05:21 | Martes 23 de Abril de 2013 | Entre Ríos

Las claves del modelo ideológico neoliberal del gobierno de Macri
Por Carlos Andujar

Groucho Marx dijo: "La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados". En ese punto, Javier Milei es marxista.

Entre Ríos - 21-05-2015 / 17:05

CONCLUYÓ LA ETAPA DE TESTIMONIALES EN EL DEBATE ORAL POR LA MUERTE DEL MOTOCICLISTA MAULUCCI

Juicio a dos asambleístas: “No sé por qué los eligieron a ellos para imputarlos”, advirtió una testigo que también estuvo procesada en la causa

Miguel Pérez y Miguel González están a un paso de conocer la resolución del proceso. ¿Están enjuiciados porque se laman Pérez y González?

María Alicia Rivero, la testigo que también estuvo procesada en la causa por la muerte del motociclista Walter Maulucci pero luego fue desestimada la acusación en su contra, dijo ante el Tribunal Oral Federal de Paraná que no sabe por qué eligieron a Miguel Pérez y Miguel Ángel González para imputarlos.

"No sé por qué los eligieron a ellos", advirtió y agregó además: "Tampoco nadie me explicó por qué estuve procesada, supongo que fue porque tenían mis datos".

Este jueves fue la segunda audiencia del debate oral y público que investiga en qué circunstancias el joven motociclista perdió la vida. Con otros siete testimonios y la incorporación de toda la prueba, cerró la etapa de testimoniales. En tanto, este viernes serán los alegatos de parte.

¿Están enjuiciados porque se laman Pérez y González?

Concluyó la segunda jornada del juicio. Mañana serán los alegatos de parte y podría haber un adelanto de sentencia. Este jueves, ante los jueces Lilia Carnero, Noemí Berros y David Chaulet, declararon otros siete testigos. En total, fueron 14 las declaraciones testimoniales vertidas en el debate, además de las dos ampliaciones de indagatoria.

Si bien estaba previsto que los padres del Maulucci, Tomasa Gómez y Osvaldo Maulucci, concurran a la sala de audiencias para escuchar su versión de los hechos, el Juzgado no pudo corroborar que hayan sido notificados y, en virtud de la prueba ya producida, las partes decidieron desestimar las citaciones. Además, estaba pedida la declaración de Enrique Reichel, un vecino de Rosario del Tala que la noche del 26 de abril de 2009 estaba en el corte de ruta, pero la decisión sobre este testimonio fue en el mismo sentido que los padres de Maulucci.

"No sé por qué me procesaron"

María Alicia Rivero, una ingeniera en Ecología de 34 años, recordó que la noche del 26 de abril de 2009 estaba en el refugio que tiene la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú en el paraje Arroyo Verde, aguardando la quinta marcha al Puente Internacional General San Martín que sería al día siguiente. "Estaba cenando con unos amigos de Capital Federal cuando escuchamos un ruido fuerte y salimos. Corrí hasta el puesto de Gendarmería que estaba a unos 100 metros y avisé que había un accidente. Después, volví adentro del refugio porque no quise ver nada", relató frente a los jueces del TOF de Paraná.

La muchacha contó que en reiteradas oportunidades participó de las marchas al puente con sus compañeros de facultad de Capital Federal. "Esa noche, ellos -en referencia a los gendarmes- me tomaron los datos. Luego estuve imputada en la causa y nunca me explicaron por qué, así que supongo que fue porque tenían mis datos", entendió Rivero. Algo similar manifestó al momento de referirse a la imputación de Pérez y González. "No sé por qué los eligieron a ellos", acotó.

Sobre el corte propiamente dicho, sostuvo que "había carteles de reducción de velocidad", y agregó: "La barrera estaba levantada porque había movimiento de vehículos permanentemente ya que preparaban la marcha del día siguiente. En el lugar había casillas rodantes y carpas", describió.

Dijo además que las asambleas eran "transversales", y en ese sentido despegó a los acusados de cualquier rol decisivo. "La asamblea es un movimiento social que se levantó por la contaminación que produce la planta liberando contaminantes al agua y al aire", acotó.

