Nacionales - 13-06-2018 / 10:06
SE PROFUNDIZA EL CONFLICTO SOCIAL
Tras fracasar el diálogo con el Gobierno, la CGT se decidió y convocó a un Paro Nacional
Después de múltiples cabildeos, la Confederación General del Trabajo (CGT) le puso anoche fecha al que será el tercer paro nacional en dos años y medio de gestión de Mauricio Macri, esta vez en reclamo de una “rectificación” de la política económica neoliberal ajustadora del Gobierno de los Ricos: será el próximo lunes 25, por 24 horas y sin movilización.
Luego de largas discusiones, que incluyeron presiones internas y externas, la CGT anunció la convocatoria a un paro general "contra el ajuste salvaje" para el próximo 25 de junio que comunicó el triunvirato en la sede de la central obrera. Como los manifestantes del Mayo Francés le piden al Gobierno lo imposible: un giro de timón en el rumbo económico.
En conferencia de prensa, Héctor Daer aseguró que "al no encontrar respuestas decidimos convocar una medida de fuerza". Por su parte, Juan Carlos Schmid, agregó que la Casa Rosada "no está dispuesta a realizar las correcciones" en la política económica que se le habían planteado por lo que ya no veía motivos para dilatar más la decisión.
El paro se prevé contundente ya que las CTA que conducen Hugo Yasky y Pablo Micheli anunciaron que se sumarán a la medida. Anoche, El secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, también confirmó la participación activa de su gremio en la huelga cegetista.
Este será el tercer paro general desde que Mauricio Macri asumió la presidencia y como ocurrió en los dos anteriores, el triunvirato tomó la decisión inmerso en complejas disputas internas y respondiendo con cierta tardanza a la compleja coyuntura que genera la crisis económica.
Habrá paro general para el 25 de junio, sin movilización. La modalidad ya se cuestiona, bajo sospecha de ser una nueva aliviada para el Gobierno de los Ricos. Pero, a favor de la CGT: lo más contundente es el paro, que demarca posiciones y fue acompañado de declaraciones muy críticas a la economía del binomio Macri-FMI.
A la conducción cegetista no le quedaba otra que sumarse a la oposición social que la praxis neoliberal macrista acrecienta día tras día. Desde diciembre de 2015 la protesta y las revueltas callejeras, el impresionante abanico de resistencias en el espacio público, empujan a la oposición política y a la principal Central de trabajadores.
Un paro con movilización hubiera sido motejado de desestabilizador. Uno fijado para el día de un partido de Argentina, tomado en solfa. El apodo de "dominguero" le caerá al del lunes 25. Todo modo, servirá de termómetro adicional para medir la desaprobación a Macri y su tozudez ajustadora.
"¿Qué pasará el martes 26, eehh?", resonará el sonsonete del Gobierno de los CEOs. Si no cambia su política, pasará más y peor de lo mismo. Cerrarán otros negocios o pequeñas industrias, crecerá la comensalidad en comedores comunitarios o en las escuelas. La frustración colectiva, el temor por el futuro inminente, la suba descontrolada de la canasta familiar, la inseguridad alimentaria y laboral son productos de decisiones oficiales. El paro planta una réplica, toma posición, fija una resistencia contra la profundización del brutal ajuste para implementar el acuerdo con el FMI.
La Opinión Popular
TRAS LA FALLIDA REUNIÓN CON EL EJECUTIVO, DEFINIERON UN PARO PARA EL PRÓXIMO 25 DE JUNIO
La CGT rompe el diálogo con el Gobierno y anuncia un paro nacional
La CGT anunció un paro nacional para el próximo lunes 25 de junio y rompió el diálogo con el Gobierno, que intentó evitar la medida hasta este martes. El paro, de 24 horas, se lanzó en rechazo al rumbo económico del Gobierno y es la primera medida de fuerza en reacción al acuerdo con el FMI que cerró Mauricio Macri.
La medida no coincide con la convocatoria del sindicato de Camioneros y las CTA para este jueves 14, por lo que el conflicto en la calle se repetirá en sólo 11 días. Se trata de un duro golpe al Gobierno, que le dio máxima importancia al paro y debatió cómo frenarlo en la reunión de la mesa chica de este lunes.
El anuncio se hizo en la sede de Azopardo por el integrante del triunvirato Héctor Daer, acompañado por Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, quienes confirmaron que a la jornada de protesta se sumará la Unión Tranviarios Automotor (UTA), por lo que no habrá transporte público de pasajeros y el paro se sentirá con fuerza, ya que las calles porteñas quedarán vacías.
El Gobierno intentó frenar el paro con una reunión convocada para este mediodía en la sede de Trabajo y había aceptado elevar la pauta salarial en unos 5 puntos porcentuales, además de la promesa de liberar fondos para obras sociales. Pero rechazaba el resto de los puntos de la CGT: eximir del impuesto a las Ganancias al medio aguinaldo, suspender despidos por seis meses y desistir de los cambios más conflictivos de la reforma laboral.
Sin embargo, la CGT faltó a la reunión y frustró la maniobra del Gobierno con las obras sociales, pese a que como anticipó LPO Macri tenía preparado el decreto para liberar 3 mil millones.
Sobre ese punto, Daer advirtió que hace "4 ó 5 meses" que está demorado el pago de las obras sociales, por un monto de 30 mil millones de pesos. "Los datos económicos y de empleo, los datos que tienen que ver con todo lo que afecta a los sectores más vulnerables se van afectando y cada vez son más alarmantes", señaló Daer.
Schmid, por su parte, evalúo que desde la central le platearon al Gobierno "realizar correcciones que parece no estar dispuesto a aceptar". "Los sectores más vulnerables son los que sufren las políticas económicas del Gobierno. Le planteamos la situación de los despidos y el ministro de Hacienda nos dijo que 'ellos no podían intervenir en el juego del mercado porque eso afectaría la creación de empleo. Estamos en las antípodas de esa posición", apuntó el integrante del triunvirato.
El ajuste que se avecina por el acuerdo con el FMI también había preocupado a los empresarios de la construcción, que advirtieron que hay 430 mil empleos en riesgo si el recorte para cumplir las metas fiscales acordadas con el Fondo se hará en la obra pública.
En el Gobierno señalan que la obra pública para este año no se tocará, pero advierten que el año que viene será un escenario complejísimo para cumplir con la meta del 1,3% del déficit que pide el FMI. El interrogante que quedó tras el anuncio de la CGT es justamente si el Gobierno tendrá la capacidad política para implementar el acuerdo con el Fondo.
Fuente: La Política Online