Nacionales - 28-10-2016 / 11:10
NUEVA DERROTA DE MACRI EN EL CONGRESO
Jaque al voto electrónico macrista: acuerdo de todo el peronismo para que el conteo sea manual
Nueva derrota de Mauricio Macri en el Congreso nacional. El Senado se encamina a hacer una serie de retoques en la ley de Reforma Electoral que impactarían en el corazón mismo de la iniciativa impulsada por el oficialismo. Es que existe un principio de consenso opositor para que el conteo de los sufragios sea manual y no electrónico, según dijeron fuentes del Partido Justicialista, del Frente Renovador y de la bancada del FpV en la Cámara Alta. De aprobarse la ley con los cambios que plantea la oposición, se abandonaría el tradicional sistema de boletas de papel y se pasaría a votar con pantallas táctiles conectadas a máquinas que imprimirán las boletas. Pero esas boletas no tendrán chip, como establece el proyecto que fue aprobado en Diputados. De esa manera, el recuento de votos deberá hacerse a mano. Los argumentos principales son que sin chip el sistema no es vulnerable a hackeos informáticos y que además garantiza que no haya robo ni faltantes de boletas en los lugares de votación.
Nueva derrota de Mauricio Macri en el Congreso nacional. El Senado se encamina a hacer una serie de retoques en la ley de Reforma Electoral que impactarían en el corazón mismo de la iniciativa impulsada por el oficialismo. Es que existe un principio de consenso opositor para que el conteo de los sufragios sea manual y no electrónico, según dijeron fuentes del Partido Justicialista, del Frente Renovador y de la bancada del FpV en la Cámara Alta.
Cambiemos sufrió en pocas horas varias derrotas en el Congreso que, aunque no definitivas, son indudablemente significativas. La primera le vino desde adentro, de la mano de Elisa Carrió, que desbarató el laborioso acuerdo tejido con Miguel Ángel Pichetto y con Sergio Massa para conseguir el próximo año el desplazamiento de Alejandra Gils Carbó de la Procuración General.
En Cambiemos dolió que, en pleno calor de la sesión, la tropa de Massa se alineara con el kirchnerismo y frenara la discusión del proyecto que la noche anterior habían terminado de consensuar. "No hubo un aviso, ni un whats app", se lamentaba un importante hombre del macrismo. El aceitado puente que hasta aquí tenían con Massa se rompió el lunes, cuando las críticas de Carrió a la reforma del Ministerio Público Fiscal hicieron volar por el aire un dictamen que ya estaba cerrado.
La segunda derrota o fracaso fue con el proyecto de ley macrista de Participación Público-Privada pensada para favorecer a las grandes empresas y al capital financiero internacional, captando 30 mil millones de dólares de inversión para grandes obras de infraestructura. El Gobierno daba por descontada su aprobación, sancionada por el Senado, pero con sorpresa, massistas y kirchneristas se opusieron y el proyecto volvió a comisión. Otro retroceso impensado para una administración que no está acostumbrada, todavía, a llevarse una pared por delante.
A esta suma habría que agregar la concreta posibilidad de que el peronismo le aseste en el Senado un golpe de muerte a la boleta electrónica, sobre la que especialistas en seguridad informática han advertido sobre sus vulnerabilidades ante la posibilidad de fraude o hackeos informáticos. La imposición del criterio de la bancada del FpV en el Senado significaría otra derrota de Macri después de los fracasos con el proyecto de participación público-privado (PPP) y de reforma al Ministerio Público Fiscal.
El Presidente prefiere negociar con los gobernadores peronistas ley por ley siempre con el toma y daca clásico a mano, algo que no es disimulable como antes lo fue. Para Macri y para Cambiemos es una lección de política para asimilar.
