Nacionales - 18-03-2017 / 10:03
GONZÁLEZ DESMINTIÓ, MACRI OPTÓ POR EL SILENCIO
Opereta de Clarín: publicó que Felipe González le habría dicho a Macri que para que llegasen inversiones Cristina tenía que ir presa
¿CRISTINA PRESA? Buena parte del kirchnerismo duro salió a defender a Cristina. "Desde el bloque de diputados nacionales FPV-PJ que preside Héctor Recalde no sólo repudiamos esta campaña persecutoria del Grupo Clarín, sino que le pediremos al doctor Felipe González que ratifique o rectifique lo publicado, aunque no creemos que el episodio sea cierto", advirtieron los diputados kirchneristas. Los legisladores además consideraron que "si Macri calla, su silencio también implicará respuesta". También opinaron que "si no vienen inversiones, las razones se pueden encontrar en la política económica y social del gobierno que afectó al mercado interno, la industria, las Pymes, los asalariados, los desocupados y subempleados, y a la catarata de reclamos sociales que se pronunciaron en las calles de la patria". "El crecimiento de Cristina en todas las encuestas ha puesto en crisis de nervios al Grupo Monopólico Mediático y lo empuja a llevarse puestos los más elementales principios democráticos buscando la proscripción de la Presidenta", afirman y concluyen: "En definitiva, Clarín se ha sacado la careta".
"Presidente: ¿por qué no va presa Cristina Kirchner? Quiero que sepa que nadie va a invertir en serio en Argentina hasta que los hechos de corrupción de Cristina sean juzgados y condenados". Esas dos frases, puestas en boca del ex jefe de gobierno español Felipe González, en un supuesto diálogo con Mauricio Macri, difundido por el diario Clarín, desataron un escándalo internacional.
Cristina Fernández reaccionó inmediatamente a través de las redes sociales y envió dos cartas documento a los protagonistas de la presunta conversación para que ratifiquen o rectifiquen las palabras reproducidas en el matutino. "Es totalmente falso y no se corresponde con mi pensamiento", afirmó Felipe González. Desde la Casa Rosada, en cambio, no hubo ninguna declaración oficial.
Pocas horas más tarde, en una entrevista, Felipe González desmentiría haber dicho eso o algo similar y pidió al diario Clarín que aclare la situación. Desde el macrismo no hubo ninguna respuesta oficial. Únicamente en estricto off the record, los voceros de Presidencia consideraban probable que la charla nunca hubiera tenido lugar.
La nota en cuestión fue publicada en Clarín y firmada por el columnista Marcelo Bonelli con el título "Los inversores españoles quieren saber cuándo la justicia pondrá presa a Cristina". Según escribió Bonelli, en un encuentro a solas durante la visita oficial a España de febrero, González le preguntó a Macri "por qué no va presa" la ex presidenta y, ante "la respuesta llena de evasivas y prudencia" del argentino, insistió: "¿Cuándo va a ir presa Cristina?".
Cristina calificó el episodio como "de inusitada e inédita gravedad institucional" y "de repercusión internacional" y aseguró que "el pueblo argentino tiene derecho de saber cuáles son los condicionamientos que pretenden ser impuestos por los supuestos inversores" que González representa.
Pero no solamente la ex presidenta reaccionó ante la presunta extorsión. El bloque de diputados nacionales FpV-PJ publicó un comunicado en el que repudian la "campaña persecutoria del Grupo Clarín" contra Cristina y le piden a los dos supuestos protagonistas del diálogo que aclaren la situación.
El episodio podría tratarse de una "opereta" periodística que apunta a esmerilar las posibilidades electorales de Cristina. Una jugada riesgosa de Magnetto, que está muy nervioso porque ve que el Gobierno se cae a pedazos y ya no sabe qué hacer para sostenerlo, y manda una orden clarita a los jueces para que metan presa a Cristina. Pero, los inversores no van a venir, porque no hay motivo. Si el consumo interno está cayendo y las exportaciones también, ¿quién va a venir a invertir?
La Opinión Popular
Felipe González negó que "poner presa" a Cristina fuera una condición para la llegada de inversiones españolas
El ex presidente español Felipe González negó este viernes el diálogo que le atribuyó Clarín con Mauricio Macri, en el cual, según el diario, había pedido que Cristina Kirchner fuera presa como condición necesaria para la entrada de inversiones de empresas españolas a la Argentina.
