Nacionales - 24-04-2017 / 07:04
SANTA CRUZ, CAPITAL NACIONAL DE LA GRIETA
Macri auxiliaría a Alicia Kirchner solo si paga el costo político de un ajuste
Santa Cruz se transformó ahora en el nuevo centro de la eterna batalla: la de la “grieta” y la imposición del "relato" en la opinión pública. A primera vista, todo indica que el paso del tiempo favorece al macrismo y perjudica al kirchnerismo, expuesto al malhumor social y la violencia en una provincia que es sinónimo del apellido Kirchner. Los graves incidentes del fin de semana dejaron al macrismo como ventajas las de una imagen y un discurso kirchnerista golpeados. Sin embargo, tiene en claro que la intervención provincial no es la mejor opción.
Por los graves incidentes del fin de semana en Santa Cruz, tanto el kirchnerismo como el gobierno de Mauricio Macri se mostraron alarmados por la escalada de violencia que llegó a poner en riesgo la integridad de Cristina Fernández, la gobernadora Alicia Kirchner, tres empleadas de la gobernación y Helena, la pequeña nieta de CFK.
También hay cierto consenso respecto de cómo se llegó a esta situación: el colapso financiero provocado por la superpoblada plantilla de trabajadores estatales, que llega a niveles récord. Casi 90.000 empleados en una provincia que apenas supera los 300.000 habitantes. Para colmo, Santa Cruz tiene una dependencia excesiva de la industria petrolera, ahora en declive por la caída de los precios internacionales.
Santa Cruz es una jurisdicción donde los empleados y jubilados cobran mal y tarde, la propuesta a los docentes es un ajuste salarial de 3% y el fantasma del estallido violento está a la vuelta de la esquina. Hay consenso respecto de que el Gobierno nacional debe asistir financieramente a la provincia en su emergencia, según las declaraciones del ministro del interior, Rogelio Frigerio. Pero ahí terminan los consensos y empieza el verdadero nudo del problema: quién debe pagar el costo político de la crisis.
Porque Cristina y Alicia sostienen que el empleo público es un espacio de contención social y de refugio en una provincia donde si se echa a un estatal se lo condena a la miseria; en un escenario recesivo como es claramente el caso de Santa Cruz, con su muy poca diversificada economía. En consecuencia, la visión K es que la dotación de empleados debe ser mantenida con la asistencia financiera de Macri.
En la vereda de enfrente, Frigerio dio a entender con bastante claridad lo que se espera de la gobernadora Alicia Kirchner: que asuma el costo político de echar gente. Que la provincia le garantice que se está haciendo algo concreto para recortar el gasto fiscal.
Resulta claro que el Gobierno de Macri no gana mucho si deja que se tense la situación, porque la gravedad es tal que no se puede descartar un final trágico si se repiten los enfrentamientos callejeros. Pero, además, al macrismo no le sirve la salida de Alicia Kirchner de su cargo. Lo que ocurriría después de una intervención federal de la provincia, es que pondría al macrismo en el antipático rol de tener que realizar el ajuste que no hizo el kirchnerismo. Y es lo que quiere evitar.
En consecuencia, se buscará un acuerdo que implique la ayuda financiera para la provincia pero que el Gobierno nacional no dará "gratis", en términos políticos. Buscará por todos los medios mostrar las consecuencias que trae un desgobierno K en esa provincia. Hoy, Santa Cruz es la capital nacional de la "grieta", un verdadero peligro que se corporiza en empleados que no cobran sus salarios o en una pedrada contra la casa donde hay una bebé de 18 meses.
La Opinión Popular
CRISIS EN LA PROVINCIA
La situación en Santa Cruz se agrava y CFK acusa a Macri por la violencia
Además de la crisis económica, Santa Cruz atraviesa una situación política delicada. Ayer a la madrugada, una marcha frente a la residencia oficial de la gobernadora se desmadró cuando algunos individuos ingresaron al patio de la vivienda por la fuerza, rompiendo el portón principal y arrojando piedras a las ventanas, mientras se encontraban en el interior Alicia Kirchner y la ex presidenta Cristina Kirchner.