Sin sospechosos

Osvaldo Acosta y Lorenzo Villalba son dos policías que se desempeñaban en la Comisaría Quinta, en Pueblo Belgrano. Arroyo Verde es parte de la jurisdicción que tenían a su cargo y solían hacer una recorrida por allí mientras estaba el corte. La noche del accidente, concurrieron al lugar antes del trágico suceso. Ambos ratificaron las condiciones climáticas y hablaron de la espesa bruma. Sostuvieron que en la zona había gendarmes, pero no reconocieron a ninguno en particular. En cambio, sí pudieron dar cuenta de quiénes eran los agentes de la Policía que estaba afectados a realizar guardias ahí.

"La función de Gendarmería era sobre la ruta, era de ellos. La Policía podía actuar si pasaba algo fuera de la ruta", asentó Acosta. Habló también de la iluminación y el asentamiento de "muchas personas" en el lugar.

Villalba fue quien realizó el primer informe del accidente. "Había poca visibilidad, recuerdo que el acoplado estaba hacia el oeste, parado sobre la arteria, sobre la mano que viene de Uruguay. Cuando estuve de instructor del accidente, no tenía sospechosos. No sé cómo eligieron a estos dos señores como responsables", manifestó.

Dijo asimismo que "había señalización" y reconoció "conos". Agregó que a su juicio, "el acoplado no se podía mover a mano". Y que según supo, "a Maulucci le avisaron en la Aduana sobre el corte y la cerrazón", apuntó.

Por su parte, Eduardo Etchegoyen, el policía que la noche del accidente estaba de guardia en el corte de ruta, recordó que fue Miguel Pérez fue quien le avisó del accidente. "Había mucha gente, el puesto policial estaba a unos 300 metros del accidente. Mi función en el lugar era comunicar cualquier novedad. Pero cuando llegué al lugar por primera vez, un gendarme me dijo que mi lugar era de la ruta para abajo", asentó.

Alberto Fernández, otro policía que actualmente está retirado, también dijo lo que sabía del accidente, el corte de ruta y la asamblea. "Siempre se juntaba mucha gente. Estaba iluminado porque la Municipalidad colocó las columnas y había conos del otro lado del corte", señaló y agregó que la medida de protesta fue una decisión "del pueblo de Gualeguaychú".

Los peritos

Dos peritos declararon este jueves. Andrés Castro, un mecánico, ratificó que el acoplado no tenía identificación. "No tenía placa y el número de chasis estaba borrado". Aseguró que no se podía determinar la velocidad a la que viajaba la moto en la que iba Maulucci. Añadió que el impacto fue frontal, y que "los neumáticos de la moto estaba semi-gastados". Acotó también que el acoplado estaba "en mal estado de conservación".

Alberto Grinóvero realizó su pericial sobre el expediente. Reconoció que fue al lugar luego de completar su trabajo pericial y que no vio los vehículos. "No se relevaron frenadas. No hubo maniobras evasivas o defensivas, lo que hace suponer que Maulucci no advirtió que estaba el acoplado. La moto quedó debajo del semirremolque", contó. Además, sostuvo que "no fueron aplicables los cálculos de velocidad para este caso. Sería azaroso hablar de velocidad", completó.

El hecho

La madrugada del domingo 26 de abril de 2009, cientos de personas permanecían apostadas en la zona del corte de ruta. Había carpas, casillas y vehículos. Había asambleístas, ciudadanos de variados puntos de país y delegaciones de estudiantes secundarios. Estaban acompañando, colaborando en la organización de lo que al día siguiente sería la quinta marcha sobre el Puente Internacional General San Martín, a modo de protesta por la instalación de la papelera.

Cerca de la 1.45 de la madrugada, Walter Maulucci de 33 años atravesó el enlace internacional, proveniente de Fray Bentos (Uruguay). Los testigos aseguran, con mayor o menor coincidencia, que el motociclista que se movía a bordo de una Motomel Custom de 150 centímetros cúbicos, color negra, fue alertado del corte de ruta. Además, alegan que a pesar de la espesa niebla, la zona estaba iluminada. Pero eso no fue suficiente, Maulucci se estrelló contra la parte trasera de un acoplado -que no pudo identificarse ni se sabe quién es el dueño- que permanecía en la ruta y murió en el acto. Su moto quedó incrustada entre las ruedas traseras del semi-remolque.

Miguel Pérez y Miguel Ángel González, llegaron a esta instancia imputados por Homicidio culposo. Les acusan haber provocado una situación riesgosa por no señalizar correctamente el lugar y el rodado de arrastre, lo que desembocó en el accidente fatal. Al inicio de la causa hubo otros dos procesados, María Alicia Rivero y Enrique Reichel, aunque luego recibieron la falta de mérito.

