Nacionales - 05-07-2019 / 10:07
AUTOMOTORES, TEXTILES Y MUEBLES FUERON LOS SECTORES CON PEOR DESEMPEÑO
Sin repunte en el consumo, la producción industrial cayó 6,9% interanual en mayo
Con el correr de los días, se va conociendo la "letra chica" de lo acordado con la UE y todas las concesiones realizadas para rubricar el principio de acuerdo. Mientras la producción industrial nacional volvió a registrar una caída interanual de 6,9% en mayo. Los sectores que más empujaron hacia abajo fueron los más sensibles, dependientes de la golpeada demanda interna, y los que mayor preocupación mostraron frente al acuerdo UE- Mercosur: automotrices, textiles, calzado y muebles.
"Tenemos que abrirnos a la competencia", que "subsistan los que son viables", repiten por estos pagos los neoliberales entusiastas del libre comercio que festejan el "éxito" de los acuerdos de Mauricio Macri. Pero lo cierto es que la UE, claramente quien cuenta con las mayores ventajas para competir, ha hecho todo lo contrario, protege su industria de las importaciones.
Con el correr de los días, se va conociendo la "letra chica" de lo acordado con la UE y todas las concesiones realizadas para rubricar el principio de acuerdo. Mientras la producción industrial nacional volvió a registrar una caída interanual de 6,9% en mayo. Los sectores que más empujaron hacia abajo fueron los más sensibles, dependientes de la golpeada demanda interna, y los que mayor preocupación mostraron frente al acuerdo UE- Mercosur: automotrices, textiles, calzado y muebles.
Una buena: mayo fue mejor que abril y así el Gobierno celebró el segundo mes consecutivo de subas. Aun así, no llegó a los niveles previos al desplome de marzo. La comparación intermensual mostró una mejora de 0,6%. Es decir, desaceleró contra la de 2,5% de abril pero le dio continuidad. En lo que va del año, la industria cayó 9,8% contra el mismo período de 2018.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, vendiendo humo, celebró vía Twitter el repunte parcial. La actitud recordó a lo ocurrido a principios de año, cuando su segundo, Miguel Braun, festejó también dos mejoras seguidas en el sector manufacturero y auguró que "la actividad habría encontrado piso".
El mismo día que se conoció que en mayo continuó cayendo la industria y la construcción, el equipo económico de Dujovne giró el primer anticipo de Presupuesto 2020, en el que vierte proyecciones que desbordan de esperanza: aguardan que el PBI crezca el año que viene 3,5 %. También, que la inflación se ubique debajo del 27%.
Esto va en línea con la proyección que hoy realizan las consultoras encuestadas por el BCRA y para su Relevamiento de expectativas de mercado (REM). El REM destaca por errar casi siempre en las perspectivas de mediano plazo, súper optimistas que nunca se dan.
Llegamos así al final de mandato de la alianza Cambiemos habiendo dejado a la Argentina en el FMI, con el fracaso de la "lluvia de inversiones" a cuestas y una economía que no termina de salir de la estanflación: inflación más recesión. Las improbables ventajas del libre comercio para un futuro todavía lejano, y las promesas de volver a crecer en el "segundo mandato", son todo lo que Macri tiene para ofrecer al cabo de sus 4 años con el "mejor equipo".
La Opinión Popular
Esta vez Dujovne afirmó: "El IPI muestra que la industria creció con respecto a abril (0,6% sin estacionalidad) y se encuentra 6% por encima del nivel de diciembre, que también fue el más bajo de la serie. Muestra signos de recuperación y las expectativas para el futuro son positivas. En mayo, casi el 60% de la industria espera que la demanda interna mejore o se mantenga, comparado con un 53% del mes anterior y un 42% en diciembre pasado".
El escenario macro en el que se dieron las mejoras de abril y mayo es similar al de enero y febrero, festejado por Braun. Esto es: dólar calmo y tasa de interés altas aunque bajando. En aquella ocasión, la pax cambiaria se interrumpió hacia mediados de febrero. Esta vez hay expectativas de que el permiso del FMI al BCRA, para intervenir en el mercado con venta de divisas, pueda sostener la estabilidad hasta octubre.
A ese panorama, que permitirá una lenta desaceleración inflacionaria, se le sumarán la también parcial recuperación del salario, a partir de las paritarias, y el extra de la demanda que pueden agregar el Ahora 12 y los créditos Anses.
En ese sentido no hay grandes expectativas. Según la Secretaría de Comercio, el Ahora 12 habría agregado $7.000 millones al consumo de junio, mucho menos que los $90.000 millones que suma cada punto de mejora del salario real.
Desde LCG destacaron: "En la industria no hay grandes expectativas para este año. Durante los próximos meses, sin embargo, mejoras en el poder adquisitivo a partir de las paritarias que se cerraron y una mayor estabilidad cambiaria podrían traccionar marginalmente el consumo hacia arriba. El sector depende parcialmente del mercado interno, y en la medida que éste mejore, habrá una mayor demanda que satisfacer. De todas formas, la severidad de la política monetaria y la poca movilidad en el mercado de crédito no permiten hablar de una reactivación significativa".
Por Mariano Cuparo Ortiz
Fuente: BAE Negocios