Nacionales - 05-02-2018 / 09:02
ALGUNOS DISTRITOS YA AJUSTAN VALUACIONES FISCALES Y ALÍCUOTAS DE ESOS TRIBUTOS
Provincias apuran impuestazos inmobiliarios para compensar bajas de Ingresos Brutos
OTRO AGUJERO EN EL BOLSILLO DE LA CLASE MEDIA. Los incrementos en el revalúo de las propiedades implicará que todo el mundo ahora va a ser millonario y entonces va a tener que pagar el impuesto a la riqueza o bienes personales. Los avalúos inmobiliarios que ya están realizando las provincias, con ajustes récord de hasta el 900% en Buenos Aires, generarán un aumento en la presión impositiva sobre la clase media que tendrá que pagar más al fisco a partir de 2019, un año electoral. El Gobierno de Macri elevó el 2 de enero de 950.000 pesos a 1.050.000 pesos (10,5%) el piso no imponible para 2018, que se paga en 2019. Ese piso equivale a unos 52.500 dólares, dinero con el que se puede comprar un departamento de uno o dos ambientes en un barrio modesto.
La reducción obligada por el gobierno de Mauricio Macri de alícuotas de Ingresos Brutos incluida en el Consenso Fiscal que firmaron la Casa Rosada y los gobernadores exige a algunas provincias a ajustar el nivel de tributación que tienen sobre los inmuebles.
En el caso bonaerense, el revalúo fiscal se tradujo en un incremento promedio en el impuesto inmobiliario urbano de 56% aunque en otros casos llega al 900% de reajuste.
Otras provincias también están implementando aumentos en el impuesto que grava las propiedades, en algunos casos sólo como actualización inflacionaria y otros en magnitudes más grandes e incluso en algunos distritos ya disparó conflictos con organizaciones rurales o con intendentes, que en algunas provincias tienen la potestad de recaudar el impuesto urbano.
De acuerdo a información que manejan en la Casa Rosada, cinco provincias ya implementaron cambios en sus valuaciones o alícuotas mientras el resto espera a las sesiones extraordinarias de sus parlamentos locales para avanzar.
El pacto fiscal rubricado con casi todos los gobernadores en noviembre del año pasado implica cambios en las estructuras tributarias de las provincias. Por un lado, se dispuso una reducción paulatina en alícuotas de Ingresos Brutos (para algunos rubros desaparecerá el impuesto) mientras que el documento propone ajustar a nivel de mercado las valuaciones fiscales, para que las administraciones provinciales amplíen su base imponible para los tributos a las propiedades.
Para eso, el Gobierno buscará que un organismo federal tenga acceso a registro catastrales provinciales para coordinar los recálculos. Esa base imponible será gravada con los nuevos cuadros de tasas del impuesto inmobiliario, que se dividen en: urbano edificado, urbano baldío, rural, suburbano, subrural, rural y secano, dependiendo de cada provincia.
Este avalúo de 2018 llevará a que millones de familias que tienen una vivienda única en la que residen y un auto de gama media, tengan que comenzar a pagar Bienes Personales en 2019. Se trata de un impuesto que apuntó a que los ricos tributen por lo que tienen registrado. Pero las decisiones políticas del gobierno de Macri, hará que ahora recaiga sobre personas que antes no lo pagaban y no porque se hayan vuelto millonarios, como los funcionarios de Macri.
Por otra parte, ante la caída de transferencias nacionales, los gobernadores se ven obligados a reajustar los tributos provinciales para mantener los ingresos. Según un estudio de la calificadora de riesgo Moody's, las provincias sufrirán una "reducción de transferencias federales" este año y por ello también deberán endeudarse más.
La Opinión Popular
De acuerdo a información del Ministerio del Interior, hasta el momento 15 provincias aprobaron en sus legislaturas el Consenso Fiscal. Otras 8 esperan las sesiones de febrero y San Luis no firmó el pacto.
Según el diagnóstico oficial, "las provincias que sancionaron su norma tributaria posterior al Consenso estarían cumpliendo con la mayoría de los puntos acordados. Aquellas jurisdicciones que dictaron su ley tributaria con anterioridad a la firma y no estarían cumpliendo, esperan las sesiones de sus legislaturas para poder modificar los puntos necesarios", afirma un informe de la cartera que dirige Rogelio Frigerio.
Entre los ejemplos de provincias que ya adecuaron sus alícuotas entre un rango de 0 y 2% del valor fiscal nombra a Buenos Aires, la CABA y Jujuy. Aunque otros distritos como Santa Cruz (inmobiliario rural) y Tucumán (urbano y rural) también implementaron cambios a sus tasas inmobiliarias.
"Las jurisdicciones que aún no cumplen con el rango de alícuota están trabajando no sólo en eso sino en la actualización de los valores fiscales", concluye el estudio del ministerio.
En algunas provincias la readecuación de los valores de terrenos generará tensiones: en Entre Ríos ya comenzaron las reuniones entre funcionarios y representantes gremiales rurales; en La Pampa, intendentes afirman que el revalúo subirá el impuesto hasta 1000% para los productores y en otro grupo de provincias los gobernadores tendrán que negociar con los jefes municipales, que tienen la potestad sobre ese gravamen.
Buenos Aires y Santa Fe negocian la adhesión de sus intendentes al Consenso Fiscal
Los gobiernos bonaerenses y santafecinos mantienen negociaciones con intendentes municipales para lograr su adhesión al pacto fiscal firmado con el Gobierno nacional en noviembre.
Los municipios tienen, en el marco de ese acuerdo, una tarea fundamental, ya que el texto del Consenso Fiscal incluye un compromiso para que los gobiernos locales también implementen bajas en las tasas municipales, además de la creación de distintas normas de responsabilidad fiscal como la que ya rige para los gobernadores.
Desde que el Congreso bonaerense se adhirió en diciembre al pacto fiscal, ya son más de 50 las intendencias que sumaron su apoyo. La gran mayoría pertenecen al oficialismo, mientras menos de diez forman parte de los partidos opositores. En los últimos días, algunos jefes comunales del PJ manifestaron estar "estudiando" la posibilidad de adherir al consenso.
Este jueves, en tanto, tendrá lugar una reunión entre funcionarios del gobierno de Santa Fe con intendentes de todas las fuerzas políticas para negociar la adhesión de cada municipio.
Hay un grupo de seis provincias que además tendrán que negociar con sus municipios la readecuación de los impuestos inmobiliarios, ya que en todos los casos sus leyes locales prevén que sean las municipalidades las que cobren ese impuesto para zonas urbanas.
Ellas son Corrientes, Chaco, Chubut (que también cobra la rural), Formosa, Salta y Santa Cruz. Tierra del Fuego mantiene un conflicto judicial sobre esta materia.
Por Mariano Boettner
Fuente: BAE Negocios