Nacionales - 25-11-2016 / 09:11
AL VOTO ELECTRÓNICO LO HICIERON BOLETA
Dura derrota de Macri: Por temor al fraude electrónico, senadores y gobernadores del PJ descartan la reforma electoral
POR TEMOR AL FRAUDE ELECTRÓNICO, SENADORES Y GOBERNADORES DEL PJ DESCARTAN LA REFORMA ELECTORAL. Senadores del bloque del Frente para la Victoria (FPV) anticiparon que no apoyarán la reforma electoral que impulsa el Poder Ejecutivo, que fue aprobada en la Cámara de Diputados, luego de un encuentro mantenido este jueves con los gobernadores Gildo Insfrán (Formosa), Sergio Uñac (San Juan), Sergio Casas (La Rioja), Carlos Verna (La Pampa), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Rosana Bertone (Tierra del Fuego) para evaluar la reforma electoral que impulsa el gobierno nacional.
Luego de reunirse con los gobernadores, el bloque de senadores nacionales de Frente para la Victoria-PJ anunció este jueves que no firmarán dictamen para apoyar el proyecto del macrismo de Reforma Electoral -que incluye la Boleta Electrónica con el chip-, que ya cuenta con media sanción en la Cámara de Diputados.
Mauricio Macri estaba confiado en que la boleta única electrónica avanzaría en la Cámara Alta y por eso incluyó la reforma en la convocatoria a sesiones extraordinarias con la esperanza de sancionarla antes de fin de año y realizar la licitación en enero con una empresa "amiga", plazo máximo para llegar a tiempo con la logística antes de los comicios de medio término de 2017.
No es una buena semana para el macrismo: esta derrota llega luego de que Macri debiera dar marcha atrás con su resistencia a tratar la Ley de Emergencia Social. En la Casa Rosada ayer primó la bronca por la caída de uno de los proyectos que el Presidente ordenó que se aprobara este año. El secretario de Asuntos Políticos, Adrián Pérez, sacado dijo que: "La decisión de no debatir la reforma política del PJ da señal contundente de que prefiere mantener su poder feudal en muchos distritos del país, antes que cumplir con una demanda ciudadana de elecciones transparentes y equitativas".
La decisión representa una dura derrota del macrismo en uno de los objetivos que se fijó el Presidente al llegar al gobierno: cambiar el sistema de votación. Tras una reunión con gobernadores del PJ, que se pronunciaron en forma mayoritaria en contra, los senadores recordaron las distintas objeciones al voto electrónico que presentaron los especialistas en informática y señalaron que seguirán tratando el tema el año próximo.
El debate por la reforma electoral venía trayendo fuertes discusiones en el bloque de senadores del PJ. Había un sector mayoritario que buscaba mantener el sistema actual, mientras que otros pretendían hacerle modificaciones al proyecto (entre otras cosas, quitar el sistema de lectura por un chip). Los senadores Juan Manuel Abal Medina y Omar Perotti formaban parte de este último grupo y habían presentado sus propuestas en este sentido.
En el Senado, el Presidente chocó contra la impericia de sus propios alfiles, que ahora intentan desligarse de la responsabilidad por la derrota que les propinó el peronismo. La bronca en la Rosada es principalmente con Gabriela Michetti y Federico Pinedo, las principales y acaso únicas figuras del PRO en el Senado. A la vicepresidenta y al presidente provisional de la Cámara Alta los acusan de no tener conducción y capacidad de negociar con la oposición.
El PJ le bloqueó la reforma electoral a Macri y lo hizo usando argumentos técnicos que el macrismo se obstinó en desconocer a pesar de que fueron presentados con amplitud y profundidad, pero en verdad la defensa del sistema tradicional encierra también una defensa de otros métodos que nada tienen que ver con la transparencia del acto electoral. En ese caso, la boleta única, sin el sospechoso y cuestionado chip, habría sido una salida que podría haber satisfecho a muchos. El macrismo no aceptó ese cambio, pero nunca consiguió acercar un solo especialista que defendiera su postura.
En este contexto, en el Congreso ven como impredecible el trabajo legislativo para lo que queda del año, puesto que el gobierno de Macri ya giró todos los fondos que pedían los gobernadores peronistas y ahora no necesitan acordar nada hasta el año que viene.
La Opinión Popular
EL BLOQUE DEL PJ-FPV EN EL SENADO RECHAZÓ LA REFORMA ELECTORAL IMPULSADA POR MAURICIO MACRI
El voto electrónico se quedó sin corriente
El bloque del PJ-FpV en el Senado labró el acta de defunción de la reforma electoral que impulsaba Mauricio Macri. Los senadores peronistas rechazaron tratar este año el proyecto, que tenían como eje principal la introducción de la Boleta Unica Electrónica (BUE).
BUEna jugada
Ante la posibilidad de que le hicieran modificaciones al sistema que buscaba instaurar, Macri recurrió a una jugada que le acercó su ministro del Interior, Rogelio Frigerio: convocó a nueve gobernadores a respaldar su proyecto. En ese encuentro estuvieron Domingo Peppo (Chaco), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Mario Das Neves (Chubut), Omar Gutiérrez (Neuquén), Juan Manuel Urtubey (Salta), Alberto Weretilnek (Río Negro), Roxana Bertone (Tierra del Fuego), Hugo Passalacqua (Misiones) y Juan Schiaretti (Córdoba). Se sacaron la foto con Macri y respaldaron la BUE.
