Nacionales - 27-05-2015 / 09:05
CRISIS EN LA PRODUCCIÓN Y EL CONSUMO
Economía K en picada: No logran reactivar el consumo, que acumula 16 meses de baja, y la industria apila 21 meses en caída
La economía K sigue en jaque. La "reactivación del consumo" que no se cansa de anunciar Cristina Fernández no se siente en las góndolas. Las ventas de alimentos, bebidas y el resto de los productos de la canasta básica volvieron a sufrir una baja en abril, de 1,6% en unidades, y de esta manera acumulan 16 meses ininterrumpidos de números negativos a nivel nacional. Además, el organismo oficial INDEC informó que la actividad fabril retrocedió en abril un 1,5% en la comparación con el mismo mes del año pasado. El sector automotor se desplomó más de 20% y la siderurgia, 19%.
La "reactivación del consumo" que no se cansa de anunciar el Gobierno de Cristina Fernández todavía no se siente en las góndolas. Las ventas de alimentos, bebidas y el resto de los productos de la canasta básica volvieron a sufrir una baja en abril, de 1,6% en unidades, y de esta manera acumulan 16 meses ininterrumpidos de números negativos a nivel nacional.
Según la medición de la consultora especializada CCR, la baja atravesó prácticamente todos los rubros -con algunas excepciones, como cerveza y agua mineral, que siguieron mostrando cifras positivas- y se sintió con especial fuerza en un sector muy sensible al consumo de las clases populares: los alimentos de almacén. Esta categoría, que agrupa desde fideos hasta arroz y aceite, en abril sufrió una baja de 4,3% en volumen.
La medición además echa por tierra las esperanzas que habían manifestado en las últimas semanas distintos funcionarios K que, sobre la base de algunos indicadores y el fuerte impulso a programas como Precios Cuidados y Ahora 12, se atrevieron a pronosticar el fin del estancamiento del consumo, uno de los pilares del modelo.
Por otra parte, la actividad industrial en abril bajó 1,5 por ciento respecto al mismo mes del año pasado y acumuló 21 meses de resultados negativos, esta vez arrastrada por el sector automotor y la siderurgia, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
De esta forma en cuatro meses la producción manufacturera se contrajo 1,8 por ciento comparando con igual período de 2014. Los datos corresponden al Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) que el INDEC difunde en forma mensual a modo de la evolución del PBI que se difunde en forma trimestral. Al igual que en los últimos meses, la debacle se explica por la industria automotriz que sufrió una contracción de 20,7 por ciento con relación a abril del año pasado.
El "país de las maravillas" en el que vive Cristina Fernández, se encuentra tan bien económicamente que la gente está haciendo cola en la concesionarias reclamando que le vendan autos O km. Este relato no resiste el menor análisis: si la industria automotriz muestra la peor caída de la producción en la última década, ello se debe al impacto de la recesión provocada por las erróneas políticas económicas de CFK.
Pero además, en abril se agregó la mala performance de la siderurgia, que tuvo una caída de 19 por ciento. La producción de acero crudo se redujo 23,1 por ciento y la de aluminio primario 0,8 por ciento. El tercer sector sensible que se mostró en baja fue el textil, que de acuerdo con la medición del INDEC se redujo 6,3 por ciento.
Sólo basta con mirar lo que pasa para darse cuenta que las aseveraciones de Cristina nada tienen que ver con la realidad. Vivimos en un país que no crece ni genera empleo genuino desde 2011, y ahora los números vuelven refutar la euforia económica del relato oficial: la producción y el consumo, los grandes pilares del modelo K, continúan barranca abajo.
La Opinión Popular
CRISIS
No logran reactivar el consumo: acumula 16 meses de caída
Afecta a casi todos los productos de la canasta básica; los comercios chicos son los más perjudicados; el Gobierno insiste en que el fenómeno ya se superó
En un contexto de caída de la demanda, el dato positivo es que la inflación volvió a mostrar una importante desaceleración en los supermercados. Según la medición de CCR, los precios promedio de los productos que comercializan las grandes cadenas en abril tuvieron una suba interanual de 28,1% frente al pico de 43,7% que se había registrado en mayo de 2014.
Los datos corresponden a la medición que hace todos los meses la consultora especializada CCR y que toma en cuenta los datos aportados por las propias empresas de comercialización en todos los canales de venta, desde los grandes hipermercados hasta los almacenes de barrio, pasando por los autoservicios chinos y los nuevos minimercados de proximidad como los Carrefour Express y Día%.
A la hora de explicar los flojos resultados de abril, en CCR destacan que la desaceleración de los precios en las cadenas de supermercados que se verificó en los últimos meses no alcanzó a compensar la falta de actualización de los salarios, como producto del retraso en las negociaciones paritarias y la decisión del Gobierno de no aprobar aumentos salariales por encima del 27 por ciento por un año.
"Esta vez la caída en la demanda se produce en un contexto diferente, en el que, a pesar de disminuir la velocidad de crecimiento de los precios, la demanda no respondió en la misma medida", señaló José Amodei, director de CCR.
"Hay que tener presente que en abril todavía no se cerraron acuerdos por paritarias en sindicatos significativos, por lo que los ingresos están corriendo detrás de los precios", agregó Amodei.
LOS MÁS GOLPEADOS
Si el panorama dista ser bueno para las grandes cadenas, en el caso del llamado canal tradicional (integrado básicamente por los almacenes y autoservicios de barrio) el escenario es mucho más preocupante.
Según la medición de CCR, en abril las ventas de este tipo de comercios sufrieron una caída de 2,5% en unidades, tomando como referencia un mes que ya había sido muy malo para el sector (en abril de 2014 la demanda en este canal había sufrido un retroceso de 1,8% frente al mismo mes del año anterior).
Para los comercios más chicos, la caída viene de larga data y el deterioro se inició en 2014. En el sector apuntan a dos factores. El primero es la decisión de las grandes cadenas internacionales de atacar el nicho del negocio de cercanía potenciando propuestas como Carrefour Express -que hoy cuenta con 370 tiendas distribuidas en la Capital Federal y el conurbano bonaerense- y Día% (que reúne a más de 600 locales, con un foco puesto en Buenos Aires y Córdoba y cuyo próximo paso será la conquista del norte del país).
El segundo factor que explica la pérdida de clientes de los almacenes de barrio y los autoservicios chinos es el programa oficial de Precios Cuidados.
Pese a los esfuerzos que hizo la Secretaría de Comercio para llevar los productos de la lista con precios acordados a todos los canales comerciales, hasta ahora el plan oficial está muy centrado en las grandes cadenas de supermercados, que a costa de una reducción en sus márgenes de rentabilidad lograron quitarles clientes a los competidores más chicos.
FALTA DE HERRAMIENTAS
En CCR destacaron además que los supermercados están mejor preparados para resistir una baja en las ventas porque cuentan con herramientas que no están al alcance de los pequeños comercios minoristas, como las actividades promocionales en los puntos de venta y la posibilidad de ofrecer pagos en cuotas a través de las tarjetas de crédito.
Además señalan que cada vez más consumidores se muestran dispuestos a recorrer distintos puntos de venta en búsqueda de ofertas y descuentos. "Los niveles altos y medios están frecuentando por mes hasta cinco comercios diferentes a la hora de hacer sus compras", explicó Amodei.
Por Alfredo Sainz
Fuentes: LA NACION, DIARIO HOY y LOP