
En el tercer trimestre, el desempleo había afectado a un 8,5% de la población, y, en el segundo, a 9,3%. Aunque no se deba realizar la comparación contra estos períodos, el propio organismo de estadísticas detalla que "los resultados del cuarto trimestre de 2016 no presentan diferencias estadísticamente significativas en el empleo con relación al trimestre anterior", aunque advierte que "disminuye la actividad y la desocupación por refugio en la inactividad".
La disminución en la tasa de actividad marca que un porcentaje de la población directamente optó por dejar de buscar trabajo. Esto se conoce como "efecto del trabajador desanimado", que es simplemente que por el pesimismo respecto a la posibilidad de encontrar empleo, se frena la búsqueda.
En concreto, la tasa de actividad, luego de haber estado en 46% en el segundo y tercer trimestre, en el último del año pasado, descendió a 45,3%. Este porcentaje es el segundo más bajo de toda la serie (desde 2003) para los cuartos trimestres de cada año. Fue en 2014, cuando los datos estaban sospechados de manipulación, que se tocó el 45,2% (se cree que el bajo desempleo durante ese período fue, precisamente, porque se forzaba a la disminución de la tasa de actividad).
Desde que asumió Jorge Todesca al mando del Indec y se declaró la emergencia estadística, se resalta que los datos de entre 2007 y 2015 debían tomarse con "reserva".
"Poder aplicar la estacionalidad a los datos de desempleo implica un método más refinado", sostuvo Gabriel Caamaño Gómez, de Consultora Ledesma. Y agregó que si bien es cierto que en los últimos años se dio que la tasa de actividad en el cuarto trimestre era más baja que en la del tercero, en el último informe del Indec se dio también que cayó la tasa de empleo: mientras que en el tercer trimestre había sido de 42,1%, a fines de año disminuyó a 41,9%. Aún así, resaltó que la actividad cayó fuerte en el último trimestre de 2016. "No parece ser una cosa que se explique solo con estacionalidad", señaló. A modo de ejercicio, estimó que si se hubiese mantenido en 46% la tasa de actividad, el desempleo habría llegado a 8,9% a fines del año pasado.
La desocupación oficial de 7,6% implica que, para diciembre, 937.000 personas (de los 31 aglomerados urbanos que releva el Indec) que buscaban activamente trabajo no lo consiguieron. Es decir que si se ampliara al total país el número sería mayor, en torno a 1,5 millones de personas.
A esto se suman los subocupados, que el porcentaje subió de 10,2% a 10,3%, y suman 1,3 millones de personas (según el informe del Indec) que también tienen problemas de empleo.
Además, están los "ocupados demandantes de empleo", que si bien tienen trabajo, buscan otro. El porcentaje de personas en este grupo creció de 14,2% a 14,6%.
De los 31 aglomerados urbanos que releva el Indec, la ciudad con mayor desocupación es Mar del Plata, con 10,6% (de hecho es la única que aún tiene dos dígitos de desempleo).
Le siguen los "partidos del Gran Buenos Aires", con un desempleo de 9,4%; Bahía Blanca-Cerri, con 9,2%; y Río Cuarto, con 9,1%.
En el otro extremo, los lugares con menor desocupación en el cuarto trimestre del año pasado fueron Viedma-Carmen de Patagones con 0,8%; Santiago del Estero-La Banda, 1,8%; el Gran Resistencia, 2,5%; y Posadas, con 2,7%.
"En 22 de los 31 aglomerados se mantiene la actividad, el empleo y la desocupación sin cambios estadísticamente significativos", detalló el Indec en el informe.
Por María Iglesia
Fuentes: El Cronista, Página12, Clarín, la Izquierda Diario y LOP