Pérez está representado por Osvaldo Fernández y Víctor Rebossio; y González es defendido por Luis Leissa y Osvaldo Fernández. En tanto, el fiscal es José Ignacio Candioti.

Fuente: Análisis Digital

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¿Qué hacen Milei y Frigerio frente a la peligrosa epidemia de dengue?

La Argentina atraviesa la epidemia de dengue más importante de su historia. Más de 333.000 personas contrajeron la enfermedad en esta temporada; mientras que las muertes por dengue fueron 238. Entre Ríos suma miles de casos confirmados de dengue en lo que va del año. ¿Qué están haciendo Javier Milei y Rogelio Frigerio frente a una enfermedad grave y potencialmente mortal que se refleja en los hechos en la incertidumbre y los temores de la sociedad?

El Presidente, inhumano e insensible a todo lo que tenga que ver con el pueblo, inspirado en un fanatismo liberal libertario y anarco capitalista, de la insolidaria Escuela austriaca del siglo XIX, experimento que nunca se aplicó en ningún lugar del mundo, decidió borrarse por completo en el tema. A tontas y a locas como lo hace casi siempre, Milei rechazó la aplicación de vacunas. "En tres meses los mosquitos habrán desaparecido", consideró. Pero, cambio climático mediante, en muchas provincias argentinas hay Aedes Aegypti todo el año, en continuado. Frigerio, si bien no corea las burradas de Milei sobre el tema, su lineamiento se asemeja al del libertario: no hacer nada.

Es política oficial de Milei y Frigerio dejar que todo lo resuelva el mercado, sin intervención del Estado, lo que llevó a un festival de especulación con los precios de los repelentes. El concepto más básico de cualquier política sanitaria, la prevención para evitar males mayores, no estuvo nunca contemplada. Sí se habilitó la importación "puerta a puerta" del cotizado mejunje espanta-mosquitos. En la ley libertaria del sálvese quien pueda, el que tiene plata compra y el que no, reza.

Lo único que hacen, Milei y Frigerio, es repartir culpas a la administración anterior y emitir comunicados en los que no se da ninguna señal que calme la incertidumbre de la población, que precisa saber qué hacer, cuando ir al médico, como acceder a repelentes seguros, efectivos y baratos, confiar en una vacuna que, aunque no es perfecta, registra una alta efectividad hasta el momento. No es tiempo de sembrar dudas sobre la vacuna, sino de ponerse los pantalones largos y tomar las riendas de la situación.

Hablando sin saber, Milei afirmó que: "La vacuna contra el dengue recién se está probando en humanos". Eso es totalmente falso. La vacuna contra el dengue ya ha sido probada en seres humanos desde el comienzo, en las fases 1, 2 y 3 de los ensayos clínicos y demostró ser segura y efectiva en la prevención del dengue sintomático y la reducción de las hospitalizaciones por dicha enfermedad. Fue autorizada por la ANMAT en abril de 2023.

Está demostrado que la vacuna es excelente, pero es cara y debiera ser provista por el Estado. Pero, con Milei no existe el Estado. Con argumento falaz, y pese a la epidemia histórica de dengue, Milei descartó incluir la vacuna en el sistema nacional que la haría gratuita y obligatoria al cuestionar su efectividad, cuando el país alcanza récord de fallecidos en ocho meses de epidemia. Es que este virus no sólo enferma. Si no se atiende a tiempo, mata. ¿Y Milei no la ve?

La incidencia del dengue en Entre Ríos aumentó notablemente en los últimos años, caracterizado por un incremento en el número, la escala y la aparición de múltiples brotes que se propagan en regiones que antes no estaban afectadas por el dengue. De manera que ni Frigerio, ni nadie vinculado con la salud pública provincial, debería asombrarse por lo que está pasando en Entre Ríos, que enfrenta una de las peores epidemias de dengue de su historia.

Algunos gobiernos provinciales ya destinan recursos para realizar campañas de vacunación sectorizadas (Misiones, Corrientes, Tucumán y Salta) y otros impulsan la fabricación de repelentes en laboratorios públicos provinciales (Buenos Aires, Santa Fe y Formosa) que se distribuyen de manera gratuita. Carente de gestión, Frigerio no está haciendo nada de lo que hacen otros mandatarios provinciales.

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