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Nacionales - 04-08-2013 / 10:08
MALA PRAXIS POLÍTICA

Lo que deja CFK es contraprogresismo

Lo que deja CFK es contraprogresismo
Si las elecciones presidenciales fueran el próximo domingo, los tres candidatos con mayores posibilidades de ganar serían Daniel Scioli, Sergio Massa y Mauricio Macri. Es la confirmación de la derrota cultural del cristinismo.
Si las elecciones presidenciales fueran el próximo domingo, los tres candidatos con mayores posibilidades de ganar serían Daniel Scioli, Sergio Massa y Mauricio Macri. Es la confirmación de la derrota cultural del cristinismo.
 
Esos tres dirigentes de matriz similar, casi la contracara del concepto dogmático de "progresismo", fueron paridos por la "ideologitis" de Cristina, es decir por la inflamación de su ideología. Ella y sus intelectuales son los responsables de que el péndulo de las preferencias haya iniciado su periplo hacia el otro lado. 
 
Cuando Cristina abandone el poder en 2015 habrá destruido muchas cosas. Las más graves son la convivencia pacífica y el concepto de "progresismo". El resto es economía, se puede arreglar con racionalidad, soja y profesionalismo.
 
Así como Carlos Menem invalidó por su mala praxis corrupta el término "liberalismo", Cristina dejará herido de muerte el contenido de la palabra "progresismo", también por su mala praxis corrupta.
 
Esa "ideologitis" que te obliga todo el tiempo a fijar posición sobre todo, ese falso relato que se quiere imponer a los amigos para estigmatizar a los enemigos, hoy es ridículo. Por eso surgen nuevos liderazgos más descafeinados que apuestan al discurso de "la gestión para resolver los problemas de la gente" en lugar de "el combate contra las corporaciones oligárquicas".
 
Hasta Cristina tuvo que recurrir a un candidato no beligerante y apto para la clase media ligth como Martín Insaurralde para subirse a ese viento de cola. Por eso Cristina le robó una foto al Papa y no a Evo Morales o a Fidel Castro.
 
Que a esta altura le pongan al torneo de fútbol "Nietos Recuperados" es la repetición serial de más de lo mismo como dogma y fanatismo que provoca cierto vaciamiento de los contenidos. ¿Se imaginan un campeonato de fútbol llamado Tragedia de Once? ¿O un trofeo con el nombre de Julio López o Juana Gómez, la chiquita qom de 15 años violada y asesinada en Chaco?
 
Una porción importante de la sociedad está harta frente a esa obsesión cristinista de teñir todo de falsa batalla épica. Todo es liberación o dependencia. El laburante que viaja mal en los trenes de mierda y que gana poco y no le alcanza, y que tiene miedo por su vida y la de sus hijos, quiere que se dejen de hinchar las pelotas con tanta sanata presuntamente progre y trabajen en serio para construir un país mas justo y más libre.

LO QUE DEJA CFK 
 
Contraprogresismo
 
Por Alfredo Leuco
 
Si las elecciones presidenciales fueran el próximo domingo, los tres candidatos con mayores posibilidades de ganar serían Daniel Scioli, Sergio Massa y Mauricio Macri. Ese es el dato de mayor provocación intelectual que aportó la última encuesta de Enrique Zuleta Puceiro. Es la confirmación de la derrota cultural del cristinismo.
 
Esos tres dirigentes de matriz similar, casi la contracara del concepto dogmático de "progresismo", fueron paridos por la "ideologitis" de Cristina, es decir por la inflamación de su ideología. Ella y sus intelectuales son los responsables de que el péndulo de las preferencias haya iniciado su periplo hacia el otro lado. 
 
Es que a toda acción corresponde una reacción en igual magnitud y dirección pero de sentido opuesto. Es la ley de la dinámica de Isaac Newton que el materialismo dialéctico supo frecuentar.
 
Cuando Cristina abandone el poder en 2015 habrá destruido muchas cosas. Las más graves, desde el punto de vista simbólico, son la convivencia pacífica y el concepto de "progresismo". El resto es economía, se puede arreglar con racionalidad, soja y profesionalismo.
 