Adentro de la casa, en Río Gallegos, también estaban Florencia Kirchner y su hija Helena, y la hija de Alicia, Romina Mercado. La policía reprimió y hubo algunos heridos. La ex presidenta culpó por el ataque a la residencia a la oposición provincial y denunció que los que intentaron entrar tenían el "visto bueno del gobierno nacional".
Como consecuencia de la gravedad de los hechos, criticados en público por el presidente Mauricio Macri, el Gobierno evalúa un pedido oficial de Alicia Kirchner de reforzar la seguridad en la provincia.
Fuentes del Ministerio de Seguridad nacional dijeron a PERFIL que están preparando planes de contingencia para evitar, en el futuro, ataques a la residencia oficial, y para garantizar la seguridad de la ex presidenta. La ministra Patricia Bullrich, según publicó Clarín, dijo que incluso evaluaron un plan de evacuación para Cristina porque la responsabilidad de la Nación es mantener a salvo a la ex mandataria. De hecho, tras los incidentes reforzaron su custodia.
Fuentes del gobierno nacional dijeron a este diario que tomaron conocimiento de la radicalización de algunos sectores sindicales y de izquierda y consideraron que esa situación, sumada a la bronca de la clase media por la demora en el pago de los salarios, termina siendo un cóctel explosivo. "Está fuera de control la situación. Porque esos sectores radicalizados no responden a ningún dirigente con el que se pueda conversar", explicó un funcionario nacional.
La gobernadora, por su parte, dijo que la oposición quiere su "cabeza" para la campaña electoral. En otras palabras, que buscan forzar su renuncia. Tanto CFK como Alicia denunciaron que hay sectores mediáticos agitando el conflicto en la provincia.
El viceministro del Interior, Sebastián García de Luca, advirtió, en diálogo con este diario, que la actual administración santacruceña es responsable de la situación que atraviesa la provincia pero aclaró que la administración nacional seguirá "trabajando, como lo venimos haciendo, para garantizar la gobernabilidad".
En rojo
El Gobierno rechazó, además, la idea de una intervención federal. La Casa Rosada envió este año adelantos financieros por más de mil millones de pesos. Esos anticipos son cancelados por la gobernación cada fin de mes.
El vicegobernador santacruceño, Pablo González, declaró que están negociando un préstamo con el Banco Nación para paliar la crisis. Y la gobernadora confirmó que quieren colocar un bono de 350 millones de dólares, pero para eso necesitan autorización de la Nación. El Gobierno contestó que no hubo ningún pedido oficial.
Un problema que en Santa Cruz reconocen es que, al tener los números en rojo, se les dificulta conseguir financiamiento externo. Básicamente, porque pocos creen que puedan devolver el dinero. La diferencia entre los ingresos y los gastos previstos para este año es de 6 mil millones de pesos. El equipo político y económico de Macri considera que Santa Cruz tiene la obligación de hacer una reforma profunda para reducir el gasto y darle "transparencia" al sistema político. La Rosada asegura que, hasta ahora, no se ha producido ningún cambio en materia económica y social.
Lo que pretende el Presidente, en líneas generales, es que Kirchner despida personal -asegura que sobran empleados públicos- y que elimine la ley de lemas antes de las elecciones de medio término
Otra marcha en Río Gallegos
El gremio docente y organizaciones de izquierda encabezaron anoche una nueva marcha junto a distintos sectores de la sociedad santacruceña en repudio a la represión de la madrugada y para pedir la renuncia de la gobernadora Alicia Kirchner. Los manifestantes colocaron carteles en las puertas de la Gobernación con duros cuestionamientos a la mandataria provincial y a la ex presidenta Cristina Kirchner.
La gobernadora había denunciado por la mañana a los gremios como los instigadores de los incidentes violentos que tuvieron lugar en los alrededores de la residencia oficial. Pero Adosac, que agrupa a los maestros, rechazó las declaraciones de la gobernadora. "Ellos se han enriquecido y han empobrecido a los santacruceños", dijo el sindicalista Pedro Cormak. También recordó que hubo un reportero gráfico de ATE herido como consecuencia de las balas de goma que tiró la Policía de Santa Cruz.
Por Mariano Confalonieri
Por Fernando Gutiérrez
Fuentes: Perfil, iProfesional y LOP