Ejecutan al mercenario yanqui William Walker, quien se había apoderado de Nicaragua
El 12 de septiembre de 1860, en Trujillo (Honduras), fusilan al filibustero yanqui William Walker.
William Walker, El Predestinado.
El 12 de septiembre de 1860, en Trujillo (Honduras), fusilan al yanqui William Walker, el más reconocido de los denominados filibusteros, mercenarios o soldados de fortuna, del siglo XIX. En México intentó conquistar los territorios de Sonora y Baja California, lo que lo llevó a fundar la «República de Sonora» que terminó en fracaso. En 1855, junto a un grupo de reclutas conocidos como «Los Inmortales», se dirigió hacia Nicaragua, país que se encontraba inmerso en una guerra civil, y luchó al lado del bando democrático.
Sin embargo, a medida que avanzaba en sus campañas militares, logró asumir el poder mediante unas elecciones amañadas, en las cuales resultó elegido presidente de la nación. Debido a la amenaza que representaba su presencia en Centroamérica, los demás países de la región iniciaron una ofensiva para expulsarlo del territorio, dando lugar a la Guerra Nacional de Nicaragua y la Campaña Nacional de Costa Rica. El conflicto también involucró a Estados Unidos, al Reino Unido (la potencia europea que controlaba la economía de Centroamérica en el siglo XIX) y al empresario Cornelius Vanderbilt.
Walker claudicó el 1 de mayo de 1857 y abandonó el territorio centroamericano. A pesar de su derrota, organizó nuevas expediciones para apoderarse de Nicaragua, pero acabó fusilado en Honduras. Las invasiones de este aventurero, apoyado por EE.UU. colaboraron a la formación del concepto de América Latina enfrentada a los yanquis.
La Opinión Popular
William Walker entrenado a sus soldados en Virgin Bay alrededor de 1850.