La plata va y viene, pero lo importante es la salud democrática y republicana. El gran desafío para el que venga será suturar las heridas para rehabilitar la cohesión social y extirpar el odio que transformó en enemigo a todo el que piensa distinto.
 
Pero así como Carlos Menem invalidó por su mala praxis corrupta el término "liberalismo", Cristina dejará herido de muerte el contenido de la palabra "progresismo", también por su mala praxis corrupta. En este último caso hay que hacer un agregado generacional que se repite como comedia y, ojalá, no como tragedia.
 
En los 70, una minoría intensa utilizó la lucha armada y el tiro en la nuca como instrumento político (definición de Joan Manuel Serrat sobre la ETA) y se autotituló "vanguardia revolucionaria". Con una asombrosa mezcla de coraje, ingenuidad e irresponsabilidad, finalmente, guió a parte de esa generación a la muerte y no a la victoria socialista.
 
Fue tan blindado el microcosmos en el que desarrollaron sus acciones, que se convirtieron en una patrulla perdida lejos de las demandas del pueblo y de su nivel de conciencia, como se decía entonces. La guerrilla hablaba en nombre de un pueblo que no la escuchaba.
 
Sin embargo, la permanente extorsión ideológica sobreactuada a la que hoy someten al ciudadano común es patética. Es de un sectarismo recargado pero, por suerte, menos peligroso porque se hace sin armas en la mano.
 
Pero esa "ideologitis" que te obliga todo el tiempo a fijar posición sobre todo es la misma. Ese falso relato que se quiere imponer a los amigos para estigmatizar a los enemigos hoy es ridículo.
 
Por eso surgen nuevos liderazgos más descafeinados que apuestan al discurso de "la gestión para resolver los problemas de la gente" en lugar de "el combate contra las corporaciones oligárquicas".
 
Hasta Cristina tuvo que recurrir a un candidato no beligerante y apto para la clase media ligth como Martín Insaurralde para subirse a ese viento de cola.
 
La fría caja registradora de votos manejada por Cristina le robó una foto al Papa y no a Evo Morales o a Fidel Castro. Más claro: Carlos Kunkel o Diana Conti fueron sepultados debajo de la sábana del Frente para la Victoria. Pero resucitaron a Scioli. Por eso quien más posibilidades tiene de derrotarlos es Sergio Massa.
 
De esta manera, una porción importante de la sociedad independiente denuncia su hartazgo frente a esa obsesión cristinista de teñir todo de falsa batalla épica. Todo es liberación o dependencia.
 
Que a esta altura le pongan al torneo de fútbol Nietos Recuperados y a la copa  Miguel Sánchez, tiene una doble lectura. Por un lado, el ejercicio de la memoria sobre el horror del genocidio nunca será suficiente. Pero la repetición serial de más de lo mismo como dogma y fanatismo provoca cierto vaciamiento de los contenidos y el reclamo desde la izquierda para combatir otras impunidades más cercanas en el tiempo que son responsabilidad del actual gobierno.
 
¿Se imaginan un campeonato de fútbol llamado Tragedia de Once? ¿O un trofeo con el nombre de Julio López o Juana Gómez, la chiquita qom de 15 años violada y asesinada en Chaco?
 
Ese repliegue del kirchnerismo sobre sí mismo, igual que en los 70, lo aísla de las grandes mayorías y lo deja atado a los más verticalistas. Su intolerancia ya no es contra viejos enemigos oligárquicos como La Nación o nuevos enemigos monopólicos como Clarín. Ahora van contra los propios, atacan a los que integran "el campo popular y progresista", que empieza a astillarse.
 
Jamás nadie podría acusar al director de teatro Carlos Rivas de golpista o simpatizante de la derecha. Todo lo contrario. Sin embargo fue atacado como si fuera un criminal de lesa humanidad sólo porque se atrevió a poner en palabras lo que piensan muchos argentinos democráticos, republicanos, progresistas, honestos y defensores de todos los derechos humanos.
 
En las discusiones en el trabajo, con amigos o la familia, los niveles de ceguera verticalista son peligrosos. El veneno que los Kirchner diseminaron sobre las venas abiertas de Argentina logra que hasta los hechos más cotidianos sean considerados de vida o muerte.
 
