Nacionales - 23-07-2014 / 08:07
REVÉS JUDICIAL: LOS K NO PARAN DE SUMAR FRACASOS
Griesa le dijo "no" al Gobierno de CFK: se negó a dar más tiempo y dejó a la Argentina al borde del precipicio
El juez Griesa le dijo "no" al Gobierno de CFK: se negó a dar más tiempo y dejó a la Argentina al borde del precipicio. En el marco de la audiencia con abogados argentinos, representantes de los buitres y bancos involucrados en el pago de la deuda reestructura, Griesa rechazó reponer el 'stay', tal como había solicitado la Argentina para ganar tiempo, e instó al país a negociar con holdouts para evitar el default. También volvió a cuestionar a los funcionarios del Gobierno de CFK por su "retórica incendiaria". En default llegaron, ¿en default se irán?
El país se encuentra a siete días de ingresar al default. La audiencia para intentar destrabar el conflicto con los buitres fue un fracaso. El juez Thomas Griesa, rechazó la posibilidad de reponer el "stay", que le permitiría al gobierno de Cristina Fernández pagarle a los bonistas que entraron al canje, por lo que el próximo miércoles el país podría ingresar en cesación de pagos.
"El stay no es necesario para continuar con el diálogo", fueron las palabras propinadas por Griesa a los abogados enviados por Cristina. De esta forma, los bonistas que ingresaron al canje no podrán cobrar los pagos del bono Discount y al resto de los títulos. Tras denegar el pedido argentino, Griesa sostuvo que "aún es tiempo de trabajar con el special master (mediador) para evitar un default".
Además, el gobierno de CFK le planteó a Griesa la necesidad de que se genere una "protección suficiente" contra el riesgo económico que puede significar la activación de la cláusula RUFO (Right Upon Future Offers), la cual implica mejorar la oferta a los tenedores de bonos reestructurados si accede a realizar una mejor oferta a los fondos que poseen bonos de la deuda defaulteados en 2001.
De esta manera, Argentina tendría que afrontar importantes demandas por parte del 93% de los bonistas que aceptaron los canjes de deuda de 2005 y 2010, lo que implicaría tener que afrontar la cancelación de alrededor de 120 mil millones de dólares.
El Gobierno emitió un comunicado donde cuestiona el rol de Griesa pero no da ningún tipo de certidumbre respecto a los pasos que seguirá el país en el conflicto con los buitres. "El juez Griesa (...) no resolvió absolutamente nada sobre ninguna de las cuestiones para las que él mismo había convocado a la audiencia, manteniendo con ello su insólita prohibición de cobro. Argentina reiteró su solicitud de una suspensión de la sentencia (stay) remarcando la imposibilidad de realizar una oferta a los fondos buitres que sea mejor que lo ya ofrecido en los canjes. Ya que tal pago violaría tanto la ley Argentina como la cláusula RUFO", sostiene el ejecutivo nacional.
Desde que llegaron, los Kirchner pagaron, utilizando los recursos que aportamos todos los argentinos con nuestros impuestos, la suma de 173 mil millones de dólares a acreedores externos. Les firmaron a todos ellos un cheque en blanco, sin realizar la más mínima auditoría, en cada una de las renegociaciones de la deuda que se concretaron.
¿Qué obtuvo la Argentina a cambio? Nada. Durante la década K, el acceso al mercado de capitales estuvo absolutamente cerrado. Las inversiones estratégicas brillaron por su ausencia y para poder seguir pagando deuda, ante la situación de colapso económico que llevó a que escasearan los dólares, el gobierno no tuvo más remedio que devaluar y restringir al máximo las importaciones.
Axel Kicillof y el resto de los imberbes camporistas que lo acompañan no tienen la más mínima capacidad como para dar este tipo de pelea con los buitres. Sin contactos en los centros financieros internacionales, y sin el conocimiento necesario de cómo se mueve el sistema capitalista, intentaron hacer frente a los buitres con clases de historia económica marxista que aprendieron en la facultad.
Los resultados están a la vista. Mientras los acreedores que entraron al canje se llevaron gran parte de los recursos de los argentinos, los que se quedaron afuera, ahora vienen por lo poco que queda.
