Nacionales - 02-09-2015 / 08:09
NI BRASIL NI EL MERCADO INTERNO PUEDE SACAR DE LA CRISIS A LA INDUSTRIA
Cristina: Échale la Culpa a Río
En los últimos meses, se ha vuelto una costumbre entre los funcionarios de Cristina Fernández apuntar contra la crisis brasileña a la hora de explicar las caídas en los índices de producción. Como en la comedia yanqui de 1984, dirigida por Stanley Donen y protagonizada por Michael Caine: Blame it on Rio (Échale la culpa a Río).
En los últimos meses, se ha vuelto una costumbre entre los funcionarios de Cristina Fernández apuntar contra la crisis brasileña a la hora de explicar las caídas en los índices de producción. Incluso, días atrás, la propia Presidenta rechazó la posibilidad de devaluar el peso, al considerar que una medida de ese tipo no sólo no iba a permitir incrementar el nivel de exportaciones sino que, además, iba a "destruir el único dique de defensa que nos queda, que es el mercado interno".
"Tenemos que seguir manteniendo la concepción de que necesitamos un mercado doméstico fuerte, y la administración del comercio", sostuvo, para luego afirmar que "lo contrario sería un error". El problema es que una rama de actividad clave para el aparato productivo nacional, como es la automotriz, está quedando atrapada en el peor de los dos mundos.
En efecto, debido al atraso cambiario local y a la crisis en Brasil, se le están desplomando las exportaciones. Y, como contrapartida, la demanda interna no sólo no levanta cabeza sino que continúa en caída. Esto quedó de manifiesto en agosto, que volvió a ratificar el mal momento que atraviesa el sector.
Según datos de la Asociación de Concesionarios (ACARA), se comercializaron cerca de 54.670 0Km, lo que implicó un fuerte descenso del 6% respecto al mismo mes del año pasado. Así las cosas, durante los ocho primeros meses los patentamientos totalizaron 432.400 unidades. Considerando que en igual lapso de 2014 se habían vendido más de 502.000 vehículos, esto significa una caida del 14%.
Por otra parte, no hay previsiones de que la actividad pueda experimentar un vuelco dado que el Gobierno dejó en claro que no cuenta con los dólares suficientes para "bancar" a esta actividad. De hecho, tras las PASO, a las terminales les está entregando un 40% menos de dólares.
En este contexto, el piso de patentamientos que maneja ACARA, entidad que nuclea a los concesionarios, es inquietante: la previsión marca unas 560.000 unidades comercializadas para todo el año. De confirmarse la cifra, esto implicaría que se estarán vendiendo cerca de 400.000 autos menos que hace apenas dos años y unos 100.000 por debajo del registro de 2014.
La economía argentina sufre no sola las consecuencias de la debacle de sus principales socios comerciales, sino los desajustes de las políticas K en los últimos tiempos. La cita de los superávits gemelos ya forma parte de la historia de una gestión que encara el trayecto final gastando las últimas monedas que quedan en el bolsillo.
Los ingresos comerciales caen abruptamente por la crisis de la economía brasileña, pero también se agita China y se derrumba el valor de la soja, principal fuente de ingresos de los años de abundancia K. Hoy, el saldo comercial con Brasil es negativo y las proyecciones del gobierno de Dilma Rousseff para el año próximo exhiben una contracción del PIB que hacen prever una demanda aún menor de los productos argentinos.
Las divisas escasean y se vuelve a ajustar el cepo cambiario para ahorristas e importadores, aunque ello aleje potenciales inversiones. El gasto se multiplica con rapidez para llevar al déficit fiscal a superar las seis cifras. Y recuperar la economía será un problema que deberá resolver el próximo gobierno.
La Opinión Popular
Las exportaciones a Brasil cayeron casi 30% en agosto y se agrandó el déficit comercial bilateral
El déficit comercial con Brasil volvió a deteriorarse en agosto debido principalmente a la fuerte caída que experimentaron las exportaciones que descendieron un 27,9% y alcanzaron un valor históricamente bajo de u$s 777 millones, similar a los registrados en 2009 en plena crisis internacional.
De acuerdo a la consultora Abeceb.com, la retracción de las exportaciones estuvo en gran parte causada por el sector automotriz pero también se verificaron caídas en minerales y combustibles, y metales y sus manufacturas.
"Entre los factores que la explican se combinan menores precios junto con una menor demanda brasileña. Sin embargo, también debe tenerse en cuenta el deterioro de la competitividad de las exportaciones argentinas, también agravado con las sucesivas devaluaciones del real brasileño", destacaron.
La depreciación de la moneda brasileña de los últimos meses determinó que Brasil pudiera mejorar sus cuentas externas y acumular un superávit comercial de u$s 7297 millones entre enero y agosto, su mejor resultado para el período desde 2012.
Sin embargo, las buenas noticias para Brasil determinaron un deterioro en la balanza comercial bilateral argentina que registró un rojo de u$s 248 millones cuando en igual mes del año pasado el saldo había sido menos deficitario, ubicándose en u$s -85,2 millones.
Entre enero y agosto el intercambio comercial entre los dos socios más grandes del Mercosur cayó 16,8% y así desde 2011 acumula una baja de 40%.
"El comercio bilateral entre Argentina y Brasil se contrajo nuevamente en agosto, acumulando en total 23 meses de caída", indicó la consultora que dirige el economista Dante Sica en un informe.
"La caída es notable teniendo en cuenta que se parte de una base de comparación baja debido a que en 2014 ya había caído un 22%" explicaron en la consultora.
"De hecho, los valores de 2015 son un 40% menores a los del mismo período en 2011. El déficit lleva acumulado u$s 1488 millones, con perspectivas a cerrar el año por debajo de los u$s 2000 millones", añadió el informe.
Las cifras relevadas por Abeceb.com en base a la información publicada por el gobierno de Brasil dan cuenta que la caída fue más acentuada en las exportaciones que en las importaciones porque mientras que las ventas se redujeron un 27,9% en agosto las compras al país vecino descendieron sólo 11,9%, lo que contrasta con lo ocurrido en 2014, año en el cual la baja del comercio fue inducida por el comportamiento de las importaciones.
En el acumulado entre enero y agosto de este año se evidenció la misma dinámica que el mes pasado ya que las exportaciones bajaron un 22,6% mientras que las compras al país vecino se redujeron apenas un 11,3%.
De acuerdo al análisis de Abeceb.com, la caída de agosto de las importaciones indicaría que "los anuncios de aumento de los cupos para importar sufrieron nuevos recortes, en tanto que se recrudecieron los controles para realizar pagos de importaciones".
En relación al futuro, en la consultora aseguraron que "teniendo presente que en el mes de octubre el Banco Central deberá realizar el pago de aproximadamente u$s 5900 millones por el Boden 15, es poco probable que hacia el resto del año se cuente con un mayor margen de divisas que permita flexibilizar los pagos".
Por Mariana Shaalo
Por Walter Brown
Fuente: El Cronista