Los detalles del supuesto diálogo entre Macri y González habían sido revelados por un artículo de Marcelo Bonelli en el matutino.
Pero en una entrevista que se emitió en la noche del viernes por el canal C5N, realizada por el Gustavo Sylvestre, González dijo que es "totalmente falso" el material publicado por Clarín y que está "escandalizado" por la situación.
"Acabo de mandar a Clarín una nota desmintiéndolo", señaló el ex jefe de estado español. Y amplió al decir que las palabras que se le atribuían no solo no salieron de su boca, sino que "no se corresponden ni con lo que pienso".
"No creo que haya que pedirle a nadie que trate de eliminar adversarios por vía judicial", sintetizó con respecto a este creciente escándalo.
La carta de Cristina
Por carta documento, la expresidenta Cristina Kirchner le había reclamado hoy a Mauricio Macri y a Felipe González que "rectifiquen o ratifiquen" la publicación que indica que el español pidió al argentino que la exmandataria vaya presa para que puedan llegar las inversiones al país.
Fuentes del entorno de la exjefa de Estado señalaron que Cristina en la carta también pidió una respuesta "en un plazo de 24 horas".
Cristina Kirchner se expresó así luego de que el diario Clarín publicara una nota en la que asegura que González le preguntó a Macri por qué la expresidenta no iba presa, al considerar que las inversiones españoles supuestamente no iban a llegar a la Argentina hasta que la ex jefa de estado estuviera detenida.
El artículo de la polémica lo escribió Marcelo Bonelli y fue publicado por el matutino este viernes bajo el título: "Los inversores quieren saber cuándo la Justicia pondrá presa a Cristina Kirchner".
"'Presidente: ¿por qué no va presa Cristina Kirchner?'", habría preguntado Felipe González a Macri, según la versión de Bonelli. La pregunta habría ocurrido en un encuentro a solas.
"Al ex jefe de Gobierno español no lo convenció la respuesta llena de evasivas y prudencia. González entonces cambió la pregunta, pero insistió con la cuestión: '¿Cuándo va a ir presa Cristina?'", continuó el periodista en su "Panorama Empresarial".
"Después le explicó por qué insistía", señaló Bonelli. "Así le dijo a Macri: 'Quiero que sepas que nadie va a invertir en serio en Argentina hasta que los hechos de corrupción de Cristina sean juzgados y condenados'", indicó el periodista.
Atenta a la gravedad de la situación, la expresidenta interpeló a los mandatarios para que confirmen o desmientan lo publicado.
Las inversiones españolas
Actualmente, España es un socio estratégico para Argentina, ya que es el segundo país con mayor nivel de inversiones (IED). "Las empresas españolas representaban el 30% de la Inversión Extranjera Directa (IED) en Argentina entre 2004 y 2006. La IED empezó a caer a partir de 2011 debido a la venta de Repsol de parte del paquete accionario de YPF, y cayó más fuerte aún desde 2012, luego de la expropiación del 51% de las acciones de la petrolera", explicó Dante Sica, director de la consultora ABECEB.
Esta situación se refleja en los números: en 2006, las IED de España tenían una participación del 31% y más de U$S20.000 millones; en 2010 la cifra se eleva a u$s23.413 millones y cinco años después (en 2015, último dato oficial disponible) desciende abruptamente a U$S13.145 millones, U$S10.000 millones menos. La participación cae a 16% del total, casi la mitad que en 2006.
Sica destacó que "la salida de Repsol de YPF significó una baja considerable de la IED española en el sector de petróleo. De U$S10.700 millones contabilizados en 2007 hasta llegar a sólo U$S886 millones en 2015. En este momento se está revirtiendo esa tendencia y hay interés en diversos sectores de la economía local".
En la actualidad, las empresas españolas orientan sus capitales en sectores como comunicaciones; sector privado financiero; industria química, caucho y plástico; metales; alimentos, bebidas y tabaco; petróleo; comercio; transporte; electricidad, industria automotriz; productos minerales no metálicos; construcción; agricultura, ganadería y otras actividades primarias y maquinarias y equipos.
Fuentes: iProfesional, Clarín, Página12 y LOP