La Opinión Popular
El juez negó el amparo y se tensa la negociación
La pelea por la deuda Griesa no hizo lugar al reclamo argentino y su fallo sigue firme. Pidió que se discuta a fondo y evitar un default. Kicillof mantuvo una extensa reunión con la Presidenta. Duro comunicado del Gobierno.
El juez Thomas Griesa está muy avejentado. Pero no ha perdido la memoria. Vestido con su habitual toga negra, durante la audiencia que tuvo lugar ayer en su Corte, este veterano del sistema judicial neoyorquino recordó que durante los once años que lleva el litigo con los fondos buitres, Argentina se negó a pagar y/o a negociar todos los fallos que dictaminó.
Griesa recordó también la retórica "incendiaria" y "desafortunada" que utilizó el Gobierno argentino en varias ocasiones y la manera que no cumplió con sus obligaciones. Advirtió, sin embargo, que esta vez es diferente. "Hemos llegado a un momento crucial", advirtió. "Si no hay acuerdo entre las partes podría haber un default. Y eso sería muy desafortunado". Según Griesa "la gente sufrirá las consecuencias de un default; no serán los buitres".
Fue en ese contexto que Griesa anunció que había decidido "ordenar" a las partes y a sus abogados a sentarse a negociar " inmediatamente sin interrupciones" con el mediador Daniel Pollack hasta que lleguen a un acuerdo. Pollack fue designado en su cargo por el propio Griesa para que las partes lleguen a un acuerdo.
"Si no hay acuerdo quiero oírlo en esta Corte", afirmó dejando bien en claro que él no será el responsable del default si las partes no negocian con éxito.
"Yo pienso que puede haber un acuerdo", dijo ayer el juez Griesa.
Fue entonces que el abogado de Argentina, Jonathan Blackman, del estudio Cleary Gotlieb & Hamilton, pidió la palabra. Explicó que era imposible llegar a un acuerdo en tan poco tiempo y que por eso es necesario suspender la ejecución de su fallo reponiendo el stay.
Blackman insistió sobre los riesgos de que se dispare la cláusula RUFO, el hecho de que los funcionarios argentinos que se ocupan del caso de los fondos buitre podrían terminar siendo procesados y en la cárcel bajo la ley argentina y también habló sobre el problema que representaban los "me too" , es decir los bonistas que no ingresaron en el canje que pedirán las mismas condiciones que obtengan los fondos buitre si hay acuerdo.
En la sala repleta de abogados, especialistas y periodistas reinaba a esta altura un gran suspenso. ¿Griesa daría o no el stay?
"Desde mi punto de vista un stay no es necesario cuando se negocia un acuerdo", terminó diciéndole Griesa a Blackman. "Usted articuló muy bien todos los problemas, pero la razón por la que estamos hablando de un proceso para llegar a un acuerdo es para lidiar con todos esos problemas y para evitar el default que es lo más importante".
A continuación Griesa le pidió a Dan Pollack que fijara un día y hora para retomar las conversaciones.
"Mañana (por hoy) a las 10 de la mañana (11 hs. argentina)" dijo el mediador. Esta fue la culminación de una audiencia que duro dos horas y 10 minutos. Es decir muchísimo más de lo previsto.
La primera hora y media de la audiencia estuvo destinada a analizar las mociones presentadas por los bancos que quieren saber qué hacen con el dinero que Argentina depositó en sus cuentas y que están destinados a los bonistas que ingresaron en el canje. Mientras tanto, los mercados se mantuvieron estables, a la expectativa de la decisión del juez sobre el stay.
Griesa no había estudiado bien el tema de los bancos. Por lo tanto una y otra vez pidió que le explicaran de qué se trataba. Primero dijo que estaba de acuerdo con el Bank of New York, que los 539 millones de dólares que recibió de Argentina, deben permanecer en su cuenta. Pero luego le dio la razón al abogado de los fondos buitre diciendo que era mejor devolver la plata a la Argentina. Y al final dijo que no iba decidir eso en este momento.
Tampoco decidió si los bonos emitidos bajo ley argentina en dólares podían ser objeto de su fallo, es decir, si el Citibank tenía derecho o no a pagarlos. Aceptó, sin embargo, que los fondos buitres presentaran una moción para poder embargar los fondos destinados a pagar ese tipo de bonos que Euroclear y ClearStream depositaron en el Citibank de Nueva York.
Por Ana Baron
Fuentes: Clarin, Hoy en la Noticia y LOP