¿Te gustó Metegol?, te preguntan desafiantes. Si decís que sí, te convertís en un antikirchnerista sólo porque Juan José Campanella no permitió que lo domestiquen.
 
La única salvación del escrache es si decís que la voz del Negro Fontova hace un mejor trabajo que la de Fabián Gianola. Y cuidadito con caracterizar de genio a Charly García. Serás fusilado por el paraperiodismo estatal y acusado de macrista.
 
Sólo el asco de Fito por los porteños es nacional y popular. Son discusiones de secta endogámica, "fecundación entre individuos de la misma especie", como dice el diccionario. Por suerte, la inmensa mayoría de los argentinos no participa de este infantilismo de asamblea universitaria.
 
El laburante que viaja mal en los trenes de mierda y que gana poco y no le alcanza y que tiene miedo por su vida y la de sus hijos quiere que se dejen de hinchar las pelotas con tanta sanata presuntamente progre y trabajen en serio para construir un país mas justo y más libre.
 
En 1764, Cesare Beccaria, un luchador por la emancipación y contra el despotismo, abogó por "la máxima felicidad para el mayor número de personas posible". Algo así es la democracia realmente popular.
 
Fuente: Perfil

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05-08-2025 / 09:08
Javier "el Loco" Milei reapareció en público este lunes por la noche, tras el triple veto presidencial a los jubilados y las personas con discapacidad. El evento fue presentado como una jornada para "reafirmar el compromiso con una Argentina libre y próspera", pero en los hechos funcionó como una tribuna libertaria para consolidar apoyos económicos y discursivos de cara a la campaña electoral del gobierno de los ricos.

Otra vez, el desquiciado prescindente Milei desató polémica durante una cena de recaudación de fondos en Puerto Madero, en el exclusivo Yacht Club, organizada por la ultra derechista Fundación Faro del conservador Agustín Laje, creada por Santiago Caputo y su hermano.

El prescindente negó que los argentinos tengan problemas para llegar a fin de mes y con un tono burdo y provocador, Milei 
disparó, con su estilo al borde de la psicopatía, que "si fuera cierto que no llegan a fin de mes, la calle tendría que estar llena de cadáveres", banalizando las penurias de millones de argentinos que, sin estar al borde de la línea de la indigencia, enfrentan enormes sacrificios para cumplir con sus necesidades básicas y que tuvieron que modificar radicalmente sus hábitos de consumo para poder sobrevivir.


En medio de un discurso a oscuras, el trastornado Milei calificó la idea de que a la gente no le alcanza el dinero como "una pelotudez". Familias que no pueden ahorrar, que renuncian a vacaciones o que apenas logran salir una vez por semana a pasear son invisibles para el prescindente, quien parece ignorar el impacto de sus brutales políticas en los sectores medios y bajos.

En su discurso, "el Loquito" también defendió su reciente veto al aumento de las jubilaciones, una medida que golpea especialmente a los adultos mayores, mientras celebraba la eliminación de retenciones a la oligarquía terrateniente, un guiño evidente a los sectores más privilegiados de la Argentina.

Con ironía cínica, el líder libertario aseguró que "los kukas parece que nos hubieran dejado en Suiza", atribuyendo la crisis actual exclusivamente a gestiones anteriores y negando la fuerte profundización de la pobreza y la miseria bajo su mandato.

Durante su disertación, el libertario también volvió a pedir paciencia y extendió los plazos para una eventual recuperación económica. "Sacar adelante al país va a llevar tiempo. No nos vamos a convertir en un país desarrollado de un momento a otro. El proceso puede tardar 30, 35 o 40 años", señaló.

"Los que destruyeron y se consumieron el capital empobreciendo a la gente fueron ellos", insistió, sin ofrecer datos algunos que sustenten su falso relato. Y, fiel a su estilo, recurrió a una referencia bíblica confusa al aclarar que "no me estoy creyendo Moisés", en un intento fallido de matizar sus declaraciones altisonantes.

Sin embargo, su retórica enloquecida no logra ocultar la desconexión con la realidad de quienes, sin llegar al extremo de la hambruna, sufren privaciones día a día para mantenerse a flote en un contexto económico anarco capitalista cada vez más hostil. La metáfora de Milei n
o solo muestra falta de empatía con los problemas de la gente, es regocijo de la crueldad.


