Nacionales - 13-08-2022 / 16:08
LAS EXPORTACIONES SUBIRÁN DE 200 A 4000 MILLONES EN SEIS AÑOS
El litio: una cuestión geopolítica para fabricar dólares
El litio asoma como el componente mineral del futuro. Su cada vez más alta cotización en el mercado internacional es la mejor evidencia de su enorme importancia en la composición de baterías potentes y durables, elementos que apuntan, a su vez, como esenciales a un futuro de vehículos eléctricos, que se van haciendo imprescindibles en un mundo que no parece detener su contaminación contributiva, a su vez, con el cambio climático. Argentina tiene la segunda reserva mundial del mineral.
El litio asoma como el componente mineral del futuro. Su cada vez más alta cotización en el mercado internacional es la mejor evidencia de su enorme importancia en la composición de baterías potentes y durables, elementos que apuntan, a su vez, como esenciales a un futuro de vehículos eléctricos, que se van haciendo imprescindibles en un mundo que no parece detener su contaminación contributiva, a su vez, con el cambio climático. Argentina tiene la segunda reserva mundial del mineral.
Argentina podría pasar de exportar litio por 200 millones de dólares en 2021 a 4.000 millones anuales en seis años. Es necesario dejar de lado la tan habitual exportación para que los países técnicamente desarrollados le dieran valor agregado a través de sus industrias y construir establecimientos refinadores y fabriles dentro de nuestro territorio. Y más todavía: se llegó a hablar de una suerte de alianza con Bolivia para trabajar en común sobre esa posibilidad. Chile, muy influido por los capitales foráneos, todavía no tenía una opinión al respecto.
Pero como ocurre siempre con los materiales estratégicos o altamente rentables (que son prácticamente lo mismo en definitiva) el tema es una cuestión geopolítica. Por un lado están los occidentales, principalmente los Estados Unidos, tradicional extractor de materias en América Latina y urgido por la competencia japonesa y francesa en la materia; por el otro China, el mayor fabricante de baterías de litio en el mundo y con una creciente presencia en el subcontinente.
Parecería que la Argentina, en lugar de la creación de una industria propia al amparo de esa competencia, una vez más está dispuesta a dejar puertas abiertas al capital extranjero de carácter meramente extractivo y exportador, que si redunda en buenos precios en tal condición los multiplicaría con el valor agregado del refinado y la fábrica de elementos que lo utilicen en sus propios países, caso de las baterías que reclama el futuro.
Poco y nada se oye actualmente de las plantas refinadoras del material salino que contiene el litio, de las que se hablaba un par de años atrás; tenían participación extranjera pero las decisiones económicas de base corrían por cuenta del socio argentino que, además, obraría como vigilante de la actividad que generaría en los ámbitos ambiental y social. Ese posible y necesario papel del Estado no lleva miras de concretarse hasta el momento, pero sí se advierten movidas en los ámbitos provinciales que sugieren apoyo a los capitales destinados a extracción primaria.
La Opinión Popular
El litio, para la fábrica de dólares
Argentina tiene la segunda reserva mundial del mineral. Hay dos proyectos activos, 7 próximos a producir y 43 en exploración.
El litio es uno de los combustibles de Sergio Massa para hacer andar la fábrica de dólares, y fue uno de los ejes de la reunión bilateral que el presidente Alberto Fernández mantuvo con su par de Bolivia, Luis Arce, en su visita a Colombia para la asunción de Gustavo Petro. Hay 50 proyectos de litio en distintas fases de exploración y desarrollo en el país, y solo dos proyectos produciendo: ¿Qué se espera de este recurso?
En Argentina hay dos proyectos mineros que producen litio, en Jujuy y Catamarca. Existen alrededor de 50 que se encuentran en fase de exploración, es decir comprobando la efectiva existencia de minerales y determinando la cantidad y calidad de reservas existentes en los diferentes lugares, siete de los cuales entrarán en etapa de producción en los próximos años.
De acuerdo a información de la Secretaría de Minería, los dos proyectos activos producirán este año 37.000 toneladas de carbonato de litio. La puesta en marcha de Caucharí Olaroz en Jujuy para inicios de 2023 podría aumentar ese número a 80.000 toneladas, con proyección de elevarse aún más en 2024. La cuenta que hacen en el gobierno es que con estos desarrollos Argentina podría pasar de exportar litio por 200 millones de dólares en 2021 a 4.000 millones anuales en seis años.
"El desarrollo conjunto del litio nos permite otorgar valor agregado a las exportaciones y promover la capacitación de técnicos y científicos. La Argentina, Bolivia y Chile forman el triángulo del litio, zona fundamental para nuestro desarrollo por la que seguiremos trabajando", publicó en sus redes sociales el presidente Fernández tras su encuentro con Arce.
Todos los proyectos están ubicados en el Triángulo del Litio, conformado por los tres países, que concentra el 50 por ciento de las reservas de este mineral a nivel mundial. Bolivia es el país con mayor cantidad de reservas en el mundo, con 21 millones de toneladas, por encima de los 14,8 millones de toneladas de Argentina y los 8.3 millones de Chile. Luego se encuentran Estados Unidos y Australia.
Proyectos
Los dos proyectos activos son el Salar Olaroz explotado por Sales de Jujuy, integrada por Orocobre S.A. (Canadá), Toyota Tsusho Corp (Japón) y Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (Jemse), la empresa estatal minera de la provincia; y el proyecto Fénix en el Salar del Hombre Muerto, operado en Catamarca por Livent, subsidiaria de la estadounidense FMC.
El proyecto más próximo para entrar en producción está en Jujuy y es Cauchari Olaroz, operado por Minera Exar, una firma donde la canadiense Lithium Americas y la china Jiangxi Ganfeng Lithium cuentan cada una con el 45,75 por ciento de las acciones y Jemse, con el 8,5 por ciento restante. El proyecto comenzará a explotarse comercialmente a fines de 2022 y podrá producir 40.000 toneladas de carbonato de litio anuales con el total uso de su capacidad instalada.
En Salta el proyecto avanzado es el Centenario-Ratones a cargo de la francesa Eramine. Producirá 24.000 toneladas anuales desde comienzos de 2024. En una segunda etapa prevé llegar a producir entre 60.000 y 70.000 toneladas anuales.
Otro proyecto avanzado es Puna Mining en el Salar del Rincón. Tendrá en principio una capacidad de producción de 2.000 toneladas anuales de carbonato de litio, con una proyección de escalar a 12.000 toneladas anuales. En la provincia se encuentra avanzado también el proyecto Mariana (Salar de Llullaillaco) operado por la china Ganfeng. Ya comenzó la construcción de una planta piloto.
Catamarca ofrece cuatro proyectos actualmente en exploración pero próximos a producir litio. Tres Quebradas en Laguna Tres Quebradas operado por la china Liex. Prevé iniciar la producción y primeras exportaciones de litio en 2024, con una proyección de 20.000 toneladas anuales durante 20 años.
En el Salar del Hombre Muerto se encuentra Sal de Oro, operado por la surcoreana Posco. Hacia fines de 2023 y principio de 2024 el proyecto tendrá una capacidad de producción de 25.000 toneladas de hidróxido de litio anual.
Un poco menos avanzada está Sal de Vida, operado por la australiana Allkem (una fusión de las compañías Orocobre y Galaxy Resources, también de ese país) se encuentra en proceso de búsqueda de inversores para financiar la construcción de la planta de producción, que demandará 18 meses.
Fuentes: Página12 y La Arena