Esa jugada, que parecía robustecer la posición de Macri, terminó siendo un tiro por la culata: el bloque del PJ-FpV anunció que iba a convocar a todos los gobernadores para discutir el tema y acordar una posición común. El encuentro fue ayer a las 14.30: asistieron Bertone, Bordet, Gildo Insfrán (Formosa), Carlos Verna (La Pampa), Sergio Uñac (San Juan), Sergio Casas (La Rioja) y Lucía Corpacci (Catamarca), mientras que por las otras provincias estuvieron el vicegobernador de Santa Cruz, Pablo González, y el de Santiago del Estero, José Neder, además del secretario de la gobernación del Chaco, Héctor Horacio Rey. Ni Schiaretti, ni Urtubey ni el gobernador de Tucumán, Juan Manzur, enviaron representantes.
Según contó a este diario uno de los asistentes, la posición mayoritaria de los gobernadores en la reunión fue en contra de hacer cambios al sistema electoral. Bertone se ocupó de defender el sistema que funciona en Tierra del Fuego y Bordet argumentó a favor de la reforma electoral, pero quedaron en minoría. Insfrán y Verna fueron los que más se opusieron a cualquier reforma.
"No nos van a correr con los plazos del Gobierno. Estamos dispuestos a tratarlo el año que viene, con tiempo, con un debate más amplio y de cara al 2019. No estamos en desacuerdo con incorporar tecnología", comentó a este diario uno de los asistentes. ¿La consecuencia concreta? No habrá modificación del sistema de votación para el año próximo, como ansiaba Macri. El diputado Juan Cabandié, del FpV, recordó ayer que "el macrismo no consiguió acercar un solo especialista que defendiera su postura".
BUEnas noches
La respuesta del Gobierno no tardó en tronar. "La reforma política que presentamos fue producto del consenso de amplios sectores y eso quedó plasmado en el consenso que tuvo en Diputados. Ahora, hay un sector que se agarra a prácticas clientelares y que quiere impedir que esta forma de votación se lleve adelante", remarcó Adrián Pérez ante este diario.
"Nosotros vamos a seguir trabajando por una reforma electoral pensando en la gente, a pesar de la resistencia de los aparatos políticos feudales que se mostraron en el Senado -sostuvo el secretario de Asuntos Políticos-. Vamos a seguir trabajando para terminar con las colectoras, las candidaturas múltiples, con el robo de boletas, para traspasar competencias a la Justicia."
Ante las objeciones de especialistas en informática respecto de la vulnerabilidad del sistema, Pérez sostuvo: "Detrás de la excusa tecnológica se esconde el interés de algunos de sostener prácticas que la sociedad repudia. El proyecto contenía el conteo manual y el electrónico. Han levantado la cuestión tecnológica para escudarse y mantener las prácticas feudales".
Por su parte, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, sostuvo en su cuenta de Twitter: "Sería un gran retroceso no aprobar una reforma electoral para que el voto de cada uno se cuente y no haya ni robo se boletas ni fraudes. Nosotros vamos a seguir tratando de que se aprueben leyes para transparentar la política".
El titular del Plan Belgrano, José Cano, aprovechó para cuestionar a Manzur, su contrincante electoral en Tucumán: "La doble cara del oficialismo tucumano. Aquí hablan de reforma política. En la Nación, sus senadores boicotean toda posibilidad de cambiar".
BUEna suerte
Como correlato de la decisión de no tratar el proyecto, tampoco será aprobada la paridad de género en las listas para el año que viene. Había un proyecto separado de la reforma electoral que fue aprobado por el Senado y pasó a Diputados, pero tampoco sería tratado: el Presidente no lo incluyó en el temario de las sesiones extraordinarias.
Los gobernadores y senadores resumieron sus argumentos en un comunicado oficial, en el que sostuvieron que su rechazo se basa en "las objeciones que los expertos informáticos presentaron en las reuniones de comisión en cuanto a la alta vulnerabilidad de algunos de los métodos electrónicos propuestos".
"Se coincidió en la valoración positiva de incorporar de manera gradual tecnología que facilite la competencia electoral, identificando métodos que ofrezcan plena confiabilidad de transparencia para la expresión de la soberanía popular", señalaron. Remarcaron "la necesidad de que todo proceso de reforma en cuanto a la forma de votación de los argentinos cuente con el consenso y el acuerdo de las distintas fuerzas políticas, en el marco de un debate profundo que descarte todo tipo de ventajas unilaterales".
"Como conclusión, el bloque de senadores del PJ-FpV seguirá analizando herramientas que permitan mejorar el sistema electoral, garantizando plena confiabilidad de resultados y facilitando la competencia política de todas las fuerzas democráticas que participan en la política argentina", indicaron en el comunicado. Sostuvieron que, por sobre este tema, es prioritaria "la crítica situación económica y social que atraviesan las provincias en relación al empleo, la obra pública y la pérdida de poder adquisitivo del salario de los trabajadores formales, informales y desocupados perceptores de asignaciones sociales".
Por: Werner Pertot
Fuente: Página12