La Opinión Popular



04-08-2025 / 09:08
La única pregunta que volvió a imponerse tras el salto del dólar es si el Gobierno de Javier "el Loco" Milei podrá aguantar hasta las elecciones sin corregir, con devaluación "formal", las graves deficiencias programáticas de su esquema económico. El interrogante ratificado no es el qué sino, tan sólo, el cuándo.
 
Como debe ser, el análisis estrictamente técnico de lo que sucede corresponde a los especialistas del área. Pero tampoco se trata de ceder, sin más trámite, a la habitual extorsión de que apenas pueden opinar los entendidos. Y mucho menos en el terreno económico, que es una ciencia social atravesada por las decisiones políticas y las relaciones de producción.
 
Los aspectos centrales de la economía, ante todo en lo relativo a quiénes se ven favorecidos por tales o cuales medidas, están a mano del entendimiento general. Después juegan los factores subjetivos que, si es por cálculos electorales de corto plazo, son o pueden ser tan o más influyentes que las grandes planillas, reales o dibujadas: no hay otra chance que ésta porque la oposición no existe; no quiero volver atrás; prefiero al loco conocido que a los sabios por conocer; no llego a fin de mes, pero aunque sea puedo calcular la inflación. Etcétera.
 
Lo problemático es que ese cortoplacismo analítico choca de frente contra el elefante del bazar, como ya ocurrió con las tres M que precedieron a Jamoncito. Sea antes o después de septiembre y octubre, nadie en su sano juicio debiera confiar en la estabilidad de un programa que, más allá del efectismo, ni siquiera es un plan.
 
Una deuda externa impagable frente a cuya insolvencia estructural advierte el propio Fondo Monetario (de las 137 páginas del documento del organismo, los tramos más relevantes indican que se necesitarán esfuerzos enormes, de dudoso resultado, para llegar a las metas propuestas). Es endeudarse sin parar para, solamente, seguir endeudados.
 
Le siguen, en orden aleatorio o complementario, un déficit estremecedor de la cuenta corriente en dólares. El proceso inflacionario a la baja a través de restringir el consumo masivo. Un asomo de recesión consecuente, con incremento de cierres, quebrantos y suspensiones. Comercios vacíos. Ceder a la presión gauchócrata mediante la baja de retenciones, sin más contrapartida que ajustar en el botín de la clase media porque, de ahí para abajo, queda antes nada que poco para continuar apretando.
 
Ante esa realidad y panorama, estimulados por la trepada verde que es una pasión argentina hace décadas por más que la mayoría de "la gente" no haya visto un dólar en su vida, el Gobierno pretendió contestar arrojando a sus mastines convertidos en caniches.
 
El jueves, a media tarde, Caputo Toto ordenó filtrar, con sus delegados del periodismo independiente, que la suba del dólar era producto de las maniobras especulativas de tres bancos: Macro, Galicia y Bapro. Aun si concediéramos que el último procedería de esa forma por obra y gracia del pérfido enano soviético, se complica que los dos primeros conformen el "riesgo kuka" aludido por el autor de "si te parece que está barato comprá dólares, campeón".
 

03-08-2025 / 11:08
Maximiliano Bondarenko, el excomisario candidato de La Libertad Avanza en las elecciones bonaerenses usurpó terrenos en City Bell cuando todavía estaba en actividad. Lo hizo junto a su compadre comisario Manuel Ortiz Valenzuela, el otro líder del complot policial denunciado en la Provincia. Los dos viven en gigantescas casas, con pileta y cancha de fútbol, construidas en esos lotes ajenos.
 
Los dos líderes del complot policial en la Provincia de Buenos Aires, Maximiliano Bondarenko y Manuel Ortíz Valenzuela, viven en gigantescas casas construidas en terrenos usurpados en City Bell e incluso, en un lote intermedio, también usurpado, construyeron una pileta y una cancha de fútbol que comparten.
 
Bondarenko, que es el candidato de La Libertad Avanza (LLA) en la Tercera Sección Electoral, inició el juicio para legalizar la usurpación en 2011, pero nunca hubo resolución, por lo cual judicialmente vendría a ser un okupa. Ortíz Valenzuela puso en marcha su proceso de legalización en 2021, en el juzgado Civil y Comercial 7 de La Plata.
 
