Nacionales - 18-09-2017 / 10:09
Con el Presupuesto 2018 en el Congreso, arranca la pelea fiscal de Macri contra las provincias
Mauricio Macri busca ajustar a las provincias mediante la disciplina de “la caja” y el presupuesto. Se trata de un mecanismo al que recurre el Gobierno nacional para disciplinar, obtener y quebrar voluntades de los gobernadores. Esto suele traducirse, en consecuencia, en apoyos dentro del Congreso para leyes claves.
Desde el comienzo de su gestión, Mauricio Macri eligió el gradualismo, porque carece de un plan económico específico. El proyecto de Presupuesto 2018 refleja ese gradualismo: obliga a mantener muy alta la presión tributaria y a apelar a un creciente endeudamiento. La estrategia es riesgosa porque exige seguir aumentando la deuda pública y socialmente costosa porque mantiene las causas que desalientan la inversión y la generación de empleos.
El presupuesto para 2018, con una pauta de inflación promedio de 15,7% prevista, minimiza la suba de precios. Pero también subestima la magnitud del endeudamiento y el costo que generan las tasas de interés elevadas. El problema es que no se contrae deuda para financiar inversiones, sino para sostener un gasto corriente desbordado que no se logra cubrir con la alta presión impositiva prevaleciente.
Pero es en el tema de la discusión por el reparto de recursos entre la Nación y las provincias, en donde se dará una batalla decisiva para el Gobierno de Macri, porque de su resultado depende tanto el cumplimiento de la meta fiscal de 2018 como el destino de la reforma tributaria que impulsa la Casa Rosada.
El Ejecutivo sabe que debe definir este debate entre las elecciones de octubre y fin de año, pero hoy tendrá la oportunidad de testear por primera vez la reacción de todos los distritos a los números del Presupuesto nacional y a la propuesta de extensión del Impuesto al Cheque.
Será a las 14 horas, cuando un grupo de ministros de Economía provinciales concurra al Ministerio del Interior para avanzar con otra de las asignaturas pendientes que cruzan la conflictiva relación entre el centralismo nacional y el interior provincial: el financiamiento del déficit de las cajas previsionales, para el cual en 2017 se presupuestaron $14.000 millones.
La reunión de hoy se gestó luego de la cumbre de gobernadores realizada el pasado miércoles 6, para debatir la pelea judicial por el Fondo del Conurbano. Preocupados por un fallo que desfinancie totalmente a sus distritos, los gobernadores aprovecharon para darle visibilidad a otros reclamos, como el existente por el envío de fondos para atender el rojo de las cajas de jubilaciones.
El otro tema que probablemente surja en el diálogo es el cambio que hizo el Ejecutivo en el impuesto al cheque. Las provincias reclamaban su coparticipación total, ya que hasta ahora 70% iba al Tesoro. La propuesta que busca extender el gravamen hasta 2019 cambia el destino de los fondos: ese porcentaje ahora irá a la ANSeS.
Como queda en evidencia, el gobierno de Macri retacea recursos a las provincias, usando discrecionalmente los fondos nacionales para disciplinar a gobernadores e intendentes, premiando a los aliados y castigando a quienes son parte de la oposición.
La Opinión Popular
Rojo previsional
El Gobierno había acordado con 13 provincias el envío mensual de fondos para que la ANSeS financie el déficit de las cajas que no habían sido transferidas, siempre que armonizaran sus prestaciones con las nacionales según cinco componentes: la edad jubilatoria, las alícuotas de aportes y contribuciones patronales, la cantidad de años de servicio con aportes efectivos, la determinación del haber inicial y la movilidad jubilatoria.
Pero la demora provincial en el cumplimiento de ese compromiso, incorporado en la ley de Reparación Histórica, generó un retraso en las transferencias.
En la cita de hoy, los anfitriones serán el secretario de Provincias, Alejandro Caldarelli, y el subsecretario Paulino Caballero. La idea es escuchar las propuestas de los ministros de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Chubut, Santa Cruz, Neuquén, Corrientes, La Pampa, Formosa, Misiones y Tierra del Fuego en torno a la armonización y poner también sobre la mesa la posibilidad de automatizar los giros, que en ocasiones son frenados por la ANSeS por la falta de exhibición de las planillas de jubilados, según señalan en la Casa Rosada.
En abril pasado, la ANSeS se había endurecido y decidió suspender el giro de fondos hasta que las provincias no cumplieran con los requisitos formales. Pero luego envió una nota a las cajas provinciales para postergar la decisión.
"Teniendo en cuenta que la implementación del programa requiere el traspaso de una gran cantidad de información histórica por parte de las cajas provinciales; y que dicho trabajo está insumiendo más tiempo del originalmente previsto, esta Administración Nacional ha decidido continuar con la distribución del anticipo mensual hasta el mes de septiembre inclusive", según indicaron en ANSeS. Pero con el noveno mes del año en marcha, poco se ha avanzado y la preocupación volvió a crecer.
Y es que la ley establece que ANSeS podrá aplicar quitas en el financiamiento a aquellas cajas que no muestren avance en la armonización, las cuales pueden llegar hasta la quita total a quienes no hayan completado con el proceso en 2020.
No obstante, fuentes oficiales revelaron a El Cronista que "la idea es escuchar el estado de situación de cada una de las provincias sobre la información que le están debiendo a la ANSeS para determinar el déficit y poder pagarlo. Hoy ANSeS está transfiriendo a cuenta de ese déficit, porque no tiene toda la información para determinarlo y poder cubrirlo". Así, buscarán avanzar en un entendimiento para cumplir con lo marcado por la ley y cubrir un rojo que, ya el año pasado, demandó más de $ 12.000 millones.
Fuentes: El Cronista, Urgente24 y La Opinión Popular