La Opinión Popular
REUNIONES PARA DESTRABAR CONTRATOS CON PRIVADOS Y REFORMA DEL MINISTERIO PÚBLICO
Cambiemos busca recomponer vínculos con Massa y el PJ para salvar proyectos claves
El interbloque Cambiemos tiene la esperanza de rescatar la ley de Participación Público-Privada (PPP) y que la Cámara de Diputados lo apruebe la próxima semana. También confían en resucitar el acuerdo con el massismo y el PJ para reformar el Ministerio Público Fiscal (MPF) y remover a la procuradora Alejandra Gils Carbó. El mismo pacto político que Elisa Carrió cuestionó públicamente hasta detonarlo y complicarle al oficialismo todas las relaciones en el Congreso.
Que estos dos proyectos centrales para Casa Rosada y el resto de la agenda parlamentaria pendiente salgan airosos este año dependerá de la capacidad de los líderes de Cambiemos para recomponer el vínculo con Sergio Massa y las dos versiones del PJ: el bloque Justicialista en Diputados y, en el Senado, el ala de la bancada del Frente para la Victoria (FPV) ligada a los gobernadores.
Algo de eso se empezó a encaminar el mismo miércoles por la noche, un rato después de que el clima de tensión, revanchismo y denuncias de traiciones y acuerdos incumplidos estallara en el recinto de la Cámara baja y entre el bloque kirchnerista, la izquierda y el sorpresivo apoyo del massismo lograran frustrar la media sanción al proyecto que quiere el Gobierno para negociar contratos de obras públicas con el sector privado.
El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, reunió en su despacho al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, el senador Juan Manuel Abal Medina (FPV), Massa, el líder del bloque Justicialista, Diego Bossio, y los diputados de PRO Nicolás Massot y Luciano Laspina.
De esa mesa salió un primer acuerdo. Al proyecto de PPP se le harán todas las modificaciones que el oficialismo había pautado con Massa y Bossio para ejecutar en la sesión del miércoles, que se frustró por la moción del FPV aprobada que devolvió el expediente a comisiones. El plan es firmar dictamen el martes y al día siguiente llevarlo al recinto en paquete, con el Presupuesto y los cambios en superpoderes. "Se va a votar y luego el Senado lo va a sacar rápidamente. Ya lo hemos hablado", confirmó Frigerio.
Hubo algunos avances con el Presupuesto, otra ley que no terminan de cerrar. Ayer Cambiemos tuvo que postergar la firma del dictamen porque se le seguirán haciendo cambios. Este jueves, Massot recibió en su despacho a Axel Kicillof (FPV), quien garantizó que su bloque no dejará al Gobierno sin presupuesto.
Hablaron del impuesto a las Ganancias, cuyo proyecto aún no ingresó, y le pidieron algún "plan B" más "barato" para algunos de los pedidos del ex ministro de Economía.
En Cambiemos dolió que, en pleno calor de la sesión, la tropa de Massa se alineara con el kirchnerismo y frenara la discusión del proyecto que la noche anterior habían terminado de consensuar. "No hubo un aviso, ni un whats app", se lamentaba ayer un importante hombre del oficialismo por la actitud de Massa. La misma fuente reconoció que el aceitado puente que hasta aquí tenían con el ex jefe de Gabinete se empantanó el lunes, cuando las críticas de Carrió a la reforma del MPF hizo volar por el aire un dictamen que ya estaba cerrado.
Ese despacho es historia: tendrá modificaciones. Una de ellas será la ampliación del límite al mandato de Gils Carbó, que en la versión original era de 5 años. Harán un nuevo intento para darle media sanción, pero todavía no saben cuándo.
Lo que no amaina es la bronca con Carrió. Molestó su denuncia al acuerdo de proyectos con Massa y Bossio. "Si está enojada que venga acá y consiga el número", sinceró su malestar un importante miembro del bloque Cambiemos. "No sé cómo se hace para sacar leyes sin acuerdos cuando no tenés mayoría. Si fuera por ella no llegamos ni al recinto", cerró.
Por Nicolás Fiorentino
Fuentes: diariobae.com, Clarín y LOP