Para cumplir con el tiempo requerido de ocupación pacífica, puso como testigos a Bondarenko y su pareja, quienes mintieron diciendo que vivían ahí desde 1990. Las imágenes satelitales muestran que empezaron a construir en 2017. Pero, para colmo, Ortíz Valenzuela hasta usurpa el doble de lo que pretende legalizar: en lugar de 606 metros cuadrados -15 de frente por 40 de fondo-, Google Earth evidencia que se está quedando con 1.389 metros cuadrados.
 
Ambas usurpaciones se hicieron cuando los dos eran policías en actividad y en la casa de Ortíz Valenzuela se hizo el famoso asado del 11 de julio en el que participaron 24 policías, algunos de ellos oficiales de alta graduación, y sirvió para planificar trabajos a favor de LLA. Según la denuncia en Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad, hay herederos legítimos de los terrenos usurpados por los policías libertarios y reclaman la propiedad de los lotes.
 
Maximiliano Ivan Bondarenko, excomisario y candidato de LLA, usurpó la parcela 8A y la parcela 7A, que es la que comparte con Ortíz Valenzuela y en la que está la pileta y la cancha de fútbol. En 2011 inició lo que se llama juicio de prescripción adquisitiva por las dos parcelas.
 
De acuerdo a la denuncia, Bondarenko le dijo a su amigo Ortíz Valenzuela que se quede con otros terrenos más, aledaños a su casa. De esa manera se quedó con las parcelas 3A y 2A y comparte con Bondarenko la 7A.
 
El uniformado recurrió a otro uniformado, el comisario Candia, que es abogado, para iniciar el juicio de prescripción adquisitiva o usucapión.
 
Como uno tiene que demostrar que lleva años en el lugar, Ortíz Valenzuela presentó como testigos a Bondarenko y a su pareja, Gisela Noemí Da Silvia. Ambos declararon -falsamente- que Ortíz Valenzuela vive en el lugar desde 1990. Según parece fue una devolución de favores porque Ortíz Valenzuela habría sido testigo de Bondarenko en el juicio que empezó en 2011 y que no tuvo resolución. O sea, testigos cruzados.
 

02-08-2025 / 09:08
"El riesgo kuka" hizo saltar al dólar, según Luis "Toto" Caputo. El mismo cuco agitó Javier "el Loco" Milei: la deuda es de los kuka, "los datos dan bien, pero ellos dicen que está todo mal". Y advirtió sobre el "fraude" que harán los kukas en las elecciones bonaerenses. Los kuka tienen la culpa de todo. Pese al salvataje del FMI, la sociedad sabe que, antes o después de octubre, saltará la inflación contenida con medidas brutales e inútiles.
 
O sea, para el gobierno, el kirchnerismo disparó el dólar, tomó la deuda monstruosa y, si pierden, harán fraude. Está demostrado que cuando toda la culpa es de los demás, las cosas están peor de lo que parecen. Y lo que se ve, es que están muy mal.
 
El único esfuerzo real del gobierno este semestre ha sido quemar miles de millones de dólares para evitar un salto inflacionario antes de las elecciones de octubre. El costo material y humano ha sido brutal. Y el escenario mostró a un gobierno desorientado cuyas medidas desesperadas indujeron inquietud en los mercados que intentaban tranquilizar.
 
La sociedad en general está convencida de que, antes o después de octubre, el gobierno decidirá otra devaluación con inflación y salarios congelados. Milei cedió a regañadientes una baja en las retenciones y aumentó las tasas de interés de los bonos a niveles estratosféricos, pero no logró frenar la compra de la divisa, ni que liquiden las cosechas. Y el dólar ya toca la banda superior.
 
En el camino, grandes corporaciones anunciaron su salida del país y despidos en masa, la crisis en el consumo destruyó miles de comercios y advirtió a los gritos el sufrimiento de los salarios. "Los datos dan bien, pero los kukas dicen que están mal".
 
Bueno, no solamente los kukas. Echarle la culpa de todo a los demás es mala señal. La otra, pésima, son las entrevistas con Fantino o con Majul. Si Milei necesita dar explicaciones sin que repregunten de verdad, es porque todo está mal.
 
