Nacionales - 23-10-2014 / 09:10
MANIOBRA PARA OCULTAR LA CORRUPCIÓN: DIPUTADOS ESTATIZÓ LA UNIVERSIDAD DE LAS MADRES
La Universidad de Hebe de Bonafini, una estafa para todos y todas
Amado Boudou y Hebe de Bonafini.
Desde su asunción en mayo del 2003, el kirchnerismo ha utilizado como pantalla la supuesta defensa de los derechos humanos para hacer oscuros negocios. Y su principal instrumento fue la Fundación Madres de Plaza de Mayo que conduce la inefable Hebe de Bonafini, quien desde un principio se alió sin miramientos al oficialismo.
Ayer, se sumó un nuevo capítulo al escándalo: con la mayoría automática K, la Cámara de Diputados convirtió en ley el proyecto de estatización de la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, haciendo oídos sordos a los pedidos de la oposición de postergar el debate.
Lo más grave es que, con esta medida, será el Estado, es decir el conjunto de los ciudadanos que pagamos impuestos, el que termine haciéndose cargo de un rojo que rondaría los $230 millones, producto de distintos desmanejos y actos de corrupción ocurridos dentro de la entidad.
Con esta acción se nota claramente la doble moral y el doble discurso de los K aplicado a las Madres y Hebe de Bonafini. Una de las características que ha regido a la Universidad de las Madres de plaza de Mayo ha sido la imposibilidad de poder disentir con la histórica jefa de la asociación o con sus ideas.
Trabajadores perseguidos por pensar distinto, un centro de estudiantes que no puede existir, un espíritu crítico que no existe, trabajadores que no se les realiza aportes previsionales, una universidad que no le paga a Edesur y que se cuelga de los cables desde hace 9 años.
Para muchos sectores de la oposición, la estatización es la excusa ideal para el salvataje de una universidad que ya no podía seguir funcionando por el desfinancimiento y los manejos turbios.
Todo comenzó a destaparse luego del escándalo del Plan Sueños Compartidos que manejaba el parricida Sergio Schoklender, el hijo putativo que durante años tuvo Bonafini. A partir de este programa, por distintos actos de corrupción, se despilfarraron $1200 millones que salieron de los impuestos que pagamos todos los ciudadanos.
Estos millones deberían haber servido para construir viviendas sociales, pero se habrían usado para engrosar el patrimonio de los hermanos Schoklender, de la hija de Bonafini y de otros personajes nefastos.
Mientras reina la impunidad, para colmo de males, ahora los ciudadanos vamos a estar sosteniendo con nuestros impuestos carreras de formación militante para estudiantes ultra K. Seguimos manteniendo vagos...
La Opinión Popular
Estatizaron la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo
Sin sorpresas, el oficialismo impuso su mayoría en Diputados y convirtió en Ley la creación de la Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos "Madres de Plaza de Mayo", que absorbe la Universidad que comandaba Hebe de Bonafini.
La nacionalización de esa universidad popular fue el último capítulo de una trama que se precipitó tras las denuncias de corrupción que involucraron a la Fundación Madres de Plaza de Mayo, que administraban Bonafini y Sergio Schoklender. El PRO, UNEN, el massismo y la izquierda votaron en contra.
A las 20.20, después de cinco horas de deliberación, el tablero de la cámara baja mostró los incontestables 132 votos a favor, 87 negativos y 5 abstenciones. Desde los palcos superiores del recinto, donde había militantes y algunos estudiantes de la Universidad, se desplegó una bandera con la leyenda: "Nuestra Uni popular ya es nacional". Enseguida, entonaron cánticos a los se sumaron legisladores oficialistas.
El debate había sido extenso. Desde el principio, los diputados kirchneristas y sus aliados expusieron la creación de la reconvertida institución como una continuación de las políticas de Derechos Humanos del kirchnerismo y desligaron a las Madres y a la Fundación de la defraudación que denunció la Auditoría General de la Nación.
Horacio Pietragalla señaló que la organización de Derechos Humanos también había sido víctima de Shocklender: "Hay un sujeto que engañó a las Madres, no lo quiero ni nombrar. Ensució la Fundación con su práctica enfermiza", sentenció, al tiempo que anticipó que "si hay un gobierno de derecha, las Madres vigilarán las políticas de derechos humanos".
La media sanción en el Senado, en mayo pasado, había provocado fisuras en el arco opositor. Ayer, en la cámara baja, casi no hubo disidencias entre los opositores.
"Sueños compartidos" y la falta de autonomía de la flamante Universidad, que dependerá del Ministerio de Justicia, fueron los principales argumentos que esgrimieron los opositores. Margarita Stolbizer fue la más dura de todas y calificó el proyecto como "un verdadero engendro legislativo, plagado de contradicciones, desprolijidades e inconsistencias".
La diputada del GEN denunció que se comprobaron pagos de la Fundación a funcionarios públicos que debían controlar a Sueños Compartidos. Stolbizer comparó la estatización de la Universidad con la de la imprenta Ciccone, que salpica al Gobierno. En el mismo tonó se manifestó Alcira Argumedo, de Proyecto Sur, que finalmente se abstuvo, al igual que Facundo Moyano, Víctor De Gennaro, Claudio Lozano y Antonio Riestra
Adrián Pérez, del Frente Renovador, cuestionó que "no existe certidumbre sobre los estados contables, los recursos y los gastos de las actividades que lleva adelante la universidad". Al cerrar el debate, Juliana Di Tullio -jefa del bloque K- tomó la palabra y cruzó a la oposición: "Hubo mucha confusión y maldad. Nunca vi tanta subestimación de las Madres, que no fueron cooptadas por la dictadura y creen que se van a dejar cooptar por un partido, por una universidad,
Por Guido Carelli Lynch
Fuentes: Clarín, Hoy en la Noticia y LOP