El fracaso del programa libertario desencadenó la crisis en salud, educación y provocó un deterioro trágico en la calidad de vida de la mayoría de los argentinos. Pero no tuvo todavía repercusión equivalente en el plano de la política. Una mitad de la población participó o respaldó numerosas movilizaciones. Pese a todo, una minoría de esa mitad apoya al gobierno. Otra mitad permaneció impasible aunque sufriente.
 
La mayoría de esa mitad respalda al gobierno a pesar de sufrir las consecuencias del ajuste. Y la otra parte fue alejada de la política. La explicación del ausentismo no es una. Es más complejo. Por la causa que fuera, el dato innegable es que una porción importante no se siente contenida por el sistema político. No es un buen momento para el gobierno y menos para el país.
 
El peligro del ausentismo presionó un acuerdo de unidad en el peronismo bonaerense. Tendrá que presentar candidatos creíbles y hacer creíble sus propuestas. No está en condiciones de limitarse a los medios y a la propaganda. Tendrá que hacer campaña cara a cara y casa por casa. Los intendentes y la militancia tienen esa capacidad de llegada. 
 

02-08-2025 / 08:08
La economía libertaria es como un truco barato de feria: parece mágica hasta que te das cuenta que te robaron la billetera. En febrero, el prescindente Javier "el Loco" Milei aseguraba en tono mesiánico que el dólar se iba a desplomar a 600 pesos. En febrero decía que la divisa "caía como un piano". Hoy se disparó al doble, el Gobierno culpa al "Riesgo Kuka", y mientras tanto, aumenta la nafta, el bondi, el cable y hasta la desilusión.
 
"Se cae como un piano", dijo, con esa verborragia de showman desquiciado en gira permanente. Seis meses después, el único piano que cayó fue el que aplastó su credibilidad. Hoy el dólar roza los 1400 pesos y el oficialismo, en lugar de asumir la catástrofe, desempolva el viejo recurso de echarle la culpa al "Riesgo Kuka". Una excusa tan berreta como decir que llueve porque alguien lava el auto.
 
Ya no alcanza con pelearse con la "casta": ahora Milei pelea contra el dólar como si fuera un fantasma peronista. Mientras tanto, la realidad patea la puerta con aumentos en combustibles, transporte, prepagas, alquileres y servicios. Todo junto. Todo de golpe. Todo firmado por él.
 
Sí, por el mismo que decía que los precios iban a bajar porque "ajustar era gratis" y que la inflación se combatía con confianza de mercado. Ahora hay más inflación, menos confianza y un mercado que se ríe del Gobierno libertariano con la misma condescendencia que uno le tiene a un primo que quiere inventar la rueda.
 
Contra el relato del Gobierno, el 14% de suba del dólar en julio impacta fuerte en los precios. Los diez gigantes del consumo masivo ya les avisaron a los supermercados que, desde el lunes, aplicarán aumentos que van del 3 al 9% en alimentos, bebidas, productos de limpieza, lácteos y aceites. Los autos no quieren perder la carrera y habrá incrementos de hasta 12% en concesionarias.
 
Agosto arrancó con subas por todos lados: aumentó la nafta por el reacomodamiento de impuestos al combustible líquido y al dióxido de carbono (una decisión del propio Ejecutivo que ahora pretende disimular con tecnicismos). El transporte público en el AMBA subió 3,6 por ciento, las prepagas aplicaron subas de hasta 1,9 por ciento, y los servicios de cable y telefonía ya remarcaron hasta un 3 por ciento.
 
Mientras tanto, los inquilinos con contratos viejos enfrentan aumentos de más del 55 por ciento, y quienes firmaron sin la ley derogada tampoco zafan: el índice de ajuste da más del 6 por ciento trimestral. Todo sube, menos el delirio libertario de Milei, que ya tocó el techo.
 
La disparada del dólar y la aceleración de precios acorralan al ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo y la estrategia que diseñó para llegar a las elecciones con el tipo de cambio bajo control y la inflación en descenso entró en crisis. La apertura del cepo se le volvió en contra, ya se gastó los ingresos extraordinarios del campo, el carry trade se diluye y ni siquiera vienen los inversores especulativos.
 
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